"Hermanos en acción"
CARLOS' POV
—¿Qué podemos hacer, Luis?—le pregunté a mi gemelo, ya cansado de ver a nuestra hermana en ese estado.
Además, Aarón ya no venía a casa como lo solía hacer. Y eso no nos gustaba. Nos caía bien Aarón. Cada vez que llamaba a la puerta o acompañaba a Bonnie a casa nos daba un caramelo y nos saludaba. Igualmente ese tal Diego no era simpático.
Mi mejor amigo y hermano se encogió de hombros. En ese momento, nuestra desmejorada hermana entró en la habitación. Ya habían pasado dos días desde que no comía ni sonreía.
—Bonnie...—la llamé. Ella me ignoró.
—¡Bonnie! ¡Quieren maquillarte!—gritó Luis.
Ella abrió mucho los ojos, pero pronto volvió a su estado introspectivo. Se tumbó en su cama y miró por la ventana.
—Bonnie, o nos hablas ahora mismo o te juramos que te pintamos los labios—amenazamos los dos.
—Ya os he hablado, ¿contentos?
Ella suspiró y bajó al salón.
—¿Qué le ha pasado a nuestra genial y divertida hermana? Parece muerta.
—Lo sé, Carlos. Y el vecino era simpático. Ya no nos hablará nunca más.
—¿Qué crees que habrá hecho Bonnie para que pase esto? La última vez que la vimos así fue cuando...
—Ni menciones a Diego, hermanito.
Yo me callé.
—Hola—dijo una voz desde la puerta. Juan tenía una expresión parecida a la nuestra. Estaba preocupado— ¿Ha pasado algo?
Nosotros le contamos lo que pasó con nuestra hermana y él nos dijo que su hermano y Zoe (la mejor amiga de Bonnie) tampoco hablaban.
—Tenemos que planear algo—propuse, más ordenándomelo a mí mismo que a los demás.
—Tenemos que hacer que se junten— completó Luis.
Nos miramos a los ojos con complicidad y nos leímos en la mirada lo que debíamos hacer.
—¡Tenemos un plan!
A grandes rasgos, el plan consistían en conseguir que nuestra hermana y sus amigos se encontraran en el parque. Una vez Juan se hubo marchado, Luis y yo intentamos llevar a cabo nuestro plan.
Pero la gran pregunta era esta, ¿cómo conseguir que el vecino fuera al parque y cómo conseguir que nuestra hermana saliera de casa?
—Carlos, tú convence a Bonnie. Yo haré lo que pueda con Aarón.
Y dicho eso, se marchó escaleras abajo.
LUIS' POV
—¿A dónde vas?—preguntó Bonnie poniendo atención a algo por primera vez en días.
—Voy a dar un paseo.
—De eso nada, no puedes ir tú solo.
—Por favoooor. Es que... he quedado con... una amiga—mentí.
—Vale, ya entiendo por donde va la cosa—comentó ella sonriendo al fin.—Quieres impresionar a una niña.
Prefería que pensara eso. Sin darle tiempo a añadir algo más, salí de casa. Llamé a la puerta del vecino pensando en lo que podría decir. El chico abrió la puerta. A diferencia de mi hermana, él parecía tener un buen humor.
—¿Qué quieres, pequeñín?
—Mi hermana no puede llevarme al parque porque está terminando de ayudar a mi hermano. Así que he pensado si me podrías acompañar tú.
—¿Y por qué yo?
—¿Porque eres un colega muy legal?—respondí.
—Está bien—masculló.
Se puso una cazadora y me acompañó hasta el parque. Nadie más había llegado. Pronto escuché las voces de mis hermanos riendo. ¡Bien! ¡Bonnie reía! Se ve que le sienta bien al aire libre.
En un abrir y cerrar de ojos, estábamos todos en una especia de círculo.
—Enanos traidores—dijo mi hermanita querida entre dientes.
—Bueno... tenemos que ir... a ver a ese... árbol—dijimos los dos al unísono y nos acercamos al susodicho árbol pegando la oreja a ese par.
—Perdón—la voz de Bonnie se oía entrecortada y muy baja.— Jamás debí haberte gritado de esa forma, pero es que... entiéndeme. Tú... tú me ignoraste y luego me sentí apartada de ti, y tú me apartaste más al intentar disculparte. Pero... pero en verdad lo siento mucho, por favor, pérdoname...
Se hizo el silencio en el parque. Bueno, a ver no. Se escuchaban las pelotas de fútbol, la gente hablando y jugando. Pero, el caso, Bonnie y Aarón estaban callados.
—Tienes razón—confesó al fin el chico.— Fui un idiota al ignorar a la chica que... por ignorarte. Y luego te hice sentir mal en vez de admitir que me... que cometí un error. Nada de eso fue tu culpa. Sólo que Daniel o Dylan o como se diga empezó a pasar mucho tiempo contigo y ya no te importaba yo y...
Se oyó un golpe seco. Nos volvimos para mirar y vimos como él se tocaba el brazo y Bonnie le miraba con ganas de asesinarle.
—Jamás, repito: JAMÁS, vuelvas a decir que no me importas, pedazo de idiota redomado sin cerebro pensante, ¿me has oído?
—Me duele...—se quejó él. Otro golpe seco.
—Estúpido imbécil sesos de zanahoria—farfulló nuestra hermana.
—Lo he oído, señorita sarcástica y estirada.
—Me alegro, estúpido señor que vio un estúpido cerdo volador.
—Perdona por todo lo que te he hecho, en serio—casi susurró él. ¡Qué manía tiene la gente de susurrar, así nunca nos enteramos los cotillas de nada!
—Todavía no estás perdonado.
Otro golpe seco.
—¡Auch!
—Ahora sí que lo estás.
—Es un alivio que no me vuelvas a golpear—se oyó decir a Aarón entre risas.— No, en serio, me alegro de que al fin estemos en paz porque la verdad es que...
—¿Es que qué?—le apremió Bonnie.
—Eh...
En la distancia, vimos a Zoe llegar. Entonces, la azabache apartó de un empujón a nuestro vecino y corrió a abrazar a la pelirroja.
—Llevo días sin verte ni hablarte, ¿en qué demonios estabas pensando?
BONNIE'S POV
Empecé a notar mi hombro húmedo. Zoe estaba llorando. Me olvidé de ese estúpido de ojos azules y de los diablillos y me centré en mi mejor amiga.
—Fue mi padre. Él...—balbuceó— él... m-me dijo que no podía estar con vosotros.
—Y tú le haces caso, ¿cómo no?
—¡Os haría sufrir!—se excusó entre lágrimas.
—Pues prefiero sufrir a tu lado que sufrir alejada de ti. ¿Sabes por el infierno que he pasado estos dos días sin poder desahogarme con mi mejor amiga?
—Yo... lo siento...
—Estás más que perdonada, Zoe.
—¿Y a ella no le pegas?—intervino el idiota de Aarón.
—Eso me lo reservo para ti, cabeza de chorlito—le dije.
Zoe me miró con una ceja alzada. Yo le devolví una mirada de "Larga historia".
En ese momento, llegó Sergio con su hermano pequeño. Éste último corrió hacia mis hermanos. Mi amigo corrió hacia Zoe y me la arrebató. La abrazó y acto seguido se separó ruborizado.
—¿Qué te ha pasado?
Ella no contestó, pero refugió su rostro entre sus brazos. Su cuerpo se convulsionaba, por lo que supuse que estaba sollozando mientras él acariciaba con cariño su cabeza. En ese momento, Aarón posó su mano en mi hombro. Recordé algo y me giré para mirarlo a los ojos.
—Tenemos una conversación pendiente—le recordé. Él me miró incómodo, pero se recompuso con una sonrisa y respondió:
—Pero puede esperar.
***********************
Fin del capítulo. ¿De qué hablarán Bonnie y Aarón? ¿Confesarán su amor Zoe y Sergio? ¿Qué pasará con el padre de Zoe? ¿Y qué hará Diego con Aarón de nuevo en el mapa? ¿Le contará Zoe a su amiga lo de Diego? Todo eso y mucho más próximamente. Y recordad, visitad la otra historia de soysensiblejdr
Adiós!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top