No cuestiones mi presente, cuando en nuestro pasado reinó en algo la indiferencia,
no retrocedas el tiempo, inevitable se esfumó como arena entre tus dedos.

Hoy solo queda un conteo regresivo, donde tomaremos distintos caminos,
no puedes congelar el tiempo, el nunca perdona, arrasa, y se lleva por delante lo que hoy ya no te pertenece.

No medites hipotéticamente, no supongas un por qué...
El sol abierto y las nubes negras hacen parte de nuestra existencia,
lo que hoy nos cubre, aún trae con nosotros esos nubarrones donde yace nuestro amor.

No me pidas devolvernos al pasado, nuestro presente hoy es el resultado.

Descargemos culpas, sanemos el  corazón sin perturbación,
dejemos que el tiempo traiga esas respuestas de las que hoy carecemos.

No cuestiones mis sentimientos, no desconozcas mi sutilidad y mi particular forma de amar y  ver la vida, no des pasos apresurados, al correr nos equivocamos.

Recuerda que siempre seremos un libro abierto, aún cuando páginas en blanco nos han quedado pendientes.

No dudes jamás de ese corazón entregado sin censura, porque te perteneció aún cuando incomprendido se entregaba a ti.

No soy dura, mi alma reposa a tu lado, solo que se perdió un no se qué en el camino.
Recuerda que el amor cuando es verdadero, es guerrero, prudente, sensible...
Me hallarás si en tu proceder vuelves a mi génesis, cuando tu amor sea mayor a tu egolatría,

No me pidas creer que nada pasa cuando todo pasa,
no conquistes mi corazón a tu acomodo,
hoy mi vida no gira alrededor de la tuya,
revisemos lo que no funcionó y si hay lugar lucharemos por ello,
de lo contrario,

Conteo regresivo... Cuando llegue a cero... Se acabó.

Luz Marina Santiesteban
17-03-2019