Como náufrago en medio del mar, deambula mi memoria con tus recuerdos,
destierro de quimeras que ya no volverán.

Solo con tu recuerdo que abriga mi afligido corazón , que casi inerte lucha por su palpitar,

porque al vislumbrar tu partida en ese horizonte de historias tuyas y mías , a lo lejos, allí donde ya mi corazón no te alcanza, la congoja intuye en mi existencia.

Desde aquel día, conservo cada remembranza de nuestras memorias, frecuento eso lugares de antaño donde compartiamos la locura de ese amor profesado,
y tomo un  café, ese de cada mañana en aquel lugar que preferiamos, y allí sentado aguardo con la esperanza de que algún día regreses.

Porque rehusarme a tu presencia solo hace que se albergue melancolía en el alma y que la soledad borre esos recuerdos que me avivan.

Luz Marina Santiesteban
24-10-18