En la ciudad Sprunki aún se podían escuchar el cantar de los pájaros, el olor del aceite de los autos y sentir los radiantes rayos de sol.

En las calles habían bastantes negocios como peluquerías, arcades y restaurantes enfocándonos en estos últimos. Había una gran variedad como restaurantes de comida rápida, restaurantes vegetarianos, entre otros.

En la esquina de una de las calles se encontraba un pequeño restaurante llamado "esquina del queso" en dónde se servían todo tipo de comida incluyendo queso de todos los tipos. Adentro de este se encontraba una fila larga de clientes esperando su turno para pedir su comida siendo atendidos por el cajero.

???: Bienvenido a la esquina del queso, queso de todos los tipos, ¿Que desea servirse hoy? *Dijo un felino gris en un tono amargado vistiendo el uniforme de trabajo*

El primero en la fila quien era un Sprunki ratón dirigiría la mirada hacia arriba del felino para ver los televisores que mostraban el menú y luego volver a ver a los ojos del gato.

Brousi: Heh... ¿Tendrán hamburguesas con queso? *Dijo viendo al cajero*

Gray:... (No, estúpido, aquí vendemos tofu. OBVIO QUE TENEMOS HAMBURGUESAS DE QUESO, ¿PORQUE CREES QUE SE LLAMA "ESQUINA DEL QUESO" RETRAZADO MENTAL)... Si... Si tenemos *Forzó una sonrisa deseando decirle todos sus pensamientos al ratón*

Brousi: Oh, entonces pediré unas dos

Gray: Bien... ¿Algo más?, tenemos batidos de queso, pan cubierto de queso, salsa de queso...*Dijo mientras escribía algo en el monitor frente a él*

Brousi: Con eso estoy bien, muchas gracias *Dijo mostrando su mano en señal de detener*

El felino gris al finalizar su escritura, de una ranura del monitor saldría un pequeño papel con el número "23" y posteriormente se lo entrego al ratón de color marrón.

Gray: Aquí tiene, cuando llamemos a su número venga aquí para recoger su pedido

Brousi: Muchísimas gracias *Dijo caminando hacia una de las mesas que estaban libres del restaurante*

Ya habían pasado 12 años desde la desaparición de Wenda, el felino ya no era un niño amargado de 11 años. Ahora era un adulto amargado de 23 años con empleo.

Aquel trabajo en el restaurante no le gustaba ya que, como el caso de hace unoa momentos, había clientes con un coeficiente intelectual bastante cuestionable. De todas formas tenía que resistirse a decir sus pensamientos ya que si los decía en voz alta su jefe lo despidiria de inmediato.

El trabajo tenía una paga decente, lo suficiente como para poder mantener los impuestos de su apartamento y comprarse algo de comida. El mismo bajo su esfuerzo pudo comprarse su propio hogar y escapar de aquel cuchitril que era la casa de sus padres. La casa de sus padres siempre estaba sucia y desordenada ya que ellos ya estaban bastante viejos como para poder hacer ese tipo de trabajos. Por lo que el felino se la pasaba limpiando todos los días.

Sprunki cocinero: Hey, gris. El pedido número 19 *Dijo un Sprunki de color plateado con antenas*

El felino se volteó y miro directamente a su compañero de trabajo y lograría ver que traía una bandeja con un paquete de papas fritas junto a una pequeña taza de queso fundido.

Gray: Si, gracias *Dijo agarrando la bandeja*

El restaurante estaba implementado con altavoces conectados a un pequeño micrófono inalámbrico en la mesa de los cajeros. Micrófono que el felino tomaría.

"Número 19, venga al cajero a recoger su pedido. Número 19, venga al cajero a recoger su pedido"

Era lo que se pudo escuchar por todo el restaurante gracias a los altavoces. Poco tiempo después el cliente llegaría a la mesa para agarrar aquella bandeja y dirigirse a su asiento.

Ya eran las 3:58 de la tarde, el felino de gris comenzaría a mirar a todos lados con impaciencia como si estuviera buscando a alguien con impaciencia.

Gray: (Mierda, ¿dónde está ese tipo? ¿Porque siempre llega tarde?) *Pensó impaciente*

Estaba algo molesto cuando a sus oídos llegó una voz familiar que provenia de la parte trasera del local, más específicamente de la cocina.

"Perdón, voy llegando. Con permiso. Uy, cuidado con eso. ¿Que tal, Jonathan?"

El felino reconocería al instante esa voz, era la persona que estaba esperando.

De la cocina saldría un chico de color amarillo combinando con el color del restaurante contando también con unas antenas que al final tendrían una forma circular. Era su compañero de trabajo, Simon

Simon: Uff. Perdón, Gray. Creo que me tarde un poco, ¿no? *Dijo poniendo su mano en la nuca en señal de vergüenza*

Gray: Si me dieran un dólar por cada vez que dices eso, sería millonario *Dijo aún amargado y algo molesto*

Simon: Siempre te quejas de que supuestamente "llego tarde" pero tú turno termina y mi turno empieza a las 4:00. Y estoy llegando justo a las cuatro por lo que no llego tarde *Argumentó*

Gray: Se supone que tienes que llegar unos diez minutos antes.

Gray le tocaba el turno diurno que era desde las 9:00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde. A partir de ahí a Simon le tocaba el turno nocturno que eran desde las 4:00 hasta las 12:00 de la medianoche. Pero este último siempre llegaba a la hora justa.

Simon: Ash, tampoco es para tanto. Amigo, ya estoy aquí. Puedes irte tranquilamente a tu humilde morada *Dijo bromeando dándole palmadas en la espalda*

Gray: Si, mejor me voy para no ver tu cara *Dijo abriendo la puerta que dirigía a la cocina en un tono amargado*

Simon:.... YO TAMBIÉN TE QUIERO, AMIGO *Gritó hacia la cocina*

Por la cocina se encontraba la puerta trasera del local por donde los trabajadores entraban y salían, al lado de la puerta trasera se encontraban varios muebles con unos espacios en dónde los empleados pondrían sus bolsos o alguna que otra pertenencia.

El felino agarraría su mochila que contenía el recipiente donde antes estaba su almuerzo junto a su celular para por fin salir de aquel trabajo. Al lado de la puerta de salida también se encontraba una máquina con un espacio para meter el dedo pulgar y así la máquina poder escanearlo y marcar asistencia. Cosa que el gato hizo al salir en señal de su salida.

El felino caminaba por las calles aún con la ropa de su trabajo con los audífonos puestos, se podría ver pasar a la gente rodeando al felino que estaba en su propio mundo con el único objetivo de llegar a su destino, a su hogar.

Se podria ver un edificio de cinco pisos, siendo este un edificio en dónde se encontraban varios apartamentos. Nos enfocaremos en el tercer piso en dónde en frente de una puerta se encontraba el felino gris sacando las llaves de su mochila y abrir la puerta de su morada.

El apartamento tenía todo lo necesario para una sola persona, una cocina combinada con una sala junto a un sofá y una televisión. Habrían dos puertas que conectaban con la sala, una iría al baño el cual tendría una ducha y un inodoro y la otra puerta iría a la habitación del felino que tendría una cama con una cobija gruesa de color azul y unos cuantos posters de su cantante favorito, Raddy.

El felino soñaba con ser un gran vocalista igual a su ídolo quien era un gran vocalista de una banda de rock gracias a su voz gruesa.

El felino tomó asiento en el sofá y encender la televisión quitandose la gorra de su trabajo. En la televisión, lograría ver programas habituales.

Gray: Maldita sea, ¿de verdad no hay nada bueno para ver? *Dijo pasando canal por canal*

"Hey niños, bienvenidos a..."

"Hoy veremos cómo cocinar un..."

"¿Quieres volverte un gran cantante...?"

Todo eso se escuchaba en la televisión mientras el felino pasaba canal por canal rápidamente para luego apagar la televisión.

Gray: Ash, que decepción. Voy a dormir, es mejor que ver cómo... Espera *Dijo recordando las últimas palabras que escuchó* SI

Rápidamente el felino tomaría el control y volver a encender la televisión.

Presentador: *Repito, quieres ser un gran cantante*

Gray: Si *Dijo emocionado*

Presentador: Que bien, porque este viernes en el teatro de la ciudad Sprunki podrás actuar en un concurso de canto. El premio será cantar en frente de muchas personas aquí mismo el martes.

Gray: ¿Y como me inscribo?

Presentador: Puedes inscribirte en nuestro sitio Web que estaremos dejando en pantalla.

Tal como el presentador del anuncio, el link del sitio Web saldría en la pantalla por un tiempo, tiempo suficiente para que El felino sacara su teléfono de su bolsillo y le tomara foto a la pantalla.

Presentador: Además, tenemos como invitado especial al gran y fantástico cantante. RADDY

La cámara en el televisor enfocaría a nada más ni nada menos que al cantante de color rojo quien estaba tomando un poco de cerveza.

Raddy:.... ¿¡HMMM!? hey, que tal *Dijo para darse cuenta que lo estaban grabando y guiñar el ojo a la cámara*

Presentador: ¿Que esperas? Preséntate este viernes en el teatro a las cuatro de la tarde y haz lucir tus talentos en frente del gran cantante

Gray: NO PUEDE SER, QUE EMOCIOOON *Grito el felino pareciendo una fangirl loca*

???: HAY GENTE DURMIENDO, MOCOSO *Grito un vecino a través de las paredes*

Ante el regaño de su vecino el cual era un viejo cascarrabias, bajó las orejas con vergüenza.

Rápidamente fue a su habitación. Cerca de la pared estaba una mesa junto a una silla de madera, encima de la mesa se encontraba una computadora de marca "FUN-bot". El la encendería con emoción para entrar a su navegador de confianza e introduciria el enlace a la página gracias a su foto.

Al ingresar a la página le pedían un formulario en dónde preguntaban cosas como el nombre, número de teléfono, cédula de identidad, género, edad, Entre otras cosas.

Rápidamente el felino introduciria todo para mandar la inscripción a las audiciones. Se quitó sus prendas de vestir para darse un baño en su ducha mientras cantaba y practicaba su canción. Emocionado y paciente esperó aquel viernes.

[Viernes]
[3:55 PM]

El felino se encontraba aquel felino gris dando pequeños saltos de emoción y viendo con impaciencia aquel reloj esperando que finalice su turno.

Hoy el gato se comportó más amable como nunca lo había sido, siendo que ahora estaba de buen humor sin estar con esa actitud de amargado frente a los clientes.

Gray: (Vamos, Simon. Llega de una maldita vez) *Pensó mordiéndose los labios de los nervios con llegar tarde a las audiciones*

Casi como si el mismo Dios lo escuchará, aquella voz que antes odiaba escuchar pero ahora amaba se haría presente cuando la puerta que dirigía hacia la cocina se abrió.

Simon: Buenas gente, ¿Cómo está mi compadre favorito? *Dijo señalando con un dedo al felino*

Gray: SIMON, COMO ME ENCANTA VERTE *Dijo lanzándose a abrazar a su compañero de trabajo quien daría final a su turno*

Simon:... O-Oye... B-Bro, respeto tus gustos pero a mí me gustan las chicas *Dijo algo sonrojado al sentir el tacto de su compañero felino*

Gray, sin decir nada más, entraría a la cocina a paso rápido y dirigirse a la puerta de salida y hacer los pasos correspondientes para largarse de su trabajo, agarrando sus pertenencias y poniendo su dedo pulgar en el escaner.

Por las calles estaría el felino corriendo hacia el teatro de la ciudad, chocando y/o rodeando a las personas que se le cruzaban por su camino. Al ver aquel lugar rápidamente se dirigiría a la entrada en dónde se encontraba un Sprunki cuidando la entrada junto a una libreta escondida en su espalda

Sprunki de la entrada: ¿Tu quien eres? *Dijo sacando una libreta*

G

ray: *respiración pesada* Y-Yo... Hah... Me llamo Gray *Dijo con las patas en las rodillas debido al cansancio del correr*

Sprunki: Déjame ver... Gray... Gray... Mmmmm... Si, aquí estás. Estas anotado para las audiciones. Será mejor que entres rápido, ya han comenzado. *Dijo abriendo la puerta dándole espacio al felino*

Gray: ¿¡Y-Ya comenzaron!? *Dijo con nervios adentrándose al teatro*

El teatro estaba vacío en su totalidad, era normal ya que habían alquilado ese lugar para ellos solos por el show de canto. El felino al fin pudo ver que atrás del escenario se encontraba una fila muy larga, también pudo escuchar a otra persona cantando seguido de varios.

"Siguiente"

El felino de color gris se dirigió a la última persona de aquella fila a tocarle el hombro.

Gray: Disculpe... Está es la fila para las audiciones

Sprunki: ¿Heh? Oh, Por supuesto que si *Dijo el Sprunki emocionado*

Gray: Genial... Dios esto será increíble *dijo igual de emocionado * (¿De verdad voy a cumplir mi sueño? Ya puedo imaginarme el martes, E-Estare frente a muchas personas que verán mi talento al cantar)

El felino cada vez más se sumergía en sus imaginaciones, comenzando a vivir una fantasía.

Fantasía

Un concierto se estaba dando a cabo un concierto gigantesco, lleno de luces azules que llenaban el ambiente. Un montón de personas se encontraban en los asientos viendo y escuchando al felino cantar una emocionante canción arriba del escenario.

Gray: "NO PUEDO VIVIR SIN TI, SIENTO QUE VOY A MORIR."

Era lo que todos los presentes podían escuchar del felino, una canción romántica pero a la vez movida

Chicas del público: TE AMAMOS, GRAY *gritaron las chicas estando en primera fila*

Gray: Y yo a ustedes, ATRAPENME

El felino correría, saltando del escenario y cayendo en los brazos de todo el público, siendo levantado entre todos mientras todos repetían su nombre en señal de admiración.

PUBLICO: GRAY, GRAY, GRAY, GRAY, GRAY, GRAY.

Fin de la fantasía

El felino estaba tan sumergido en sus fantasias que no se estaba dando cuenta que ya era su turno de pasar al escenario

"¿Quien es el siguiente?"

La voz se escuchó otra vez por todo el teatro. Cosa que hizo que el felino de color tenue lograra salir de sus pensamientos.

Gray: Heh... AH

Ahí estaba, subido en el escenario a la vista de los jueces. Tímidamente se acercó a un micrófono que estaba situado en medio del escenario.

En frente del escenario se encontraban varias sillas vacías exceptuando dos que estaban en primera fila. Esas dos sillas estaba ocupadas por aquel presentador que vio en el anuncio de televisión y a su lado se encontraba el inigualable Raddy quien se encontraba mordiendo la parte de atrás de su lápiz con una libreta descansando en su regazo.

Presentador: Bienvenido a las audiciones, amigo. ¿Cómo te llamas? *Preguntó amablemente*

Gray:.... Heh... Me llamo

*Bzzzzzzzz*

Al hablar cerca del micrófono este hizo un sonido chirriante que haría que todos los presentes se cubrieran los oídos.

Gray:.... Dije que... Me llamo... Gray *Dijo tímido y avergonzado*

Preaentador: Bienvenido, Gray. Espero que estes teniendo un buen día *Dijo con amabilidad*

Raddy: Pues bueno, pana. ¿Que tal si nos vas demostrando tus "habilidades" al cantar? *Dijo con una actitud más gamberra*

Gray: Heh... Si... Ejem. *Dijo aclarando la garganta*

El felino sujeto firmemente el micrófono para así respirar hondo y comenzar el número que tanto practico mientras se duchaba.

"Oh, oh~.... ¿Donde estas, mi amor?
Aquí sin ti me muero de caloor~... Dónde vayas yo te seguiré siendo tu pareja fiel~ buscando aquellos días de amor que tanto querías encontraaar~ HEY HEY~ Cuando yo..." *Dijo mientras cantaba en un tono bajo y melancólico*

Raddy: De acuerdo, de acuerdo. Para de una vez *Reclamó el cantante de rojo callando así al felino*

Gray: Heh... ¿Que pasó? No había terminado *Dijo extrañado*

Raddy: Si... Verás... No puedo decir que cantas mal o cantas bien porque directamente no te escucho. *Se quejo el cantante*

Gray: ¿P-Perdon?

Raddy: Cantas demasiado bajo, en un concierto real tienes que cantar lo suficientemente alto como para el ruido de la gente no te perjudique.

Gray:.... P-Pero *Dijo con la voz temblorosa*

Raddy: De todas formas, gracias por venir aquí. Ahora como último favor, ¿Podrías irte? *Dijo señalando la salida del escenario*

Presentador: Ash... Lo siento, amigo *Dijo el presentador sintiendo algo de pena por el gato*

El gato de colores tenues no podía creerlo, practico tantas veces aquella canción, el mismo la escribió con sus propias manos... Todo para que sus sueños y expectativas sean destruidas en un solo segundo.

Raddy: Bien. SIGUIENTE *grito el cantante dando la señal al chico gato que se largue*

El felino tenía los ojos abiertos como platos, trato de impresionar a su ídolo solo para que el mismo lo rechazara de una manera tan floja y rápida...

El gato ahora se encontraba caminando entre una aglomeración de gente, no sentia nada más que ira, tristeza, decepción, resentimiento. Sus sentimientos combinados hacían mal a la estabilidad mental del felino.

"Maldito seas"

"¿Porque siempre soy un fracaso?

"Vayanse todos a la mierda"

Eran los pensamientos que pasaban volando por la mente del gato, haciendo que apreté sus dientes formando una mirada de odio e ira.

Chocaba violentamente contra las personas a su alrededor, estar cerca de un gato enojado no era buena idea.

De un momento a otro, una persona atrás de el se tropezó haciendo que ambos cayeran el el duro piso de la calle.

Gray: MALDITA SEA, TEN CUIDA- *Estaba cerca de reclamar gritando a aquella persona con la que tropezó*

Cuando vio bien la figura de la persona frente a él, logro notar que está era una hembra vestida totalmente de negro, chaqueta negra con capucha, pantalones largos negros, entre otros. Así que por respeto calmo su ira respirando profundamente. A un lado de la chica logro ver una billetera, seguramente era de la hembra ya que pudo habersele caido al tropezar.

Educadamente, se agachó y recogió la billetera para acercarse a la hembra que aún estaba de espaldas a él y estaba cerca de levantarse por completo.

Gray:.... Disculpa... Creo que esto es tu *Dijo extendiendo la mano para pasarle la billetera*

Antes de entregarle la billetera a la hembra, escucho unas palabras que venían de atras que lo dejaría quieto.

"Ladrona, ladrona"

Al girar su cabeza, logro ver a un chico color cafe usando un traje y gorro de policía junto a otro chico color morado correrían apartando a la multitud dirigiéndose hacia el. O tal vez no... Estaban corriendo hacia la hembra.

???: DAME ESO *Rápidamente, la hembra se giró y le arrebato violentamente la billetera de las manos del felino para volver a correr*

Cuando la hembra se giró el felino pudo ver su cara, la cual estaba semiescondida ya que la hembra llevaba un cubrebocas de color negro. Lo único que no estaría escondido serian sus ojos.

Aquellos ojos generarían mariposas en el estómago del felino, aquellos ojos los recuerda perfectamente. Recuerda perfectamente a quien le pertenecen aquellos ojos...

Aquellos ojos....

Dios mío, ya está dando sueño, no debería estar escribiendo esto literalmente a la medianoche.

Bueno, lo típico. Espero les haya gustado, bla bla bla, si no les gusta me pueden insultar en los anunciosz bla bla bla. Chau