La noche estaba realmente helada y había olvidado traer conmigo un suéter, sin embargo no daba la más mínima señal de que me estaba congelando porque no queria que Johann tuviera que sacarse su chaqueta para ofrecérmela.... Me hablaba sobre lo emocionado que estaba por la grabación del vídeo y aunque me costaba un poco permanecer enganchada en la conversación, trataba de no perder ningún detalle de lo que mencionaba. 

Realmente en este punto de la noche, no sabía si había hecho bien al no contestarle a Christopher y apagar el celular. Comenzaba a arrepentirme y querer hablar con él, pero por motivos de mi estúpido orgullo y enojo, había dejado el móvil en el hotel.

— ¿Y cuando empiezan las grabaciones?—pregunto y él me dedica una sonrisa.

—En dos días, primero hay que preparar algunas cosas de producción. Por ello vine antes de tiempo—menciona y se detiene al observar a un músico callejero que se encontraba tocando el saxofón en una esquina de la calle mientras muchas personas lo rodeaban admirados de su talento.—Wao, es muy bueno—dice más tarde y comienza a aplaudir como ya muchos también lo hacían.

— ¿Por qué no mencionaste antes que venías? Hubiésemos viajado juntos—menciono aplaudiendo también y el me mira un poco serio.

—Por Christopher —menciona de inmediato y se encoje de hombros. Se aleja hasta el músico y le ofrece un billete para luego tenderle la mano y decirle algunas palabras. El músico se notaba realmente contento y agradecido por el detalle de Johann, lo que a mi me hizo sonreír sin querer.

<<¿Sonreír sin querer?>>

No tengo respuesta a ello.

— ¿Por qué dices que fue por Christopher?—pregunto una vez que vuelve y comenzamos a caminar de nuevo.

—Tuvimos un pequeño encuentro horas antes, no queria causarte problemas—dice sincero y me mira para ofrecerme una pequeña sonrisa.—Le dije que habías pasado la noche en mi casa porque me imaginaba que se estaba preguntando la razón de mi presencia y la de Yoyo cuando apareciste. Y honestamente sabía que no le gustó para nada aquello.

— ¿Le mencionaste el porqué de quedarme en tu casa?—inquiero algo sorprendida y él asiente.

—Sí, pero sé muy bien que aún así no le agradó saber donde pasaste la noche. Teniendo en cuenta que además Yoyo y yo somos sus amigos, quizás se disgustó de que no lo llamáramos para decirle que estabas con nosotros.—explica y se detiene una vez más. Veo a nuestro alrededor y me percato de que no hay nada que pueda haber llamado su atención para tener que detenerse.—Dane, me disculparas porque puede que pienses que soy un entrometido.

—Para nada—digo negando de inmediato y él asiente.

—Sé que últimamente tienes muchos líos con Chris, realmente no sé los detalles y tampoco espero que me los des a saber, pero es algo muy notorio. Lo pude notar aquella noche y mucho más cuando no quisiste contestar su llamada hace unas horas... Sí, sé que era él quien llamaba... Solo... solo espero que todo lo que suceda sea para el bien de ambos.—menciona muy serio y se acerca un poco hacía mí.—Dane, eres una chica muy especial... podrás decirme que estoy loco...  —dice y sonríe de lado—pero lo supe en el momento que te vi aparecer en cámaras cuando te captaron con los chicos en Guayaquil. Y... aunque Chris sea mi amigo, tú eres más importante y no quiero que te hagas daño.

—Gracias, Joly... es muy lindo de tu parte, creo que eres una persona maravillosa también y me lo estás demostrando al preocuparte por mí —digo empezando a ponerme algo nerviosa por su cercanía. Al segundo me toma de ambos lados de mi cara con sus manos, las cuales se encontraban cálidas en comparación con las mías.

—Dane, no soy tan maravilloso como crees... No justo ahora... cuando lo que más quiero es besar a la novia de mi amigo—explica y se me corta la respiración. Sonríe un poco sonrojado y me acaricia una mejilla sutilmente.—Lo siento—susurra y se aproxima tan cerca de mis labios que puedo sentir su respiración entrecortada. Sin embargo cierra los ojos fuertemente y me da un beso en la frente y luego se retira dejándome pasmada.

<< ¡Dane, REACCIONA! >>

Creo que me va a dar algo.

—Creo... creo... que... es hora de irse... es un poco tarde ¿no? —menciono tratando de volver en mí y el asiente sin decir más nada.—Bueno, eh... entonces... Dios, lo siento, Johann... no sé como reaccionar—digo nerviosa y me abrazo a mi misma sintiendo más frío aún.

—No seas tontita... porque no simplemente dices que te estás muriendo del frío. Tienes que cantar mañana, Dane, no puedes enfermarte de un momento a otro—dice entre regañándome y riendo. Me cubre con su chaqueta y toma mi barbilla con sus manos.—Sé que no debí decir lo que dije... y lo siento mucho por ello, pero me está oprimiendo el pecho como no tienes idea. Realmente me gustaste desde aquel día que te grabaron, me pareció tan gracioso que trataran de ocultarte debajo del abrigo de Christopher en vano. Me reía de la situación y ni siquiera la entendía, pero en cuanto vi la foto de tu rostro mi corazón quedo impactado.—menciona riendo al recordar como vivió aquel momento y de la misma manera lo hago yo. Siento de inmediato un vuelco en el estómago necesitando hablar con Christopher de inmediato.

—Tengo que volver al hotel, Johann—digo un poco apenada y él asiente soltando mi rostro.

— ¿Esto?... ¿Esto cambia algo entre nosotros?—pregunta cabizbajo y lo observo sin saber que decir.

—No, realmente no... sigo creyendo que eres maravilloso. Puede que se sienta algo raro el hecho de que hayas confesado que te gusto, pero eso no desaparece que seas un buen chico... Me respetaste y también a Christopher al no besarme... Si crees que podemos estar bien, yo lo pensaré igual—menciono y le dedico una sonrisa tímida.

—Gracias, linda... no me equivoqué al pensar que eres una chica extraordinaria... Entonces, te acompaño al hotel—dice y asiento empezando a caminar para tomar un taxi.

El viaje de regreso está callado al contrario de cuando apenas salimos hace unas horas. El taxi se parquea y ambos nos bajamos para entrar y subir los pisos hasta llegar a mi habitación.

—Bien... gracias por la salida, Joly, la pasé estupendo —menciono sonriendo y le devuelvo la chaqueta.

—No, quiero que te la quedes... te ves muy bien—dice y asiento sin decir nada más.— ¿Puedo hacerte una pregunta antes de irme?—inquiere segundos después cortando el silencio que se había generado.

—Ya lo estás haciendo—digo riendo y él se golpea suavemente la cabeza riendo igual.

—Tienes toda la razón—dice y ríe aún más.

— ¿Entonces?—pregunto llamando su atención.

— Quiero que seas sincera—pide y asiento sin problemas.— ¿Por qué no reaccionaste cuando iba a besarte? Digo, no hiciste nada para impedirlo—menciona y me quedo sin palabras.

<< Tenía la misma duda... ¿Por qué, Dane? >>

—Yo... ah... pues. Realmente...—menciono sin tener respuesta alguna y Johann me mira con curiosidad.

Dios... ¿Por qué no lo hice?

—Creo que después de todo no te soy tan indiferente como creía —dice divertido y me alborota el cabello. De inmediato siento mi cara arder y ponerse roja.

—Ten... tengo que descansar... Buenas noches, Johann—digo nerviosa sin conocer la razón mientras él sonríe de oreja a oreja. 

—Está bien, descansa... Buenas noches, Dane—menciona y se acerca dándome un pequeño beso en la mejilla que me hace sentir cosquillas. Acto seguido está caminando por el pasillo hasta el ascensor y me dedica una sonrisa antes de que las puertas se cierren.

Me quedo observando la nada por varios segundos y luego decido entrar. Doy un gran suspiro de alivio y me recuesto en la puerta intentando pensar en lo que había sucedido minutos atrás. Miro hacía la cama y decido tomar el celular y prenderlo.

De inmediato las notificaciones me dan a conocer que Christopher ha hecho muchas llamadas y me ha dejado muchos mensajes de texto y de voz. Decido escuchar primero los mensajes de voz de whatsapp.

—Tenemos que hablar, amor... realmente no quiero estar así contigo y lo sabes. Contesta, por favor, te extraño y me duele que me ignores. ¡Te amo! —termina el mensaje y abro otro.

—Hermosa, ¿dónde estás? ¿tuviste algún compromiso de última hora? Llámame en cuanto puedas... Te amo, preciosa—Luego pulso otro.

— ¿Dane? Dios, ¿acaso quieres que viaje a Argentina para poder hablar contigo? Ya han pasado dos horas y no quieres comunicarte conmigo, por favor, por lo menos dime que estás bien. Estoy preocupado, amor... Recuerda... Te amo solo a ti.

Antes de abrir otro mensaje de voz de Christopher, recibo otro mensaje en whatsapp de un número desconocido. Lo abro con curiosidad y me encuentro con una selfie de Andrea junto a Christopher, Richard y Joel comiendo pizza frente al televisor, donde al parecer estaban viendo una película de terror. Leo el mensaje que está junto con la foto y mi enojo vuelve a hacerse tan grande que quiero llorar.

*Voy a quedarme está noche con los chicos, Dane. Christopher está muy solito y triste porque no le quieres contestar... pero no te preocupes, que yo lo consuelo por ti ;)*

Tiro el celular al piso haciendo que éste se desarme y me acuesto llorando y maldiciendo al mundo entero. 

El frío me envuelve de nuevo y tomo la chaqueta de Johann quedándome profundamente dormida mientras la abrazo.

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Hoooooliwis CNCOwners!!!

Lo prometido es deuda y por ello aquí me tienen de nuevo con otro capítulo de esta bella historia... Bueno, ni tan bella por ahora xD!

¿Cómo han estado? Pues espero que de maravilla aunque yo no tanto por el examen final que estuvo para matarse :/ Realmente creo que le atine a poco por más que estudié lo que más pude. Pero la vida es bella y hay que continuar hacia delante. \(^O^)/

Pues espero que les haya gustado o ¿disgustado? el cap de hoy, bueno no lo sé... pero aún así espero que me sigan dando el mismo amor y cariño con sus estrellitas y comentarios como siempre lo han hecho.

Un millón de gracias por leerme y yo me despido hasta el próximo capítulo (que será muy pronto), dejándoles millón besos para ustedes! (/3\)

Con mucho amor CNCOwner:

Elena Chan xD!

¡LAS JAMO MUCHOTE CNCOwners!