Capítulo 17 - ¿Qué crees que haces?
¿Qué se cree Christopher?
Si sigue comportándose de esa manera tan infantil comenzaré por no aguantarlo... y ese será un gran problema.
— ¿Solucionaron las cosas?—preguntan y doy un grito del susto.
— ¿Qué haces aquí, Zabdiel? ¡Casi me da un infarto!—digo un poco alterada mientras llevo mi mano al pecho. De un momento a otro mi corazón estaba a mil por hora. Obviamente, quién no se va a asustar de esa manera al entrar en una habitación que supuestamente está vacía.
—Solo quería que hablemos un poco—menciona tranquilo mientras se encuentra sentado sobre la cama. — ¿Y solucionaron algo?—inquiere realmente interesado y luego sonríe.
—Sabes que no... tu amigo es demasiado inmaduro—menciono. Ruedo los ojos y camino acercándome a mi equipaje. Tendría que preparar mi outfit para esta tarde con el insoportable de Christopher.
—Habló la chica más madura del universo—dice riendo y lo fulmino con la mirada.
—Pues más madura que tú tonto amigo, si soy—digo cruzándome de brazos. — Y ya veo que su "show" de ir al gym sólo fue a propósito—menciono y me giro a lo que estaba haciendo para evitar su mirada.
Recuerdo nuevamente lo que dijo Christopher sobre mi lunar y me sonrojo tanto que siento mi cara arder.
¡Estúpido!
— Sabemos que están locos el uno por el otro... por eso lo hacemos—explica. Me vuelvo hacia él y lo miro con el ceño fruncido.
— Zab... sabes muy bien lo que hizo, y no estoy dispuesta a volver con él.... NUNCA—digo finalmente y me encierro en el baño para no tener que escuchar nada más que tenga que ver con ese tonto.
<< ¿Realmente no regresarás con Christopher? >>
Obvio... ¡ya aguanté mucho de ese inmaduro!
<<Si, claro>>
Escucho la puerta de la habitación cerrarse y sé que Zabdiel se ha ido. Me miro al espejo y efectivamente, mis mejillas están tan rojas que parece que he corrido un maratón completo.
¿Cómo es que pude dejarme llevar de esa manera?
Ahora creo que no seré capaz de volverlo a ver a la cara sin sonrojarme y comenzar a sentir cosas extrañas que no he sentido antes.
Mi celular suena tras la puerta del baño y salgo para tomarlo. Johann me está llamando. Contesto al tercer tono.
— ¿Diga?
— ¡Dane, Dios! ¿Qué sucedió? He tratado de comunicarme contigo y no he podido hasta ahora—dice un poco alterado y doy un gran suspiro.
—Lo siento, Joli... había dejado mi celular en el bolso, lo olvidé por completo—menciono en disculpas.
—Está bien, al menos ahora sé que estás viva—dice un poco más animado y sonrío.
—Tuve que volver a Miami por cuestiones de trabajo—explico automáticamente. —Tengo una entrevista o algo parecido en la tarde.
— ¿Y tu viaje a Ecuador?
—Quedó postergado para mañana—respondo y de inmediato recuerdo que no me he comunicado con mamá aún para avisarle. Ya lo haré después.
—¿Y en qué programa saldrá la entrevista para no perdérmela?—inquiere animado y me quedo callada unos segundos.
—No creo que te guste mucho si la ves, Joli —digo con incomodidad. Me sobo la nuca y tomo aire para lo que se viene.
— ¿Por qué? ¿Tiene algo de malo?
—Pues creo que no... pero, es una entrevista de "pareja"... Christopher y yo—digo lo más tranquila posible y no escucho respuesta alguna por su parte.—¿Joli?
—Sí, te escuché... Pues espero que te diviertas—menciona claramente disgustado.—Creo que tengo que colgar, Dane... Avísame cuando tengas tiempo para hablar.
—De acuerdo, Joli—digo tirándome a la cama.
Sé que debe estar tratando de luchar con él mismo para no hablarme mal. Después de todo, lo entiendo, yo tengo la culpa por darle una oportunidad, él me quiere y ahora mismo debe estar muriéndose de los celos.
—Te quiero, Dane—menciona varios segundos después y no cuelga esperando una respuesta de mi parte.
—Cuídate, Joli... Te quiero—digo con los ojos cerrados y conteniendo el aire. Finalmente cuelga y me siento rendida. Tomo entre mi mano el collar que me obsequió y lo acaricio con delicadeza.
Tengo que hacer un gran esfuerzo... Johann lo merece.
Me pongo de pie finalmente y decido ir por un vaso de agua. El desayuno quedó a mitad de hacerlo, por lo que podría continuar cocinando y comer algo decente para mi estómago que está muriendo del hambre.
Abro la puerta y allí está él.
—Así que lo quieres—menciona enojado y ruedo los ojos.
Lo que me faltaba.
— ¿Acaso no te han enseñado que escuchar tras la puerta es de mala educación?—inquiero enojada y él frunce el ceño más.
— ¿Entonces es cierto? ¿Lo quieres? ¿Estás enamorada de él?—inquiere de inmediato y se sitúa justo en medio del camino para no dejarme ir.
—Christopher, ese no es asunto tuyo... te dije que me dejes en paz—digo frunciendo el ceño igual que él y me doy vuelta para cerrar la puerta.
Cambio de planes, al parecer hoy no podría desayunar.
Pone un pie para evitar que cierre y luego empuja pero con cuidado de no golpearme o hacerme caer. Entra y tras eso cierra fuertemente, poniendo seguro a la puerta.
— ¿Qué crees que haces?—inquiero de brazos cruzados.
—No me iré de aquí hasta que contestes lo que pregunté —dice testarudo y se cruza de brazos también.
— ¡Lárgate,Christopher! O empezaré a gritar—digo más enfadada de lo que puedo estar. Trato de contenerme para no golpearlo y luego salir huyendo.
— ¡Ya estás gritando!... Y no me voy—refunfuña y se recuesta contra la puerta a propósito.
—Bien, entonces no diré nada... por mi te puedes quedar todo el tiempo que te dé la gana—menciono y me dirijo hasta la cama. Me siento y cruzo los brazos mientras lo miro con el ceño fruncido.
¡Ni creas que te vas a salir con la tuya, tonto!
Transcurren los minutos y ninguno de los dos dice nada, simplemente tratamos de mirar a cualquier otro lado y no prestarnos atención. Al parecer Christopher se cansa y se sienta en el suelo aún obstruyendo mi salida, toma el celular y empieza a jugar para matar el tiempo.
Mi estómago gruñe y llevo mis manos a él para sobarlo.
¡Estúpido, Christopher!
—Listo, fue suficiente... déjame salir—digo poniéndome de pie y caminando hasta donde él.
—No, hasta que me contestes—dice sin mirarme y siguiendo su juego en el celular.
—Tengo hambre, Christopher.... deja de comportarte como un niño y sal de la maldita puerta —menciono frustrada y éste se pone de pie. Guarda el celular en el bolsillo de su pantalón y se recuesta sobre la puerta nuevamente.
Me mira tranquilo y sin decir nada, lo que me hace bajar la guardia. Tengo que alejarme un paso de él para evitar quitar unos mechones de cabello que tapan su rango de visión, lo que lo hace ver más lindo de lo normal.
—Solo... necesito que respondas, por favor—dice con dificultad y quita un paso de distancia de mí. Me toma de la muñeca izquierda con suavidad y se acerca más hasta tenerlo a pocos centímetros de mi rostro.—¿Realmente lo quieres?
Doy un gran suspiro y abro mi boca para tratar de hablar pero nada sale de ella. Solo niego y de inmediato sus labios se curvan en una hermosa sonrisa que me deja notar sus pequeños hoyuelos.
Inesperadamente y como por arte de magia, quiero besarlo... y por estúpida que sea la idea, quiero hacerlo.
Sin pensarlo llevo mi mano hasta su mejilla y doy una leve caricia lo que hace que Christopher cierre los ojos y sonría más. Me siento como en un estado de trance absoluto y no me importa, porque lo único que deseo ahora mismo es besarlo y que él me bese a mí.
Me acerco a su rostro teniendo que ponerme de puntillas y planto mis labios en los suyos, haciendo que él abra de inmediato sus enormes y bellos ojos marrones y se topen con mi mirada. Cierro los ojos y siento como afloja mi muñeca para poner su mano en mi cintura al igual que hace con la otra. Ahora me sostiene para que no me canse de estar de puntillas mientras lo envuelvo por el cuello con mis brazos.
Comienza a acariciar en el sitio donde termina el short a la altura de mis caderas y me toma con ambas manos por los muslos para ayudarme a enredar las piernas a su cintura. No dejo de besarlo y jalar su cabello con mis manos haciendo que dé pequeños gruñidos desde su garganta y apriete mis muslos y cadera.
—Ya no lo soporto más, Dane... quiero hacerte el amor —dice entre besos y simplemente asiento sin dejar sus labios. Muerde con un poco de fuerza mi labio inferior y me hace gemir de dolor y placer al mismo tiempo haciendo que sienta un poco el sabor de sangre en cada beso.
Me recuesta sobre la cama y de inmediato se libera de su camisa. Vuelve a besarme y me acomoda sobre él para ahora deshacerse de la mía. Cuando lo hace nos miramos a los ojos por varios segundos sin decir nada, dirige su mirada hacía mi cuerpo y me sonrojo por ello.
—Está justo aquí —dice sin aliento y haciendo un pequeño circulo con su dedo por encima de mi brasier. Sé que lo dice por mi lunar y me sonrojo simplemente asintiendo. Me toma por las mejillas y me atrae a él para volverme a besar y situarme nuevamente bajo él.
Sé que esto está mal, pero no lo detendré como hace unas horas.
No lo haré porque lo amo y porque aunque no estemos juntos, no me imagino haciendo esto con nadie más en el mundo. Si tengo que perder mi virginidad algún día, prefiero mil veces que sea con Christopher, porque le amo tanto que quiero que sea el primero en hacerme sentir cosas que nunca he sentido.
Cierro los ojos mientras besa mi cuello y baja mi short, dejándome al descubierto tan solo con mi ropa interior, que por vergonzoso que sea, es de Bob Esponja.
<< ¿Y quién era el inmaduro? >>
No me juzgues... ¿quién no ama a Bob Esponja?
Christopher detiene los besos y me mira pareciendo que está tratando de grabar en su memoria cada pequeña parte de mi cuerpo. Sonríe de lado al detenerse en mi tanga y no puedo aguantar la risa por la vergüenza.
—Es lindo... es tan tú—dice con un brillo en su mirada y se acerca para dejar un beso en la punta de mi nariz. Sale de la cama y toma su camisa para luego ponérsela.
¿Acaso lo espantó mi tanga de Bob Esponja?
—¿Qué sucede?—pregunto sin entender y me siento sobre mis talones. Se sienta a mi lado y quita un mechón de cabello que estaba sobre mi rostro.
—Te amo, Dane... y sé que tu también, pero creo que no es el momento... quiero que sea algo especial para ambos —dice con cariño y planta un beso fugaz en mis labios.
—¿No es el momento?—repito sus palabras sin entender y él asiente.—¿De qué hablas?... Tenemos que hacerlo ahora, Christopher...
—¿Por qué ahora?
—Porque quiero perder mi virginidad contigo antes que venga cualquier otro—explico sintiendo un poco de enojo y Christopher frunce el ceño.
— ¿Antes que cualquier otro? —inquiere confundido.—¿Acaso piensas estar con otro tipo después de estar conmigo?
—Pues ni modo que me quede solterona toda la vida—digo y me levanto de la cama enfadada. Tomo mi ropa del suelo y comienzo por ponerme el short.
—¿Solterona? Pero... si estás conmigo no estás soltera, Dane —menciona entre confundido y enojado.
—Pasa que yo no estoy contigo, Christopher... Esto solo iba a pasar ahora y listo, pero lo has arruinado—digo finalmente vestida y tomo aire para controlarme.—Sal de la habitación, por favor, necesito descansar un poco—pido y Christopher no dice absolutamente nada.
—¿Solo ibas a acostarte conmigo y después hacer como si nada pasó? ¿En qué clase de chica te has convertido?... ¿Quién iba a ser el siguiente?... ¿Johann?—inquiere tan enojado como puede y sin pensarlo de doy una bofetada dejando la marca de mi mano en su mejilla.
— ¡No soy una puta, Christopher!... Ahora simplemente lárgate de aquí antes de que no aguante más y te vuelva a golpear... ¡Lárgate!—grito y lo empujo hasta llevarlo a la puerta y obligarlo a salir.
Quedo alterada y tratando de tranquilizar mi respiración.
Ese estúpido se atrevió a insinuar algo tan feo de mí que nunca se lo voy a perdonar. ¿Es que acaso cree que iba a olvidar todo después de lo que hizo? ¿Después de besuquearse con Andrea? ¿De emborracharse y tirarme en mi cara que me fue infiel? ¿Después de burlarse de mí?
Simplemente quería estar con él porque lo amo y luego olvidarme de todo... tratar de seguir con mi vida lejos de él, pero como siempre arruina todo.
¡Lo odio!
¡Te odio, Christopher Vélez!
-------------------------------------
Holiwis CNCOwners hermosas!!!
Sé que me han extrañado y no se imaginan cuánto yo también, pero últimamente mis responsabilidades y obligaciones han crecido y pues no me da mucho tiempo para otras cosas. Para que se hagan una idea, aquí en Ecuador estamos con puente vacacional desde el miércoles y adivinen qué.... Mis hermosos profesores me han enviado tarea, tanto así que ni siquiera me he ido de viaje o al menos salido a la esquina de mi casa *llora desconsolada* :/
Aún así, estaba consciente que tenía que actualizar y no dejarlas sin capítulo tanto tiempo por eso aquí tienen. Millón gracias por votar en cada capítulo y por darme su amor incondicional. Espero que me den su estrellita ahora así como cualquier comentario aquí abajito.
CON AMORSH:
Elena (^3^)/
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top