CAPÍTULO 22: La pareja sweetie
Danna
¿Para que negarlo, si las palabras de mi sweetie me llegaron? Hondo, como la espada del Capitán Jack Sparrow contra sus Jacks duplicados.
Aclarar que yo también le digo sweetie a mi Benjamín.
—¿Lo dices enserio? —le pregunto con una risueña sonrisa. Entonces Benjamín entorna los ojos, sonriendo también.
—¿Todavía lo dudas? ¿O tal vez existe otra Danna Stephani Bellot Valdivia en el mundo?
—¡Oh, Dios libre a esa pobre chica! —se me sale, mientras hago la señal de cruz, ya saben, esa de «En el nombre del Padre, del Hijo y etcétera, etcétera», como la monjita Juana Inés en la telenovela mexicana "Hijas de la luna".
Pero Benjo me mira extrañado. ¡Seré papa frita! ¡Pensé en voz alta! Retráctate, retráctate.
—Quiero decir, odio que digas mi nombre completo, sweetie. Es algo ñoño —y la verdad es que sí. Mis nombres me gustan mucho, pero su combinación sigue pareciéndome rara.
—¿Por qué? Si a mí me encanta y no lo encuentro para nada ñoño —sonríe de medio lado.
¡Oh, sweetie, sos único! Como diría la pendeja de Floricienta.
—Y a mí me encantas todo tú —okay, supongo que esta es una reconciliación, así que lo beso. Con mucha pasión, tal y como esa noche en que me dijo: «Te amo». Lo beso, lo beso y lo beso como si no hubiera un mañana, tal y como dijo en uno de sus vídeos el guapísimo Germán Garmendia al relatar uno de los peores días de su vida.
Muerdo sus labios como a fruta, saboreo su lengua como paleta y… Me estoy poniendo intensa.
Me separo, sonrojadísima como ciruela y nos miramos a los ojos unos segundos. Siento que algo especial nos une visualmente hablando, como una conexión, en resumidas cuentas, siento lo que sienten esas protagonistas de novelas románticas en el popular Wattpad.
—Te amo, Benjamín —lo abrazo de imprevisto—. Por favor, por favor, por favor, no vuelvas a ponerte distante y frío conmigo. De verdad, lo sentí mucho mucho.
—Una vez más, perdóname sweetie. Me resentí sin motivo alguno —se encoge de hombros y me dedica una nostálgica sonrisa.
—¿De verdad querías sexo?
—Lo quería, no te lo voy a negar. Pero me hiciste ver que si realmente te amo, sabré esperar a que estés lista, sin presionarte a nada.
—¿Y si nunca estoy lista? —me aterra pensar en esa idea.
—¿Y cuando nos casemos? —se sobresalta—. ¿Qué habrá de nuestra luna de miel?
—Por eso te quería decir, que ya tengo la solución perfecta para satisfacer tus deseos hormonales y enfrentar ese mi estúpido miedo.
N/A:
¿Qué exactamente planeará Danna? Aquí comentario.
¡Pero lo descubrirán en el siguiente capítulo! ;-)
Si realmente te gusta esta novelita de dramaqueen adolescente, no te olvides de comentar y votar. Bueno, así sentiré su amorrr
¡Besos, mis amores!
426 palabras
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top