Mis compañeras de equipo capítulo 16

No sabían cómo se mantenían en pié, algún que otro traspié y también algunos bandazos peligrosos habían amenazado con esto, sería por ser shinobis, o a lo mejor no estaban tan borrachos o bueno, quizás sería porque los 3 marchaban agarrados en procesión, a paso lento y renqueante, sin pausa pero a la vez sin prisa, había mucha noche por delante para descansar así que... qué más da tardar una hora de más en llegar a tu casa?. Menos mal que Konoha se quedaba desierta a altas horas de la noche... porque cualquiera que viera a ese trío se quedaría de piedra... vaya suerte que tenían los condenados... no sabían cuanto tardaron en llegar al barrio Uchiha, a ojo, quizás unos minutos, aunque habían caminado mucho más que para ir al restaurante, al llegar a la puerta Sasuko les pidió (a Naruto, Sakura estaba fuera de la ecuación) que esperaran a que pudiera abrir la puerta, la llave le temblaba en la mano y la acción de insertarla en la cerradura se convertía en la tarea más difícil del mundo, quizá sólo comparable con enebrar una aguja teniendo Parkinson... finalmente logró meterla y abrir...

Sasuko: Pa... pasad... no me encuentro bien y no... no puedo subir las escaleras...- Naruto se prestó a ayudarla, aunque no es que estuviera mucho mejor y Sakura... bueno... la última vez esperó en la puerta por vergüenza a entrar... esta vez... dónde estaría esta?.- A paso lento subieron los escalones, la casa se les hizo enorme o eso es lo que su trastocada perspectiva les indujo a creer.

Naruto: Dios... creo... que... ya casi... madre de Dios... no tenemos que beber tanto.- No se encontraba muy bien,se estaba mareando por momentos y la sensación era horrible, empeorando a cada segundo, a cada escalón que subía, sentía la necesidad de tumbarse, de relajarse unos instantes,que si no lo hacía echaría todo al suelo.

Sasuko: No me encuentro bien... tengo que ir al baño...- La Uchiha se separó de los otros 2 y caminó torpemente hasta el aseo, cerró la puerta tras ella dejándolos a solas.

Naruto: Sakura-chan... voy... voy a tumbarme un momento aquí...en el suelo.- El chico se recostó boca arriba respirando profundamente, buscando calmar el mareo y la angustia, Sakura le miró apoyada en la barandilla, también se sentía torpe y mareada, le pareció buena idea sentarse y descansar un poco... se dejó caer lentamente apoyando su espalda contra la barandilla que parecía ser su mejor amiga en esos momentos... todo comenzaba a dar vueltas con mayor virulencia, como si el reposo agudizara los efectos del alcohol en su cuerpo... pero ya no era capaz de levantarse, mejor quedarse así un ratito más...

Increíbles náuseas golpeaban su cuerpo, se sentía mareada, fatigada, todo se movía a su alrededor y conforme se acercaba a la taza de su inodoro todo se agravaba más, por fin pudo posarse sobre este y prepararse para lo inevitable, una arcada... dos... tres... sintió como todo se le salía por la boca, un sabor agrio, increíblemente asqueroso llenaba toda su cavidad bucal, de nuevo otra embestida vacío su estómago, el mareo parecía diseparse unos segundos... pero malicioso volvía peor a cómo se había ido, de nuevo otra bocanada a punto de volverla del revés, como pudo se acomodó lo máximo posible, buscando una posición lo más confortable... sabía que iba para largo... por lo menos quería estar cómoda, minutos después se había quedado dormida arrimada al váter...

Fuera del cuarto de baño, sus dos compañeros estaban echos polvo, el rubio parecía haber conciliado un poco el sueño, y Sakura aún cabeceaba muy incómoda y mareada, debido a esto último se dejó caer de lado acabando recostada en el piso, su respiración era lenta y profunda, buscando relajarse y aplacar un poco el malestar producto de la ingesta desproporcionada de alcohol, lentamente consiguió dormirse...

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Abrió los ojos con pesadez, un fuerte dolor en la nuca y en la parte superior de la espalda sumado a un sabor horrible en la boca la reubicó, con pesadez se levantó del inodoro y caminó con paso lento y mortecino al lavabo, procedió a lavarse la boca intentando esfumar ese sabor agrio y repugnante que parecía castigarla por su irresponsable comportamiento hacía... bueno no sabía cuánto tiempo llevaba ahí, cepilló sus dientes y se enjuagó con un poco de colutorio bucal, el sabor que dejó este en su boca no era mucho mejor que el del vómito... pero algo era, caminó por el cuarto de baño hasta la única ventana que había en este, afuera aún perduraba el manto nocturno presidido por la luna, Sasuko dedujo que aún serían altas horas de la madrugada, colocó todos los utensilios de higiene en su sitio y se dispuso a salir del aseo, la estampa que se encontró fuera de este la dejó helada, sus 2 compañeros estaban tirados en el suelo, dormidos, con cuidado se acercó al rubio y le dió unos suaves golpes con el pie para intentar despertarlo.

Sasuko: Dobe... dobe... despierta...- El rubio había cogido bien el sueño y parecía no querer librarse del abrazo de Morfeo... la Uchiha suspiró resignada.- Dobe... despiértate de una vez...- El joven se quejó un poco por la molestia que le provocaban los golpes en su cadera, se giró quedando recostado de lado, dándole la espalda a la azabache.- Dobe! despierta!.- Le atizó una buena patada en mitad de la espalda, el Uzumaki se despertó inquieto, moviéndose ajetreado por la "curiosa" y repentina forma que había tenido de abandonar el sueño.

Naruto: ahh... Qu-qué pasa?.- Se sentía aún un poco mareado, para empeorar su malestar, tenía un dolor en el estómago y una sensación ardor que harían estragos en cualquiera, con cuidado y valiéndose de la barandilla que había a su lado, se puso de pie delante de la propietaria del inmueble.- Sasuko... cuánto... cuánto llevo aquí?.

Sasuko: No lo se... yo me acabo de despertar también... ve al baño y enjuagate la boca... te apesta el aliento a alcohol.- El ojiazul se sonrojó por la vergüenza y asintió.- Está en el mueble del lavabo, primer cajón a la derecha...- Nuestro shinobi rubio levantó ligeramente el brazo, dando a entender que la había escuchado, finalmente ingresó en el aseo a un paso lento y tedioso.

Sasuko centró su mirada en su otra compañera, Sakura dormía plácidamente acurrucada a unos escasos pasos de distancia, con su espalda rozando la barandilla y su brazo derecho como almohada improvisada, el rostro estoico y la mirada fría de Sasuko no varió ni un milímetro, así estuvo, contemplándola sin moverse, sin cambiar sus expresiones faciales, casi sin respirar, completamente centrada en esa mujer de cabellos cerezo tirada en el suelo de su casa.

Naruto: Ya me siento un poco mejor... gracias por dejarme usar tu lavabo Sasuko...- La doncella de orbes oscuros cambió el centro de su atención, Naruto se estremeció al verla tan seria, en su mente, supuso que estaría cabreada por como acabaron la noche de copas... y técnicamente, el era el responsable por proponer dicha idea.

Sasuko: Te parecerá bonito dobe...- El joven alzó una ceja dudoso.- Mírala, está completamente borracha.- Naruto miró a Sakura en el suelo, le salía un ligero hilo de baba de los labios, una gota de sudor bajo por su nuca.

Naruto: Si bueno... lo siento Sasuko... creo que se me fue la mano con el sake, pero lo pasé genial bebiendo con vosotras.- Sonriendole un poco nervioso y avergonzado.

Sasuko: Lo que tú digas dobe... ayúdame a llevarla a un cuarto, o mañana no habrá quién la aguante con un dolor de espalda horrible.- El chico caminó hasta los pies de la pelirosa, ambos la levantaron, a la Haruno parecía no poder despertarla ni un huracán, la llevaron lentamente hasta uno de los dormitorios de la mansión, valga la redundancia, por suerte Sakura estaba tan grogui que no se inmutó, inclusive hubo un par de zarandeos y movimientos bruscos por... la resaca de sus "transportistas" improvisados, finalmente y con gran dicha, llegaron a uno de los cuartos, la depositaron con cuidado sobre la cama y el muchacho la arropó, Sasuko bufó levemente al ver aquello y salió del cuarto seguida por el Uzumaki segundos después, en el pasillo, la azabache le esperaba cruzada de brazos.

Naruto: Estás bien Sasuko?.- La mujer suspiró sería, su mirada se cruzó con la del ojiazul.

Sasuko: No, me encuentro mal, tengo el estómago del revés y estoy con un ligero dolor en el cuello que me está matando, no creo que deba seguirte la próxima vez que te vayas de juerga, ya me he pasado 2 veces del límite y así he acabado...

Naruto: Eh... si, a veces no tengo un control con la bebida... el ero-sennin me mal acostumbró... perdón...- Tenía una ligera sonrisa en su cara, sonrisa que se le contagió a la Uchiha, no podía enfadarse con él y menos por una estupidez como esa...- Si quieres... me voy ya para mí departamento, también me puedo llevar a Sakura y dejarla en su casa, no quiero que te sientas molesta Sasuko.

Sasuko: No me molestas dobe... no digas estupideces... si no te importa, podemos bajar abajo y tomar un té, no tengo ganas de dormir estando así...- El rubio asintió y la siguió escaleras abajo hasta la sala de estar, la morena fue a la cocina y puso el agua a hervir, volvió poco después con 2 vasos de té en sus manos.

Naruto: Gracias...- Tomando un pequeño sorbo de la bebida.- Y bueno Sasuko... hay algo de lo que quería... bueno... no sé si debería...- La azabache dejó su taza en la mesa observándole inquisidora.

Sasuko: Qué? sabes que no me gustan los titubeos dobe...- Naruto tenía dudas, las mismas dudas que había tenido esa misma tarde, se reprendía mentalmente por tener la lengua demasiado larga, el puto alcohol le hacía hablar de más, en su mente bullían un centenar de maldiciones sobre su persona por soltar la boca, en serio, con un poco de alcohol de más era un bocazas... en menudo lío se había metido.

Naruto: Bueno... esto... es que... estuve dándole vueltas esta tarde a algunas cosas que han estado pasando últimamente, bueno, que han pasado desde que volví, tu me entiendes.- El chico jugaba con sus dedos y la superficie de la mesa, un leve tintineo que en vez de relajarle le ponía más nervioso aún y para colmo... a Sasuko la descolocaba e impacientaba.

Sasuko: Dobe me estás impacientando y no tengo mucho aguante... di lo que tengas que decirme...

Naruto: Te... acuerdas de lo que pasó cuando estuvimos todos bebiendo cuando quedamos en grupo? ya sabes aquella noche que bebimos más de la cuenta...- La muchacha sabía por donde iban los tiros, no podía hablar, desde hacía mucho tiempo que no se sentía tan nerviosa.- No sé si recuerdas que te acompañe a casa y te llevé a tu cuarto... y bueno, cuando... cuando te dejé en la cama... bueno... pasó algo que no me esperaba... y no sé porqué sucedió...- Sonriendo un poco triste y nervioso.

Sasuko: Te besé... lo sé...- El ojiazul sintió una vorágine de mariposas revoloteando en su estómago, sensación que ascendió por su vientre apoderándose de su garganta, cortándole el aire, casi ahogándolo, no se sentía así desde que conoció a su padre... que horrible sensación que atenazaba su voz y la impedía salir...

Naruto: Exacto... verás... te mentiría si no te dijera que... bueno me gustó, que me encantó y más de una noche estuve pensando en... ti y... bueno, tus labios... Sasuko... te conozco desde hace mucho... me... me gustas... mucho, pero... no puedo explicarlo con las palabras adecuadas... todavía no estoy... no estoy lo suficientemente sobrio y se me nubla el juicio...- El tintineo de sus dedos subió de ritmo acordé al bombeo desmesurado que sobrecargaba su corazón, Sasuko le miraba fijamente con un rostro sin sentimiento, indescifrable para él, así había sido ella desde que la conocía, pocas veces con un gesto que cambiará su neutralidad habitual, y eso... eso le atraía de ella y a la vez le provocaba un miedo enorme, miedo por no saber cómo podría reaccionar o cómo podría contestarle...- Lo que... lo que quiero decir... es que... bueno, me... me gustas desde hace mucho Sasuko... y eso no va a cambiar nunca... no soy una persona que pueda cambiar el afecto, el amor y el cariño por el odio... el desdén o cualquier cosa negativa... no puedo... y también... soy alguien muy sincero... no puedo mentir a las personas que aprecio... por eso tengo que decirte que si bien siento... siento un cariño y un amor... hacia ti, también... también lo tengo por Sakura... sé que esto es... ruin o egoísta y quizás inmaduro... pero no puedo mentirte, no puedo mentirme a mi mismo, el ero-sennin me enseñó muchas cosas en nuestro viaje... y una de ellas fue que en algunas ocasiones uno debe elegir entre su felicidad o la de las personas que le importan... yo... no puedo ser feliz haciéndote daño... ni ha Sakura tampoco... por eso espero que... me perdones por... no poder elegir... no soy capaz de... de tomar esa decisión...

Sasuko se mantuvo callada, escuchando en silencio cada una de las palabras de su camarada de la hoja, no hubo sorpresa, miedo, irá, despecho, o cualquier emoción en sus ojos, Naruto se temió lo peor, quizás ese beso fue solo un malentendido, y las peleas con Sakura simple rivalidad... tenía una cosa en mente, una sola cosa pasaba por su cabeza en ese instante... que la había cagado... había hablado más de la cuenta y... que nada volvería a ser como antes... maldita fue la hora en la que decidió emborracharse...