Decidí esperar a que los chicos salieran del lugar, junto con Sira a mi lado. El primero en salir fue Ansu, acompañado por una chica.

—Hola Ansu, ¿quién es ella? —pregunté mientras le daba un abrazo a mi mejor amigo.

—Oh, cierto, se me olvidó decírtelo. Ella es mi novia, Mara —respondió Ansu.

—Encantada, yo soy Laia —dije, extendiendo una sonrisa a Mara.

—Y yo soy Sira —añadió mi mejor amiga.

—Encantada —respondió Mara con una sonrisa.

A lo lejos, divisé a Gavi y corrí hacia él para darle un abrazo.

—¡Gavi! —exclamé emocionada.

—Hola, preciosa —respondió, correspondiendo al abrazo.

Nos separamos y nos dirigimos hacia donde estaban mis mejores amigos y la nueva chica.

—¿Sabías que Ansu tiene novia? —pregunté a Gavi mientras caminábamos.

—Sí, Mara. Es muy amable —respondió, observándola a lo lejos.

—Ya... Bueno, vamos —dije, notando una punzada de celos al ver cómo el chico que me gustaba miraba a otra.

Al llegar donde estaban los demás, noté cómo Mara y Gavi se miraban mucho. Entonces, decidí hablar con Sira en privado.

—Sira, ¿podemos hablar? —le pregunté.

—¡Claro! —respondió ella.

—En privado —añadí, mirando a los otros tres.

—Ah, vale, vamos —dijo Sira, tomando mi mano.

Nos dirigimos a un lugar apartado, donde pensábamos que estaríamos a solas.

—¿Qué pasa, tía? —preguntó mi mejor amiga.

—Es que, tía, Mara y Gavi se están mirando mucho, y creo que me estoy enamorando de Gavi —confesé, preocupada.

—Tía, Mara es la novia de Ansu, tranquila —intentó tranquilizarme Sira, pero no pudo terminar, pues escuchamos a alguien salir de un lugar. Era Pedri.

—No, Mara y Gavi son ex —intervino Pedri.

—¿Y? —pregunté.

—Pues que he visto cómo se miran. Ten cuidado, yo te avisé. No suelen salir bien las segundas oportunidades —advirtió, mirándome fijamente.

Cuando nuestros ojos se encontraron, volví a sentir lo mismo que siempre había sentido por Pedri.

—Lo que tú digas —respondí, alejándome un poco.

Sira corrió tras de mí mientras lloraba.

—Déjame, tía —sollozé.

Me dejé caer al suelo y comencé a llorar desconsoladamente.

—Tía, ¿por qué nunca me salen bien estas cosas? —pregunté entre sollozos, sintiendo un profundo dolor en mi interior.

Sira intentó calmarme, pero no lo logró.

De repente, Pedri se acercó y empezó a ayudarme.

—¿Por qué nunca nadie me quiere de verdad? —pregunté, con lágrimas en los ojos, mientras Pedri tomaba mis manos.

—Laia, mucha gente te quiere, yo también —me aseguró, mirándome profundamente.

—Pero estabas enfadado —mencioné.

—No puedo estar enfadado contigo, Laia. Pero ahora no vamos a hablar de esto —dijo Pedri, tratando de reconfortarme.

Permaneció unos minutos ayudándome, y cuando se aseguró de que estaba bien, se levantó y se fue.

Corrí hacia él y le di las gracias.

—¡Pedri! Gracias... —dije, mirándolo.

—No es nada —respondió, sonriendo.

—Sabes que siempre que necesites algo, aquí estaré —dijo Pedri antes de irse.

Pedri te quiero mucho amor❤️‍🩹

¿Qué pensáis sobre Gavi y Mara? ¿Os da mala espina?

Sira+Ferran= mis papis😍

Al final maratón de tres no, he subido dos

¿Os va gustando la historia?