Luke fue el primero en reaccionar, ya que cargo a Sharon entre sus brazos.

—Corran.

Esa palabra bastó para que todos comenzáramos a correr, mientras los rayos caían muy cerca de nosotros, el ruido que provocaba al hacer contacto con la tierra, hacia que me aturdiera los oídos, pero además de eso que diera saltos de miedo.

Vi como el cielo se nublaba, pude ver cómo salía un rayo dirigido hacia Madd, corrí lo más rápido que pude, la empuje lejos, pero el rayo impacto sobre mí.

Abrí mis ojos con mucha dificultad, pero estaba asombrada ya que no estaba en el bosque, ¿qué había pasado?, yo estaba en el bosque tratando de salvar a mi hermana.

Estaba en mi habitación de la casa de mis padres, caminé lentamente, mientras trataba de calmar mi respiración. Llegué a la habitación de mi hermana menor, tome el pomo y lo gire, empuje un poco la puerta hasta que la abrí completamente.

Al entrar a la habitación, la puerta se cerro dando un portazo. De repente la habitación se había transformado, en medio de la habitación había un espejo.

Arrastre mis pies hasta llegar en frente del espejo y solo podía ver mi reflejo, tragué saliva ya que desde que habíamos jugado no me miraba en un espejo por tanto tiempo. En eso mi reflejo soltó una carcajada que hizo que me diera escalofrío, mi cara en el espejo se transformó en una sonrisa gigante que hacía que me diera escalofríos.

—Sabes podría acostumbrarme a este cuerpo, después de todo, tienes todo lo que necesito.

—No.—Dije casi como un susurro.

En eso me sorprendió ver a alguien atrás de mi, era James.

—Chels, tienes que tener cuidado, Mary...

El sueño se corto abruptamente y yo me había levantado mientras respiraba muy horrible.

Chels, ¿estás bien? —Me preguntó Madd.

—Si, ¿qué pasó? —Pregunté mientras me sujetaba la cabeza, ya que dolía con mucha intensidad.

Las tres personas que estaban en frente de mi se vieron entre ellas, para después hablar.

—Bueno, prácticamente después de que Sharon se desmayó, un rayo te impactó, por cierto muchas gracias por salvarme. —Hizo una pequeña pausa.— Después de eso estuviste como 3 horas inconsciente, comenzaste a decir cosas sin sentido, pero pasó algo mientras estabas desmayada, Mary llegó.

Comencé a ver en donde estábamos, era cerca de un lago. Traté de comprender las palabras que me había dicho, pero además de eso, trate de recordar mi sueño. En eso recordé a James.

—Mientras estaba dormida, que creo que no fue un simple sueño, soñé con Mary, pero además de eso estaba James, él me trató de advertir algo, pero cuando me lo iba a decir, desperté abruptamente.

Madd se mordió el labio, tratando de no llorar. Ella se paró mientras se ponía las manos en la cara, cuando se quitó las manos, volteo a verme.

—Siento que esto está mal, deberíamos volver a nuestro mundo.

Lo único que pensé al escuchar eso, fue ¿qué?

—Tienes que estar bromeando, hemos venido aquí por mi hermana.

—Lo sé, pero estuvimos a punto de morir, no podemos seguir.

En eso me hirvió la sangre, ¿como podía ser tan egoísta?

—Yo, por eso les pregunte, les dije los riesgos que implicaba el que viniéramos y aún así aceptaron. —Dije gritando.

—Chels, date cuenta, pasaremos aquí años, hay miles de puertas.

—Pues si quieren váyanse, cuando salgamos de este mundo, las sacare de aquí.

Camine enojada adentrándome al bosque.