Abrí mis ojos, después de sentir como mis pies tocaban el piso, el horrible olor invadió inmediata te mis fosas nasales, lo que me provocó un escalofrío.
Lo primero que vi era que estábamos en un largo pasillo que parece infinito, había muchas puertas de color dorado, mientras que las paredes eran de color rojas, había una alfombra de color negra por todo el pasillo.
— ¿Dónde estamos? —Preguntó Sharon.
Vi a mi alrededor, parecía como si estuviéramos en un pasillo de un hotel, uno muy elegante.
—No lo sé, esto parece un hotel. —Dije.
Las tres miramos con desconfianza el inmenso pasillo.
— ¿Qué hacemos?, seguimos o abrimos una puerta.
Yo me quede pensando, el pasillo era muy extenso, pero no confiaba en abrir la puerta. ¿Cuál era la decisión correcta?, camine un poco y toque la puerta lo cual activo en mi un sensor, era como si debiéramos entrar pero no a esa puerta sino a la que estaba en frente.
—Debemos entrar, —En eso camine hacia la puerta — en esta.
Mire a mis amigas y las dos asintieron con desconfianza, yo les sonreí y trate de armarme de valor, camine hasta la puerta, tome la perilla y la gire, abrí la puerta lentamente hasta que vi todo blanco, las tres entramos agarradas de la mano, en eso la puerta se cerró y pudimos ver mejor la habitación. Estábamos en un bosque y era de noche.
—Chicas, mejor vámonos.
Nos dimos la vuelta, pero no estaba la puerta, las tres nos miramos aterradas, volteamos hacia en frente mientras escuchamos un crujido, las tres nos pusimos en forma de triángulo, mientras observábamos a nuestro alrededor, pero era inútil, solo escuchábamos como esa persona o monstruo nos acechaba desde la oscuridad, lentamente.
—¿Tienen algún plan?
—No.—Dijo Madd.
—Cuando mi papá me llevaba al bosque a cazar, me enseñó ahuyentar a los animales salvajes, pero necesitamos saber cuál es, porque no en todos es igual. —Dijo.
Escuchamos como un arma crujió y volteamos, en es vimos una pequeña luz y como alguien gritaba, el animal salió huyendo rápidamente.
Nosotras nos quedamos con los ojos abiertos y tratando de calmar la respiración, La Luz que provenía de una antorcha se acercó nosotras, en la cual pudimos ver a un chico rubio con unos grandes ojos azules.
—Hola.— Nos dijo mirándonos.
Todas nos quedamos viéndonos mutuamente al final las tres le saludamos.
—Mi nombre es Luke tengo 15 años, desaparecí en 1999, ¿quienes son ustedes?, jamás las había visto. —Dijo mientras nos observaba.
—Nosotras somos Madd, Chels y yo soy Sharon, venimos del 2018.
Él se mordió el labio, y dio una gran suspiro.
—Mucho gusto, escuchen supongo que atravesaron una puerta, bueno esas puertas son donde nos mantiene encerrados, en cada puerta hay alguien que jugó, pero lo más importante en cada cuarto está a lo que más le tememos, en mi caso al bosque. —El hizo una pausa viendo observando a su alrededor. —Supongo que compartimos el mismo miedo, por eso están aquí.
Negué con la cabeza.
—Soy una banshee, hace dos años jugamos pero logramos romper la maldicion, pero Mary por venganza se llevó a mi hermana así que vine a buscarla para llevarla a casa.
Él me miró esperanzando y con un enorme brillo en sus ojos que delataban sus intenciones.
—Llévenme con ustedes.
Las tres nos miramos, tratando de pensar en si era la opción más viable.
—Por favor, yo sé que cosas de Mary, podría resultarles útil.
Las tres nos miramos y pensamos en lo mismo.
—De acuerdo, ¿pero como salimos de aquí? —Dijo Madd.
—No lo sé, ¿ creen que si lo supiera estaría todavía aquí? —Dijo Luke.
Bien, solo teníamos que averiguar cómo salir de esta habitación sin morir en el intento.