Luke. Ese era su nombre.

Se le había presentado. Sin embargo, la campana fue tocada y no pudieron hablar más, ella ni siquiera se creía que le había respondido. Era tan... extraño. Por primera vez había escuchado su voz.

Él se había despedido diciendo: —Nos vemos en la salida.

Ella no podía esperar, quería volver a escuchar su voz.

Cuando salió al patio lo buscó con la mirada, pero se decepcionó.

Él no estaba.