Aiga mandó unos cuantos mensajes al móvil de Valt. Unos eran agresivos, que ni se le ocurriera hacerle nada. Al final los dos llegaron a un acuerdo, aunque le doliese a Aiga.

Quedarían en el claro del bosque, allí harían un combate como antes Arthur le había pedido, no debía ir acompañado. Tampoco es que tuviera con quien ir más que Drum.

Nada más dirigió su vista al camino el cual estaba empezando a oscurecerse del todo. Al mismo tiempo que hizo eso, dirigió su andar para atrás en dirección a las puertas del BC Sol, entrando. Dirigiéndose indiscretamente a las salas de entrenamiento del club.

Todo estaba oscuro, cosa que le gustaba. Pues no había nadie. Más que su propia respiración... Nada más sacó a Union Achilles y seguido lo puso en el lanzador disparando a este al estadio con fuerza.

—Debemos estar preparados...—.

[. . .]

Drum se encontraba mirando desde las puertas de la sala de entrenamiento, ya había hablado con Chris y Ramón. Decían que estaban de acuerdo y que no se lo dirían a nadie, solo había que recuperarle.

Qué cosa más sencilla, ¿No?

Más el chico de ojos verdes miraba preocupado al de ojos azules. Se preguntaba cuánto debería de estar pasando. Sabía que este conocía mucho más a Valt que el rubio. Y se veía más afectado en realidad.

Suspiró dando al fin aquel silencio inoportuno para ambos, viendo como el escarlata caía al suelo de lo agotado que estaba. Nada más el rubio se acercó a este y le miró como roncaba. Nada más lo agarró en brazos y se lo llevó con él a su habitación compartida.

Lo dejó en su respectiva cama y nada más agotado de llevarlo en brazos este se tumbó en la suya. Dando así un nuevo día.

[. . .]

Ya era un nuevo día y el escarlata seguía dormido. Drum nada más fue despertado por los rayos del sol, luciéndose sus rasgos faciales frágiles y más en aquel pelo el cual parecía oro a la hora cuando le bañaba los rayos de Sol.

—Mmgh...—

Dijo el rubio quitándose la manta de por encima y seguido ponerla bien, mirando por unos momentos a Aiger el cual se encontraba durmiendo entre ronquidos. Nada más el rubio agarró de la mesilla una botella llena de agua para lanzársela en la cara al contrario.

— ¡Aah! —

Dijo el escarlata mientras se levantaba de golpe como si de un paro cardíaco le hubiera dado. Miró a sus lados hiperventilandose, hasta que salpicó de su pelo todo el agua. Llegando a caer un poco en Koryu.

— ¡¿Qué hora es?! ¿¡Qué hago aquí?! ¿¡Qué- —

No le dio tiempo a terminar su frase, pues fue interrumpido por el rubio el cual le enseñó su teléfono con la hora en la pantalla. Y seguido le lanzó a la cara un batido que tenía el propio escarlata en su mesilla.

— Vete ya. —

Dijo serio el joven mientras el peli marrón se levantaba de la cama a toda pastilla. Aún llevaba su ropa de ayer, cosa que no le importó.

— Gracias Drum...—

[. . .]

Ya había llegado al lugar indicado, frunció su ceño al encontrarse con aquella figura. Iba a empezar la conversación, pero...

— Te noto muy enfadado... —