El linaje de los Hannover tenía un historial limpió desde que comenzó su reinado muchos años atrás.

Lastimosamente un descendiente hizo que todo ese linaje se fuera al retrete.

Minos Hannover.

Cómo cada hereditario el también nació con el poder de los ojos atrayentes.

El único problema de él es el hecho que desde muy pequeño el tuvo un mal manejo de crianza.

Desde pequeño veía como su padre traía una mujer nueva por cada mes siendole infiel a su propia esposa, luego en las malas influencias de su propio padre, ya que le enseñó en como usaba el poder hereditario para así atraer a más mujeres.

Así que desde una edad adolescente el inició en atraer chicas gracias al poder, obviamente se salía con la suya porqué convencía a esas chicas en no decir nada por el miedo cuando las amenazaba.

Y así fue hasta que llegó a una edad adulta, debido a que había ocultado perfectamente toda su aventura logró conseguir matrimonio con una mujer con bastante herencia.

Pero el no estaba satisfecho, ya que la Avaricia le podía más, así que, incluso antes de casarse, fue a una reunión secreta con la joven Sakuroma.

Hizo un trato con ella, básicamente, vender al primer hijo o hija que nazca por una gran suma de dinero, luego el se las ingeniería para fingir cómo murió.

El pensaba que ya tenía el juego ganado y se saldría con la suya.

Pero no fue así.

El primer strike fue cuando su esposa resultó ser estéril, fue algo que le hirvió la sangre al enterarse, el estaba dispuesto a pegarle, pero tuvo que calmarse porque sino daría una mala imagen a su linaje.

Así pasaron los años y nunca pudieron tener un hijo, cosa que le estaba afectando a Minos, ya que realmente quería ese dinero.

Al estar frustrado decidió irse al anillo de la lujuria para satisfacerse, ya que no había tenido relaciones con su mujer hace tiempo y realmente ni estaba dispuesto hacerlo.

Manteniendo un perfil bajo solo pudo observar que estaban construyendo un edificio enorme.

Al preguntarle con cautela a los de alrededor dijeron que es una construcción que mandó hacer la Pecado de la Lujuria.

El volvió a fruncir el seño porque ese tipo de construcción costaba un dineral y más en un lugar tan transitado.

Con el enojo a tope se fué de ahí para evitar pensar sobre el asunto.

Se fué a uno de los lugares menos transcurridos del anillo y solo pudo observar cuando vió a una mujer muy hermosa desde su punto de vista.

Por su parte, esta mujer estaba ofreciendo servicios, ya que su situación económica no le permitía darse el lujo de comer muy bien, ya que su familia pasaba un mal momento debido a las amenazas por las deudas.

El señor Hannover no perdió tiempo y fué con ella.

Desde el primer encuentro ellos dos fueron a un hotel para hacer su acto.

Fueron exactamente casi 5 días en el que Minos no regresó a su palacio y eso hizo sonar las alarmas en el círculo de la Avaricia.

Exactamente fue el quinto día cuando la mujer le comentó la noticia sobre su embarazo.

La primera reacción del hombre fue haberle dado una bofetada.

─ No puedo creerlo... El único engendro que da vida es con una simple plebeya...

Ella se sorprendió y a la vez tuvo miedo de esa revelación.

─ ¿Plebeya?... No me digas que...

Su voz fue cortada cuando la agarró de los cabellos para mirarle en la cara, esos ojos hipnóticos ya no le estaban haciendo efecto desde que lo conoció.

─ Escúchame ¡Más te vale que abortes esa cosa! No quiero que mi linaje quede manchada por alguien insignificante como tú.

Ella con el poco valor que tuvo le dió un arañazo en su ojo derecho gracias a sus uñas largas.

La soltó cuando sintió el arañazo y su ojo estaba sangrando ─ Ahora sí valiste hija de tu p*ta madre...

Lo siguiente que ocurrió fue una serie de golpes y gritos de sufrimiento por parte de la mujer, eso ocurrió durante media hora.

Ya cuando se sintió satisfecho el decidió irse del hotel para irse de regreso a su palacio, sin haberse ocultado su rostro como siempre lo hacía.

Lo que no esperaba es que las cámaras de seguridad eran de alta calidad y habían grabado el momento en el que Minos salió y poco después la mujer.

¿Por qué las cámaras tenían buena calidad? Porque el guardia de seguridad era algo cochinote y siempre guardaba grabaciones.

Lo que el guardia no esperaba es que el quien salió era el mismísimo Minos Hannover, luego vió como salió la mujer que siempre la acompañaba.

Tenía en sus manos material importante, sonrió de una forma malévola porque ya tenía una forma de chantajearlo.

[...]

Fue un caos.

Así se describió cuando los vídeos fueron publicados a internet y todos tenían a la mira a Minos.

Su mujer cuando se enteró que había tenido una aventura con una plebeya ella rápidamente le solicitó el divorcio.

Y las cosas no se calmaron, uno de los sirvientes encontró el contrato que hizo con la Pecado de la Lujuria.

─ Fuiste infiel conmigo... ¿¿¡¡Y encima querías intercambiar a nuestro posible hijo!!?? ─ gritó la mujer enfadada.

─ Tu no lo entenderías Elizabeth, piénsalo, la Pecado de la Lujuria tiene tanto dinero que construyó su propio negocio en un lugar tan transitado que cuesta millones, además, así ya tendría a mujerón tan rápi─

¡¡SLAP!!

El sonido de una cachetada sonó en la habitación, Elizabeth no soportó lo que estaba escuchando y por acto de impulso le dió un golpe.

─ No puedo creer que hayas tenido un pensamiento así... Estaremos en el propio infierno, pero eso no te da derecho de hacer lo que quieras hacer con nuestra familia. ─ luego se puso recta ─ O debería decir, mi familia.

De repente aparecieron unos diablillos en traje.

─ Minos Hannover, te demando por todos los daños que has hecho.

Minos iba a estrangularla, pero rápidamente fue interceptado por los guardias.

─ Ahora que has revelado tu verdadera naturaleza es hora que termines en la calle... ¡¡Llevenselo!!

Luego los guardias se llevaban al príncipe ─ ¡¡Aguarden!! ¡Tengo derecho a un abogado!

Su juicio fue algo muy esperado en el círculo de la Avaricia, ya que la mayoría de rencorosos quería ver ese linaje caer.

Tuvo una duración de 3 meses y la situación para Hannover no era muy favorable, los testigos presentados por Elizabeth hablaban bastante a favor de ella y presentaban pruebas en su contra.

Al no tener muchos testigos y pruebas que probaran su inocencia hizo que empezara a hundirse en la desesperación.

El veredicto llegó a una conclusión.

─ Decisión del caso. Minus Hannover, queda totalmente despejado de su título de príncipe, toda propiedad que sea de su linaje ahora pasará a la princesa Elizabeth y además... Queda totalmente desterrado de este circulo, Se cierra el caso...

Fue así como la vida de Minus pasó de ser alguien que tenía un lugar en la sociedad a un simple plebeyo, caminando solo en el círculo de la lujuria.

Pasó exactamente 1 año desde que fue su vida se vino abajo.

El siempre se cubría el rostro para que así nadie lo reconociese, ya que desde que no tenía a sus guardias muchos han intentado matarlo.

Pasó cerca de una tienda de televisiones y justamente pasó el noticiero.

─ Recordemos que la Pecado de la Lujuria también podía haber ido a testificar, pero obviamente no le convenía, por eso intentamos los medios para tener alguna opinión y esto fue lo que obtuvimos.

El se detuvo cuando escuchó la noticia y rápidamente regresó para ver la noticia.

─ Señorita Sakuroma ¿Por qué no decidió no asistir al juicio del señor Hannover?

Por su parte la polilla solo dijo unas palabras ─ ¿Quién?

Esas simples palabras hizo enojarlo.

─ Lo siento cariño, pero hay tantos hombres que se quieren confesar conmigo que realmente no memorizo nombres.

─ Pero señorita, usted hizo un contrato con él ¿Enserio aceptó casarse con su próximo hijo?

─ Quizás, quien sabe, de todos modos siempre olvidó las cosas que no me interesan.

El que sostenía el micrófono intentó hacer más preguntas pero llegaron los guardias para sacarlos del castillo.

El señor Hannover rápidamente recordó el contrato que hicieron, para fortuna de él lo había ocultado y aún lo conservaba.

Iba hacerle una visita inesperada, y ya sabía cómo entrar sin ser detectado.

[...]

Incluso si entró por dónde no habían guardias, rápidamente fue interceptado y llevado ante Sakuroma.

La polilla ahora con sus 18 años y altura de 2 metros estaba mirándolo de una forma aburrida.

─ Así que tú eres el exiliado, Minus Hannover, es gracioso ver cómo cayó el circo que creaste. ─ sonrió de manera dominante.

El abrió lo ojos de sorpresa ─ Espera ¿Aún me recuerdas?

Sakuroma miró a otro lado ─ Claro que te recuerdo, las entrevistas son aburridas y ya falta unos toques finales para la apertura de mi gran negocio y me molesta que a cada rato me pregunten la misma estupidez.

Ahora lo miró con el seño fruncido ─ De todos modos, es una sorpresa que aparecieras de repente, si viniste a robarme con un solo chasquido de dedos puedo hacer que te maten. ─ los guardias a su alrededor estaban apuntandole con lanzas.

Rápidamente habló ─ Nuestro contrato, todavía aún tenemos un trato.

Los guardias estaban a punto de clavarles sus lanzas pero ella levantó la mano para que se detuvieran.

─ Retirense, esto es una conversación privada. ─ los guardias acataron la orden y se retiraron, dejando solos a ambos.

Ella dió un suspiro ─ No entiendo porque insistes, ya te dije que no te daré el dinero porque ni siquiera tuviste linaje. ─ respondió algo molesta.

El rápidamente se arrodilló ante ella ─ ¡Deje un hijo al mundo! ─ tomó una pausa para tomar aire ─ Escucha, el trato era regalartelo y me dabas el dinero, no importa si fue con una plebeya, ahora sí puedo tener el dinero.

Entrecerró los ojos, sabía perfectamente si no le daba el dinero este podía ocasionar más problemas para ella, y estaba cansada en que lo siguieran vinculando con él.

Así que con una mirada aburrida dijo ─ De acuerdo. ─ dió un chasquido con sus dedos y su mayordomo apareció con una maleta ─ Eso es el montón que querías.

El mayordomo se acercó al señor Hannover y abrió la maleta revelando bastantes billetes ahí.

─ Ahora tómalo y lárgate. ─ ordenó la polilla.

El mayordomo le entregó la maleta y el se fue demasiado feliz saliendo del castillo.

Mientras que Sakuroma de repente sonrió de una manera terrorífica.

─ Quiero que su muerte sea un accidente.

─ Si madam. ─ respondió obediente el mayordomo.

En un callejón donde no había nadie estaba Minos Hannover contando cada billete.

─ Finalmente el engendro que dejé tirado me sirvió de algo, ahora puedo volver a rehacer mi vida. ─ comentó algo felíz.

Cerró la maleta y se dispuso en irse del callejón para irse al Circulo de la Gula.

Se cubrió el rostro e iba a pasar al otro lado de la calle.

¡¡¡CRASH!!!

Un accidente.

El señor Hannover había sido atropellado por un vehículo que iba a toda velocidad, su muerte fue instantánea.

A simple vista pareciera un imp cualquiera en un vehículo común y corriente, pero en realidad era un guardia vestido de civil para no levantar sospechas.

─ Minus Hannover ha muerto mi excelencia. ─ habló con Sakuroma a través de un comunicador.

─ Perfecto, ahora prosigan con el plan. ─ dió la orden.

Fue así como apareció otro vehículo para llevarse el cuerpo, los demás estuvieron de espectadores al ver cómo el cuerpo del ex-principe fue llevado por parte de los "médicos".

En realidad si eran médicos, pero eran los personales de Sakuroma, pero nadie se había dado cuenta del detalle.

Fue así como los reporteros empezaron a tomar fotos para tener las noticias en primera plana.

Cuando Sakuroma tenía en posesión el cuerpo fue a recuperar la maleta de dinero y después encontró el contrato que había hecho con él.

─ ¿Piensa conservar eso su excelencia? ─ apareció el mayordomo.

Ella lo pensó un momento ─ Posiblemente. ─ fue lo único que dijo.

─ Además ¿Piensa buscar a su prometido?

Esa pregunta le tomó desprevenida, ella no había tenido ningún interés amoroso en lo que lleva reinando.

Además, el propio Lucifer le dió el permiso de seguir reinando sin necesidad de que tuviera algún principe porque ella misma logró ganarse el título "La Pecado de la Lujuria" a base de sus habilidades y fuerza, además de haber sido descendiente de sus padres porque ellos también tenían ese título.

Pensó un poco más, seguramente su "prometido" tendría como 1-2 años, ser un plebeyo mancharía su título y posiblemente alguno de los otros Pecados Capitales querrían adueñarse de su fortuna en caso de que su título sea revocado.

Además, cuidarlo como si fuera una madre para después casarse con él... No le agradaba la idea, algunos más desquiciados lo harían, pero ella no.

─ No, no quiero involucrarme más en eso. ─ para ella fue el punto y final del asunto.

Aún así, decidió guardar el contrato y ocultarlo en el lugar más recóndito de su castillo para que nadie sepa la existencia de ese papel.

Sin embargo, años después, Sakuroma se encontraría con el descendiente de Hannover muchos años después.

[Antes de terminar]

La madre de TN días antes planeaba abandonar a su hijo, pero no sabía por dónde ir.

Tenía un montón de moretones en el cuerpo y nadie la querría así.

Fue entonces que un día ella volviendo a su casa para "convivir" con su hijo alguien se le había cruzado en su camino.

─ Veo que tú vida es muy infeliz ¿No?.

Ella ignoró su comentario y pasó al lado de él sin decirle nada.

─ Ya veo, esa mirada dice que tienes que aguantar a una cría que tú ni siquiera soportas. ─ ese comentario la hizo detenerse ─ No soporto ver a una dama tan bella como usted perderse en un abismo que no podrá salir.

Ella volteó a mirarlo para confrontarlo ─ ¿¡Que planeas hacer!? ─ gritó con desconfianza.

─ Yo en particular nada, pero me gusta que finalmente hayas levantado la voz. ─ ella se dió cuenta de ese detalle ─ Así que déjame hacerte un trato, abandona a tu hijo y únete a mi, no volverás a ser la débil que eres y todos te tendrán miedo de mencionar tu nombre.

Ella entrecerró los ojos ─ ¿Cómo podré confiar en ti en primer lugar?

El tipo chasqueo los dedos y una fuerza desconocida fue dada a la madre de TN y sintió presión cuando recorría en su cuerpo.

─ Eso es un poco de lo tanto que te puedo dar, contigo a tu lado podremos irnos del infierno y vivir en el reino de los vivos.

Cuando el poder se acostumbró a su cuerpo pudo levantarse ahora con un pequeño cambio, sus ojos ahora tenían un destello rojo.

─ ¿Cuál es tu nombre? ─ preguntó ahora más abierta.

─ ¿Mi nombre? Recuérdalo bien, yo soy.

Daddy Dearest.

Fin del Acto IV.V.

¡Feliz Día de los Inocentes!

Lo siento el último capítulo todavía no lo he escrito, tengo las ideas anotadas, pero la inspiración tarda.

Pero si o si lo terminaré, quiero dar fin a esta historia para hacer mis siguientes proyectos.

La razón por el cual hice un .5 es porque quería dar contexto el pasado del padre de TN y que fue lo que lo llevó a la ruina.

Además como un plus puse la razón por el que la madre de TN lo abandonó.

Que tal les pareció el capítulo ¿Bien o mal?

Soy Lynx con fotito de Amber y nos vemos en el siguiente capítulo.

Nos vemos.