La mañana había comenzado bastante tranquila para Ben, como lo hacia habitualmente desde que llego entrego los pedidos de la panadería de los padres de Marinette, un trabajo bastante cómodo en su opinión, tampoco tan pesado, con Xlr8 era cosa de niños. También paso un tiempo de calidad con su abuela, curiosamente estaban mejorando su relacion, casi olvidando el hecho de que intento matarlo, aunque estuvo obligado a ver con ella su telenovela, pero bueno al menos demostraba cambio.

Estaba seguro que su pequeña Eira influyo mucho en su cambio, pues tener una bisnieta alienígena resulto ser muy hermoso para la Anodita, y de cierta forma le alegraba. Su pequeña Eira, ya paso una semana desde que llego al mundo y puede decir con seguridad, que fue la mejor y la mas cansadora semana que pudo tener en su vida, los momentos de diversión con su pequeña como los momentos de trabajo eran una gran experiencia como también muy agotadora, porque es así, si por si ser un padre primerizo con un bebé normal era agotador, imagínense una bebé alienígena.

Primero estaba su dieta, hierro y plasma solar era lo único que comía, lo primero era fácil de conseguir pues estaba en cualquier lado, lo malo era lo segundo, y para su mala suerte era lo favorito de Eirá, la primera vez que tuvo que obtenerlo fue por petición de su abuela ya que según ella la dieta de Eirá debía variar entre los dos alimentos, ahora ¿Cómo conseguir plasma solar?, cualquiera te diría que es algo imposible, que te calcinarías por si de algún milagro llegas ir al sol, es ahí donde entro su increíble Alien X, así es, su alíen mas fuerte, el alíen con el cual puede hacer literalmente todo, es usado para alimentar a su pequeña hija, gracias al Alíen X el plasma solar era tan fácil de conseguir como una leche en el super mercado.

Eso en cierta forma también lo beneficio, pues pudo presentarles a Eira a Serena y Bellicus, y de paso les hizo una visita rápida, como lo espero Serena no tardo nada en relacionarse con Eira, casi parecían hermanas, con Bellicus la cosa resulto un poco mas ruda, pero no sabia si era buena o mala suerte lo que tenia pues Eira resulto ser mas pegada a el, ¿le gustaba la actitud gruñona de Bellicus?, es una buena pregunta, pero al final Bellicus le tomo aprecio a su pequeña, aunque lo niegue siempre.

Lo segundo estaba en que su pequeña tenia el sueño cambiado, era mas nocturna que otra cosa, y lo entendía perfectamente puesto que cuando se transforma en Frio la noche se siente muy agradable que casi dan ganas de quedarse a disfrutarla, y eso es lo que hace Eira, hubo días en los que no durmió porque la pequeña quería pasear, hasta que cierto día decidió intentar una cosa, cosa que hizo que se ganara un gran regaño de Gwen y Verdona, y otro de Marinette cuando se entero.

¿Se preguntaran qué fue lo que hizo?, pues resulta que utilizando a fuego pantanoso roció un poco de somnífero en Eira para que pudiera dormir toda la noche, logrando así que de a poco su siclo del sueño cambiara. En su momento pareció buena idea, y además no daño a su pequeña, nunca lo haría, pero digamos que Gwen y las demás no compartían la misma opinión.

Y finalmente el tercer punto, su apariencia, no era nada malo pues su hija era muy hermosa, pero su apariencia alienígena jugaba en su contra aquí en la tierra, ya se imaginaran que no puede salir con ella a ningún lado, tampoco puede dejarla interactuar con alguien que no sean conocidos, y no le gustaba, sinceramente no le gustaba que su hija sea una excluida, así que estuvo pensando en algo para ayudarlo, ese algo ya estaba casi completo, Materia Gris solo necesitaba hacerle unos retoques.

Aunque ese no era un impedimento para poder salir con ella, tomo la idea de Adrien y Marinette de llevar una mochila en la cual Eira pudiera transportarse sin problemas, y eso lo lleva a la situación actual, ambos en una parte algo oculta del parque, un lugar donde Eira podía jugar y el poder vigilarla, aunque a veces había sus tropiezos.

Ben: No hagas esto, no sabes cuantas personas pudieron estar aquí. —Eira se encontraba masticando el metal de la banca en donde estaba sentado, y parece que lo hacia mas por juego que por hambre.— ¿Qué voy a hacer contigo traviesa?. —le pregunto colocándola frente a el a lo que la pequeña coloco una de sus manos sobre su nariz riendo un poco.— oye, ya es algo tarde, a esta hora tu tía debe de estar saliendo de clases, dime ¿quieres ir a ver a tu tía y a tu madrina?.

Como respuesta Eira simplemente hizo un sonido, como el sonido de un gatito maullando. Viendo su aprobación observo a los lados, como pensó no había nadie, se movió un poco la manga dejando a la vista aquel pequeño reloj el cual activo dejando ver aquellos característicos hologramas, movió un poco el selector dejando a la vista la imagen de aquel alíen azulado fe gran velocidad.

Y ante la mirada de Eira lo presiono siendo cubierto por un resplandor verde, transformado agarro la mochila la cual estaba sobre la banca y le pidió que se metiera, por suerte no tiene problemas en que ella haga casa, mayormente porque tiene un poco de metal a dentro para que pudiera comer. Asegurada la mochila, y buscando alguna manera por la que esta pudiera abrirse, cerro su visor y desapareció en un borrón azul.

[Colegio Françoise Dupont]

De un callejón un poco alejado del colegio salió Ben, quien de lo mas tranquilo comenzó a caminar hacia su destino, verificando de ves en cuando si Eira estaba bien, aunque solo se le escuchaba masticar el metal, era bastante glotona, aunque el lo era igual. ¿Podría Eira comer comida normal?, porque si podía comer una hamburguesa o papas con chile, seria el padre mas feliz del universo, quizás sean algo que pruebe mas tarde.

Pero no con ella, mas bien se transformara en Frio y lo probara consigo mismo. Mientras divagaba en sus pensamientos pudo divisar a lo lejos a Gwen salir de la escuela en compañía de Marinette y Alya, para que luego Adrien, Nino y Luka se les unieran. 

Ben: ¡Hola! —saludo una ves que se acerco a ellos. Igualmente recibió un saludo de su parte, pero se centro mas en Gwen, pues esta parecía perdida en sus pensamientos, ni siquiera lo volteo a ver, ni tampoco le prestaba atención a su al rededor. No fue hasta que coloco una mano sobre su hombro cuando reacciono.

Gwen: ¿Qué?, ¿Ben?, ¿Cuándo llegaste?. —pregunto confundida.

Ben: Hace un momento, ¿estas bien?, te noto extraña.

Marinette: Es verdad, comenzaste a actuar extraño desde la clase de ciencias, ¿ocurre algo malo?.

Gwen: Si, en clase ocurrió algo que me tiene intranquila. —dijo mirando hacia todos lados— les explicare en el camino —susurro a lo que todos estuvieron de acuerdo, iniciando así la caminata.— Ben, ¿tienes que entregar algún pedido?. —pregunto con curiosidad.

Ben: En realidad no, ¿Por qué?.

Gwen: Por tu mochila, es raro verte con una, además de que parece estar llena. ¿Algo importante que transportar?.

Ben: Importante si, algo no, mas bien alguien. ¿Por qué no hechas un vistazo?. —Gwen simplemente movió un poco el cierre de la mochila sorprendiéndose cuando la pequeña cabeza de Eirá se asomo por aquel espacio— dile hola a la tía y los amigos. —y la pequeña alíen solo chillo.

Gwen: Hola pequeña, la tía te extraño mucho. —le dijo mientras con su dedo acariciaba su cabecita.

Marinette: Hola Eira, espero que no te hayas olvidado de la madrina. —y solo basto con escucharla para que Eira atravesara la mochila y se lanzara hacia ella a lo que sin dudarlo la abrazo.— hola corazón.

Nino: Wow, cuando me lo contaron me pareció sorprendente, pero verla en persona es mejor. —dijo observando a la pequeña con bastante sorpresa.

Alya: No es de sorprender su reacción, Marinette es muy buena con los niños. —y todos tuvieron que estar de acuerdo con su comentario, incluso Gwen que sentía un poco de celos al ver que su sobrina le tenia un poco mas de cariño a Marinette— ¿pero es seguro que este a la vista?.

Ben: No hay problema, estamos caminando en grupo, si Marinette se queda en medio podemos cubrirla, además que Eira es pequeña, por lo que se le dificultara a cualquiera notarla. Ahora, Gwen, ¿Qué es lo que tienes que explicar?.

Gwen: En medio de la clase, una ayuda telepática fue mandada a mi campo de energía. No fue muy exacto, las palabras apenas se entendían, pero estoy segura que estaban pidiendo ayuda.

Adrien: ¿Alguna idea de quien pudo mandarlo?.

Gwen: No, y eso me inquieta.. yo agh. —se quejo sujetándose la cabeza con una de sus manos.— Es la misma sensación, percibo algo.. —cuando Ben noto sus ojos brillando en color rosa no dudo y la sujeto del brazo para empujarla hacia una callejón a donde todos la siguieron.

Repentinamente mana comenzó a concentrarse en un punto del aire creando de apoco una especie de pantalla mientras que la imagen de su interior comenzaba visualizarse.

— ¿Puedes escucharme Gwen?, ¿encontraste a Ben?, necesitamos ayuda. —pregunta la persona de aquella pantalla, que aunque la imagen estaba distorsionada era reconocible.

Ben: ¿Helen?. —para su sorpresa quien le hablaba no era otra que aquella alienígena plomero que se enfrentaron hace tiempo.

— No puedo escucharte.

Ben: Helen, ¡Aquí estoy!. —dijo levantando un poco la voz.

— Chicos, si reciben este mensaje es importante, por favor necesitamos ayuda.

Gwen: No me concentro, no puedo mantener la conexión.

— Hay un peligro extremo, necesitamos ayuda desesperadamente, es cuestión de vida o muerte. ¡Por favor!. —lamentablemente el mensaje no pudo seguir pues Gwen al no poder concentrarse mas cayo de rodillas al suelo.

Luka: ¿Estas bien?.

Gwen: Si claro, estoy mejor que esos niños plomeros. —dijo mientras se ponía de pie con su ayuda.

Nino: Cielos viejo, no se si sorprenderme de lo que acabo de ver, o de que ustedes estén tan tranquilos, como si fuera algo de todo los días, sobre todo tu nena.

Alya: Te acostumbras.

Gwen: Ben, debemos ir a sacarlos.

Ben: Tu no iras. —la forma seria en que lo dijo sorprendió tanto a Gwen como a los demás.

 Gwen: ¿No escuchaste?, ¡necesitan ayuda!.

Ben: Lo se, pero Gwen ya hemos estado ahí, y no es algo agradable la verdad, ¿Quién sabe todo lo que cambio desde que lo visitamos?. 

Gwen: ¡Puedo soportarlo!.

Ben: No, no puedes... no puedo arriesgarte a ir ahí. Ni tu, ni a Ladybug y Chat noir. —disimuladamente miro a Marinette y Adrien— por eso iré yo solo.

Gwen: ¿Qué?, estas loco si crees que te dejare ir solo. 

Marinette: Pero Ben, ¿piensas irte así de repente?, lo mejor seria pensar las cosas con calma y tratar de planear algo, no es seguro lanzarse de la nada. —Eira en sus brazos no entendía de lo que hablaban, pero sentía que no era bueno, y lo demostraba moviéndose incomoda.

Ben: El tiempo esta en nuestra contra, mientras hablamos ellos.. ella, están en peligro, necesito irme ahora. Gwen por favor, si tu puedes llevarme te pido que lo hagas, por favor no quiero discutir. —la pelirroja, mantuvo el silencio, y la mirada hacia a un lado, hasta que se acerco a el y extendió su mano.

Gwen: Dame tu teléfono. —pidió aun sin verlo, pero este obedeció.— desbloqueado. —pidió otra vez y nuevamente obedeció.

Ben: ¿Qué estas haciendo?.

Gwen: Sincronizo nuestros teléfonos. Aunque tenga la probabilidad de crear una puerta temporal al proyector, si no la cruzas cuando la alarma suene, te iré a buscar. 

Ben: Entendido, una cosa mas, ¿pueden ser los niñeros de Eirá?, prometo que les pagare cuando regrese.

Marinette: ¿Pagar?, ¿por cuidar a mi ahijada?, olvídalo.. solo.. regresa, y será suficiente ¿ok?.

Ben: De acuerdo. —sonriendo se acerco a Eirá y suavemente la acaricio— Papá regresara pronto, no causes muchos problemas ¿si?.

Tras eso el pequeño grupo de amigos se adentro mas por aquel callejón. Gwen se paro en la pared la cual cerraba este, cerro sus ojos y luego los abrió mostrando de nuevo que estos brillaban, una pequeña esfera de energía se marco en la pared, luego la esfera comenzó a girar formando un circulo y dentro de este se formo un portal.

Gwen: He retraído la energía del mensaje de Helen, ojala pudiera llevarte a donde esta pero es todo lo que puedo hacer.

Ben: Es mas que suficiente.

Gwen: Recuerda, si no vuelves cuando suene la alarma, iré a buscarte. —Ben solo asintió.

Su atención se enfoco en el portal, ¿Qué le esperaba del otro lado?, ¿tendrá algo de la primera vez que entro?, ojala que no fuera así, no quería volver a luchar contra aquellas criaturas, todavía recordaba como Vilgax y Kevin la usaron como si de simples caballos se tratasen, estaba listo, así que sin mas nada que decir comenzó a caminar hasta el portal.

Fue un segundo, un descuido y todo su mundo se detuvo, ¿por qué no lo imagino?, ¿por qué no pensó que algo así pasaría?, era obvio al ver el brillante portal, era muy llamativo para cualquiera.. incluso.. para los pequeños.

Ben: ¡¡Eirá!!. —fue su grito al ver como esta entraba en el portal, los colores brillantes fueron suficientes para causar la curiosidad de la pequeña quien no dudo en salir de los brazos de Marinette y dirigirse hacia tan "divertido" objeto.

Y todo razonamiento se vino abajo, su cuerpo simplemente reacciono y se lanzo de golpe al portal, pero no fue el único, todos lo hicieron por lo repentino de la situación, segunda fue Gwen y detrás de ella Adrien y Marinette, luego Luka, después Alya y finalmente Nino, todo el grupo de amigos se había lanzado sin pensar en las consecuencias, y es que no había nada que pensar.

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Dentro de aquella dimensión, flotando en el espacio se encontraba la pequeña Eirá, quien como todo infante observaba con curiosidad todo a su al rededor. Un lugar interminable, de cielo color rojo repleto de asteroides pequeños y gigantes. Todo muy llamativo para la pequeña Necrofriggian, hasta que de repente una sensación de peligro invadió su cuerpo, una respiración a sus espaldas hizo que lentamente se diera la vuelta, quedando paralizada del miedo por el ser que ahí se encontraba.

Una bestia de color gris, sin ojos y con una gran boca la cual dejaba a la vista sus grandes colmillos, alas de murciélagos en su espalda las cuales se movían con velocidad permitiéndole volar, y por ultimo unos tentáculos similares a los de un pulpo al final de su cuerpo.

Un fuerte rugido fue lo soltó, como si le estuviera avisando que seria su bocadillo, y ataco. Su gran boca se abrió mas y con fuerza la cerro sobre la pequeña "devorándola", o al menos  eso era lo que tenia que pasar, pero Eirá simplemente se hizo intangible y escapo de sus feroces colmillos dando comienzo a la persecución. 

La pequeña alienígena volaba con desesperación pasando por aquellos asteroides con la bestia pegada hacia ella como si de una garrapata se tratara, volaba haciendo varias vueltas o tratando de perderlo atravesando asteroides, pero el ser era terco y se negaba a dejarla ir, sus gritos, sus chillidos de pánico y miedo se escuchaban con fuerza al igual que los rugidos de la bestia.

Hasta que un golpe seco dejo en silencio todo, el choque de un objeto con un asteroide hizo que Eirá se detuviera, volteando hacia atrás noto que la bestia había desaparecido, no había rastro, como si estuviera sola desde el principio, se apoyo en un pequeño asteroide y miro a otro mas grande el cual tenia un cráter y la bestia enterrada en el, la cual extrañamente tenia algunas partes congeladas. Fue ahí cuando del asteroide en el que estaba reposando comenzó a salir una figura del suelo.

Ben: De todo lo que pudiste sacar de mi, ¿tenias que sacar mi imprudencia? —la figura de Frio se hizo presente, contrayendo sus alas formando su capucha estiro sus manos hacia su hija quien sin dudarlo voló a sus brazos.— ¿te hizo daño?. —Eirá solo se movía contenta entre sus manos— tomare eso como un no, pero me diste un gran susto, y no solo a mi, a tu tía y madrina también, tendrás que darles mucho cariño si quieres su perdón. Por mientras, estas castigada, nada de plasma solar. —y con eso la expresión de la pequeña cambio a una molesta— no me mires así tu te lo buscaste, igual no puedo culparte del todo.. pues eres una Tennyson. —y con la pequeña al fin en sus manos salió volando del lugar para encontrarse con sus amigos.

[Con Gwen y los demás]

Nino: Wow, viejo este lugar es increíble. —dijo el moreno y todos afirmaron. El paisaje para ellos era sorpréndete y una nueva experiencia, excepto para Gwen quien veía todo normal y estaba alerta por si algo atacaba.

Alya: Y que lo digas, ¡esto tendrá muchas visitas en mi blog! —exclamo entusiasmada grabando todo lo que podía con su celular.

Marinette: Alya ya hablamos de esto, no puedes subir nada que tenga que ver con alienígenas a tu blog, además de que estarías exponiendo los poderes de Gwen.

Luka: ¿Pasa algo malo?. —pregunto al ver como Gwen observaba hacia todos lados.

Gwen: No se alejen de mi, este lugar es todo menos tranquilo. Vamos. —pidió sujetando su mano mientras que con la que estaba libre la levanto creando varias plataformas de mana en las cuales comenzaron a caminar.

Adrien: Ben aun no vuelve, ¿creen que encontró a Eira?

Gwen: Si, no tengo dudas de eso, pero no podemos quedarnos quietos esperándolo, hay que avanzar y buscar un lugar donde podamos estar seguros.

Luka: ¿Seguros de qué?.

Y como si fuera broma después de la pregunta de Luka se escucho un rugido, el rugido de la misma criatura que anteriormente había atacado a Eira.

Gwen: De eso. —contesto haciendo brillar su mano creando un campo de mana al rededor de todos— ¡estén alertas y no se acerquen a los borde! —ordeno y todos asintieron.

— ¡Ayúdenme, por favor ayúdenme! —el pedido de ayuda provino de un alienígena que estaba siendo sujetado por los tentáculos de la bestia.

Gwen extendió su mano y del campo de mana salió un lazo de energía la cual se dirigió con velocidad al alien logrando atrapar su pierna, y con la misma velocidad lo atrajo hacia dentro  del campo.

Luka: ¿Se encuentra bien?. —le pregunto ayudándolo a ponerse de pie.

— Lo sabia, sabia que una vez que mi captura sea publicada no me dejarían caer en las manos de D'Void.

Marinette: *¿D'Void?* —pensó hasta que escucho a Gwen, quien estaba haciendo esfuerzo para mantener a la bestia del otro lado, aunque el campo de energía comenzaba a agrietarse tras los golpes de este y de rayos de energías que salían de su boca— *¡¿Qué hago?! no puedo transformarme con Alya y los además aquí, sobre todo frente Adrien.. pero si no ayudo.. nosotros.. * —era una decisión que le costaba tomar, aunque no sabia que no era la única pues Adrien también estaba pensando lo mismo.

—¡Ship! —el pequeño Mecamorfo había hecho acto de presencia, mostrando su rostro desde la pantalla del celular de Marinette.

Marinette: ¿Qué pasa Ship?, ¿tienes alguna idea?.

— ¡¡Ship!! —y con eso el pequeño mecamorfo había alterado el teléfono de Marinette convirtiéndolo en una pequeña arma.

Marinette: Espero que no sea permanente o mamá me matara, gracias Ship —agradeció al pequeño para apuntar el arma hacia la bestia— ¡Gwen déjalo entrar!. —Gwen asintió y deshizo el campo— ¡Provecho! —grito disparando el arma haciendo que un rayo de energía verde golpeara de lleno la boca de la bestia de la cual comenzó a salir humo, y finalmente esta se detuvo para caer sin mas al vacío.

Adrien: Eso.. fue, asombroso. —dijo sin mas.

Marinette: Ahora sabes quien lleva los pantalones en la relacion, Agreste. —dijo burlona soplando el cañón del arma.

Gwen/Alya: Le enseñe bien, creo que demasiado bien.

Adrien/Nino/Luka: Pobre alma en pena. —se dijeron a si mismos estrechando sus manos.

— ¡Debemos irnos!, el regresara, y no regresara solo —dijo el alien al que salvaron cuando ya no habia peligro.

Marinette: ¿Te refieres a ese tal D'void?

— ¡Si!.

Adrien: ¿Y quien es D'void?.

— Hablemos cuando estemos en un lugar oculto, aquí estamos expuestos. —el alíen miraba a todos lados alterado, esperando que en cualquier momento lo atacaran.

Alya: Pero.. Ben aun no vuelve, y no sabemos si pudo encontrar a Eirá.

Luka: No quiero decirlo, pero el tiene razón, si nos quedamos aquí solo estaremos expuestos aun posible ataque. Podríamos buscar un lugar seguro, Ship podría dar una señal a Ben para encontrarnos ¿no?.

Marinette: Creo que si. —el mecaformo, quien ya había dejado el celular y ahora se encontraba en sus brazos, movió su cabeza en confirmación

Gwen: De acuerdo, nos moveremos, luego veremos como contactar con Ben. Solo, no se separen ¿si?.

Y así lo hicieron, con ayuda de las plataformas de Gwen les fue muy sencillo moverse por aquel lugar, así fue como llegaron aun gran asteroide con un gran crater en su centro el cual serbia de refugio, al menos por el momento. Fue ahí donde se ocultaron, encendiendo una pequeña fogata con un encendedor que traía Nino y con unas rocas algo viejas las cuales eran flamables, se sentaron a su al rededor formando un circulo con su respectiva pareja.

— Si conocen a los ayudantes deben ser advertidos, toda la dimensión se desestabilizara. —dijo el alien, quien estaba sentado en una roca frente a todos, observando el fuego.

Gwen: ¿Quiénes son los "ayudantes"?.

— ¿No son ayudantes?. —todos negaron— Los ayudantes son las únicas personas que se atreven a entrar aquí y derrotar a sus guardias.

Adrien: Sinceramente no entiendo nada, nos estas dando poca información.

Gwen: Si pudieras, no se, dar mas detalles quizás.. —de golpe se soltó del abrazo de Luka y alzo sus manos hacia arriba creando un escudo de mana que los protegió a todos de unos láseres.

— ¡Los guardias nos encontraron! — grito viendo que aquellas bestias con alas los tenían rodeados.

Gwen estaba apunto de lanzar un hechizo, para al menos alejarlos y tener una oportunidad para que todos se ocultaran, pero fue interrumpida cuando escucho los gritos de emoción de alguien. Y ahi vio a ese tetramand con el que se enfrento hace tiempo, Manny se encontraba encima de un dragón disparando con sus armas.

— ¡Los ayudantes!.

Antes de decir algo vieron como las bestias eran golpeadas por un borrón de color azul y verde, revelando a Helen, quien se detuvo en frente de ellos.

Helen: ¡Cómanse mi polvo!. —exclamo para voltear hacia ellos— vámonos no tenemos mucho.. ¿Gwen?, ¿Qué haces aquí?, ¿y Ben?. —pregunto al no verlo en ningún lado.

Gwen: Una larga historia.

Manny: ¿Qué hace ella aquí?, ¿y acompañada?.

Helen: No lo se, yo pedí a Ben, pero realmente me alegra que vinieran. Necesitamos mucha ayuda Manny.

Gwen: No se preocupen, puedo regresarlos a casa. Solo tenemos que esperar a Ben.

Helen: No Gwen, no lo entiendes.. —el rugido de las bestias los alerto.

Manny: Es D'void.

—El rey a llegado, ¡tengo miedo! Todo esta perdido. —grito hasta que Manny lo subió al dragón para luego darle un golpe y que este se fuera volando.

Helen: Gwen, deben irse y buscar a Ben, cuando lo hagan traten de ocultarse, ustedes son muy valiosos para caer en las manaos de D'void. Nosotros seremos señuelos, lo alejaremos

Gwen: No vine aquí para nada, aquí estoy, puedo luchar y ayudarlos a vencer a D'void.

Helen: Pero ellos no. —señalo a Marinette y los demás.— ellos están en peligro aquí. Ahora váyanse. —con eso dicho ambos se fueron.

Gwen sabia que era cierto, aunque Marinette y Adrien decidieran transformase para luchar, todavía estaban Luka, Alya y Nino, ellos podrían salir heridos en la batalla, tampoco podía crear un portal para mandarlos de nuevo, no le daría el tiempo, y dudaba que la dejen concentrarse en medio combate. La única alternativa era hacer lo que dijeron, encontrar a Ben y esconderse, al menos hasta que se les ocurriera otra cosa.

— ¡Suéltame!.

El grito proveniente de Helen hizo que todos voltearan a su ubicación, notando que habían varias bestias volando en circulo, como si estuvieran cubriendo algo, hasta que ese algo se dejo ver, un hombre, con capa verde, pantalones negros, cabello blanco y patillas.

Gwen: ¿Dr Animo?. —exclamo sorprendida.

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