Trate de llegar a tiempo, pero se me había echo demasiado tarde. Lo más probable es que no esté ni por todo eso.

La busque en el aula, la biblioteca e incluso en la cafetería pero no hay rastro de ella por ningún lugar.

- Ya lo estropee, de nuevo - pienso en voz alta mientras tapó mis rostro con las manos.

- Ajem, todavía no - dice alguien parado frente a mi.

Destapó mis ojos nuevamente y para mi sorpresa, era Cris. Estaba de brazos cruzados fingiendo estar molesta pero su sonrisa demuestra justamente lo contrario.

Me acerco a ella con cara de perrito mojado tratando de que no se enoje mucho conmigo.

- Lo siento, Cris yo... perdí la noción del tiempo, no tengo reloj - le muestro mi muñeca - También deje el móvil en el auto y empecé a caminar por ahi como un tonto, ni siquiera sabía lo que haci...

- Tranquilo, bobo - dice mientras cubría mis labios con su terso y delicado dedo índice - malo hubiera sido si me dejaras plantada.

- Aún así no me gusta dejar a una mujer tan linda como tu esperando a un inepto como yo - tomo su mano y colocó una sonrisa de coqueteo.

- Es cierto, eres un inepto, pero que lo voy a hacer a eso - dice mientras se ríe a carcajadas.

- Te sigues burlándo de mi ¿no es así? ¿Sabes que me voy a vengar?

- No, no, no - echa a correr, pero la agarré por la cintura y me la echo a la espalda poniéndola de cabeza - Bajarme, ¡¡me voy a caer!! ¡Ahhh!

Grita y patalea como una niña chiquita mientras que yo lo único que hago es reirme de su actitud. Me la llevo cargada hasta mi auto y sólo entonces es que la suelto en el asiento del copiloto.

- Si te vuelves a burlar de mi, la próxima vez será peor - le amenazó con el dedo.

- Noo, eso no volverá a suceder - responde haciendo pucheros.

Me siento en el asiento del conductor y es cuando voy a arrancar el auto  me doy cuenta de que no tengo las llaves. Jacob debió olvidarse dárselas con todo lo que todo ese alboroto.

- ¿Qué pasa? ¿No enciende? - pregunta ella un poco preocupada.

- Sólo dame unos minutos ¿si?

- Esta bien.

- Jacob, me puedes traes las llaves de mi coche - le digo a través de nuestro enlace.

Unos minutos después

- ¿Qué estamos esperando? - Pregunta Cris.

- Falta po...

- Aquí tienes tus llaves, te salvaste que estaba cerca sino no hubiera traído nada - interrumpe mientras me observa con desprecio y se va.

- ¿Cómo sabía lo de...?

- No importa, vámono - esquivó una posible conversación incómoda.

                                 🐺

- ¿Te encuentras bien? - rompe el silencio.

- Si, es sólo que... No me gusta la relación que llevamos el y yo últimamente, eso es todo. No quiero que te sientas culpable por eso.

- De seguro se le pasará enseguida - dice tratando de tranquilizarme mientras coloca una mano en forma de consuelo sobre mi hombro.

- No estoy tan seguro de que sucede así - respondo muy desanimado

- Para el auto, es aquí - indica.

- Pero si aquí sólo hay un parque.

- Lo sé, es que no es muy buena idea que mi mamá te vea sino tendré que responder muchas preguntas, ya sabes. - dice mientras se baja del asiento con rapidez.

Puedo sentir como su corazón se acelera con cada segundo que transcurre hablando conmigo.

- Adiós - se despide y ni siquiera espera a que le devuelva el saludo.

¿Qué pasa con está chica?

La vez anterior fue igual, nos detuvimos antes de llegar a su casa, es como si le tuviera miedo a algo o a alguien, pero ¿por qué me oculta cosas? ¿Estará pasando por una crisis familiar?

Me gustaría poder ayudarla si fuera así, aunque si ella no se deja apoyar tampoco puedo obligarla.

Será mejor que ponga rumbo a casa.

                              🐺

Trato de entrar por la puerta lo más sutil posible para que nadie noté mi presencia, pero siempre hay un ojo que te ve.

- ¿Dónde estabas? - pregunta una figura masculina de el cual no podía ver si rostro porque está sumergido en la oscuridad.

- Fui a acompañar a una amiga a su casa.

- ¿Una novia? - inquiere mientras va saliendo entre las sombras.

- No, sólo somos amigos respondo con total seriedad.

Puedo ir distinguiendo poco a poco quien era.

Es mi padre, bueno, mejor dicho... mi tío. Si lo que dijo ese señor era cierto.

- Llegas justo a tiempo para la cena en familia.

- ¿Familia? - Eso sí es raro, ¿habré escuchado bien.

- Si, sigueme.

Me condujo por un largo pasillo cubierto por una alfombra roja hasta terminar en un amplio comedor con una mesa extremadamente largada.

Un mayordomo echa para atrás una silla indicando que me sentase sobre ella. Jacob yacía justo a mi lado izquierdo, en la cabecera mi tío y a su costado su esposa e hijo.

Esto es realmente incómodo. Con cualquiera de esas personas estaba molesto por diferentes motivos. Tenía ganas de salir huyendo del salón, pero eso no era una opción.

- Bien los he reunido hoy, primero que todo porque extrañaba este ambiente familiar - Sus palabras son tan falsas como el - y la otra razón es para informarles que se está acercando la ceremonia de entrega. Donde un hijo y heredero mío recibirá el honor de convertirse en Alfa Supremo de la manada para dirigirla con orgullo y sabiduría.

No me gusta el rumbo que está tomando está conversación.

- Taylor, quiero que seas esa persona encargada de tal responsabilidad.

- Padre, no estoy de acuerdo - se levantó con rapidez muy enojado por la decisión que tomó Tomás - Yo debería ser el Alfa, el ni siquiera es tu hijo, pero yo si.

- ¡Silencio! - golpea la mesa con brusquedad - Leonardo ya hablamos sobre esto y ¡No voy a repetir lo mismo!

- Pero...

- ¡Basta, ni un pero más! Ya está decidido. Taylor será el líder y Jacob su más fiel seguidor y se acabó.

Le dirijo la mirada a Jacob y tanto el como yo, no estamos de acuerdo con nada.

- Ahí te equivocas, no voy a ser alfa. Eso es sino quieres que le cuente la verdad a todos, de que mi madre te traicionó y por eso la mataste.

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Con cariño Katy 😘❤