El principio del fin

Le contamos todo al anciano y el nos prometió ayudarnos. Al día siguiente el orfanato Sousa Rangel se llenó de policías y detectives.

Arrestaron a su directora Raquel Soto por múltiples delitos: tortura, abusos a menores de edad, retención de personas en contra de su voluntad etc, una lista lista infinita de crímenes atroces realizados por su propia mano. Ella declaró que había tenido un poco de ayuda del profesor que nos daba clases, así que a el también se lo llevaron.

Ahora la nueva dueña y dirigente de esa institución se llama Alicia. Promovida por las autoridades hasta que se encontrará un sustituto para que tomará su cargo, pero eso no afectará para nada su labor como doctora de los niños que ella cuidaba con amor y delicadeza.

En cuanto a Jacob y a mi, tuvimos que volver a ese lugar, pero estamos más tranquilos porque está vez no será tan malo como antes.

- Que bueno que esa bruja se fue para siempre - dice Jacob tirado en su cama justo al lado de la mía.

Ahora somos compañeros de cuarto gracias a la amabilidad de la doctora.

- Se siente tan bien saber que no habrá nadie que nos este vigilando todo el tiempo... por cierto, ella... no era ni un lincantropodo ni un vampiro... entonces ¿Qué es realmente? - pregunto con curiosidad.

- Hay cosas mucho peores que nosotros Taylor... ella era una abominación, nunca vi nada parecido.

- Será que de verdad era la mujer del diablo.

No pudimos evitar reírnos.

- Puede ser. Por cierto Alicia quería hablar algo con nosotros.

- Vayamos a verla - respondo.

                                🐺

- Nos estaba buscando Doc - dice Jacob juguetonamente.

- Si - responde - Chicos yo quiero agradecerles por lo que hicieron para salvarme no todos hubieran arriesgado su vida como lo hicieron ustedes - hace una pausa - pensaba que mi mundo se iba a acabar cuando veía que los días pasaban, luego los años y nadie nunca sospechaba de mi desaparición tan repentina. Yo creía que el mejor remedio para mi era... la muerte. Si no hubiera sido por vosotros todavía estuviera siendo torturada por ese monstruo.

Estalla en lágrimas recordando aquellos momentos infelices de su vida.

Entre los dos la abrazamos para consolar la y ella nos devuelve el afecto.

- Despreocupece ya eso pasó, sólo tiene que concentrarse en su futuro a partir de hoy - digo en modo de inspiración para calmarla

- Es difícil de olvidar todo lo que sufrí, Taylor  - dice.

- Eso es cierto pero mire lo por el lado positivo, no volverá a verla nunca más.

- Puede que tengas razón, ya me siento mejor, gracias.

- Para eso estamos - respondo.

- Lo que dice el - y Jacob me sigue la rima.

- Me alegra saber que se siguen llevando igual de bien y que no han cambiado en nada.

- Digamos que el es como mi cola, a donde quiera que yo vaya, el viene detrás - dice el muy sinvergüenza.

- ¡Eyyy! - reprochó y Alicia se ríe por su comentario.

- Me retractó. Taylor es mi hermanito de sangre - Me rodea los hombros con un brazo y con el otro me frota la cabeza como si fuera un niño pequeño.

- ¡Ya basta, déjame en paz! - digo retirando el brazo de mi espalda.

- Bueno chicos los dejo para que sigan con su amor infinito porque tengo mucho trabajo que hacer. Como extrañaba poder decir eso.

- Hasta luego - me despido - Ahh esperé un momento me gustaría hacerle una pregunta.

- Si, claro.

- ¿Que edad tiene usteded que siempre la veo en perfecta forma? - se tenía que decir y se dijo. No podía aguantar la curiosidad.

- Tengo casi 250 años.

Una vez que escucho su respuesta quedé con la boca abierta muy perplejo, no esperaba algo así. Ella no era inmortal, de hecho es una humana.

- Ya se que te estás preguntando como es posible eso, pero la respuesta es simple. Soy una hechicera y cuando era joven hice una fórmula para no envejecer, e aquí mi forma actual.

Se observa de arriba a bajo de manera sensual y Jacob no pierde oportunidad de vacilar.

Tiene curvas muy pronunciadas y casi siempre usa vestido pegados al cuerpo resaltando aún más su figura. Con unos ojos azul celeste podía hipnotizar a cualquier hombre.

- Deja de mirar pervertido - lo delató.

- Vete al infierno - Me empuja con el codo y me río.

- Sino tienen más preguntas me voy.

- Yo tengo una - levanta la mano como si estuviéramos en clases - ¿Cuando te vas a casar conmigo? - dice mirándola desafiante.

- Eres un niño corazón, nunca estaría con alguien que yo le llevará 215 años por encima - responde mientras se marcha haciendo sonar sus tacos durante todo el recorrido.

- Estas muy loco lo sabías.

- Yo no tengo la culpa de que ninguna mujer te mire.

- Y lo dice aquél que acaba de ser rechazado.

- Sabía su respuesta antes de que me la dijera, cariño, pero de todas formas quería intentarlo.

- Haré como que te creó.

- Puedo nombrar, si quieres, con cuántas he estado e incluso ya tuve mi primera vez con una de ellas.

- ¿Así?

- Mientras que tu con la única chica que has hablado en tu vida a sido esa tal Cristal y porque tenía 4 años - se bufa.

- Eso es porque no soy un mujeriego, rompe corazones como tu.

- Bla bla bla - lo empujó como método de defensa.

Pasamos toda la tarde hablando y riéndono.

Puede que tenga razón. Mi vida amorosa no es muy activa, pero eso es porque no me sé relacionar con nadie.

Soy demasiado tímido y reservado, las pocas se me han acercado y automáticamente se vuelven a alejar. También puede que sea porque no me interesa nadie realmente en lo absoluto.

Ya llegará ese alguien que me haga saltar de alegría y que me provoque una noche entera despierto sólo pensando en esa persona, mientras tanto prefiero seguir tal y como estoy.

Si te ha gustado la historia hasta ahora por favor ayúdame con tus votos y comentarios. No olvides que opinión cuenta.

Con cariño Katy 😘❤

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