29-Magico
Un golpe muy poco delicado o tan solo siquiera amable cae en mi cabeza con fuerza. Levanto a la mirada para fulminar a Taehyung con la misma pero sus ojos están tan obscuros y al mismo tiempo incendiados por el enojo que solo chasqueo la lengua y me sigo bebiendo mi batido.
—Eres un idiota. ¿Cómo se te ocuerre decirle eso a Kibum? —lo igo suspirar pesadamente.
Al día siguiente de mi reunión con Kibum había llamado a mi mejor amigo para hablarle de lo sucedido en el centro comercial y del mal sabor que me había dejado en la boca.
—¿No se supone que deberías estar feliz porque básicamente te dijo que también te quería? —cuestiona quitándome mi vaso de platico transparente. Pongo los ojos en blanco.
—Lo estoy —paso una mano por mi cabello— pero exactamente, ¿qué esperabas que hiciera? Kibum me dijo que estaba confundido, no iba a arriesgarme que rechazara y que nuestros próximos encuentros fueran incómodos o peor, que ya no quisiera verme.
—¿Hablas de verlo realmente o de tener sexo con él? Porque hablando entre nosotros solamente, sé que eso es lo más importante para ti.
—Y no te equivocas —río suavemente—. Pero no. Ya sea con sexo o no, creo que sería incapaz de soportar otra vez la ausencia de Kibum.
—¿De verdad crees que Kibum está confundido? —pone su barbilla en la palma de su mano y con los dedos de la otra golpea la mesa.
—Es lo que me dijo.
—¿Y qué creías? —exclama abriendo sus brazos—. Siempre has sido un hijo de puta.
—Lo sé.
—Un cabrón.
—Lo sé.
—Egoísta.
—Tae...
—Narcisista.
—Taehyung.
—Malagradecido.
—Ya me quedó claro.
—Erógeno.
—¡Kim Taehyung! —las personas me miran por el grito que suelto. Gruño y me cruzo de brazos.
—No tenías que gritar —lleva un dedo a su oído y lo mueve en forma de masaje.
—Es que no te callabas.
—Bueno, bueno —mueve su mano frente a si rostro—. ¿En qué estábamos? Ah, sí. Cuando conociste a Kibum lo único que hacías era burlarte de él y básicamente humillarlo, recién empezaste a cambiar cuando te diste cuenta que lo querías más que una distracción sexual pero Kibum es tan...ehm...inocente que seguro no se ha dado cuenta.
—Ibas a decir tonto —arqueo una ceja—. Le daré la noticia.
—No hagas que me odie más —frota su mejilla—. Ya de por sí no confía en mí porque ha de creer que quiero revivir viejos tiempos contigo y...
—Ahg, ni pensarlo. Eres muy ruidoso —me quejo haciendo una mueca.
—Perdona si no soy perfecto como Kibum.
—De hecho él es más ruidoso pero él es tierno así que se lo perdono.
—Eres un enfermo —mueve su cabeza de lado a lado.
—¿Podrías dejar de insultarme?
—Y tú de interrumpirme.
Aprieto el puente de mi nariz con dos de mis dedos. Tomo aire y lo miro.
—Hablemos como personas racionales.
—Es lo que intento —reniega haciendo un mohín.
—Ajá —asiento para evitar seguir peleando—. Continúa.
—No me des la razón como si estuviera loco —frunce el ceño. Me muerdo el labio para callar todas las palabras muy poco agradables que quieren salir.
—¿Vas a hablar o no?
—Sí, ya perdón —ríe cambiando su expresión—. Bueno. Es normal que Kibum tema expresar sus sentimientos de manera abierta y sinceramente porque de seguro cree que lo vas a rechazar o peor, te vas a burlar y luego tendrás sexo con él.
—Pero a él le gusta que me la pase a su trasero todo el día pegado.
—Minho —golpea la mesa con sus manos abiertas—. Hablamos de sexo. El sexo es delicioso, es lo mejor que puede tener el ser humano, es...ah, perfecto.
—Tú estás más loco que yo —suelto una sonora carcajada.
—Pero —vuelve a ponerse serio— en el caso de Kibum, él no ve al sexo aún como algo que pueda aferrarse.
—¿A qué te refieres?
—Es un adolescente, Minho. Así que es normal que se sienta confundido —sus ojos miran encima de mi hombro.
—¿De qué mierda hablas, Taehyung?
—¿Eh? —su atención regresa a mí—. Ay, perdona. Ese niño tiene un trasero enorme. ¿Qué le dan de comer a los niños de ahora para ser tan guapos y tener el cuerpo así?
Miro hacia atrás y descubro a nada más y nada menos que a Jos...oh, cierto. Jonghyun.
—Está mirando hacia acá, así que quise hacerme el filosófico —noto de reojo como se pasa la lengua por los labios, como Jonghyun lo mira confundido para después irse como si nada.
—Es amigo de Kibum —resoplo cogiendo nuevamente mi batido aprovechando que está distraído.
—¿Todos sus amigos son así se guapos?
—Algo así —sorbo un poco—. La lesbiana está buena aunque para nada de mi gusto y el póker face tiene una belleza extraña.
—¿Eso qué quiere decir?
—Que sí es guapo.
—No sabía que poseías un tipo ideal —se burla y vuelve a quitarme el vaso.
—Kibum ahora es mi tipo ideal. Ahora dame mi —un beso. Lo miro neutro, Taehyung se mantiene unos segundos más pegado a mis labios y después se separa—. ¿Estás urgido?
—¿De verdad no sentiste nada?
—Ya te dije que estoy enamorado de Kibum —se levanta de golpe y se pone a dar saltitos.
Se sienta a mi lado y me da un gran abrazo.
—¿Andas en tus días? —intento separarme pero sus brazos se aprientan más.
—¿Por qué no quieres estar con Kibum? —dice en lugar de responder mi pregunta.
—Porque no me considero lo suficientemente bueno para él —murmuro mirando a cualquier lado menos a su rostro.
Sus brazos vuelven a apretar su boca vuelve a emitir un grito agudo y bajo.
—Es adorable oírte decir cosas que jamás creí que pronunciarías —besa mi mejilla sonoramente.
—Deja de ser meloso —vuelvo a empujarlo pero sigo sin tener éxito.
—Ay, vamos. Extrañaba hablar contigo, Minnie —hace un puchero pero no me conmueve como los de Kibum—. Hace mucho que no teníamos una reunión de amigos.
—Es precisamente por esto que no salgo contigo —pongo mi mano en su rostro para apartarlo cuando intenta besarlo.
—¿Minho? ¿Taehyung? —ambos miramos en dirección de aquella voz tan conocida para ambos.
—Bum...
—Hola, Bum —Taehyung se pone de pie de inmediato soltándome para pasar a abrazar a Kibum, quien desvía sus ojos de los míos para mirar a Taehyung. Está vestido de niña.
La boca se me hace agua de solo mirarlo.
—¿Qué hacen aquí? —pregunta tratando de apartar a mi amigo pero con menos brusquedad que yo.
—Salimos a comer algo. Hacía mucho que yo no hablaba con Minnie y pues él tenía que contarme unas cuantas cosas.
—¿Qué cosas? —frunce el ceño y sus labios forman una delgada línea.
—Oh, cariño. Son cosas que debe contarte él mismo.
—¿Andas con tus amigos? —intervengo de repente ganándome su atención.
—Sí. Con Jonghyun, Woohyun y Jessica.
—¿La puta lesbiana?
—¿Algún problema? —contraataca casi de inmediato haciendo que me sorprenda.
—Iré a ver a tus amigos para invitarlos a comer.
—Espera, Taehyung. Ni siquiera los conoces.
—Los llamaré para decirles que irás —mete su mano al bolsillo de su falda y saca un teléfono que al parecer es nuevo porque antes no se lo había visto.
—No es necesario. Yo ya conozco a uno —le guiña un ojo y pasa por su lado para lo que yo supongo, ir a buscarlos.
—Así que no —se sienta frente a mí.
—¿Disculpa?
—Dijiste que no te gustaba Taehyung —pestañeo un par de veces y cuando entiendo suelto una carcajada—. ¿Qué?
—¿De verdad estás celoso?
—¡No! —sus mejillas se ponen rojas al instante—. Solo no me gusta que me mientan.
—Oh, claro —me levanto y me siento junto a él, antes de que diga nada paso mi brazo por sus hombros.
—H-Hablo en serio —balbucea cuando acaricio su mejilla con mi nariz.
—Hueles delicioso.
—Oye —me empuja pero con muy poca fuerza, aunque me aparto lo suficiente de todos modos.
—Taehyung es muy meloso, pequeño —se muerde el labio—. Lo sabes.
—No parecía molestarte —hago que gire su rostro en mi dirección poniendo mis dedos debajo de su barbilla.
—Estaba intentando apartarlo pero es muy insistente —rozo nuestras narices.
—N-No me dejas pensar —pone sus manos en mis hombros pero esta vez solo las deja descansar ahí.
—No pienses y déjame besarte —deja caer sus párpados y ladea su cabeza.
—¡Bum! —se separa de golpe.
Suelto un suspiro de frustración poniéndome de pie de nuevo para tomar mi lugar anterior.
Todos sus amigos se sientan de golpe, sin siquiera pedir permiso, ignorándome por completo. ¿No se suponía que los malditos coreanos educaban bien a sus hijos? Aprieto mi mandíbula cuando el póker face abraza a Kibum como yo hice antes y él no hace nada por apartarlo como a mí.
José (sé que así no es su nombre pero lo llamaré de esa manera porque me desagrada) que está su lado le dice algo al oído haciendo que MI PEQUEÑO ría con fuerza. La lesbiana puta se inclina sobre ellos para oír y también acaba riendo.
Carraspeo llamando su atención y lográndolo al instante.
—Oh, es Minho —comenta uno de ellos.
Bufo de molestia. ¿Dónde se fue Taehyung?
—Buenas tardes —saludan todos.
—Jose —lo señalo al más alto— tu Woo o ¿Que? —señalo al que abraza a Kibum— lesbiana puta —la señalo a ella.
—¡MINHO!
—¿Qué? Odio a cada uno de ellos, no voy a pretender que me agradan solo porque estás tú —me pongo de pie y cojo a Taehyung del brazo apenas aparece con una bolsa en la mano.
—¿T-Te vas? —los miro una última vez.
—No me gusta relacionarme con niños más que contigo —respondo tirando de Taehyung sin darle tiempo a reprochar nada.
—¿Y ahora qué pasó? —inquiere sin detenerse ni intentar que yo lo haga.
—Interrumpieron un beso entre Kibum y yo además de ignorarme los muy pendejos.
—Eres tan adorable.
—Cállate.
—¡Minho! —me detengo de golpe y giro mi cabeza para mirar a Kibum, que corre hacia mí. La falda revolotea con sutileza yo lo único que puedo hacer es esperar.
—Los dejo —Taehyung se suelta y entra a una tienda cercana de ropa.
—¿Qué quieres? —digo cuando se detiene frente a mí.
—Yo...—toma aire— lo siento —lo suelta.
—¿Por qué?
—No sé, sentí que debía hacerlo —susurra poniéndose recto para arreglar su cabello.
—Pudiste hacerlo mañana.
—Para mañana quería estar de buenas contigo.
—¿De verdad?
—Sí —sonríe ampliamente.
—Pues —me cruzo de brazos— sigo enojado y lo único que hará que eso cambie es...
Iba pedir un beso pero sus brazos rodeando mi cuerpo a pesar de mi posición hace que sonría y corresponda de inmediato.
—No te enojes conmigo —no sé si son sus palabras, el tono que usa para hablar, su puchero o todo junto lo que hace que mi corazón empiece a latir con fuerza.
—Eso es imposible mientras me sigan interrumpiendo cada que quiero besarte —lo oigo reír. Se separa de mí y cierra sus ojos estirando sus labios hacia arriba.
Sonrío divertido y me inclino hasta su altura para unir sus labios con los míos. Su brazos rodean mi cuello y los míos su delgada cintura. Lo levanto un poco del suelo y entreabro mi boca para atrapar su labio superior delicadamente. Suspira y una de sus manos acaricia mi cabello. A este paso me va a terminar dándome igual lo que las personas hagan en un futuro pero la culpa la tienen Kibum y sus dulces labios. Saco mi lengua y alcanzo a rozar la suya antes de que alguien haga que me separe de él.
—Perdón pero es peligroso para ambos —se excusa Taehyung mirando a todos lados.
—Claro —mi humor se ha mejorado notablemente con un beso así de pequeño de Kibum. Increíble...
Le doy un último pico antes de separarme por completo.
—Nos vemos mañana —agita su mano para después salir corriendo hacia sus amigos.
—Es mágico, ¿eh? —Taehyung palmea mi hombro.
—Vaya que lo es.
Quiero terminar esta adaptación ya que casi es 1 año de que lo comencé, actualizaré cada día si es posible.
Muchas gracias por su apoyo los amo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top