83.
—Has elegido mal.
Ni bien vio a la comitiva llegar a su hogar, los enfrentó.
—Has sido elegido.
—Elegido o simplemente señalado para realizar un sacrificio que ustedes no quieren hacer.
—Reborn.
—Sus hijos nunca son elegidos. Mi familia no tiene estatus y por eso fui elegido, porque la pérdida de un comerciante es insignificante.
Los miró acusador, elevando su voz con reproche.
—Es tu deber.
—Es tu fallo porque solo sabes designar muerte y no hallar una solución para conservar la vida.
Les dio la espalda.
—Seré el sacrificio, pero mi alma los atormentara de por vida. Lo juro.
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