Sentimientos.
-¡Eda ya volví!-canturreó feliz abriendo la puerta sorprendiendo a todos.
-Hey niña te noto más feliz de usual ¿pasó algo?-miraba a la humana fijamente entrecerrado sus ojos.
-No me lo vas a creer me pasó algo sorprendente.
-¿Acaso te peleaste con alguien?-preguntó el pequeño demonio al ver la ropa destruida.
-Bueno tuve que hacer unos desafíos en la biblioteca pero ese no es lo que iba a decir.
-¿Entonces que es? No te había visto esa sonrisa desde que ganaste aquel concurso de comida.
-Es sobre Amity-gritó emocionada.
-¿Que tiene la chica Blight?-la mayor la miró confundida.
-Vamos Luz habla-comenzó a comer una bolsa con papitas de un aspecto raro que se había encontrado debajo del sofá. El búho tubo quería unas cuantas pero King se alejó de él y se sentó cerca de Eda.
-Bueno es que ella es tan linda-se sonrojó al referirse de esa manera de ella-conmigo quise decir. Me ayudó a buscar un diario de un humano que había vivido con anterioridad aquí pero había un problema. Ella debía de ir a un área prohibida donde solo el dueño de la biblioteca puede pasar. Le prometí no meterme en líos. Todo iba bien, el lugar donde estábamos era gigantesco y lleno de estantes con libros viejos. Varias manos fantasmagóricas acomodaban libros fuera de lugar. Hasta habíamos encontrado el libro que tenía una pinta muy antigua pero al momento de abrir estaba un ratón muy extraño que se había dado un festín con el.
-Vaya eso es terrible. Si yo estuviera en tu lugar lo hubiera rostizado para luego comerlo.
Todos miraron a Eda con cara de asco mientras ella se lo imaginaba.
-¿Y que más pasó hoot?-habló el búho queriendo participar en la conversación.
-Obviamente me molesté con este amiguito-sacó al animal de su capucha haciendo haciendo le brillen los ojos a aquella bruja por el posible bocadillo que tendrá-por su culpa nos descubrieron y nos echaron de allí. El se encontraba muy decepcionado de ella y la despidió. Me dolió verla tan triste a tal grado que su voz se quebró y se le notaba lagrimas en sus ojos. Me dijo que desde que llegué ella había hecho estupideces que nunca hubiera pensado. Y le comenté que me pasaba lo mismo, me sentía culpable por lo ocurrido. Dejé que se fuera a su casa porque posiblemente tenga cosas para pensar.
-Entonces fuiste a recuperar su empleo y por lo que veo fue muy peligroso.
-Exacto. No fue sencillo realizar las pruebas que me impuso Malphas. Tuve que categorizar insecto devoradores de hombres y tuve que domesticar un dragón de papel. No fue nada divertido todo esto pero ver la reacción de alegría de Amity es suficiente.
-¿Reacción de alegría dices?-soltó una risa-niña aún no te has dado cuenta ¿verdad?.
-¿Darme cuenta de que Eda?-preguntó confundida.
-Veamos...ella ha sido amable contigo a tal grado de que me enferma.
-Ajá.
-Se preocupa mucho por ti y te ayuda cuando lo necesites.
-Si...¿a donde quieres llegar con todo eso?.
-No se olviden que se pone rara cuando te ve Luz-siguió el demonio.
-¿Rara?.
-Ya sabes, sonrojos y se pone nerviosa a tu lado...
-Bueno quizás es algo tímida conmigo.
Nadie de la casa búho se esperaba esa respuesta de la humana y gruñeron de la frustración.
-Sabes que mejor dejemos esto así, ¿que tal si jugamos Hechipoker? apuesto un poco de helado por esta partida.
-Si se trata de comida yo entro-respondió alegre el demonio-tengo pastelillos para apostar.
-Yo quiero jugar pero solo tengo insectos así que solo voy a mirar.
Eda sacó las barajas de su cabello y comenzó a repartir, Luz los miró contenta.
-Diviertanse chicos hoy fue un día muy cansado y necesito cambiarme de ropa.
Todos se despidieron de ella y continuaron con su partida. Luz se fue a darse una ducha con agua tibia, se puso una ropa cómoda y fue a su bolsa para dormir.
-Ahora que lo pienso jamás me hubiera imaginado que Amity se comportara de esa manera a mi lado. Como estuve tan preocupada por la maldición no me di cuenta hasta que Eda lo dijo. Y con el beso que inesperadamente me dió supe que ambas sentimos lo mismo-su cara se puso roja al recordar ese momento-¿y ahora que haré con esta información?, no se si sea prudente decírselo. Me pregunto cuando será el momento adecuado. Ugh esto me matará lentamente...
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