—Me preguntó de dónde habrás tomado el color marrón abominable—dijo en voz alta mientras sostenía el rostro de Luz.

—E-es que usé una tierra especial y lo mezclé en la masilla....—comentó Willow nerviosa y miró de reojo lo aterrada en incomoda que estaba su amigapor el contacto de la bruja de cabellos castaños.

—Mm ajá—se volteó sin dejar de tocarla—otra duda que tengo es que como obtuvo cabello y unos ojos blanquecinos, ¿acaso mataste a alguien?.

—¡Qué!...¡n-no!...yo...

—Todo esto me parece muy inusual—se separa del recipiente y comienza a alejarse—¡sigueme y lleva tu creacion contigo!—ordenó sin mirar.

Temerosa y disculpándose en silencio con Luz tomó la olla donde se encontraba y rápidamente siguió a Amity.

—¿A-a donde vamos?—habló cansada después de correr empujando el objeto.

—Vaya pensé que te ibas a acobardar media bruja. En fin quiero ver que trae adentro, siento que con tu creación Industrias Blight tendrá mejores herramientas para la seguridad de todos. Si logro descubrir su contenido me encargaré de darte una buena suma de caracoles por el descubrimiento—comentó con una sonrisa mirando el abominable.

Luz soltó un leve chillido del miedo al ver esos ojos dorados fríos observándola fijamente despues de que se asomara para tomar un poco de aire. Su corazón comenzó a latir fuerte y empezó a temblar. Vió como se acercaba pero Willow se puso enfrente aliviando un poco a la humana.

—¡Pe-pero Amity no puedes!...quiero decir no debes dañar a esta criatura, e-es un regalo del titan y el no hubiera querido que lo dañases.

—Tal vez pero hay que pensar en el futuro y creo que eso ayudaría, sería benéfico para todos en las Islas. Ahora vamos que necesito irme a la fábrica a probar nuestra última adquisición lo mas rápido posible.

Los minutos pasaban cuando se dirigían al salón de las clases de abominacion, Amity sentía que su antigua amiga le ocultaba algo, quería hacerla sentir miserable por robarle su tan preciada estrella y debía recuperarla antes de que sus padres se enteraran de su fracaso y la castigarían, sus ansias por desquitarse hscia que esbozara una sonrisa. Por su parte Willow no sabía que hacer. Ella solo quería huir pero no podía dejar sola a su nueva amiga quien atacó por accidente con su magia de plantas horas atrás cuando se desahogada por las burlas que le había hecho Amity.

Luz quien era la que peor se sentía, se lamentó por haber perseguido a Owlbert y su afán de ser aquella bruja de sus cuentos pensando que todo sería un lecho de rosas. No se arrepentía de conocer a Willow pero si al convertirse en su proyecto escolar, no contaba con que una bruja maniática de la perfección se encontraba allí y ahora ella sería la que acabara con su vida.