Han pasado unos días, quisiera decir que todo ha estado normal como siempre, pero no es así. Desde ese accidente con Minho en dónde nos dimos un pequeño beso, todo pareció dar un giro totalmente inesperado y ahora no puedo parar de pensar en él día y noche; en lo suaves que se sintieron sus labios y sus ojos brillantes cuando cruzamos miradas, también en el sonrojo de sus mejillas y lo bien que se veía sonriendo.

¿En serio no es nada? ¿Minho sólo es un amigo para mí? Toda su existencia ha ocupado al menos el 90% de mi mente ahora mismo.

¿Él estará igual que yo? ¿Pensará en mí si acaso un poco?

Ni siquiera puedo dormir de tanto pensar en él, en serio trato de tomar una siesta en el cómodo sofá de Chan, pero su imagen sigue en mi mente, todo ese momento aún sigue demasiado presente que me quita el sueño.

—Sung, despierta, tengo que hablar contigo. - dice Chan moviendo ligeramente mi hombro.

—Estoy despierto.

No pude ni dormir aunque sean unos cinco minutos, por más cansado que llegué de la escuela, simplemente no pude.

—Bien, siéntate y escucha. - hago caso a lo que dice y me acomodo en el sofá para quedar sentado. —Esto que voy a decirte en serio es muy importante, y espero que puedas aceptarlo.

—¿De qué estás hablando?

Él me ve con una amplia sonrisa mientras se acomoda mejor en el sofá para hablar.

—Verás, ahora que me reencontré con Changbin estuvimos hablando sobre el gran talento que tienes. Jisung, en serio eres muy bueno en lo que haces, sólo faltan pulir algunos detalles para que estés al nivel de un profesional.

¿En serio piensan eso?, ¿Es real lo que estoy escuchando? Tener está opinión de dos profesionales me hace sentir muy feliz y orgulloso. Nunca me he considerado muy especial en esto, tener esa opinión sobre mí hace que mi cerebro se altere un poco.

—¿Y... qué pasa con eso? No entiendo por qué tantos elogios, quiero decir; gracias, en serio lo aprecio. Pero no sé a dónde lleva todo esto.

Él ríe un poco negando levemente con la cabeza.

—Está bien, seré franco; Changbin y yo queremos llevar tus canciones al estudio, hacerles nuevas melodías, arreglos y que no sólo te limites a cantarlas con tu guitarra. Queremos hacer de tí, Han Jisung, el artista que siempre has querido, es momento de impulsarte y comiences a pavimentar tu carrera.

No puede ser. Esto está pasando en verdad ¿En serio quieren producir mis canciones? ¿No es una broma?

Un artista, él realmente cree que puedo serlo y está dispuesto a levantarme.

Todo este tiempo he deseado que alguien se diera cuenta de cuánto amo hacer esto, y ahora ha aparecido, y no solo eso, me está ofreciendo a llevar mis canciones a un estudio de grabación, estoy a punto de desmayarme. ¿Y si no lo hago bien? ¿O si vuelvo a fallar? En serio no quiero desepcionar a Chan ni a Changbin al momento de hacerlo, quiero dar lo mejor de mí.

Tengo que dar todo mi esfuerzo para que los demás vean que esto no es cualquier juego para mí.

En serio por más que quiera decir algo, de mi boca no sale ninguna palabra, no puedo expresar lo emocionado que estoy ahora mismo. No lo puedo creer.

—Yo...no, no sé que decir. Es...es demasiado.

—Lo sé, lo sé, te tomé de sorpresa. - ríe un poco rascando su cabeza. —Pero en realidad nos interesa grabar tus canciones. Piénsalo, no es necesario que sea de inmediato, pero me gustaría que lo tomaras en cuenta.

—Es que...no tengo el dinero, lo sabes.

Creo que no tomé eso en cuenta, ahora todo se ha desmoronado, ya nada servirá.

—No te preocupes por eso, poco a poco lo irás pagando, cuando te conviertas en una gran estrella; hablaré con mis jefes de tu situación y estoy seguro de que verán tu gran talento. Hagamos esto; escoge una canción, la que más te guste, nosotros haremos la pista y si acaso le haremos unos arreglos, cuando la tengamos lista te llevaremos al estudio para grabarla ¿Te parece?

Esto parece un sueño ¿No estoy soñando? Sí es que estoy soñando, espero nunca despertar, porque es lo que siempre he querido en toda mi vida.

—Está bien, hagámoslo.

Es hora de cumplir mis metas, aunque tenga miedo, voy a atreverme a mostrarle al mundo lo que un alien puede llegar a hacer. Tú puedes, Han Jisung.

Voy a abrirme paso en el mundo, seré parte de él a la fuerza, las personas tendrán que aceptar que un alien viva entre ellos y yo tendré que adaptarme a la tierra.

Voy a ir derribando todas estas barreras.

🐶🐶🐶

Si con el tema de Minho no he podido dormir, ahora con lo que Chan y Changbin me propusieron, definitivamente tengo insomnio; he estado pensando en qué canción puedo grabar primero, tengo tantas que ni siquiera he cantado en el bar que no sé por cual empezar. Hay muchas cosas cruzando por mi mente.

No sé quién ocupa más mis pensamientos ahora realmente, por un lado está Minho y por otro están mis canciones, esto se está saliendo de control. Así que ahora estoy en el baño de la escuela refrescando mi cara con un poco de agua esperando que así pueda llegar claridad a mi cabeza.

Sin embargo al escuchar una horrible voz acercarse sé que todo se ha ido al carajo.

—Hey, aquí está nuestro querido alien.

Te odio, ojalá desaparecieras, Choi San.

—No entiendo tu obsesión conmigo. ¿Te gusto acaso?

Eso pareció molestarlo, ya que sus cejas se fruncieron y su mirada se oscureció, fue acercándose más a mí a paso lento quedando un poco cerca.

—No soy un maldito asqueroso como tú.

Siendo sincero, ni siquiera yo sé si soy...así, de esa manera.

—Si te doy tanto asco ¿Por qué no sólo me dejas en paz?

—Es importante enseñarles a las personas como tú que no deberían de estar aquí.

Está bien, eso es todo, pondré un fin a esto de una manera diferente.

—Voy a denunciarte. - sus cejas se fruncieron un poco. —Sabes...la policía realmente puede considerar sancionarte, ya casi eres mayor de edad. No querrás tener una linda amonestación en tu historial, ¿O sí?

—No te atreverías, eres un cobarde.

—Pruébame.

Probablemente he sido un cobarde toda mi vida y pocas veces me he arriesgado a hacer las cosas, y aunque a veces no salgan bien, esta vez voy a hacer todo lo que esté en mis manos para ponerle un fin a todo esto.

De todas formas tengo a Chan, él se encargará de este idiota.

Sé que con esto ya he ganado, él se ha quedado estático en su lugar viéndome como si quisiera enterrarme vivo, quizás cree que con eso ya no lo haré, pero está demasiado equivocado, voy a hacerlo. Lo rodeo chocando mi hombro con el suyo y cuando estuve a punto de salir escucho su estúpida risa.

¿Está bien de sus facultades mentales?

—Oh, mi querido Jisung. - dice sin dejar de reír. —¿Quieres denunciarme? Bien, hazlo, estaré esperando.

—¿Qué estás...?

—Estaré esperando mientras me divierto un poco con alguien más. Sabes, ese niño que tienes como amigo ¿Cómo se llamaba? ¿Jeongin? Creo que es simpático, estoy seguro de que querrá nuevos amigos que le ayuden con sus tareas.

Sus palabras hicieron que me paralizara por completo; acaba de mencionar a Jeongin, le hará daño y lo atormentara. Mi sangre está hirviendo en este momento y en serio quiero aprovechar de que solo estamos nosotros dos para poder golpearlo, no importa si es más fuerte que yo y práctica artes marciales, realmente no me importa, sólo quiero golpearlo y advertirle que no se meta con Jeongin.

Necesito proteger a ese niño a toda costa.

—No te atrevas a tocarle ni un solo pelo. No me das miedo, en serio iré a hacerlo y te irá peor.

Miento, él siempre me ha dado miedo, mucho miedo, pero logro disfrazarlo un poco esperando que así se aburra de mí y me deje en paz; aunque al parecer él puede detectar mi temor siempre que se acerca.

—No trates de darme órdenes, mucho menos trates de amenazarme. - se acerca a mí y empuja un poco mi cabeza con su dedo índice. —Escúchame Han, tú siempre has sido un bueno para nada, nunca puedes defenderte y cuando quieres hacerlo sólo terminas peor. ¿Y aún así quieres defender a ese niño? No seas ridículo. Tú me obedeces a mí, yo te amenazo a tí. Claro que me tienes miedo.

No puedo llorar ahora, no voy a permitir que salgan las lágrimas, eso sería dejarlo ganar aún más.

—Eres un hijo de puta.

—Puedo ser peor. - sonríe sinicamente. —Ahora lo que vas a hacer es cruzar por esa puerta e ir directo a las canchas, te espera una linda sorpresa.

—No lo haré.

—¿Prefieres que Yang lo haga? Si tú lo haces olvidaré esa puta idea que tienes en mente de ir a la policía y dejaré en paz al niño. Tú decides.

Estoy entre la espada y la pared, aunque siento que la respuesta es obvia. Jeongin no tiene que pasar por esto, él tiene que vivir una adolescencia normal en la escuela, con muchos amigos y buena convivencia sin que nadie lo moleste, debe aprender a no saltarse las clases por ir a comer, pero también debe de disfrutar los momentos en los que no está presionado por hacer la tarea a último momento; debe de tener esa sonrisa en su cara todo el tiempo y sus ojos siempre tienen que tener ese brillo que los caracteriza. Él no merece tener los moretones en los brazos ni las pesadillas en dónde parece que el túnel nunca termina y no puede dejar de correr para escapar de ellos.

Jeongin no merece ser como yo, no merece vivir este dolor.

—Está bien.

—Buen chico. - revuelve un poco mi cabello.

Prometo que encontraré una solución rápido, esta vez controlaré mis emociones para no explotar con Chan y dejaré que me ayude con esto; mientras tanto, yo me encargaré de cuidar a Jeongin y evitar que salga lastimado por mi culpa.

No hay nadie en los pasillos que pueda ayudarme, no hay nadie quien preste atención realmente; Seungmin y Jeongin están en clases, al menos ellos estarán bien y no se verán embarrados en esto. Así que seguí caminando con mis piernas temblorosas hasta las canchas de fútbol, San estaba detrás de mí viéndome como una fiera, mi cuerpo no dejaba de temblar.

Al llegar puedo ver a todos sus amigos rodeando mi mochila, totalmente destruida junto con mis libros los cuales también se encontraban hechos mierda. Mis ojos empezaron a picar en ese momento, me había costado tanto conseguir una mochila nueva y los libros son demasiados costos ¿Por qué hacen esto?, ¿Por qué les resulta divertido?

¿En serio me veo tan ridículo siendo un llorón? Mis lágrimas son causa de sus risas.

—¡Sorpresa! - gritan todos.

—¿Te gustó? Estuvimos planeando esto desde hace tiempo. - dice San pasando su brazo por mis hombros. —Hoy es un día soleado ¿Sabes que significa, cierto? Gracias a ti ahora estoy más enojado, tengo que desquitar mi estrés.

Supongo que no puedo escapar, al final de todo sigo siendo un cobarde que no puede defenderse.

Tonto, tonto, tonto Han Jisung ¿Por qué no puedes ser más fuerte?, ¿Por qué no puedes ser más valiente?, ¿Por qué simplemente no puedes ahorrar más dinero y cambiarte de escuela? Consigue otro trabajo, y junta más dinero para no tener que sufrir más esto. ¿Por qué soy tan flojo como para conseguir otro? De cualquier manera el año escolar acabará en algunos meses y podré graduarme.

¿Por qué?, ¿Por qué tiene que pasar esto?

Debería dejar de lamentarme y simplemente arreglar toda la mierda que he causado.

Cada vez se van acercando más, me arriesgaré por más del peligro que sé puedo correr si lo hago, pero en serio no puedo seguir siendo un maldito llorón. Voy por el que considero más débil, el chico más bajo de todos quien es el que se encarga de grabar todos los momentos en dónde se "divierten", me abalanzo contra él y ambos caemos al piso; sé que es cuestión de segundos antes de que puedan separarnos, así que no espero para golpearlo fuerte en el rostro, sujeto el cuello de su camisa para impedir que pueda escapar mientras apoyo mis rodillas en el suelo.

—Me tienes harto con tu puto celular. - digo soltando otro golpe.

Él trata de cubrirse con sus brazos para detenerme, supongo que se dió cuenta que no es divertido estar en mi posición. Escucho risas detrás de nosotros, todos ellos parecen estar disfrutando de un espectáculo como si fuera parte de un circo; pero realmente le resto importancia cuando veo la cara de este tipo siendo cada vez más lastimada por mí. Utilizo toda la fuerza de mis puños para golpearlo, al menos hasta que ya no pueda más y mis lágrimas puedan dejar de caer.

—¡Vaya! Parece que el alien ya se hartó de no ser parte de los humanos. ¿Quieres venganza?

Sólo no me atrevo a partirle la cara porque sé que no duraría ni un segundo de pie, al primer golpe que él de yo ya estaría en el suelo. Nunca fui fanático de la violencia, pero en esta ocasión lo único en lo que pienso es que quiero ver sus caras como la última vez que me dejaron a mí, quiero ver sus rostros llenos de lágrimas y súplicando que los deje en paz como yo tantas veces lo he hecho. Sí, supongo que quiero venganza.

Mis nudillos han agarrado un tono rojizo, ya no puedo seguir, así que como último recurso tomo el celular de aquel idiota y lo estrelló contra el piso, de esa manera me aseguro de que todo lo que he sufrido se ha borrado, toda la humillación que he recibido se extinguió.

Pero aún así no puedo estar en paz.

—Bien es suficiente. - dice San cambiando su tono de voz. —Sujétenlo, ya me cansé de sus juegos.

Dos de ellos me levantaron del suelo, dejando al chico ahí sin recibir algún tipo de ayuda. Al menos me alegra ver qué terminó de esa manera por mi culpa, saber que llegará al día siguiente con vendas en la cara me hace sentir un poco orgulloso; sin embargo el miedo sigue presente al ver a San tronando los dedos de sus manos con una expresión furiosa.

Aquí termina mi momento de protagonismo, fue bueno darle lo que merecía a ese idiota por unos momentos. Ahora me toca a mí.

Cierro los ojos con fuerza esperando su puño estrellarse contra mí, pero la voz de una persona demasiado conocida apareció de repente.

¿Debería comenzar a llamar a Minho como un salvador?

—¡Hey, ustedes! ¿Quieren jugar un partido conmigo?

Tenía un balón de basketball en manos y una expresión un tanto retadora hacia ellos.

—Estamos ocupados. - responde San.

—Si no juegan conmigo asumiré que con unos cobardes, ya que tienen miedo a perder contra mí. Saben que soy bueno en todo.

¿Qué está haciendo? No sabe jugar, ¿No le da miedo quedar en ridículo? Él mismo lo dijo cuando estábamos en la cancha de basketball, no era bueno en deportes. ¿Por qué de repente les ofrece un partido?

No necesita hacer esto para distraerlos, sé lo importante que es para él lo que es quedar bien con lo demás.

Uno de los que me sujetaban me suelta bruscamente y se acerca hacia San para susurrarle algo.

—San, estar más cerca de él nos puede beneficiar, ya sabes.

Él voltea a verlo con el ceño fruncido, parece meditarlo un poco después de darme una mirada frustrada, pero al final le ordena al otro chico que suelte mi brazo.

Pude respirar bien en ese momento.

—Bien, jugaremos contigo.

Minho sonrió en grande indicandoles que lo siguieran. Mis piernas parecieron dejar de funcionar y simplemente caí al suelo colocando una mano sobre mi pecho tratando inútilmente de detener los latidos de mi corazón tan agitados; noté como volvió su mirada hacia a mí y me dió una ligera sonrisa, pude sentirme seguro al ver sus ojos.

Pude sentir por un momento que todo iba a estar bien, que todo iba a mejorar.

🐶🐶🐶

Aún con mis piernas temblando un poco, logré llegar a la azotea ya que era el único lugar tranquil en el que se me ocurrió estar. No tengo ganas de hablar con nadie, no quiero tener que dar explicaciones de mi ausencia; sólo quiero quedarme aquí en silencio totalmente agotado de este día y con mi estómago rugiendo. Quiero que acabe ya para irme a casa y llorar mientras abrazo a Chan como si fuera un niño pequeño.

Aunque sé que llorar no sirve de nada, lamentarse no cura ninguna herida. Debería de dejar de ser tan sensible.

—Aquí estás. Por fin te encontré.

Minho llegó a mi lado, sentándose cerca de mí con sus piernas cruzadas.

Siempre llega en el momento indicado, en serio es como un salvador de mis días malos.

—¿Por qué hiciste eso? Dijiste que no sabías jugar.

—No podía quedarme de brazos cruzados. Si nadie aquí hace algo por detener a esos idiotas, yo lo haré; quizás no sepa pelear, pero soy importante en este lugar, no puedo evitarlo, soy muy guapo. - termina haciendo una pose guiñando el ojo.

—Ahora tú estarás en problemas, ¿Cómo lograste librarte de ellos?

—En realidad tuve que jugar un poco, pero sólo pasaba el balón y corría en cualquier dirección que no fuera la canasta. - soltó una ligera risa. —Después de la primera ronda les dije que tenía que irme a clases y simplemente corrí a buscarte.

¿En serio se arriesgo a no quedar bien con los demás? Él se preocupó primero por mí, ¿Eso está bien? Yo en serio quería que dejara de lado esa presión de ser alguien sumamente perfecto, pero no tiene que hacerlo por querer salvarme.

Sin embargo el pensar que quizás soy importante para él me hace sentir muy feliz, hace que mi corazón se agite de una manera agradable. En serio no puedo describir lo mucho que siento.

—Gracias, prometo que no volverá a pasar, así no tendrás problemas.

O al menos si pasa, será en un lugar muy alejado para que él no tenga que preocuparse. Pero en serio voy a solucionarlo.

—Mis problemas no son importantes cuando tú estás en medio. No sé cómo exactamente, pero te ayudaré a resolver esto, confía en mí, todo estará bien.

Siento la calidez de su mano sobre mi hombro, su sonrisa hace que mi mente se despeje; siento unas ganas inmensas de abrazarlo en este momento y no sé por qué, sólo quiero abrazarlo fuerte y no soltarlo; quiero inhalar su perfume hasta que sea lo único que pueda respirar, caer al suelo estando aún en sus brazos y dormir ahí por el resto del día con nuestros cuerpos siendo fusionados, sentir los latidos de su corazón como si fuera una canción de cuna y despertar con ellos como si fuera el canto de los pájaros. Quiero que todas mis heridas se sanen con un simple abrazo porque siento que sus brazos pueden ser un buen remedio para dejar de llorar.

Quiero todo eso, quiero estar con él.

Creo que eso es demasiado cursi y exagerado, ¿Por qué de repente estoy pensando en todo esto?

—Lo resolveré pronto, está bien.

Él vuelve a sonreír esta vez un poco más amplio y quita su mano, nuestras miradas se desconectan y él voltea a ver al cielo, sin embargo yo no puedo dejar de verlo; él en serio es el chico más guapo que he visto, es demasiado lindo y su perfil es tan bonito que no puedo despegar mi mirada de él. ¿Se sentirá incómodo si lo sigo viendo? Creo que debería dejar de hacerlo.

—El día está soleado. - dice tomando un poco de iré. —Los días soleados son bonitos, hace un buen clima.

Mi opinión sobre los días soleados ha cambiado mucho en este tiempo, ya no es lo mismo que antes. Odio el sol en mi cara, odio las pequeñas gotas de sudor que se forman en mi frente, odio tener que tomar algo frío para poder refrescarme.

Odio a la persona que me hizo odiar los días que tanto amaba.

—No me gustan los días soleados, creo que prefiero cuando está nublado.

Supongo que cuando el cielo no tiene ni un rayo de luz es cuando representa mi vida, todo está oscuro y hace un poco de frío; pero de igual manera no está mal ya que no hace mucho calor, me gusta sentir la calidez de ciertas personas que me acompañan, también de mi cachorro quien ya ha estado creciendo demasiado.

—Los días soleados son mejores, hacen que tu rostro se vea más reluciente.

Él en serio tiene que dejar de decir cosas como esas o en serio mi corazón va a estallar.

—¿En serio?

—¡En serio! Además que es un buen tiempo para hacer muchas actividades; puedes salir a pasear con minho, ir a comprar un helado, escribir una canción sobre sacar a pasear a tu perro y comprar un helado. - lo último nos hizo reír un poco. —O simplemente puedes quedarte en casa y dormir, también es un buen clima para una siesta.

—Si quiero salir a pasear con minho y comprar un helado, ¿Vendrías conmigo?

—Yo pagaré los helados.

Eso me hizo sonreír, no porque pagaría los helados, sino porque vendría conmigo, porque me haría compañía y estaría con nosotros pasando un buen rato; eso es lo que quiero.

Supongo que los días soleados no son tan malos después de todo, Minho hace que sean más cómodos.

—Eso suena bien.

—Entonces será una cita.

¿Una cita? Creo que eso suena muy bien, me gusta como suena, me gusta esa palabra y la definición que tiene. Me gusta pensar que tendremos un tiempo juntos después de la escuela, me gusta, en serio me gusta esto que estoy sintiendo; debo de admitir que tengo un poco de miedo porque son demasiadas emociones en un mismo lapso de tiempo. Pero está bien, me gusta.

Me gustas Lee Minho, me gustas mucho.

🐶🐶🐶

capítulo largo, cada vez estoy más inspirada y se me ocurren ideas de último momento, supongo que tendrá más capítulos de los que imaginé JAKJAKAJA.

espero que los disfruten, nos vemos pronto, besitos 😽💗