Creo que ya no tengo un tipo ideal de chico. Sólo quiero a alguien que sepa tan sólo con mirarlo a los ojos, que no me lastimaría jamás con intenciones.

Mejor me concentro en mi misma, es lo mejor.

Luego de enviarle el mensaje de texto a Taehyung, me concentré en quedarme a un lado de la rueda de la fortuna donde quedé en encontrarme con él. Le envié un mensaje a Jennie preguntándole donde estaba y ella me contestó que ya venía de camino. Y que Jungkook también. Releí ese ultimo mensaje unas dos veces más y me preparé mentalmente para la situación, al mismo tiempo que me maldecía por ser tan vulnerable de repente por la presencia de Jungkook en el lugar. ¿que me sucedía? Era increíble que con tan solo unos pocos encuentros el ya se hubiera robado mi corazón por completo. Aún cuando yo intenté muy en el fondo que nadie lo volviera a hacer.

Metí las manos en los bolsillos de mi pantalón y me dediqué a mirar a mi alrededor con impaciencia. Al decir verdad yo parecía la única tonta que se había esforzado en llegar a tiempo, y siendo sincera me molestó.

Sin embargo el enojo no duró demasiado, porque de repente taparon mis ojos con dos manos gruesas y grandes y entreabrí la boca sobresaltada.

--¿Q-quien es?

--Soy el Cuco--dijo alargando la "o" de una forma exageradamente siniestra y gruesa. Sonreí volteandome para verlo.

--Taehyung no seas idio...

Sin embargo me quedé a mitad de la oración cuando vi que en realidad se trataba de Jeon Jungkook sonriendo y mostrandome esa perfecta hilera de perlas blancas.

--Jennie me dijo que vendrías.--explicó rápidamente al ver mi cara de estupefacción--supongo que hola.

--Hola.--dije de igual forma, sonriendo--me sorprendiste, creí que eras mi am...--estaba por decir amigo hasta que recordé--q-quiero decir novio, lo siento.

--Tranquila, no es para tanto--explico rodando los ojos--elegimos un día fresco para pasear por aquí ¿no crees?

--Si, pero a decir verdad me gusta más sentir mis dedos congelados que mis capas de piel derritiendose ante el calor--bromee a lo que me respondió con una sonrisa llena de calma que fue música para mis oídos.

--Cierto.

No pudimos hablar más porque vi a Jennie de repente asomándose entre la multitud. Vino y me abrazo de manera eufórica mientras que luego a Jungkook le daba un beso en la mejilla.

--¡Hola a ambos! Falta uno más ¿cierto?--yo asentí ante su mirada interrogativa y ella hizo una mueca--esperemos que llegue pronto.

Jennie y Jungkook comenzaron a hablar como siempre de manera nerviosa y timida. Me dejaron a mi afuera de la conversación sin preguntar y tuve que oir las tonterías de chicos enamorados que salían de sus bocas.

Vamos, Tae, ven rápido. Esto comienza a ser incómodo.

Taehyung llegó justo en el momento que comenzaban a destensarse. Al verme me abrazó y yo imite el gesto sonriente. Luego le sonrió a Jennie y a Jungkook también y me tomó instintivamente de la mano haciendome tensar.

--Lalisa me contó mucho de ustedes.--estaba sorprendida de que mintiera de forma tan natural. Quería quitar mi mano de la suya pero sabía que no era prudente--¿A donde iremos entonces?

Jungkook y Jennie se miraron con un interrogante. Entonces abrí mi boca para hablar y dije:

--¿Que tal el carrusel?

Todos aceptaron la propuesta gustosos y fuimos directo al mencionado. Como eran vueltas de tiempo corto no nos resultó muy tediosa la fila. Luego de 20 minutos aproximadamente de hablar de trivialidades, con un Taehyung rodeando con su brazo mis hombros, pudimos finalmente subir. Jennie y Jungkook se quedaron en el nivel bajo mientras que Taehyung y yo fuimos al segundo piso.

--Gracias por venir a ayudarme--le dije una vez más--¿crees qué se lo creyeron?

--Pues claro.--se burló--ni siquiera nos prestan atención, están muy ocupados haciéndose ojitos.

Sonreí con boca cerrada y me senté en la taza de té que giraba. Me crucé de brazos e invité a Taehyung también.

--¿Porque esa cara?--me preguntó ceñudo--¿no te estás divirtiendo?

Me encogí de hombros.

--No vinimos para divertirnos exactamente.

--No, pero yo quiero hacerlo aún así.--informó haciendome abrir los ojos sorprendida. Entonces, sus manos se colocaron en el volante de la taza de té y comenzó a girar sin previo aviso con una sonrisa maliciosa entre los labios.

--¡Taehyung espera!--el se carcajeó ante mi mirada de pánico y siguió con su objetivo: hacerme vomitar.--¡No es gracioso, estas yendo muy rápido!

El ignoró mi pedido y continuó con lo suyo.

Mi ceño fruncido y mi posición tensa entonces, se fueron disolviendo de a poco. Vi a Taehyung haciendome un puchero decepcionado por el hecho de que no lo acompañara en ese momento y acto seguido fingió llorar. Y fue tan ridículo que no pude evitar carcajearme al ver como contrajo su cara.

--¿Ves que si podías divertirte?

Sonreí. Las vueltas del carrusel se detuvieron y entonces, todas las vueltas que estuvimos dando me cobraron factura. Mi estómago se revolvió y comencé a tener arcadas, así que salí corriendo de ahí.

[...]

Las siguientes atracciones fueron más ligeras. Sillas voladoras, el típico tirar botellas con el que te ganabas peluches (y en el cual yo me gané un pequeño alien verde por parte de Taehyung) y finalmente la rueda de la fortuna. En todo momento intenté ignorar lo melosos que se ponían poco a poco Jennie y Jungkook. Taehyung parecía sospechar de mi actitud fría pero no decía nada al respecto. Le agradecí internamente por ello. Cuando llegamos a la rueda de la fortuna supe que era el momento indicado para el tan esperado beso que Jennie quería tener con Jungkook, por lo que subí con algo de malhumor a está atracción mientras comenzabamos a subir.

--¿Te sientes bien?--me preguntó Taehyung preocupado.

--Sí, sí.--respondí distraída mirando el paisaje a mi alrededor.

--¿Sí?--insistió

--Que sí Taehyung.--respondí molesta--¿puedes dejar de estar pendiente de mí un segundo?

Al instante en que lo dije me arrepentí. Su mirada fue de puro desconcierto, para finalmente terminar en seriedad mirando hacia el frente, viendo como seguíamos subiendo.

--Lo siento.--dije, apenada. El nisiquiera se inmutó ante mis palabras-- Taehyung...

--Dijiste que deje de molestarte y eso haré.--murmuró seco, a lo que sentí mi corazón contraerse con dolor de repente, como si me hubieran dado una gran bofetada en la cara. Con fuerza.

No voy a negar que me dolió verlo contestarme así. Jamás lo hacia. Lo miré por unos cuantos segundos intentando creer que era una muy mala broma. Sin embargo ni se inmutó de mi mirada sobre él.

Eres una estúpida. Dijo la voz de mi mente. Y tenía razón.

Quise decir algo más al respecto para quitar su mirada endurecida, pero nada salió de mí. Quizás porque sabía en el fondo que nada de lo que le dijera lo haría cambiar de opinión.

Mientras Jennie finalmente se atrevía a dar el gran paso junto a Jungkook, yo estaba teniendo un ataque hormonal repentino y estaba a punto de largarme a llorar. Entre Jungkook que besaba a Jennie con dulzura a unos cuantos metros de distancia de nosotros y Taehyung ignorandome, deseé desaparecer por unos instantes. Me desesperaba saber que no sabía por cuánto tiempo se enojaría Taehyung conmigo o si ya se había cansado completamente de mí y decidió no hablarme más.

Una vez que llegamos al suelo y las vueltas finalizaron, me bajé de ahí con lágrimas sin derramar de mis ojos y me abrace a mi misma en busca de contención. Jennie en cambio bajó con una sonrisa de oreja a oreja que empezó a decaer al verme angustiada.

--Hey ¿que sucede?--me preguntó preocupada. Negué con la cabeza sin decir palabra alguna al respecto. Nisiquiera me atreví a mirar atrás para ver que reacción tenía Taehyung.

--Nada. Sólo una complicación de último momento. ¿pudieron proceder?--pregunté de repente. A lo que ella, a pesar de su repentina preocupación asintió con la cabeza con una sonrisa.

--Sí. Fue como de película. Nos dimos un beso en la cima de la rueda.

Sonreí a pesar de mi tristeza.

--Felicidades Jenn. Ahora pueden estar solos y tranquilos. Yo me iré a casa.

--¿Estas segura?

Abrí la boca para hablar y decirle que si, pero me congelé en mi lugar al ver por detrás de Jennie a Taehyung, quien bajo de la rueda en ese mismo momento y nos dio una mirada seca en señal de despedida.

Fruncí los labios viendo como se iba sin más. Jennie entonces nos miró de hito en hito con sorpresa y entonces comprendió todo.

--Oh. Lo siento. Seguro ya se arreglarán.

Le dí la razon para dejar de hablar del tema. Aunque siendo sincera no estaba segura con respecto a ello.

Jungkook llegó en ese mismo momento y abrazó por detrás a Jennie de forma cariñosa casi sin perscatarse de mi existencia. Decidí entonces que ese era el momento adecuado para irme si no quería terminar aún más hecha mierda, así que di una vaga despedida y me fui de ahí.

¿Qué me sucedía? ¿Porqué estaba tan afligida por Taehyung?