Pov narrador

uraraka había tomado la caja y se encontraba entrando a su habitación, atrás de ella se encontraba tsuyu la cual estaba regresando de tomar aire, todas vieron curiosas a la castaña al darse cuenta que traía algo entre sus manos, uraraka se sentó en el suelo y en su mente empezó a leer lo que decía la carta.

Luego de unos momentos se podía notar que su rostro había tomado un color carmesí, las chicas empezaron a decirle que leyera en voz alta lo que decía la carta, pero ella no podía porque sino le daría mucha vergüenza así que decidió darle la carta a las chicas, cuando ellas terminaron de leer posaron unas miradas pícaras en la pequeña castaña.

—vamos vamos, abre esa caja!.— alentaba la chica invisible.

Ochako solo asintió y acto seguido abrió la pequeña caja.

—Es... un celular!?.—grito la castaña mientras empezaba a hacerse una idea sobre cuánto le habría costado eso a quien se lo envío.

—Que suerte ochako, ya quisiera yo que me regalaran cosas, pero quién habrá sido?.—pregunto una chica de piel rosa.

—yo creo tener una idea.—tsuyu se acercó al oído de mina.

La pelirroja pego un  gritó.—midoriya!?, Que valiente!.—

Ochako se sobresaltó al escuchar el nombre del peli verde.

—sabes?,existe una palabra llamada discreción.— kyoka hablaba mientras tenía una mano en el rostro.

La peli rosa solo agachó la cabeza un poco y se disculpó con la castaña, al verla su rostro cambio a uno de preocupación.

—Ochako?, estas bien?.— pregunto mina.

El rostro de ochako estaba demasiado rojo tanto que había empezado a botar humo—S-si... estoy bi....—Sin más se desmayó.

—Wah!, Ochako no vayas hacia la luz!.— las chicas gritaron alarmadas.

Al parecer mientras las chicas estaban hablando, la mente de la castaña ya había empezado a volar en la imaginación, cuando las demás se dieron cuenta su imaginación ya había llegado a un punto de no retorno, tanto así que la pobre no aguanto y se desmayo. Las chicas solo la cargaron y la colocaron en su cama hasta que ella despertase.

—creo que fue demasiado para su pobre corazón.— Comentó kyoka.—tsuyu, estas segura que fue midoriya?

—Si, mientras regresaba vi que el dejaba algo y se iba corriendo.

— Que lindo por parte de midoriya.

— Pero habrá sido por amor o amistad?.— pregunto toru.

—yo diría que es mas tirando a amor, últimamente actúa más extraño de lo normal cuando habla con ella-kero.

—Y que hago con esto entonces?.—interrumpió mina mostrando el celular.

—déjalo en su caja y escóndelo por allí, es mejor que eso no sea lo primero que vea al despertar.— respondió yaoyorozu.

— Porque?

— Porque caería desmayada otra vez.

Luego de unos momentos de espera la castaña empezaba a despertar, esta al parecer pensaba que lo ultimo que había pasado fue un sueño.

— chicas... ¿Qué pasó?.— pregunto confundida.

—Este... te desmayaste por la película... si eso.— respondió toru.

— Enserio?, tuve un sueño extraño donde recibía un regalo de un admirador.

Todas se tensaron al escuchar eso.

—Aun no nos graduamos y ya estas pensando en admiradores, que graciosa.—mina soltaba una risa nerviosa para intentaba sonar convincente.

—Es verdad, mejor no adelantar acontecimientos, continuemos con nuestra noche de chicas.

—S-si!.—las demás estaban nerviosas ya que tarde o temprano se dará cuenta de que su sueño no fue realmente un sueño.

Todas reanudaron con la película que momo iba a poner, algunas estaban pensando sobre que iba a suceder cuando uraraka se diese cuenta que le habían mentido, aunque ya no podían hacer nada, solo podían dejar que ocurra lo que tenga que ocurrir.

Pov izuku

Ya era domingo por la mañana, me encontraba ordenando y haciendo espacio en mi habitación, aunque era temprano era mejor ir preparando todo antes de que llegasen Eri-chan y togata-sempai, al terminar tome el azúcar y las manzanas para dirigirme a la cocina.
Al llegar tome una olla no muy grande y vertí el azúcar para seguido ponerla a calentar en la estufa, cuando vi que ya estaba bien derretido empecé a tomar las manzanas.

—olvide los palitos para las manzanas!— para enmendar mi error apague la estufa y salí rápidamente.

Active el OFA y me metí por el bosque para ir mas rápido al supermercado, de camino pase por un pequeño lugar donde vendían té, la nostalgia me invadió ya que ese lugar fue donde tuve que enfrentar a gentle y la brava, de no haber sido por los guantes que me hizo hatsume-san no creo haberlos podido vencer, pensando en hatsume-san, nunca pude agradecerle lo suficiente por todas las mejoras de mi traje, tal vez pueda hacerlo hoy, como dicen, mejor tarde que nunca. Llegué al supermercado y fui hacia la sección de dulces, compre un poco más de taiyaki y una botella mediana de jugo de cereza, estaba a punto de ir a pagar y recordé los palitos, fui hacia la sección donde vendían materiales para manualidades y dulces, tome una bolsa de palitos para manzanas y fui rápidamente a la caja registradora.

Ya estando cerca de los dormitorios tome rumbo hacia la U.A, encontrar a hatsume-san no era tan difícil ya que siempre se encontraba en el taller, cuando llegue toque la puerta pero parecía no haber nadie, cuando estaba por irme hubo una explosión y la puerta de acero salió volando, rápidamente ya que sabía quién era responsable de la explosión.

— Hatsume-san, estás bien?

— Solo un pequeño contratiempo.— la peli rosa estaba moviendo su mano de lado a lado para exparcirse el humo.—por cierto que te trae por aquí un fin de semana?, Alguna mejora para ti traje?.—

—no, no es eso, te traje un poco de taiyaki y jugó para agradecerte por todo los que has hecho por mí.

—gracias pero no tengo tiempo para comer, necesito pensar en un nuevo bebé.

—pero un pequeño descanso y unos dulces pueden ayudarte a pensar mejor.

—entonces acepto, gracias por la comida.—ella comió de una manera muy rápida.

—esto... hatsume-san, hace cuánto que no comes?

—pues solo llevo un día sin comer.— respondió como si eso fuera normal.

—un dia!?, Hatsume-san no debes hacer eso, es malo para tu salud, podrías enfermarte.— ella solo hizo como si me escuchará.

— ...y no podrías hacer ningún bebé más durante unos días.—eso si parece haber llamado su atención ya que dejó de ajustar a su bebé.

—cuando termines los ajustes puedes ir a mi habitación, habrá unas cuantas cosas para que comas.

—bueno, cuando mi bebé esté listo iré.—

—bien allí te espero.—dije para irme.

Bueno ya tenía a alguien más para que fuera a mi habitación, tal vez debería preparar un almuerzo ya que solo dulces no seria bueno para Eri ni para Hatsume, otra vez debía ir al supermercado y hay se un casi todo lo que había ganado en el trabajo, al menos tengo suerte de haber ahorrado mucho.

Ya otra vez en el supermercado tome dos lechugas y unos cuantos tomates, una bolsa de arroz, tres cebollas grandes, dos zanahorias grandes, media docena de papas, especias y carne.

No sé cuántas veces e ido ya al supermercado está semana pero al menos ya estaba en los dormitorios... otra vez, en la cocina pude ver a satou-kun batiendo algo, otra vez estará haciendo dulces para entrenar, al ver el azúcar en la olla y las manzanas logré ver que tenían un papel que decían no tocar.

—Buenos días satou-kun.

—oh midoriya, buenos días, las manzanas y el azúcar son tuyos?

—si, porque?

— tuviste suerte, los chicos casi se las comen.

—mi error debí ser más precavido, gracias por evitar que se las coman.

—no hay de que, pero porque tantas manzanas?

—eri-chan y sempai van a venir y les dije que les haría unas cuantas, y si vienes tú también?. En mi habitación hay unos cuantos dulces y estaba pensando en preparar un almuerzo.

—es fin de semana, claro que iré pero primero quiero entrenar un poco.

Me puse un delantal y volví a calentar el azúcar, mientras calentaba lave las lechugas, las cebollas, el arroz y los tomates para tenerlos listos, deje las verduras a un lado y empece a poner los palillos en las manzanas para luego una por una darle vueltas en la olla donde tenia el azúcar derretido, cuando termine con todas las puse en unos platos que tenia preparados para que el azúcar de las manzanas se endureciera.

Ya teniendo las manzanas listas empece con la comida, empece por cortar las zanahorias, papas y la carne en trozos chicos, lo que iba a preparar era arroz con curry, algo sencillo a mi parecer, aunque seria la primer vez que lo prepare.

Luego de una hora ya tenia todo listo, era hora de llevar todo hacia mi habitación, tome una bandeja grande y coloque todo allí y tome rumbo hacia arriba, estaba dando pasos cuidadosos ya que no quería chocar con nada, al empezar a subir las escaleras debía ir viendo cada escalón para saber dónde debía pisar ya que la bandeja bloqueaba un poco mi visión, al llegar arriba respire más tranquilo ya que la parte más difícil había pasado.

POV narrador

El peli verde sintió que alguien se acercaba a el así que se dio la vuelta para ver de quién se trataba.

— midoriya, que oportuno encontrarte.— dijo un chico de cabellos bicolores.

—que pasa todoroki-kun?.— pregunto mientras acomodaba sus manos en la bandeja.

— podrías ir a mi casa el viernes?

—...porque tan repentino?

—pues... —

-Flashback-

Sábado por la tarde, el chico de cabellos bicolores se encontraba en su casa comiendo su platillo favorita acompañado de su hermana y su padre, todo era demasiado silencioso así que la chica de cabellos blancos decidió hablar.

—Y.... ya que es tu último año... estás pensando hacer algo con tus amigos?.—

— No, nada especial.—

—oh... que mal, entonces qué tal si los invitas el viernes para que se queden y el sábado pueden irse juntos hacia el centro comercial.

— TIENES MI PERMISO PARA HACERLO, ADEMAS ESPERO QUE YA CONSIGAS NOVIA SHOTO!.—grito el mayor.

— no es necesario que grites... además ya hay alguien.— dijo girando un poco la mirada.

—shoto está interesado en una chica!?.— gritó la chica de cabellos blancos.

— No sé si es eso... todo esto es nuevo para mi, dejando eso de lado no es mala idea invitar a mis amigos a que vengan.

— ¿¡shoto no se negó!?.— volvió a gritar sorprendida.

— No es necesario que grites, empiezas a parecerte a el.— dijo señalando al peli rojo.

-Fin de Flashback-

— y eso fue lo que pasó.— hablo indiferente.

— vaya que familia más energética.– dijo soltando una risa nerviosa acompañado de gotas de sudor que recorrían su frente.— está bien, iré.— dijo sonriendo.

— Gracias midoriya, bueno yo me voy, debo decirle a algunas personas más.— el chico se despidió moviendo su mano para seguido bajar las escaleras.

El peli verde retomó su camino hacia su habitación, al llegar a la puerta levantó su rodilla y colocó la bandeja allí, con su mano libre giró la perilla para poder abrir la puerta y entrar.

Treinta minutos después izuku ya tenía todo listo, ya era la una de la tarde así que no debería faltar mucho para que los demás llegasen, el peli verde tapó la comida para que no se enfriara, tomo una pesa y se sentó en su cama, este entrenaría un poco hasta que los demás llegasen.

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