Capitulo 3

Descansamos lo suficiente.

No supe por cuánto tiempo dormíamos; sin embargo no importaba realmente. Por extraño que parezca. Estar en estas mazmorras hacia que pareciese que estuvimos días o meses encerrados aquí dentro, siendo que en verdad llevamos casi más de horas aquí.

La pequeña niña estaba teniendo mucho frío en su cuerpo; por lo cual use un yesquero que había en la habitación y encendí una de las antorchas de la pared. Fue entonces que el fuego comenzó a calentarla y no solo, sino que también se abrió lo que parece ser una habitación secreta.

Fui a verla y no avance más debido que el olor de adentro era nauseabundo a más no poder y no solo el olor. También los cuerpos que se encontraban adentro ya muertos por las torturas de Trotur.

Regrese a la celda, la niña todavía dormía y la desperté. Se tallo los ojos y tomo aquel cuchillo que le regale.

Ella tomo mi mano y salimos de la celda.

Fuimos donde frente a la cámara de tortura y pasamos por una celda que tenía escaleras llevando hacia abajo. Con las llaves de Trotur abrí la celda y comenzamos a bajar.

La niña dio un pequeño grito de miedo y empezó a llorar debido a que todo el lugar estaba compuesto por cadáveres humanos y las paredes como el suelo tenían una contextura parecida a la carne debajo de la piel. Tanto fue la impresion que me separé para vomitar.

- Ugh buaf -volvi a vomitar. El olor era asqueroso y más al ver como era el lugar todavía era aún más peor. Después de unos momentos limpie mi boca y me dirigí a la niña. - No mire, pequeña, no mires esto. Solo toma mi mano.

Ella obedeció, cerró sus ojos y tomo mi mano mientras seguíamos avanzando como si nada.

Al lado nuestro, en la izquierda, había un enorme agujero. No quise mirar por temor que haya algún monstruo en ese lugar o si por accidente nos fuéramos a caer pero tenía mis sospechas de que era un agujero para que pueda pasar un elevador.

Seguimos recto. Podía sentir a la niña temblar de miedo y mirándola de reojo ella veía con miedo y curiosidad toda las deformaciones y cuerpos de aquellos que se encontraban pegados a la pared.

Al lado nuestro, y por fin, encontramos una especie de salida. Suspiré por esto, no quería pasar un minuto más en este lugar.

Antes de que pudiéramos pasar por aquel lugar, un destello blanco se mostró en la distancia junto al sonido de algo cortando el viento. Mis ojos captaron rápidamente como una espada curva iba en contra de la niña, y de manera casi automática me puse al frente de la niña, abrazándola, y recibiendo el ataque.

- ¡Ahhhh! -grite de dolor. Aquella espada había atravesado mi brazo izquierdo. Vi detrás mío y el mango del arma estaba siendo sujetada por una mano de reptil alargada. Dicha mano comenzó a retorcer más la espada destruyendo tanto el hueso como los tejidos musculares de mi brazo. - ¡AHHHHHHH, MI BRAZO!.

- Ah -la niña grito del susto y pánico. Aquella espada logro rebanar mi brazo mandándolo a volar, por supuesto teniendo yo una hemorragia masiva y la sangre cayendo a más no poder.

Escuché un siseo a la distancia, mire con rabia detrás mío y un hombre serpiente venía amenazando con matarnos. Y en su mano izquierda portaba su espada y en la derecha un escudo de araña.

Me levanté y tome mi espada, a pesar de que quería proteger a la pequeña la sensación de estrés y el desmayo estaban ganandome. Debo terminar esto, tengo que protegerla.

No pude proteger a mi padre, ni a mi madre. Pero se que puedo proteger a la niña.

- Pequeña. -llame la atención de la chica mientras blandia mi espada. - Tengo que pedirte un favor. Se que debes estar asustada ahora, sin embargo, necesito que me ayudes. En esta batalla.

Ella solto un leve quejido, tomo su cuchillo y a pesar de que lo blandia sus manos temblaban. Le sonreí para quitarle el miedo y la duda.

Lance un fuerte rugido hacia el hombre bestia y este mismo acaba de corresponder gimiendo en un siseo de odio y muerte.

° T/N acaba de usar Adrenalina.

(Adrenalina, cuando está en activo obliga al usuario a reaccionar de manera desmedida ignorando los conflictos internos que tenga concentrandose únicamente en su enemigo de en frente. Es probable que ignore el dolor y solo priorice en su supervivencia).

Me abalance contra el hombre serpiente y ambos empezamos a chocar nuestras espadas con furia, la niña corrió directamente contra el monstruo y este arremetió su cabeza contra mi y su espada fue contra ella. Y en un movimiento casi imposible de realizar para mí logre frenar su avance y desviar su espada chocando contra los muros de carne.

La niña enterro el cuchillo en las costillas de la bestia, rugiendo de dolor, y yo quien estaba concentrado rápidamente empuñe mi espada como si fuera un cuchillo y le hice un corte demasiado rápido en la pierna derecha cortandola a la mitad.

El monstruo estaba furioso cuando cayó al suelo inclinandose con su única rodilla, y me lanzo un golpe de su escudo que logré bloquear con mi espada, ví como la niña se subió encima de la bestia y comenzó a apuñalarlo repetida veces en su cuello, y sin embargo a pesar de la perdida de sangre que estaba teniendo el monstruo este, por supuesto, tomo a la niña del cuello y la llevo a su boca para deborarla.

Antes de que hiciera eso, logre destruir su escudo con la espada y antes de hacer algo para salvar a la niña el maldito me dió un puñetazo lo suficientemente fuerte para mandarme lejos. Logré pararme y detener mi retroceso pero no me detuve en ese momento sino que tome mi espada por la hoja y la lance hacia la dirección de la cabeza de aquella bestia.

Un golpe seco se escuchó y un arcada de dolor. Invoque a la espada de sangre de Alll-Mer y corri directamente donde estaba aquella bestia. Mi espada había atravesado su garganta. Tome con firmeza la espada de Sangre de Alll-Mer y corte su cabeza de cuajo para posteriormente cortar por la mitad su cuerpo.

Tome a la niña antes de que pudiera caerse y golpearse en el suelo. Ella estaba bien, de milagro.

La baje y ella se puso de pie. Tome mi espada y la guarde. La bestia había caído, muerto, sin embargo sus ojos reptilianos y fríos me daban una mala sensación en el cuerpo como si me estuviera vigilando.

La adrenalina del momento se había terminado y con ello la ola de emociones cayó en mi. Mareo y nauseas se apoderaron de mi cuerpo al igual que la hemorragia de mi herida en el brazo.

Si la niña no me hubiera atrapado a tiempo probablemente me habría ensuciado por toda la sangre y vísceras del suelo.

- N-no me dejes. -escuche hablar a la pequeña, ella me estaba abrazando con fuerza y no quería soltarme para nada. Acaricie su cabello con las pocas fuerzas que me quedaban.

- Te dejo ... mi cuerpo en tus manos ... -

Fue lo último que dije antes de caer inconsciente, podía escuchar los llantos de la pobre chica y a la vez los movimientos que hacía en sostenerme y en como bajabamos por las escaleras.

Me dolía no solo el cuerpo, también la parte donde me faltaba el brazo y a la vez también empecé a sentir como mi cabeza dolía y ardía mucho, es decir ya estaba empezando a tener fiebre.

Pocas veces abría mis ojos viendo como la niña me arrastraba usando mi brazo e intentaba levantarme, ella todavía seguía llorando y por alguna razón aquello me dolía bastante.

No tenía las fuerzas para levantarme ni siquiera para poder decirle algo.

Cuando sentí que mi cuerpo dejó de moverse empecé a tener una sensación de paz en mi, y un hermoso sueño que me daba una sensación de que estoy en una zona segura. Un lugar dónde nadie podría hacerme daño.

Abrí mis ojos para ver todo un paisaje en blanco, como si fuera un cuadro sin pintar todavía, pero de ella emergió como si de la luz se tratase una hermosa mujer de cuerpo  dorado y pechos al desnudo, redondos y suaves, su sola presencia parecía que podía sentir todo mi ser en paz.

"Por favor....protege a mi hija"

Ella me dijo aquello. Sin embargo no supe a qué se refería debido que el sueño me estaba ganando y había olvidado que mi brazo estaba cortado y aquella zona sangrando y brotando en hemorragia.

Empecé a respirar con fuerza y mis ojos se cerraron de manera automática. Al volver abrirlos pude ver a la pequeña niña durmiendo encima mía, abrazándome por mi abdomen, y mirando mi brazo faltante pude ver como aquella zona estaba cubierta por un vendaje.

Estaba cansado, tal vez porque me faltaba medio litro de sangre por culpa de mi brazo faltante o simplemente porque tenía hambre, sin embargo no pude hacer mucho por obviamente tener a la pequeña durmiendo en mi pecho.

Comencé acariciando el pelo de la niña quien comenzó a despertarse poco a poco. Bostezo y abrió sus ojos para abrazarme más fuerte.

- Perdón por desmayarme. -exclame arrepentido. - Muchas gracias.

Ella asíntio ante esto. Se separó de mi y tomo lo que es mi mochila abriéndola y sacando un filete de carne ya cocinada, mire a la izquierda y había una hoguera encendida, parece que encontró una forma de hacer esto.

Tome el filete y lo parti a la mitad para ambos, ella tomo su parte y comenzó a gustarla como yo hice ahora con el mío.

Cuando termine de comer solté un suspiro que no sabía que contenia en su interior y mire de manera cansada y agotada toda la prision en dónde estábamos.

- Pequeña, por cuánto tiempo estuve insconciente. -le pregunté y ella me miro fijamente.

Nego con la cabeza, al parecer ella no sabía cómo medir la hora y el tiempo que pasa pero aún que lo supiera ella no podría realizarlo debido que estás Mazmorras atrapan a cualquiera siendo imposible saber por cuánto tiempo has estado encerrado en este sitio abandonado por sabe cuánto tiempo.

Indique a la niña que me dejase levantar un momento, al salir de arriba mío me apoye en la pared con mi unico brazo y logré levantarme; quitando el hecho de que siento ardor en mi brazo, como si todavia pudiera mover los dedos o incluso el mismo brazo.

Esto era incómodo. Fue lo que pensaba en estos momentos mientras veía mi ya brazo cortado y vendado.

- Debemos irnos. Hay que buscar una forma de seguir avanzando. -no quería seguir con esta misión, no por mi estado actual, sino que no podría proteger a la pequeña si soy herido de gravedad o si llego a morir. No quiero pensar en eso.

Cuando salgamos de aquí. Ella y yo viviremos como una familia.

El resto del camino fue difícil para mí debido que mis piernas estaban entumecidas; aún así pude seguir.

Por accidente había pisado una baldosa de trampa en dónde casi una flecha nos da pero logramos esquivarlo, fuimos por dónde vino la flecha y había un guardia deforme solo que está vez estaba él distraído con algo.

Era una ... especie de murciélago humanoide. No voy a buscarle lógica a esto.

Tome mi espada maldita y la lance con todas mis fuerzas hacia la cabeza del guardia deforme, obviamente la espada logro atravesar su cráneo y antes de que él murciélago pudiera hacer algo lo agarre con la mano y comencé a azotar su cuerpo contra el piso una y otra vez de manera repetítiva hasta destruirle el cráneo.

Entramos en la celda que estaba detrás de ellos y abrí el cofre que estaba ahí. Para mí sorpresa habían 50 monedas de plata y tres orbes de fragmento de alma.

Las tome y las guarde en la mochila por si tengo tiempo de ir arriba y usar la mesa de Hexen.

Tome mi espada y la limpie de aquella sucia sangre y prosegui mi camino. Yendo directo hacia al frente había una especie de celda con escaleras pero la reja estaba cerrada por el otro lado.

Hacia la derecha entramos en una especie de oficina y detrás de todo ella se encontraba otro guardia deforme vigilando el lugar, lo peor de todo es que este es uno de los reforzados.

No creo poder derrotar a ese monstruo en mi estado actual. Sin embargo si lo dejo vivir podría darse cuenta de nuestra presencia e ir a matarnos.

°T/N acaba de usar Adrenalina.

Fui rápidamente contra aquella bestia y salte encima suya enterrando mi espada en su cuello, empezó a sacudírse constantemente mientras mi espada lo apuñalaba todo el rato.

El miserable del guardia choco contra la pared golpeándome en ella, debido al golpe grite de dolor por esto pero no me detuvo aquello, tome mi espada con más fuerza y la enterré mas profundo en su pescuezo.

El maldito uso su mangual y me dió un golpe en la espalda dañando me seriamente, lo que me obligó a caerme.

Aquel guardia se quitó la espada del pescuezo y me rugió con ira, lanzandome la espada que por suerte esquivé. Invoque a la espada de sangre de Alll-Mer y corri contra la bestia quien me lanzo un golpe con su machete que logré esquivar deslizandome por el suelo y cortarle la pierna.

Cuando cayó, le arrebate el casco y lo agarre de la nariz hacia arriba y de un solo corte desolle su cabeza separándola del cuello, caí al suelo después de que aquel monstruo caminase hasta caer en un armario de espadas y fue empalado por estás atravesando todo su cuerpo.

- Ganamos -exclame cansado y agotado.

Fui a la próxima sala donde en esta había una palanca y al accionarla se escuchó el sonido de algo metálico bajando como un ascensor. Debe de ser el lugar donde habíamos venido hasta las cárceles.

Salimos de la oficina y fuimos a inspeccionar las jaulas donde únicamente habían Ghoul y varios cuerpos sin vida y sin ningún signo de que pudieran levantarse y reanimarse.

Por suerte para nosotros dos pudimos encontrar a alguien en una celda, alguien que yo conocía perfectamente bien.

- Vaya, Cahara. No solo te metes en problemas sino que también en este lugar abandonado por dios. -dije con un tono de burla pero alegría de ver a otro ser vivo aparte del príncipe Buckman.

- Ah. T/N. Con un demonio. De todos porque tú -exclamo él cansado y soltando un gemido de dolor.

De un solo empujón la puerta de la celda cayó al suelo. Permitiendo que Cahara pudiera salir y estirar sus brazos.

- Dios. Parece que han pasado muchos años desde que estuve fuera. Oye, que le pasó a tu brazo.

- Protegi a la pequeña. -dije. Tocando el hombro de la niña y acariciandola suavemente. - Un hombre serpiente por poco logra matarla pero al atravesarme el desgraciado se llevó mi brazo consigo, pero yo terminé con su vida a cambio.

- Nunca dejas de usar ese estúpido honor de caballero tuyo. -rode los ojos ante su comentario. Cahara se arrodillo frente a la pequeña y comenzó a acariciar su cabello, la niña estaba avergonzada tanto así que miro a otro lado. - Es una lindura. Sabes, si no supiera que está chica es diferente a ti, diría que es tu hija.

- Aja.

- Oye lamento lo de.... Bueno, lo de tu brazo. Pocos soldados de Rondon se preocupan por los suyos y lo único bueno que tienen son sus mujeres.

- No es simplemente por mi honor de caballero y soldado. -negue ante las palabras de Cahara. Y mire a la pequeña. - La niña es inocente en todo esto y no puedo evitar verme reflejado en sus ojos. Ella es inocente en este podrido mundo asqueroso.

- Entiendo. ¿Por cierto, porque estás aquí?. La última vez que supe de ti fue que encarcelaron hace meses por matar a tu capitán y a tu escuadrón.

Hice una mueca ante esto recordando de manera vivida como mi espada acabo con la vida de mis compañeros y de mi jefe. Se que hice mal y si vuelvo sin Le'garde posiblemente no solo las tropas de Rondon me maten sino que también las familias de los soldados ya muertos.

Se que hice mal y en el fondo de mi pecho, en mi corazón, bombardea la culpa y el resentimiento sin embargo esos bastardos mataron a mi madre y si por mi fuese los reviviría para matarlos otra vez y acabar con sus vidas de una buena vez.

- La iglesia de Alll-Mer me pidió que buscará a un hombre. Llamado Le'garde. Según ellos los crimenes se perdonarán si traigo aquel hombre con vida.

- Vaya. Yo también voy a por ese hombre. -dijo Cahara sorprendido.- Bueno, unos tipos me dijeron que me darían una suma muy grande de dinero a cambio de su cabeza. Siendo sincero no me importa si ese tipo es el mesías del Nuevo Mundo o un futuro dios. Tengo mis responsabilidades en casa una vez que todo esto termine.

Asentí ante esto. Conocía a Celeste debido que una vez la ayude a escapar de la frontera con una amiga, más bien ella quería que su amiga escapase de la frontera e irse a otro reino.

Celeste y yo no somos amigos en si, solo conocidos, y más de una vez hemos compartido cama cediendo nuestra lujuria con placer.

Deje de asistir a su cama cuando me enteré que empezó a salir con el pilló de Cahara, la verdad no sabía bien porque ambos estaban juntos por 1- Celeste estaba preñada con un hijo de Cahara, 2- Celeste estando preñada todavía mantenía relaciones sexuales con otros (por lo que supe son fetiches de ellos) y 3- Que si tienen mala suerte, aunque Alll-Mer no lo quiera, el bebé podría tener y concebir enfermedades al nacer.

En todos estuve feliz por ello. Nunca mate a Cahara ni lo lleve a un juicio debido a que servía más vivo que muerto; además de que sirvió como un espía en otros reinos cuando le pagabamos bien. Es un charlatán pero buena gente. Además; es probable que Cahara este aquí para poder tener el dinero para que él y Celeste escapen de la capital e irse a otro reino para criar a su hijo o hija.

En todo caso espero que ambos puedan lograrlo si es que Cahara seguirá vivo para aquel entonces.

- Bien. -estreche mi mano con el de Cahara y este acepto- Más te vale no hacer nada raro.

- No prometo nada. Además, me gustaría salir de aqui. La forma que me atraparon no fue .... nada bonita .... y tampoco es agradable para él recuerdo. - Cahara se llevó su mano a su parte trasera, por lo que enseguida entendí el punto para rápidamente cambiar de tema.

- Tengo que buscar al principe. No sabemos si más soldados del reino han venido a este lugar con la esperanza de rescatar a Le'garde. -le dije, tome la mano de la niña y Cahara asintió ante esto.

Ambos comenzamos a irnos de la celda. Por al siguiente salida. Y mientras caminabamos no podía dejar de sentir una especie de peligro en mi cuerpo, como si el lugar al que íbamos fuese peligroso para todos.

Espero que no sea así. Aunque con la ayuda de Cahara. Dudo mucho poder hacer algo al respecto con la falta de un brazo.

No solo quiero que la pequeña viva bien, querido que viva una vida llena de salud y que pueda enamorarse de alguien de su edad y casarse. Tengo miedo de que yo falle en algo y ella termine muerta por mi culpa, no quiero que le pase algo por la falta de mi brazo.

Si todo sale bien espero poder regresar a casa y pedir a algún artesano que me haga una prótesis.

Si es que todo sale bien ....

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top