—¿Qué haces amor? —pregunta Mew entrando al living.

—Contando los regalos —responde Gulf—. Humm… Veo que no falta ningún regalo.

—Claro que no amor si has contado los regalos todos los días y lees tu lista hasta durmiendo supongo —se burla Mew yendo a abrazar a su esposo.

—No te burles, sabes que nada puede salir mal —responde Gulf—. Estoy seguro de que falta uno.

—Lo dudo, están todos los regalos y ya están verificados, ¿vamos a comer afuera? —propone Mew besando la mejilla de su esposo.

—Está bien, ya está todo el orden y no hay nada más que esperar que llegue la noche para recibir a tus padres y los míos —responde Gulf sonriendo.

—Qué bella sonrisa, eso es lo que más me enamoró de ti cuando te conocí —manifiesta Mew al besar a su esposo.

—¿Solo eso? —pregunta Gulf al rodear con sus brazos el cuello de su esposo.

—Sabes que no, también me enamoro tu forma de ser, tu alegría, aunque igual la seriedad para trabajar —responde Mew—. Llegó a urgencias por un dolor de estómago y salgo enamorado.

—Jajaja y operado. Si lo recuerdo hace 3 años —se ríe Gulf recordando el día que conoció a Mew—. Voy a la habitación y te veo sujetando tu estómago y luego te hacías el valiente.

—Me dio vergüenza ser tan débil delante de ti —responde Mew cargando a su esposo y sentarse en el living con Gulf a horcajadas.

—Pero claramente tenías mucho dolor si tenías apendicitis —manifiesta Gulf—. Claro que te iba a doler.

—Recuerdo que me apretaste y me dolió como un infierno —dice Mew con un puchero.

—Era mi trabajo y agradece que hiciera la operación, yo ya me iba de mi turno —dice Gulf sonriendo—. Las enfermeras decían que había un chico muy guapo en la habitación #4.

—Te ganó la curiosidad por lo que veo —sonríe Mew dejando un pequeño beso.

—Exacto, y que Khunpol estaba retrasado por su turno —responde Gulf—. Sí que me tocó sacar tu apendicitis jajaja.

—Fuiste mi salvador, desde ese entonces estoy a tus pies, soy un humilde esclavo de tu belleza y encantos —dice Mew abrazando a Gulf.

—Tan cursi, pero sigue —responde Gulf.

—Desde ese día mi corazón te pertenece ¡No! Espera, mi alma y vida es solo tuya, desde aquel día solo quería que fueras mío —dice Mew muy feliz.

—Recuerdo que después de darte el alta siempre recibía regalos y era la envidia de todos —responde Gulf—. Qué manera de fingir dolor solo para ir a verme jajaja.

—Sí, debería haber estudiado teatro —manifiesta Mew pensativo—. Hasta que decidí conquistar tu corazón.

—Y lo lograste, aquí estamos 3 años después siendo esposos y celebrando otra navidad juntos —responde Gulf levantándose—. ¿Vamos a comer?

—¿Comida o postre? —pregunta Mew de forma coqueta.

—Comida y el postre más tarde —responde Gulf ayudando a Mew a ponerse de pie.

—Solo si me das un beso —pide Mew estirando su boca.

—Todos los que pidas mi esposo —responde Gulf para besarlo.

꧁𝐹𝑖𝑛꧂