Helen:

Seguíamos hablando por teléfono con el Alpha Luis.

- En serio, Latinoamérica? - pregunté yo.

Luis: Ya lo sé, chicos, se que es difícil, pero.....

Henry: Nuestros padres están allí!!!

- Qué haremos si alguien nos reconoce? - preguntó Dayana.

Emily: Y yo como llevo cinco siglos desde que no voy a Latinoamérica.

- Yo me encargaré - yo lo dije, al fin y al cabo, es para conseguir bienes para la manada.

Luis: Gracias Helen, alguien más?

Dayana: Ya veo, no hay remedio, Mateo!! Qué opinas de ésto?

Mateo: Bueno hermana, esto será divertido, claro, si Helen está de acuerdo a que vayamos con ella.

- Bueno, regresemos a Perú - dije yo.

Henry: Así se dice hermanita - mi hermano como siempre apoyándome.

Luis: Entonces comenzaré.

Mi celular se abrió como un proyectador hacia la pared.

Luis: Sus identidades serán:

Helen, harás de Hyuna, una surcoreana que se casó con un latinoamericano y se mudaron a su país natal. Allí se te presentará a tu esposo, tienes dos hijas y aquí es donde entran ustedes: Emily y Dayana, ustedes serán las hijas de Helen llamadas Luz y Bella, ambas son mellizas, pero una salió a su madre y la otra al padre, tienen 16 y estudian en ESP en el año 3, clase 2-C.

Mateo y Henry serán Alex y Marcos, ambos son novios de Luz y Bella, ustedes son primos, tienen 17, igual estudian en la ESP en el año 4, clase 3-D.

Luis: Con esa información, me despido.

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Helen:

Se cierra la pantalla de mi celular y el Alpha Luis cuelga.

Emily: Me quedaré con Bella.

Dayana: Vale, yo con Luz.

Henry: Entonces primo?

Mateo: Yo con Alex y tú con Marcos.

- Bueno, entonces empaquemos para que comience la misión.

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Todos empacamos nuestras cosas y bajamos a la sala:

Emily: Bien, nos vamos? - todos asentimos.

- Esperaba eso de ti, mi beta favorita - chocamos nuestras manos.

Dayana: Qué mala eres Helen, sólo hablas bien de Emily y de Koya, pero nunca de mi.

Mateo: Huelo a celos aquí, hermanita.

Henry: Respecto a Koya.....

- Ayyy, se me olvidó - dije yo y los 5 subimos a mi cuarto, sorprendidamente estaba allí.

Un niño de 5 años y medio.... estaba abrazando a Koya como siempre, no sabíamos su nombre, pero le pusimos Koya.

Dayana: Ven conmigo Koya - Dayana lo fue a cargar, pero empezó a llorar.

- Day, déjame cargarlo - yo me incliné y cargué a Koya quien al fin había soltado mi peluche - Así se hace, mi pequeño koala - Con un chasquido de dedos, en mis manos aparecieron galletas y le di una.

Emily: Ahora si nos podemos ir?

Mateo: Amor, acaso estás apurada?

Henry: Creo que cuidar niños le está afectando y mucho.

Emily: Helen, calla a tu hermano antes de que le rompa la cara.

Dayana: Con mi amorcito no te metas!!

- Basta!! - grité y se detuvieron - Maduren de una buena vez, nos llevaremos a Koya y fin!! - Es tan complicado criar a un niño.

Un día Emily y Dayana salieron y lo encontraron en la calle, por eso lo trajeron, nos permitieron obtener su custodia y aquí estamos: 4 lobos cuidando de un humano.

Le pasé a Koya a Henry y le di otra galleta.

Con mi magia puse las maletas de todos en el auto, nos subimos al auto y nos fuimos, bueno, nos vamos hacia Latinoamérica para hacer una nueva misión.

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Lectores, agradezco su paciencia, pero es que yo no la tengo, me he roto la cabeza con esta novela. Es 100 veces peor una novela de lobos que una de magia y lo puedo notar de mi propio libro: Lágrimas de Sangre.

En fin, el próximo capítulo, disfrútenlo.