CAPITULO 61. Malentendido.

                             Olivia.

Después de despedirnos de Rafael, regresamos a la empresa unas horas más, terminamos el trabajo pendiente. Jessica se quedaría a dormir con Namjoon, lo hace más seguido ahora que avanzaron en su relación, me contó todo lo de su primera noche con él.

A diferencia de mi, algo extraño ocurría en mi relación con Jimin, un miedo irracional a perderlo comenzó a crecer en mi interior, después de resistirme tanto, ahora que lo deje entrar en mi vida y en mi corazón, sentía que todo pendía de un hilo. No quería sufrir de nuevo, no quería volver a llorar noches enteras preguntándome qué hice mal.

Esos eran mis pensamientos mientras caminaba a la parada para tomar un autobús. Me senté ahí a esperar.

Un auto que conocía muy bien se estacionó frente a mi, el vidrio de la ventana del auto se bajó un poco dejándome ver a Jimin dentro.

—Sube.— dijo abriendo la puerta del copiloto. Tomé mi mochila y me monte en el auto —No esperaste por mi.

—Crei que pasarías tiempo con Eunji.— dije con la mirada fija en el camino.

—¿Acaso te molesta el tiempo que pasó con ella?— me dio una mirada rápida.

—Dejemoslo así Jimin, estoy cansada, no tengo energía para hablar de esto.— me cruce de brazos.

Agradecí internamente que no dijera nada más, de hecho ninguno de los dos lo hicimos, todo el camino fue en completo silencio.

Llegamos al edificio y después de estacionar el auto, bajamos de este para entrar al edificio. Tomamos el ascensor y marque mi piso, pasaron segundos que me parecieron eternos hasta que las puertas se abrieron y salimos para dar un par de pasos hasta quedar frente a la puerta del departamento. Introduje la contraseña en la pantalla táctil y tuvimos acceso.

Entre y fui directo a mi habitación, deje mi mochila en una silla, me senté en el borde de la cama para quitarme los tenis y dejar a mis pies ser libres.

—¿Es verdad lo que dijo Rafael?— pregunto.

—¿Sobre que?

—Que se besaron.— estaba parado frente a mi cruzado de brazos.

—A los catorce años, ¿si escuchaste eso?, o solo preferiste escuchar lo que te conviene.

—Entonces sí.

—Sí, nos besamos la primera vez que cantamos esa canción que escuchaste, pero fue por la emoción del momento, jamás volvió a pasar. Porque es mi amigo y teníamos claro eso.— Expliqué.

—No me parece que se sienta con la confianza de decir o hacer...

—¿Qué cosas?, Eunji hace cosas peores, siempre está sobre ti abrazandote, dándote besos en la mejilla, tocándote. Rafael sabe mantener límites.— dije con frustración —No voy a permitir que digas algo más sobre mi amigo, sobre todo cuando tienes a Eunji encima de ti todo el tiempo.

—Olivia...

—No Jimin.— me pare y fui directo al baño.

Comencé a desnudarme, necesitaba una ducha fresca para poder relajarme un poco.

Deje caer el agua sobre mi, cerrando los ojos sintiendo todo mi cuerpo mojarse. Lleve las manos a mi cabeza deslizandolas hacia atrás sobre mi cabello.

El tacto de unas manos en mi cintura me hicieron abrir los ojos, girando la cabeza encontrándome con esos ojos que amo tanto.

Dejo besos en mi cuello y llevo sus manos a mi intimidad.

—Jimin.— susurré y sentí como sus dedos pellizcaban ligeramente mi clítoris, lo frotaba y comenzó a despertar mil sensaciones en mi, quería resistirme, pero mi cuerpo respondía a su tacto, a su besos, a él.

Cerré los ojos y dejé que siguiera con su cometido, frotaba deliciosamente mi punto de placer haciéndome recargar la cabeza en su pecho. Me deje llevar sintiendo como se formaba mi orgasmo dentro de mi, hasta que estalló en múltiples sensaciones placenteras, mi boca libero gemidos agudos, al mismo tiempo que mis dientes aprisionaban mis labios.

Me dio la vuelta, tomo mis muslos haciendo que mis pies dejarán de tocar el suelo, su pene se abrió paso dentro de mi y comenzó sus embestidas intensas. Taladraba dentro como le placía, sin ningún tipo de delicadeza, duro y preciso.

Acerco su boca a mis senos saboreandolos con su lengua, tenía claro cuánto le gustaban, cada que tenía la oportunidad los tocaba a su antojo.

Mi espalda se recargaba de la pared, Jimin aceleró enterrándose aún más profundo y segundos después gemidos al unísono, nos liberamos al mismo tiempo, dejando que el orgasmo nos recorriera todo el cuerpo.

Mis pies volvieron a tocar el suelo y el salió de mi, nuestras respiraciones poco a poco se regularizaban.

No dijimos ni una sola palabra, simplemente nos duchamos y salimos del baño cuando terminamos.
Me puse mi pijama, me junte la crema que me mando el médico para mí piel por el ramen caliente derramado sobre mi. Después me metí debajo de las sábanas, quería dormir hasta el día siguiente, para volver a la rutina de todos los días.

Sentí el colchón hundirse a mi lado, sus manos me buscaron y me jalo hacia él. Me dio vuelta para tomar mis labios en un beso suave y lento.

—Te amo.— susurro sobre mis labios —Olvidemos lo que pasó hoy, ¿Sí?— asentí y me refugie en su pecho, aferrándome a él en un cálido abrazo.

——También te amo.— dije en un tono bajo.











Dos semanas después...

Habíamos decidido reunirnos en casa de los chicos, justo ahora nos encontrábamos ayudando a Jin y Nam a cocinar. Jimin había ido con Jungkook a comprar unas cosas que hacían falta, mientras Sonmin se encontraba ayudando a Hobi a organizar la mesa.

Tomé una de las fresas que tenían en el tablón de la cocina, la metí en mi boca y seguí picando los vegetales. Los chicos tenían música de Coldplay de fondo, lo que hacía más ameno el momento.

—¿Yoongi está en casa?— pregunté, no lo había visto desde que llegamos.

—Fue a una consulta con el traumatólogo, ya sabes, lleva terapia para recuperar la completa movilidad del hombro.— contesto Namjoon.

—Es cierto, lo había olvidado.

—Le sirvió demasiado la operación, ha estado tranquilo, sin tanto dolor.— comento Jin.

—Me da gusto saberlo.

—Aunque le da pereza ir a las consultas, ya sabes cómo es.— dijo Taehyung apareciendo en la cocina —¿Ya casi está lista la comida?, muero de hambre.

—Si, deja nos apresuramos.— dijo Jessica —Chicos metanle velocidad que Taehyung ya tiene hambre.— nótese el sarcasmo.

—Gracias Jess, que eficiente eres.— Tae dejo salir una pequeña risita.

—Siempre soy eficiente en todooooo.— dijo mi mejor amiga.

—Uy, pues no sé, eso solo lo sabe Namjoon hyung.— sus labios se curvaron en una sonrisa pícara mientras se metía una fresa a la boca —¿Qué?, hyung no me mires así, son algo ruidosos.

—¿Envidia?, ¿no tienes quien te pele la banana?.— Jessica casi hace que Taehyung se atragantara con la fresa, empezó a toser y al mismo tiempo se reía. Los dos mayores se echaron a reír.

—Te jodió Jessi.— Jin no paraba de reírse.

—Me humillo.— Taehyung se llevó las manos al costado izquierdo de su pecho fingiendo estar herido. Lo que provocó la risa de todos en la cocina —¿Tienen alguna amiga por ahí?

—Tengo primas, muy hermosas.— dijo Jessica —Pero están en México.— volvió a reír.

—Confirmo, son bellísimas.— apoye el comentario de mi mejor amiga.

—¿Tienes fotos?— pregunto Taehyung.

—¿Las vas a mandar a traer desde México o que?— dijo Seokjin divertido.

—Eso mismo pensé.— dije riéndome.

—Quiza más tarde te enseñe fotos de ellas.— dijo Jess.

—Abran paso.— llegó el maknae, entro con varias bolsas y las dejo sobre el tablón de la cocina.

Estaba por preguntarle por Jimin, cuando escuché dos risas aproximarse, una que me encanta y conocía muy bien, la otra la detestaba.

—Llegamos.— Jimin entro a la cocina acompañado de Eunji, ella no le soltaba la mano. La mirada de ella fue directa a mi, parecía querer que no me perdiera el hecho de ese contacto entre ellos.

—Hola a todos.— saludo con una cínica sonrisa —No sabía que se reunían así. Pero, Jimin me invitó espero no incomodar a nadie.

Jessica me miró y las dos bajamos la mirada completamente incómodas, seguimos en lo que estábamos, el silencio reino en el lugar. Los chicos como siempre la saludaron, lo entendía, ellos jamás eran descortés con nadie.

Jimin llegó a mi lado y dejo un beso en mis labios, después beso mi mejilla.

—Te ves preciosa.— susurro en mi oído —Te amo hermosa.— eso me hizo sentir un poco más segura, que lo hiciera delante de ella me tranquilizaba.

Levanté la mirada y la vi observandonos, desvío la mirada en completa seriedad.

—¿Estás enojada?— pregunto Jimin.

—No me dijiste que la traerías.— le dije en tono bajo para que solo él pudiera escucharme, mientras seguía cocinando —Pensé que hoy sería el único día que ella no estaría presente.

—Ayer ella vio algunos mensajes de los chicos...— voltee a mirarlo.

Deje lo que estaba haciendo y le pedí a Jessica que lo terminará por mi. Salí con Jimin de la cocina para dirigirnos a su habitación, no sin antes ganarme una mirada retadora de su "mejor amiga".

—¿Cómo pudo verlos?— fruncí el entrecejo.

—Ella a veces toma mi teléfono, saca algunas selfies y ve mis mensajes...

—Es muy extraño porque pensé por un momento que ella era millonaria y podía costearse un teléfono que tenga una cámara de calidad.— cuestioné.

—Es que le gusta la cámara de mi teléfono.— trato de justificar.

—Puede comprarse uno igual, estoy segura que el dinero no es un problema para ella.

—Lo sé, pero no me quita nada prestarselo.

—¿Por qué razón revisa tus mensajes?— cruce los brazos —Soy tu novia y ella tiene más acceso a tu teléfono que yo.— reclamé —Y no te estoy diciendo que quiero tenerlo, pero si yo no hago esas cosas, ¿por qué ella si?

—Por favor no hagas una escena de celos por esto.— eso sí me hizo enojar.

—No voy a hacerte una escena, no te preocupes. No me quedaré.— me dirigí a la puerta y él me tomo de la cintura desde atrás.

—Jimin, basta.

—No te irás.— me cargó sobre su hombro y me dejó caer en la cama —Por favor no me hagas esto.

—¿Qué?

—No me hagas elegir entre las dos.— dijo conflictuado —Las dos son importantes para mí, tú eres mi novia y ella mi mejor amiga, no tiene porque haber conflicto.

¿Estaba siendo muy dura con él?, no lo sé. Pero se que no puedo hacerlo elegir de esa manera. Aunque no me guste ella llegó primero a su vida y no puedo exigirle que la haga a un lado, después de las veces que ella estuve presente para él en momentos cruciales de su vida.

Me sentí un tanto egoísta.

—Tienes razón, lo siento.— dije —Pero, debiste decirme que ella vendría.

—Lo siento.

—No quiero que ella esté tomando tu teléfono, eso no me agrada.— asintió —Tampoco quiero demasiado contacto físico entre ustedes, es decir, está bien que a veces se den abrazos y así, porque yo también abrazo a mis amigos, pero tiene que existir un límite.— volvió a asentir —No quiero que me hagas aún lado para pasar más tiempo con ella, como las últimas semanas.

—Lo prometo.— levanto la mano —¿Te quedarás?

—Esta bien.— sonreí, no podía enojarme tanto tiempo con él, supongo que así es cuando se ama a una persona —Vamos con los chicos.

Se quitó de encima de mi para dejar que me levantará de la cama, salimos de la habitación y regresamos con los demás.

Todo en la mesa estaba servido, llegamos justo a tiempo tomando nuestros lugares, Eunji rápidamente se sentó a lado de Jimin y yo ocupe el otro lugar a su lado.

Comenzamos a degustar de los alimentos y hasta ahora es que note la presencia de Yoongi, debió llegar cuando me encontraba hablando con Jimin en su habitación.

Comimos y diversas conversaciones fluyeron como ya era costumbre en nuestro grupo cada que teníamos la oportunidad de estar todos juntos. Sonmin se veía feliz a lado del maknae y Jessica desbordaba amor a lado de Namjoon.

Le di a probar a mi novio algunas cosas que cocine yo misma y pareció gustarle, todo fluía bien apesar de la presencia de su mejor amiga. En diversas ocasiones besaba mi mejilla y mis labios. Claro que note las incontables veces que su amiga trataba de llamar su atención, para que dejara de darmela a mi. Comenzaron a platicar de cosas que yo no entendía sobre la familia de Jimin y eso pareció fascinarle, era un punto en el que ella llevaba la delantera, yo no tenía idea de nada acerca de su familia.

No mentiré, en ese aspecto si sentí celos de ella, la incomodidad me invadió así que me levanté de la mesa excusandome con ir al baño.

Entre a la casa y si fui al sanitario, abrí la llave del lavamanos y moje mi cara, me mire al espejo directamente.

—Tranquila, no puedes querer toda su atención para ti.— me dije a mí misma —¿Qué más da si no conoces a su familia?, ¿Qué más da si no sabes nada de ellos?— suspiré —Si la relación avanza, seguro que algún día los conocerás.

<¿Y si la relación nunca avanza?,
Él puede dejarte.>

Cerré los ojos apretando los párpados y negué repetidas ocasiones, no podía dejar que esos pensamientos me hicieran sentir insegura.

—Tranquila Olivia.— me force a sonreír para mí misma —Hace un rato en su habitación volvió a decir que te ama, no tienes que temer.

Trague saliva con dificultad, sabía que estás inseguridades venían por todo lo vivido con mi madre y hermano. Por el abandono de mi padre.

No podía dejar que mi pasado interviniera en mi presente.

Salí del baño pero no quería regresar tan pronto con todos los demás. Así que me escabulli a la cocina, para mí sorpresa Yoongi estaba hurtando un par de pastelillos de Jin.

Una risa nasal lo abandono al verse descubierto por mi.

—No le digas a Jin.— me pidió aún queriendo reírse.

—No le diré si me das uno.— me senté junto a él en los bancos altos de la cocina.

—Me parece justo, ten.— extendió uno y lo tome —No parecías cómoda allá afuera.— si alguien podía leerme como un libro abierto aparte de Jessica, ese era Yoongi, fingí una sonrisa para después darle un mordisco al pastelillo —Ella no te agrada.— negué —A mi tampoco.

—¿Por qué aceptaste la colaboración?

—Todos la aceptaron por petición de Jimin, desde hace mucho nos dijo que su amiga quería colaborar con nosotros. Yo solo les dije que no me molestaba trabajar con ella, pero que no esperarán que socializara, es por eso que soy con él que menos convive, no me gusta ser hipócrita.— explico —No quieres decir que los demás lo sean, pero a ellos si les agrada más que a mí, así que cada quien elije como llevar las cosas.

—Entiendo.— asentí —Trabajo es trabajo.

—No tienes que soportarla solo porque es amiga de Jimin.— dijo dándole una mordida al pastelillo —Eres su novia, debería de tener límites muy marcados.

—No lo sé, no quiero ser egoísta al respecto.

—Pedir que te de tu lugar no es ser egoísta.— respondió mirándome a los ojos.

—¿Cómo te va en las terapias con lo de tu hombro?— Yoongi sonrió al darse cuenta como cambie el tema de conversación, aún así no dijo nada al respecto.

—Bien, mejor que antes, a veces siento una pequeña incomodidad, pero el doctor dijo que con el tiempo desaparecerá, así que tengo que seguir llegando a chequeos.— contesto a mi pregunta.

—Me da gusto saber que tu salud ha mejorado.

—Gracias.— sonrió. Me observó por varios segundos sin decir nada.

—¿Por qué me miras así?

—Eres tan bonita, no dejes que te hagan sentir insegura.— sonreí ante sus palabras.

Conversamos por un buen rato, todo volvía a fluir con él. Eso hacía feliz a mi corazón, Yoongi era una de esas personas que jamás quería perder.

Después de un rato decidimos volver con los demás y lo que encontré no fue tan agradable. Eunji y Jimin bailaban una canción lenta, ella se recostaba en su pecho y él tenía las manos en su cintura. Sin duda se veían como una pareja.

Aún costado estaban en la misma posición Namjoon con Jessica y Jungkook con Sonmin.

Yoongi tomo mi mano e imitó la posición de las otras parejas, no puse resistencia, así que comenzamos a movernos lento al ritmo de la melodía.

Pude ver a Jimin teniendo la intención de ir a dónde me encontraba con Yoongi, pero Eunji lo impidió aferrándose a él.

Al terminar de bailar volví a la mesa a refrescarme la garganta con un poco de agua y así me di la vuelta con el vaso en mano. Choque con Eunji, quien estaba extrañamente demasiado cerca de mi y un poco del agua se derramó.

—¿Por qué me haces esto Olivia?— comenzó a alzar la voz, llamando la atención de todos —No te hice nada para que actúes así conmigo.

—¿De qué hablas?, fue un accidente no te vi.— contesté frunciendo el entrecejo.

—¿Qué ocurre?— Jimin se acercó.

—Tu novia, que al parecer le dio tantos celos vernos bailando que ahora me tira agua encima a propósito.— se victimizo.

—Eso no fue lo que pasó, yo...

—Eso fue lo que pasó, me tiraste el agua a propósito, no es mi culpa que seas tan insegura.— siguió diciendo.

—Olivia jamás haría algo así, a menos que tú empezarás.— Jessica intervino en el asunto —¿Tienes algún problema?

—Esto no es contigo, no te metas.— Eunji le contesto mal a Jessica.

—Voy a meterme donde me de la gana, sobre todo si tú te estás metiendo con mi amiga.— Jessica se acercó a la cantante de manera imponente.

—Jessica, basta. No te atrevas a hacerle daño a Eunji.— Jimin intervino.

—Jess, amor ven.— Namjoon tomo la mano de mi amiga.

—Si ella deja de meterse con Olivia no tendre motivos.— dijo con evidente molestia —Pero ya quedo claro quien es más importante para ti.

—Dile mejor a tu amiguita que deje de verme como una amenaza, quiere que mi amistad con Jimin termine.— dijo la estúpida.

—Jamas he querido eso, ¿Qué ocurre contigo?

—¿Puedes llevarme a casa?— ella se volteo a mirar a Jimin y este asintió.

No me dijo ni una sola palabra, salió de la casa con ella. Eso me hizo sentir tan insignificante que unas inmensas ganas de llorar me invadieron.

Después de eso decidimos irnos, Yoongi y Namjoon nos hicieron el favor de llevarnos. Una vez que estuvimos frente al edificio me despedí de ellos y baje rápidamente, subimos en el ascensor y cuando pudimos entrar al departamento fui directo a mi habitación.

Me deje caer en la cama sintiéndome mal por lo ocurrido.

—Jimin está comportándose como un idiota.— dijo Jess parada en el umbral de la puerta —Es que me jode mucho que estaba chingando que quería que le dieras el "sí" y ahora actúa de esa manera, esto me jode mucho.

—Todo fue un malentendido Jess, Eunji creyó que lo hice a propósito, pero no fue así, solo fue un malentendido, lo hablaré con ellos después.— contesté.

Quería creer que de eso se trataba, un simple malentendido.
















Una fotito de Olivia, ya tenía rato que no les dejaba una :)

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