Capítulo 3

Han pasado 3 semanas desde que John se ha ido al infierno, en el mundo de los humanos, hay algunos carteles de "Se Busca" con la foto de John, su madre se ha puesto más preocupada por saber, aunque sea una pista de su hijo, mientras que su padre trata de esperar alguna llamada de alguien que lo haya visto, entonces se escucha el teléfono de su padre y era del oficial de policía.

Padre de John: ¿Hola?

Oficial: Hola Señor Vázquez, encontramos algo de John, en un momento llego a su casa para que lo vea.

Cinco minutos después llega el oficial y le muestra que era una cajita.

Padre de John: Es el regalo que mi hijo quiso dar a su novia Fernanda.

Oficial: Lo curioso es que lo encontré en un rincón cerca del restaurante donde ocurrió lo del video.

Madre de John: ¿Me dice que mi hijo fue secuestrado?

Oficial: No sacaré conclusiones, pero es lo más probable.

Los padres se ponen a preocuparse más, sobre todo la madre que comenzó a llorar de desesperación, el padre solo ve la caja.

Mientras que, en el infierno John continúa trabajando limpiando la oficina, al menos le han dado una pequeña habitación donde pudo dormir en una cama, aunque trata de alejarse un poco de Loona, porque aún le preocupa que intente morderla después de lo del sándwich, en ocasiones viene de visita Stolas con Octavia, y John oculta su cara con una caja para que no vea su identidad su amiga Octavia, aunque con el paso del tiempo se han vuelto más cercanos, mientras que Loona los ve con enojo, trata de hablar con John, pero como se aparta nunca tiene oportunidad.

Ahora John anda hablando con su amiga Octavia en el área de descanso riendo poco.

Octavia (riendo): Eres buena persona John, hace mucho que no me divertía con alguien.

John: A mi igual, eres una buena amiga y eso que te ves linda cuando sonríes.

Octavia se sonroja al escuchar lo último, John reacciona por lo que acaba de decir.

John (sonrojado): Bueno yo...me refería que...

Octavia: No, está bien entiendo lo que me quieres decir, bueno cambiando de tema, me preguntaba sí... ¿quisieras venir conmigo a mi casa?

John la escucha y sonríe un poco, aunque no lo ve Octavia.

John: Claro a cabo ya terminé por hoy.

Octavia: Genial, déjame decirle a mi padre.

John: Claro.

Octavia se va en busca de su padre, mientras que John comienza a esperarla, hasta que llega Loona.

Loona: John.

John trata de apartarse, pero Loona lo detiene, John se pone asustado.

John (pensando): Ahora si es mi fin.

Loona: John...yo...quiero decirte que...

En eso llega Octavia y Stolas.

Stolas: Hola John, Octavia me contó de que irías con nosotros, por supuesto que puedes venir, vamos.

John: Claro.

John se va, dejando a Loona, ahí llega Blitzo.

Blitzo: Bueno, al menos estará distraído Stolas, necesito descansar. – Ve a Loona – Loona, ¿Qué ocurre?

Loona (enojada): NADA, ME VOY A DORMIR.

Loona se va golpeando la mesa, eso dejó asustado a Blitzo. Al llegar Loona al sofá donde siempre duerme John, ella se acuesta con algunas lágrimas.

Loona: John, eres un idiota, pero aun así te quiero.

Mientras que en la casa de Stolas, John se sorprende al verla.

John (pensando): Woow, es enorme, ni en mi cerrada tienen casas tan grandes.

Al llegar dentro de la casa, Octavia lleva a John hacia su habitación, al momento de llegar, John se siente algo nervioso ya que nunca había ido a la habitación de una chica que no sea de su familia.

Octavia: Siéntete como en tu casa.

John: Gra...gracias.

Octavia y John estuvieron escuchando algo de música un poco, hasta John invita a bailar a Octavia, jugando y bailando hasta que ambos se caen por accidente en la cama, ambos se ven, pero a la vez se ríen, aunque al verse más cerca ambos se sonrojaron.

Octavia: John...

John: Octavia...

En eso escuchan pasos y abre la puerta Stolas, mientras ve a los dos tranquilos sentados en la cama.

Stolas: Hola chicos, preguntaba si querían algún bocadillo.

Octavia: No, estamos bien papá.

John asiente la cabeza.

Stolas: Oh bueno, los dejo solos.

Stolas cierra la puerta y se va, mientras que ellos comenzaron a respirar tranquilamente, pero al verse se rieron un poco.

John: Imagínate si tu padre nos atrapara en esa posición, me hubiera matado.

Octavia (riendo): Sí, pero bueno al menos todo está bien.

En eso John siente mucha confianza con Octavia.

John: Octavia...

Octavia: ¿Sí?

John: Yo...no he sido totalmente honesto contigo.

Octavia: ¿Qué?

John: Verás, yo no uso esta caja porque el público vomitaría, lo uso porque no soy como ustedes.

Octavia: John, no me importa cómo te veas, eres tú y eso me importa, eres la primera persona en que le confío totalmente.

John se sonroja al escuchar eso.

Octavia: ¿Puedes mostrarlo?

John: ¿Qué?

Octavia: Tu cara, no me importa que seas, así que puedes mostrarme que eres realmente.

John: Yo...

Octavia se acerca poco a poco a él y trata de quitarle la caja, aunque al principio no quiso, se dejó por Octavia, entonces al quitárselo Octavia se sorprende al ver el verdadero rostro de John sabiendo que era realmente un humano.

Octavia: Tú eres...un humano.

John: Sí...bueno entiendo que no quieras verme, así que mejor me voy.

John trata de ponerse la caja de nuevo, pero Octavia lo detiene.

Octavia: Te dije que no me importa que eres, me importa quién eres realmente.

John (sonrojado): Octavia...

Octavia se acerca más y le da un beso en los labios, eso lo deja sorprendido por la acción de Octavia, pero se sintió tan bien que le correspondió y así estuvieron por un rato, hasta que se detienen por aire.

Octavia: John, te amo.

John: Yo...

En eso aparece Stolas sin previo aviso.

Stolas: Chicos, quise preguntar si...

Stolas vio a John sin su caja, y se quedó en shock.

Stolas: John, eres un humano.

John: Yo...bueno sí, pero es que tiene una explicación, pues es que...

Stolas: John, largo de aquí.

John lo escucha y decide irse con su caja en la cabeza, Octavia trata de detenerlo, pero Stolas no la deja y John se va de la casa caminando hacia la oficina.

Al llegar a la oficina, John lanza su caja enojado, y se sienta en el área de descanso.

John (enojado): MALDICIÓN, ¿Por qué soy tan idiota? Le revelé mi secreto a Octavia.

John se lamentaba hasta que ve a Loona dormida en el sofá con unas botellas de cerveza, en eso decide llevarla a la pequeña habitación que tiene y la pone en la cama, le da su cobija para que no sufriera frío y cuando se iba a ir, Loona lo tomó del brazo y lo arrastra hacia el sofá abrazándolo y John se quedó pegado su cara en sus pechos, eso lo puso tan sonrojado que no sabía qué hacer.

Loona (durmiendo): John...te quiero.

John se quedó sorprendido por lo que dijo Loona.

John (pensando): ¿Qué rayos?, Loona tú... ¿me amas?, no puedo decir que me incomoda porque la verdad se siente bien, pero espera no, está borracha no voy a aprovecharme de eso.

En eso John logra liberarse y la deja en la habitación, mientras que él decide dormirse en el sofá algo sonrojado, ya que dos chicas se le confesaron en el mismo día.

FIN del capítulo.

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