Cap 39. Sentimientos a flor de piel.

Narra ____

Después de reaccionar ante mi grandísima estupidez, y ser salvada por Bloody. Tenía literalmente a todas las chicas encima revisando cada centímetro de mi ser.

-Chicas de verdad, estoy bien, no me paso nada sólo fue el susto- traté de que se tranquilizaran, cosa que logre a medias-.

-Me alegro de que te encuentres bien ____, en serio me preocupaste- dijo mi mejor amiga al borde de las lágrimas-.

-Mamá....-susurró mi pequeña de ojos esmeralda mientras se acercaba a abrazarme, cosa que correspondí de inmediato-.

-Tranquila mi niña, ya pasó...como dije, estoy en perfectas condiciones-.

Miré a mi pequeña con una suave sonrisa, cosa que ella me devolvió de igual manera pero con sus ojos desbordando lágrimas como si no hubiese un mañana, me conmovió su tierna reacción.

-Me alegra que estés bien ____ a todos nos diste un enorme susto- suspiró la chica de mechón fucsia y sonrisa cosida-.

-Si...-la siguió la rubia de orbes negros- aun que no entiendo como es que no saliste de inmediato, ¿a caso no sabes nadar?-.

Me encongí de hombros asintiendo  mientras limpiaba las últimas lágrimas que escurrian por los ojos de Sally para distraer el rojo de mis mejillas.

-Pero...incluso de ser así, almenos te hubieras mantenido unos momentos en la superficie ¿no?- esta vez la chica con máscara blanca tomo lugar en la conversación-.

-Concuerdo con Jane- afirmó el chico waffles- en cambió te undiste hasta el  fondo como si fueras tan pesada como una roca-.

-De hecho cuando ayude a Painter a sacarte, estabas realmente pesada...-dudó por unos segundos Masky-.

-En realidad...yo tampoco tengo idea de por qué pesé tanto, ¿no se suponía que en el agua todo se hace más liviano?- dije acariciando el cabello de Sally-.

-Después investigaré eso cariño, pero es hora de comer, será mejor que te levantes y todos los demás vengan a merendar, sobre todo tú ____, no quiero te pase nada malo- mi novio como siempre preocupándose por mi-.

Narrador Omnisciente

Cuando la castaña comienza a levantarse para ir a la gran manta, su equilibrio la traicionó haciendo que vuelva de trasero al suelo.

Ante esto se quejó debido al dolor, unas risas por parte de las chicas y los proxys's no tardaron en presentarse.

-Oigan, eso no ayuda en nada saben- dijo bufando con clara irritación-.

-Si, lo sentimos querida- dijo esta vez Judge calmando su risa-.

La rubia le estira la mano para ayudarla a estar de pie, cuando ____ vuelve a estar derecha, con obvia dificultad, vuelve a perder el equilibrio, pero antes de caer esta vez Masky y Hoodie la sostienen, algo que se les hizo un poco difícil.

-Joder, pero que está pasando contigo ____- mencionó el de máscara blanca- si que pesas...¿que estás comiendo?-.

-¿Me estas diciendo gorda?- dijo la castaña con molestia-.

-N-no es eso señorita, solo que de verdad pesa más que antes- reafirmó el de pasamontañas-.

-¡Les dije que ni yo lo sé!-.

-Eeeh...chicos, creo que ya sé cuál es el problema...-dijo Tobías apuntando a la espalda de la chica-.

Todos los presentes en ese momentos se pusieron a un lado del antes mencionado pudiendo apreciar a lo que se refería, varios estaban confundidos pero nadie articulaba palabra alguna.

-Que...que sucede- la muchacha algo exasperada por la situación intenta ver su espalda-.

-Eh, ____...arrodillate quieres- escuchó decir a su novio-.

No le quedó más remedio que obedecer, y como si tuviera imanes en sus rodillas estas se golpearon de bruces contra el suelo a penas Masky y Hoodie la soltaron, no hizo más que gruñir harta de todo esto.

-Y bien, ¿me diran que carajos tiene mi espalda que no dejan de mirarla?-.

-Tus alas cariño...- dijo sin más el ender menor-.

La chica hizo un gran esfuerzo por ver sus pequeñas alas que se econtraban muy caídas, es como si la fuerza de gravedad las afectara de sobremanera.

Esta intento regresarlas a su lugar habitual pero le fue imposible, estaban muy pesadas, fue ahí cuando un click hizo en su cerebro, ahora todo tenía sentido.

-El agua -dijo sin más con la mirada perdida, aun procesando la información-.

Todos los presentes comprendieron ahí que, el agua en las alas de ____ fueron la causante de su casi muerte prematura.

-¿Y solo ahora te das cuenta enana? -comento Jeff haciendo notar su presencia-.

-Claro que si mapache idiota, te dije que no sabía nadar y además, si lo hubiera sabido antes ¿crees que almenos me habría acercado a la orilla del lago?- el sarcasmo en sus palabras era muy notorio-.

-De acuerdo, si, tienes razón, pero...- cuestionó dudoso- ¿que se supone que haremos con tu problemita?-.

Nadie más hablo, ninguno sabía que hacer, aun que la respuesta era muy clara y obvia, solo uno de ellos se dio cuenta de la solución.

-Serán idiotas -dijo en un susurro que sólo él escuchó- obviamente secarlas-.

El pintor habia dicho eso con tanta obviedad que ni siquiera le quito la vista a su nuevo dibujo, que no era nada más ni nada menos que la castaña, pero en su posición actual, de rodillas con ambas manos en sus muslos y con la mirada en sus mojadas y caídas alas.

Todos se miraron entre sí sintiendose los más estúpidos del mundo ante el comentario de Painter. Más sólo obedecieron y ahora Jeff fue el primero en hacer un movimiento, solo atinó a estrujar las alas de la menor.

-Demonios -se quejó mirando sus manos-.

-O-oye, eso dolió -dijo con una notable mueca de dolor y horror al ver a Jeff-.

Las manos del susodicho estaban cubiertas por blancas plumas, al parecer fue un poco brusco, no tardó en mirar a la chica y disculparse.

-Tranquilo Jeff, solo querías ayudar -le dedicó una suave sonrisa-.

-Mejor hazlo con esto sonrisas -el chico tics le extendió una toalla a este-.

Jeff no hizo más que tomar la toalla y junto a Toby dar suaves toques con estas en las alas de ____, tratando de que menos plumas posibles se salieran de su lugar.

Luego de un rato las alas de la chica no estaban tan caídas como antes y ahora podía mantenerse de pie, claro con un poco de ayuda ya que aun seguían con agua.

Con ayuda de ambos la muchacha pudo ir a la manta donde todos la estaban esperando para comer. Esta misma fue donde habia dejado la canasta con la comida.

La abrió y comenzó a repartir los sándwiches que ella misma había preparado personalmente para cada uno de los integrantes del grupo. Cada sándwich fue hecho con los ingredientes favoritos de cada creepy.

A penas la chica decía el nombre del creepypasta le entregaba su merienda junto a un jugo de manzana, todos le agradecían de sobre manera a la oji morada que esta misma modestamente respondía, "no es nada".

Pero mientras todos comían y disfrutaban del día hablando con sus compañeros en la gran manta. La castaña sabía que no estaban todos, faltaba un chico en particular que desde que la salvó no se ah movido de su lugar.

A pesar de que ____ sabía como era el pintor de antisocial, este era un día en los que todos debían estar juntos disfrutando de sus mini vacaciones.

Miró el último sándwich que tenía reposando en sus manos, obviamente era para él, con ayuda del titiritero pudo saber cuales eran sus ingrediente preferidos, además de eso, también supo que ellos dos eran como "mejores amigos", cosa que hizo que varias dudas se resolvieran para ella.

Sin pensarlo mucho con algo de dificultad tomo el sándwich de Bloody  y el suyo junto a un vaso de jugo de manzana. Camino tambaleante hacia el pintor, ya frente a él, este ni siquiera la miró.

La muchacha rodó los ojos con una suave sonrisa en sus labios y con cuidado de no botar nada se sentó al lado del peli negro, éste rápidamente cambia de página su block dejando dudosa a la chica debido a su repentino actuar.

No le tomo mucho importancia y le extendió su correspondiente merienda, el de ojos azules miró directamente a los ojos morados de la chica, quizás se vuelva una costumbre para él mirarla de esa manera.

No dijo nada, aceptó el sándwich y el jugo, la chica sonrió y posteriormente ambos de dispusieron a comer en completo silencio, pero no uno incómodo, sólo un silencio normal en el que ambas partes gozaban de la compañía mutua, claro sin mencionarselo al contrario.

Al terminar el chico de un solo trago se tomó el jugo dejando la mitad de este, su objetivo era dajarle algo de beber a la chica, lo pensó por un momento, se estaba arrepintiendo, pero sin pensarlo dos veces le extendió el vaso a la castaña sin decir nada.

-Gracias... -dijo la chica sin más mientras tomaba lo que quedaba del líquido dulce-.

-Estuvo...delicioso, gracias por el sándwich- respondió de vuelta el pintor-.

-De nada, quería hacer algo especial para cada uno de ustedes-.

-¿Por qué lo haces?-.

-¿Hacer qué?- cuestionó de vuelta ladeando la cabeza confundida-.

-Esto...lo de los sándwiches, el atendernos muy amablemente y todo lo demás, ¿por qué lo haces?, se que tienes tus razones, todos las tienen, nadie es así de amable porque sí- esta vez su voz de endureció al decir lo último-.

-Bueno...pues...-.

Su vista se dirigió a todo el grupo de creepypastas y endermans que se encontraban aún hablando y riendo bajo el gran sauce, se quedó unos minutos en silencio tratando de encontrar las palabras correctas.

-Desde que llegue a la casa de los enders, me han tratado como jamás lo han hecho en mi corta vida...y después de la llegada de los demás eh intentado en llevarme bien con la gran mayoría, cosa que eh logrado -suelta una suave risa- aun que algunos sean muy testarudos-.

Esta vez mira al chico que esta a su lado, este no hace más que bufar y poner los ojos en blanco para mirar hacia otro lado.

-Y bueno...jamás tuve una familia...pero creo que aquí con todos, al fin la eh encontrado...por eso soy así de atenta con todos y cada uno de ustedes, aun que algunos sean unos idiotas, les tengo un lindo aprecio...-.

El chico de blanca tes retomó su mirada a la de la chica, que esta aún seguía mirando a los demás, pero sus ojos reflejaban nostalgia, ¿por qué?, es la pregunta que rondaba por la mente del muchacho.

-Se que sonará cursi y algo extraño debido al poco tiempo que llevo conociendolos pero...los considero mi familia...-soltó sin más para mirar sus pies- y eso te incluye Bloody-.

Sus ojos viajaron a los azules de Painter, se perdieron en un mar de emociones, el pintor por una extraña razon sintió como algo dentro de él se prendió, aquellos sentimientos que había sepultado otra vez florecian.

-Se que no te agrado -retomó la palabra- pero tu a mi sí, y si necesitas ayuda o algun consejo, lo que sea, puedes decirme, con toda la confianza del mundo-.

El pintor no articuló palabra alguna, sólo sonrió de la manera más real y sincera que pudo, cosa que para la castaña fue más que suficiente para hacerle saber que si entendió el mensaje.

-El sol...-dijo el chico de repente-.

-El sol, ¿que? -cuestionó ella curiosa-.

-Estira tus alas hacia el sol, así se secarán más rápido -respondió mirando detrás de ella-.

Imitó la acción del mayor notando como el sol bajo un poco más, se asomaba entre medio de los árboles, ____ comprendió y gateo un poco quedando a unos metros más allá de la posición del pintor.

Ésta aun de rodillas se abrazó a si misma suspirando y relajándose, volteó la mirada a su derecha y comenzó a estirar sus alas con lentitud.

Estas se iban estirando y agrandando al pasar los segundos, cada vez se hacían más grandes, cuando pudo extenderlas a su máximo, alcanzaban un tamaño fijo de 2.10 metros de longitud.

Más sólo pudo estirarlas pero no desplegarlas debido al peso. Durante todo ese proceso unos ojos azules no tardaron en viajar a la hermosa escena que sus ojos tenían el privilegio de presenciar.

Debido a la posición en la que estaba la chica, junto a sus enormes y bellas alas, hacían un hermoso contraste con los rayos del cálido sol. Literalmente parecía un ángel. Ángel que no tardó en ser vista por todos.

Quienes estaban maravillados con la belleza de la chica. Pero alguien más se adelantó a los suceso y ya había plasmado el momento en una hoja, Bloody Painter no podía creer a la cautivadora criatura que tenía ante sus ojos. Podría mirarla para siempre y aun así no cansarse jamás.

Durante todo ese lapso de tiempo la chica desde el comienzo notó como todos la miraban muy fijamente por largos minutos, sobre todo por la quemante mirada de alguien. No le gustaba estar metida en esas situaciones debido a su horrible autoestima.

Sin más decidió ponerse de pie, sacudir sus piernas y girar para comenzar a caminar, debido a esto los demas volvieron a hacer lo que estaban haciendo antes de embobarse ante la chica.

La castaña volvio a encojer sus alas mientras caminaba las iba revisando, pluma por pluma para asegurarse de que estuvieran completamente secas. Lo estaban, pero aun había algo de húmedad.

Al instante tuvo una pequeña idea, que ayudaría a que sus alas se secaran al 100% y además la despejaría de tantos sucesos ocurridos durante el transcurso de ese extraño pero agradable día.

Volvió a subir a aquella gran roca en la cual casi pierde la vida. Ya arriba fue a la orilla de esta, su posición no paso desapercibida por nadie, de inmediato varios de los presentes que se encontraban abajo corrieron a la orilla del lago al ver donde se encontraba la chica en ese momento.

-¡Que mierda crees que haces mocosa! -Jeff fue el primero en gritar-.

-¡____, cariño, baja inmediatamente de ahí!-lo siguió un Slenderman realmente preocupado-.

-¡Amiga!, ¡si no bajas en este preciso instante te juro por tu santa madre que subo ahí y te bajo yo pero de los pelos!- gritó su mejor amiga con seriedad-.

Si no fuera porque ____ conoce muy bien a su amiga, sabría que todo por muy gracioso que lo hiciera parecer, hablaba muy en serio.

La joven soltó una risa divertida confundiendo a todos, puso su dedo índice en la comisura de sus labios haciendo la señal de silencio.

Posteriormente puso sus pies en el límite de la roca, miró abajo y luego a sus amigos, sonrió relajada, de verdad quería a su nueva familia. Con todos sus defectos y virtudes.

En menos de un segundos desplegó completamente sus alas, subiéndolas lentamente hasta que cada punta chocara entre si sobre su cabeza, luego estiró sus brazos a cada lado cerrando sus ojos y finalmente dejándose caer.

Antes de tocar el agua abrió los ojos para que con un giro en el aire evitara tocar el agua y asi comenzar su vuelo; con las puntas de sus dedos tocó la ahora fría agua del lago.

Con un poco más de impulso se elevó hasta que sus pies casi tocaran el agua, miró al frente donde estaba más cerca de su familia y miró directamente a su novio.

-Nos vemos en casa...-dijo sin más con una sonrisa relajada-.

Y con un enorme aleteo de sus poderosas alas se elevó hasta la nubes dejando en la tierra a un ender cada vez más enamorado de la castaña por su espíritu libre y hermosa sonrisa.

[...]

Han pasado unos 15 minutos desde que la chica había estado volando a su hogar, podía notar como solo le quedaban unos escasos momentos hasta que el sol dejara de proporcionar su luz.

Dio un suspiro de satisfacción al ver como el techo de la ahora mansión se asomaba entre medio de las copas de los pinos del bosque, y descendió con algo de rapidez.

Al tener los pies en el suelo comenzó a caminar a la entrada ya que había bajado pero a un costado de la mansión, como no escucho ruidos de peleas idiotas intuyó que aún no regresaban, quizás debió quedarse a ayudar para empacar las cosas.

Con una mueca en la cara ya había dado la vuelta a su hogar, pero grande fue su sorpresa al notar que no estaba sola, alguien estaba recargado en uno de los pilares de la escalera.

La muchacha sin más caminó con más rapidez hasta quedar frente al primer escalón, como aquel desconocido estaba de costado y completamente cubierto por ropas negras no pudo ni siquiera ver su rostro.

Cosa que disgustó más a la joven, ahora su mueca estaba mas marcada que antes, se ah vuelto más impetuosa debido a los traumáticos sucesos que le ah tocado vivir. Un cambio de actitud que fue hecho a la fuerza, pero que ahora la beneficiaba.

-¿Quién eres tú? Y ¿qué haces en mi casa? -habló de manera dura, fue más una demanda que una pregunta-.

El sol ya no hacía demanda de su presencia, dejando tras él unos débiles rayos de sol que a cada segundo se extinguian, igual que la paciencia de ____.

-Te acabo de hacer una pregunta, responde -volvió a tomar la palabra la castaña pero esta vez más irritada-.

Por parte del sujeto escucho una risa burlona, esto hizo que la sangre de la chica hirviera ¿quiénse cree aquel sujeto para burlarse se ella?.

Por reflejo ____ subió las escaleras con pasos pesados, acercó su mano a la capucha de la larga gabardina negra que portaba el extraño. Pero antes de que pudiera hacer algo más una mano la tomó de su muñeca con fuerza impidiendo su acción.

-Ni se te ocurra hacer alguna estupidez niñata -dijo tetricamente, más había algo extraño en su voz según la joven-.

Antes de que ____ respondiera sintió una fuerte brisa que la hizo voltear y apreciar como todos habian regresado. Al parecer todos quedaron desconcertados ante la escena.

Pero pudo sentir como su novio "miraba" con asombro al desconocido,  estaba estático, al igual que sus hermanos. No prestó atención y volvió su vista al extraño.

Sus ojos se abrieron a más no poder, debido a la fuerte brisa esta hizo que su capucha se saliera; estaba demasiado desconcertada ¿quién mierda era?, ¿que hacía ahí? y lo más importante ¿conocía a los hermanos mens?, tenía un extraño presentimiento de que si.

[...]




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¿Quién creen que sea?, ¿cuales serán sus intenciones?. Voten y comenten, nos vemos pronto♡.

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