Capitulo 25 (Completa Unión)
Teniendo cuidado al levantarse, su cuerpo se sentía diferente, incluso sentía como si no pudiera cerrar sus piernas por completo, aun recordaba los besos y suaves caricias que el segundo líder le proporcionó.
Dirigió sus pasos al baño, debía limpiarse adecuadamente, aunque el olor que despedía era sin duda la esencia de su Alfa.
No quería alejarse de ese aroma por completó, pero entendía a su corta edad, que muy posiblemente algún Alfa notaria su cambio incluso los Omegas y eso es algo que no podía permitir.
Jamás querría meter en problemas a Shaka.
Al estar limpiando su cuerpo, sintió la marca en su nuca.
Una sonrisa se dibuja en su rostro, sintiendo tanta paz y tranquilidad, oficialmente tiene alguien que lo cuidará toda la vida.
Que lo ama con todo su corazón y jamás lo dejaría.
-Shaka... Te amo- Esas palabras ya no tenía que guardarlas en su corazón, las susurro por lo bajo.
De un día estar sufriendo por su celo, y al otro sintiendo una hermosa sensación en su corazón.
Sonriendo en todo momento, amado, a salvo.
Pensando que con esta revelación de sentimientos, las cosas mejorarían, pero también pueden empeorar.
Su joven mente, trajo a su ser el temor nuevamente.
Cubierto por una toalla dirigiendo sus pasos algo torpes de regreso a su cama, no logro llegar cuando sus piernas flaquerón, por el miedo.
-Si... Si... Los ancianos... Se enteran... Él recibirá ese castigo...- Tembló, abrazándose a sí mismo, solo pensar a Shaka recibiendo esos latigazos en su espalda, le causa que sus lágrimas caigan y la culpa lo inunde.
-No... Hice algo muy malo... Perdón...- Se cubrió el rostro con sus manos.
El pequeño fauno, volvía a pensar en esa tortura, esas reglas del gremio son demasiado crueles que causa una horrible afectación.
Mu esta sin duda olvidando las palabras que el rubio le dedico antes de irse.
Esa idea que llevara a cabo en cuanto los Shadow's sean acabados.
Pero ¿Cuánto deberían esperar?
¿Cuánto tardarán en detenerlos?
Y ¿Si se dan cuenta?
Estas preguntas sofocan al Omega, sintiendo que se podría hundir en un abismo.
Echo su cabeza hacia atrás, recargándose al pie de la cama.
Con ese leve movimiento, pudo sentir que el aroma de Shaka que dejo impregnando en aquel lecho, le volvía a traer la calma que su corazón necesita.
Abrió sus ojos, las lágrimas aun caían, pero trato de suprimirlas, limpiándose la nariz de igual manera, y tratando de levantarse, apoyándose en su cama, con la mirada baja.
-No, no... No debo pensar en eso- Sonrió, tocando su pecho, el latir tan rápido de su corazón se fue calmando –Debo confiar en Shaka- Sus lágrimas fueron olvidadas en ese momento, los hermosos recuerdos y la ilusión de un nuevo mañana a lado de quien ama, le da esperanza y fuerza –Seremos cuidadosos... Solo debo esperar hasta que lo logremos...-
Al decir esas palabras, logro tener una energía renovada, el amor puede ser el mejor catalizador para que obtengas una fuerza mayor de la que se logre pensar antes.
De esta manera se alisto, poniéndose su ropa cotidiana.
Pensó en comer algo antes, pero noto que por su desesperación de ayer, los alimentos que Shura le dejo los tiro al suelo, obviamente ahora no podía degustarlos.
Sin embargo no le importo mucho, después podría buscar algo con lo cual alimentarse.
Ya no podía aguardar ni un minuto más, solo quería de nuevo abrazarlo, darle algún beso o solo contemplarlo.
El joven pelilila tiene a su rubio amado tan cerca, teniendo todo el cuidado del mundo, podrían vivir su amor en secreto, solo por una temporada.
Aunque en un instante, antes de salir, su mente trajo una pregunta muy importante.
-¿Dónde estará Shura?- Le preocupa no saber nada de quien lo ha cuidado muy bien.
Pero trataría de encontrarlo después.
No sabía si sería conveniente hablarle sobre lo que ha pasado entre Shaka y él.
Mas sabe con toda la certeza del mundo que Shura guardaría el secreto, pero lo consultara con el rubio.
Su corazón late con tan solo pensarlo, sonriendo emocionado, dirigió sus pasos para salir de su habitación e ir al encuentro con el rubio.
En ese momento no había otro ser en la tierra que luciera tan hermoso y feliz, como si hubiera salido de un cuento de fantasía, Mu irradiando alegría inmensa.
---Estudio del segundo líder---
Debió asearse lo antes posible, aunque odió tener que ocultar el dulce aroma de Mu.
Pero eso no impediría que su mente reviviera la noche anterior y su cuerpo se agobiará con sensaciones que debía controlar.
Aunque sea su Omega oficialmente, no podía tomarlo como le plazca, ni donde sea.
Lo respetará, lo amará y protegerá toda la vida, es un juramento que le hizo y piensa cumplirlo.
Más aun desea hacer algo muy importante, su mente tiene una idea maravillosa.
Una que solo corresponde a su persona hacer realidad y algo que su familia ha hecho por generaciones.
Dirigió su mirada a los pergaminos que había resulto en las últimas semanas.
En ese punto todo cubierto, presento la mayor estrategia, una bastante arriesgada, pero que podría resultar.
Debía pensar en otra cosa hasta la llegada de su fauno.
-Si todo sale bien...Para el final de la doncella del Verano, dejare de ser líder- Poso ambas palmas en el escritorio, dejando escapar un suspiro –Mu y yo podremos vivir tranquilos y lejos del gremio-
Nunca creyó que su mayor deseo pudiera cambiar.
Antes de conocer a ese inocente pelilila, solo deseaba encontrar a quien acabo con su familia, resolver la muerte de su hermano mayor.
Sin embargo, con el trato de Mu, como su sonrisa le logra calmar su corazón, provocando que olvide una venganza que sus padres hubieran deseado que dejara por su propio bien.
Se supone que su familia no debería desear actos tan negativos y crueles.
Es normal querer acabar con los desgraciados que te despojaron de todos tus seres queridos.
Pero ahora, tiene a alguien importante que desea proteger con todas sus fuerzas, que no dejaría que nadie lo dañe, esa es la razón por la que sus pensamientos se enfocaron en cuidarlo.
Mu es quien ama, tiene su corazón en sus manos, podría hacer lo que desee con él.
Puede que el tiempo que paso ha logrado que el gremio se volviera más cuidadoso pero... No piensa correr ningún riesgo.
-Confía en mí, te protegeré con mi vida si fuera necesario- Llevo su mano al bolsillo en sus prendas, sin duda apretó el contenido que lleva.
Sus pensamientos se tornaron en diferentes ideas de como vivirían cuando esta guerra con esos seres malditos acabe.
No es un hombre de muchas palabras, usualmente deja que sus acciones hablen por él, pero... Con ese Fauno logra decir más, y todas son para los oídos de Mu.
Pensó en aquella vieja casa que los esperaría al salir del gremio, la arreglaría como fuera el deseo de Mu, lo llenaría de atenciones.
Sabiendo la condición de todos los faunos corderos, su capacidad de procrear un bebe, cuidaría de su hermosa familia al momento de que se presente el caso.
Podría ya estar divagando demasiado, pero es su instinto Alfa hablando.
El deseo de tener una familia con Mu, es algo que no puede dejar de lado.
Sonrió apenas visible, cada pensamiento solo colma su corazón de felicidad inmensa.
Que casi no se percataba de los pequeños golpecitos que daban en su puerta.
Su boca se abrió, para pronunciar el nombre de su Omega, pero se calmó casi de inmediato, todo debe ser como siempre.
-¿Quién?-
-Sha...- Detuvo su hablar, para corregir sus palabras –Soy Mu, señor Shaka- Hablo con cuidado.
Sin duda están logrando su cometido de disimular.
De nuevo la sonrisa se dibujó en el rubio.
-Pasa- Le dijo con ese tono que solo es para Mu de ahora en más.
-Si- Contesto con esa dulce voz.
Abrió la puerta con cuidado, pero no espero tener al segundo líder de frente, con su mano en la perilla.
-Hola- El pelilila saludo con timidez, sus mejillas se sonrojarlo a tenerlo tan cerca.
Apenas dejo que entrara, cerró la puerta, no podía seguir fingiendo, necesita esos delicados labios de nuevo.
-Mu- Susurro su nombre, y robo un beso de aquella sonrisa preciosa.
Primero fue una sorpresa muy grata, pero rápidamente se dejó llevar por la hermosa sensación que recorrer su cuerpo.
Esa unión se profundizo un poco más, al grado que la mano del rubio rodeo su cintura, acercándolo más a su cuerpo.
No utilizaría para nada su fuerza, con suavidad lo toma entre sus brazos.
Shaka en solo unas horas, se volvió dependiente de los adorados labios de Mu, ya no los puede dejar, agradeció que en ese momento están a solas, su estudio es el único lugar tranquilo, para su amor.
Se separaron con cuidado, ambos con sus rostro sonrojados, aun así no rompió el abrazo ni en un solo instante.
Sonrió, mirando con ternura ese bello rostro, que es de su Omega y solo él puede contemplar.
-Mu, gracias por venir-
Devolvió la sonrisa, la inocencia que el fauno proyecta lo hace lucir mucho más adorable que ya es.
-Usted...- Negó con su cabeza, fijando esas esmeraldas en los zafiros del mayor –Tu, me pediste que viniera, pero... Ya quería verte- Sonrió con una gran emoción, y rápidamente lo abrazo, posando su cabeza en el fuerte pecho donde un corazón late con suavidad.
-Sé que debemos guardar las apariencias, sin embargó, necesitaba tenerte entre mis brazos- Confeso la verdad inminente, estrechó más fuerte al pelilila, besando su cabeza con cuidado.
Podrían quedarse así todo el día, abrazándose, sintiendo el latir del corazón del ser amado, protegiéndose mutuamente.
Más Shaka, tenía una idea que ha estado pensando desde que despertó.
No podía darle más vueltas al asunto en su mente o se volvería loco, y puede que no exista el momento adecuado para hacer lo que desea, pero necesita, en lo que respecta en las tradiciones de su familia completar la unión que ha iniciado con Mu.
Puede que para el Omega ha terminado, solo necesitan estar juntos toda la vida, pero no tiene ni la más mínima idea de lo que va a ocurrir en unos segundos.
Aun sujetando su frágil cuerpo contra su pecho, llevo una de sus manos al bolsillo que antes había estado explorando con un contenido.
Jamás fue un hombre de muchas palabras, así que solo se dejó guiar por lo que creía correcto.
En un lapso de segundos, algo fue depositado en Mu, justamente bajo por su cabeza hasta el cuello.
Sin duda cuando el Omega sintió ese objetó en su cuerpo, se sorprendió, y rápidamente dirigió su vista a lo que lleva.
-¿Qué es esto?- Preguntó, sujetando una de las cuentas de color café con unos adornos morados que cuelgan de ese objeto.
Su mirada se digirió rápidamente a Shaka, el cual se nota con las mejillas rojas, pero sin apartar la vista de Mu.
-Es un rosario, ha estado en mi familia por mucho tiempo- Explicó, tomando la misma mano con la que Mu sujeta lo mencionado –Cuando un Alfa Devica, encuentra a su Omega destinado, se lo debe colocar en el cuello, simbolizando de esta manera que...- Ahora beso aquella delicada mano –Que deseo volverte mi compañero por toda la vida, incluso en la que sigue- Sonrió con un semblante de ternura -¿Aceptas este propuesta de matrimonio?-
-¿Matri... Monio?- La boca de Mu se abrió suavemente, sus ojos de igual forma, temblando por aquella pregunta.
-Sé que puedo estar yendo muy rápido, pero... Debo honrarte al momento de que te he vuelto mío- Tomo ahora las mejillas del menor –Piénsalo si así lo quieres- No lo obligaría a nada, lo esperaría el tiempo que sea necesario.
-Shaka...- Murmuro el nombre del rubio, sintiendo las manos del mayor como algo tan cálido –No necesito nada que pensar- La alegría se puede demostrar de diferentes formas y en esta ocasión las lágrimas fueron una de ellas –Acepto- Sonrió adornado con las gotas saladas de sus ojos.
-Gracias Mu- Lo volvió a abrazar con cuidado –Te amo, con todo mi corazón-
-Shaka, yo te amo mucho, quédate a mi lado siempre- Limpiando sus lágrimas en el pecho del mayor.
Le agradeció por aceptar aquella propuesta, técnicamente al poner ese rosario en el cuello del Omega, significa que se han casado, pero el rubio deseaba hacer la pregunta aun con ese símbolo sobre Mu.
Fue una propuesta que no podía falta en su actual relación.
Mu debería ocultar ese hermoso objeto símbolo del amor de un Devica Alfa.
Lo haría sin falta, entre sus ropas.
Ya no podía guárdalo el rubio, si ha encontrado a quien ama con toda su alma, le pertenece a ese hermoso ser.
Puede que sus instintos deseen volverse a entregarse, pero resistirían, solo besos y una abrazo que los acerca más, es lo que necesitan por ese momento.
Sería tan hermoso, podrían pasar el día en ese estudio, con el pretexto de estar preparando algo o que Mu pidiera un favor al mayor.
Lamentablemente sus planes para el resto del día, se verían arruinados por una noticia que nadie esperaría.
Unos fuertes golpes en aquella puerta de madera, fueron sonoros en todo el recinto.
Ambos tuvieron que separarse por la sorpresa.
Mientras Mu oculta el rosario entre sus ropas, poniéndolas debajo de estas.
Shaka frunció su ceño, y dirigió su vista a la puerta.
-¿Quién es?- Su tono no se disimuló para nada.
-¡¡¡SHAKA!!! ¡¡¡SOY MILO DEBO HABLAR CONTIGO DE INMEDIATO!!!- Los fuertes gritos del peli cerúleo, pusieron en sobre alerta al segundo líder de inmediato.
-Entra- Le respondió con precaución.
Milo abrió de inmediato, sin cuidado alguno azoto la puerta, causando sobresalto en el pelilila.
-¡¡¿QUÉ TE OCURRE?!!!- El rubio molesto, por la actitud del fauno Alfa que se comporta tan mal educado.
-¡¡¡AIOROS Y SHURA ESTÁN ANTE LOS ANCIANOS!!!- Agitado, trato de recuperar su aliento -¡¡¡ESTÁN SIENDO JUZGADOS EN ESTE MOMENTO, PORQUE... LOS DESCUBRIERON!!!-
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azucar? Jajajajajajajaja yo estoy muriendo de frió... jajajajajaja no me gusta el invierno para nada... Seré una paletita congelada de mamá terrón de azúcar, jajajajaja
Seré borrega helada, jajajajaja
Quiero decir una cosa... Lo del rosario es algo que compartía con una amiga, un terrón de azúcar que ya no esta con nosotros... Ambas creíamos que en la parte que le regresa el rosario, es como si se hubieran casado, jajajaja incluso su mamá lo decía, jajajajaja
Así que en honor a ella, ya tenia planeado desde el segundo capitulo que esto pasaría en la historia... Bueno... Era lo que quería decir... Escribir... Bueno... Jjaajjajajaa
Ya me voy a poner sentimental y eso si que no...
Kiaaaaa es tan dulce, Mu y Shaka ya nada podrá separarlos, pero aun se cerraran muchas cosas, mas no todo esta seguro.
Jajajjaja se que digo cosas muy confusas, pero ya saben que soy así.
La pregunta del día de hoy es:
¿Cual es su Shipp suprema? Ya saben esa que no podrían cambiarla nunca o le son muy fieles.
Yo pues tengo dos, pero el ShaMu, esta en un peldaño mas arriba que el DohIon, jajajajajja
Bueno espero sus respuestas, comentarios y reclamos.
Bueno mis terrones de azúcar, mucas gracias por siempre estar apoyándose, estando aquí, para leerme y disfrutar mis locuras.
Espero siempre entretenerlos y divertirlos, gracias por estar aquí, ser parte de la familia terrón de azúcar que no puedo creer somos ya 165 terrones en Wattpad, en otras plataformas no se como se sepa mucho de eso, pero les tengo una propuesta.
En el momento en que lleguemos a los 200 terrones de azúcar en Wattpad actualizare cinco fic's que ustedes escojan, mientras no sean las semanales de ese tiempo.
¿Les parece bien?
En fin, cuídense mucho, sigan las medidas de higiene, no se confíen por favor, que los quiero sanos siempre, coman bien, los que estén en inverno abrigansen.
Los quiero mucho.
Ammu se va.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top