Capitulo 2 (El Miedo No Desaparece)

¿Se acuerdan cuando les pedí votaciones por ser 600 terrones y ahora ya somos 744?

Jajajajajaja bueno... Aquí esta el especial por los 600... Jajajajajaja, creo que debo un poco dos... Jajajajaja Ay una disculpa, pero aquí esta el primero que debía desde abril del 2022... Ay, lo siento. ..

Disfruten el capítulo y el siguiente mas votado, lo tendrán después... Me trato de poner en orden para a ver si al fin logro tener en linea todo, para volver con los semanales.

Tenemos nuevo vídeo

Aquí tiene el link

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El nombre

Audio Fanfic Saint Seiya. Una Papá Para Kiki, Capítulo 2 (Tauro) [ShaMu] {ShakaXMu}

Igual pueden encontrar mi canal con el mismo nombre de mi cuenta: AMMU TEIKOKU YUDAINA

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Muchas gracias por su mega apoyó, ya somos 27 terrones en youtube, kiaaaaaa miles de gracias vamos a por mas.

Pasen a disfrutar, un capitulo de esta versión... Donde Dohko y Shion no se separaron y podrán vivir felices o... ¿No?

Jajajajajajaa, a leer se ha dicho

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-Auch... Ay no... Duele... Mu... Mucho...- Los quejidos de dolor ahogados resuenan en todo el bosque.

Aunque intente ocultarlos detrás de su mano, mientras aprieta la mandíbula y cierra sus ojos, para tratar de soportar el dolor.

-Perdón... Pero si no limpio y sacó esa cosa, te hará daño y podría...- De solo pensar en eso, de imaginar que esa situación le arrebate al amor de su vida, que de nuevo se quede solo, que por su causa tenga sufrir tanto dolor... Provoca que el peli verde, trague saliva y se contenga un poco en seguir su labor con aquellos instrumentos que usan para preparar alimentos, y aquí son sus herramientas para sacar aquella bala del hombro del tigre.

Intenta recuperar su calma, respirando hondo de manera discreta, pero le sigue dando bastante pánico el solo pensar que el Alfa que lo protegió, que lo ama, que ha sido su salvador, pueda llegar a perecer por el dolor y la sangre que brota por intentar sanar aquella herida.

Incluso sus manos comienza a temblar un poco, su semblante se intenta mantener calmado, pero lamentablemente palidece un poco y la angustia es muy evidente.

Algo que desde luego el castaño nota a pesar de sentir el fuerte dolor en su hombro. Puede percibir el aroma de su Omega algo diferente, notando la tensión y miedo en su ser. Lo cual provoca que entrecierre sus ojos, como sí estudiara rápidamente al joven carnero, a la vez que intenta sonreírle un poco, alejando la mano de su boca, para tocar el pálido rostro de quien intenta retener sus cálidas lágrimas.

-Mi hermoso corderito, ¿Sucede algo?- Aunque duela su hombro, aunque sangre y no tenga ha tenido mucho descanso después de que peleó contra esos humanos que intentaron robarle al amor de su vida, está dispuesto a hacer cualquier esfuerzo para trasmitirle a Shion toda la tranquilidad posible.

-¿Eh?- Eleva su vista, y reacciona ante a aquel llamado, para ver como el tigre castaño se encuentra más calmado y sonriente a pesar de que tuviera una herida abierta en el hombro, y que de ella brote aun sangre por manipulación.

Entiende muy bien que esa tranquilidad que muestra, es solo para que él no se sienta mal o culpable.

Curioso que con tan poco tiempo de conocerse, ya sepan tanto uno del otro.

-No... No es nada...- Niega con la cabeza, aunque sus lágrimas sin querer caen lentamente por sus mejillas, ni siquiera el omega se ha dado cuenta de esto.

Ver las perlas de sal de su amado que le recorren la cara, junto a esas mejillas poco rosadas por la travesía reciente, provoca que se sienta sumamente preocupado y angustiado, por qué algo malo le esté pasando.

-Pero, Shion... Corderito... ¿Qué te ocurre?- Sin que le importe hacer esfuerzo con su hombro derecho malherido, toma la mano del menor, para que entienda que está con él -¿Por qué lloras? ¿Te duele algo? ¿Tienes frío?- Sus preguntas insistentes llueven en torrencial tormenta, fijando sus esmeraldas en esos cuarzos preciosos que adora tanto.

La sorpresa en sus ojos se presenta, abre su boca un poco, dejando escapar un jadeo, mientras siente la calidez de esa mano que aunque áspera, es tan suave y delicada con él.

Sus lágrimas siguen brotando de sus cuarzos, sintiéndose en ese momento como un verdadero idiota por ponerse a llorar cuando el Alfa es quien está más herido de los dos; sin embargo, es difícil contenerse cuando su corazón y mente al fin sienten una calma que jamás creyó volver a tener, pensando en todo lo que ocurrió recientemente.

-No sé...- Entre sollozos recita aquellas palabras, mientras su cuerpo tiembla, bajando la mirada, mordiéndose los labios para callar lo que siente, pues ni siquiera él mismo entiende lo que le pasa.

-Shion... Corderito mío, ¿Dime que te sucede?? ¿Te sientes mal? Solo dime lo que sea y hare todo lo posible para que ya no llores- Su angustia solo crece, y aunque este sentado sobre una roca, y el otro en una más bajita, intenta alcanzarlo, para que no se intente alejar, tocando su rostro con la izquierda libre, sintiendo como el corazón se le parte por verlo llorar y no saber qué hacer para ayudarlo.

Es curioso pensar que hace poco tiempo, estaba matando a uno malditos humanos a sangre fría, que intentaron acabarlo, y robarle la libertad a su amado Omega.

Así es Dohko con su amado Omega, es alguien dulce, atento, tierno, y que puede engañar a cualquiera de que puede llegar a ser un Beta por su manera tan dócil de ser al no sentir peligro o estar cerca de quien ama... Pero en cuanto algo lo perturba y poner en alerta, se trasforma exactamente en lo que es, un Alfa temible, peligroso, y extremadamente protector, ya lo ha demostrado una vez, y lo seguirá haciendo las veces que sea necesario.

Los ojos del fauno menor se siguen aguadando, sintiendo como la opresión en su pecho sigue creciendo, mientras se siente tan cerca del Alfa que lo marcó, y le ha mostrado tanto amor... Que teme que no sea real.

Pensar que pudo haberlo perdido en ese encuentro tan aterrador, y que le demostró que haría lo que fuera por verlo bien y feliz, incluso si eso significara sacrificar su propia vida.

No puede soportarlo más, y con cuidado, se apoya en el hombro izquierdo del Alfa, sin dejar que su peso caiga por completo sobre este, solo dejando que su frente toque aquella piel, no puede parar de llorar a mares.

-¡¡¡ESO ES LO QUE NO QUIERO...!!! ¡¡¡LO QUE TEMO Y ME DA TANTO MIEDO!!!- Deja salir su dolor, mientras aquel grito es resultado de su pesar, provocando que el castaño se sorprenda de una manera que no esperaba.

-¿Qué? Corderito... No entiendo... ¿De qué hablas?- Aún con las esmeraldas bien abiertas, sorprendido por esto, y el dolor en su hombro, nada le impide que su instinto sea de rodear ese frágil cuerpo desnudo... Pues lo nota tan necesitado y angustiado, tanto en su esencia como en su voz.

Siente la piel del castaño, en donde puede dejar salir libremente sus lágrimas, mientras siente el toque suave en su espalda por encima de aquella tela que usan para cubrirse en las noches.

Ambos están con muy poca cantidad de ropa, ya que aquellas que llevaban la noche anterior, las tuvieron que lavar, pues las manchas de sangre y suciedad debían quitarse lo antes posible; ahora que el sol salió y se siente cálido, e puede secar de forma adecuada.

Shion, solo está cubierto por la tela para dormir, y Dohko, usa su pantalón color café aun manchado de sangre, pero siente la necesidad de estar preparado para cualquier cosa que llegue a pasar.

Puede sentir el latir en el pecho de su Alfa, es suave y reconfortable, pero a la vez acelerado, pues claramente nota la enorme angustia que tiene por él.

No quiere herirlo aún más, siente que debería estar curando su herida y extrayéndole aquella bala con los pocos utensilios que posee. Sin embargo... El terror y miedo de creer que lo perdería... Es tan grande que lo ha hecho flaquear tanto.

-Dohko...- Lo llama en un sollozo, mientras temblando, sintiendo tan cálidas las manos ajenas en su cuerpo -No quiero... Que hagas ninguna locura... Para salvarme...- Le dice aquello en un débil susurro, sin poder darle la cara al otro.

Sin comprender estas palabras, se confunde demasiado ante esto, pero no por eso va a dejar de lado el amor y preocupación por su amado Shion.

-¿Qué dices? ¿Por qué no?- Su mano izquierda sigue acariciando la espada ajena, pero su derecha la ha tenido que retirar, ya que el hombre le empezó a dolor terriblemente, pero eso poco a nada le importa, aunque su rostro exprese malestar seguro -Eres lo que más amo en este mundo- Lo mira con devoción, aunque no pueda apreciar ese preciso rostro -Soy tu Alfa, mi deber es protegerte contra lo que sea- Le habla en tono firme, intentando buscar que sus ojos conecten, cuidando que aquellos cuernos que han comenzado a afilarse no lo lastimen.

-¡¡¡ESO ES LO QUE NO QUIERO!!!- Grita con todas sus fuerzas, alzando su vista de golpe, frunciendo el ceño, mientras sus labios tiemblan, las lágrimas escurriendo por sus mejillas rojas, de este modo le planta cara al Alfa que tanto ama.

Cosa que desde luego alarma al Alfa y lo confunde mucho peor. Este Tigre no encuentra razones sensatas para que su amado corderito diga algo como eso -Pero... Es mi deber, es lo que quiero...- Sus esmeraldas se fijan con desesperación en los cristalizados cuarzos -Te amo, y yo haría y daría mi vida por ti, para que tú nunca vuelvas a sufrir ningún tipo de dolor... Shion, ¿Qué pasa?- Con dulzura pregunta su duda, aunque su ser se siente tan confundido y lleno de angustia ante las palabras del menor -¿Aún tienes miedo? Esos malditos humanos ya no nos van a encontrar, ni alcanzar, corrimos toda la noche y ahora estamos muy lejos, además...- Su rostro se vuelve un poco lúgubre, tal cual de un feroz depredador, con la sangre hirviente de cólera –Los aniquile a cada uno de ellos, ninguno sobrevivió... Y sí alguien más se atreve a intentar tocarte o hacerte algún daño... No dudare en matarlos a todos- En su tono de voz no existe otro sentimiento que no sea el odio puro, su furia incremente a cada segundo en que piensa en quienes casi le arrebatan a su Omega.

Ahora ya no le teme, pues lo ha conocido un poco mejor y siente seguridad a su lado a pesar de mostrarse bastante sombrío en su rostro por aquellos recuerdos...

Ha visto la peor fase del tigre, pero eso no le aterra en lo más mínimo, porque sabe que nunca lo atacara a él. Se lo ha demostrado a diario, siendo cariñoso, atento y muy amable; aunque también sea un adolescente como él, le demuestra el amor que ha crecido en su corazón, además el comprender los instintos Alfas, que siempre defenderán a su Omega de quien sea, le hace no temerle.

Pues, recuerda muy bien a su padre, que así siempre había sido con su familia, les dedicaba todo su amor, proyección y comprensión, pero... Con los enemigos, se trasformaba y dejaba ver el instinto de un Alfa por defender y proteger a su familia. Y sí se le agrega que Dohko es un fauno carnívoro, con la condición más alta en la jerarquía, sin duda es alguien de mucho temer.

-¡¡¡NO SEAS UN TONTO DOHKO!!!- Le grita fuertemente, enfrentándose ferozmente al castaño, mirándolo con seriedad y las mejillas rojas -¡¡¡SI DAS LA VIDA POR MÍ, ME DEJARÍAS SOLO!!!- Declara su dolor y peor miedo en un potente grito, para seguir dejando que sus lágrimas caigan sin tregua alguna -¡¡¡¿QUÉ NO ENTIENDES QUE SIN TI, YO NO PODRÍA VIVIR?!!!- Sus palabras suenan bastante crudas, pues van cargadas de fuertes emociones, como de sentimientos entremezclados.

De nuevo, vuelve a confundir al fauno carnívoro, aun así parece ir comprendiendo de a poco, a que se refiere el carnerito que ama -Shion, pero...-

No puede proseguir, pues sus palabras se cortan a causa de otra voz.

-No quiero que te sacrifique por mí...- Niega con la cabeza intentando no apartar su vista del contrario -Yo se... Que soy un Omega, que soy tuyo, pero también eres mío...- Hace un esfuerzo para que su respiración se calme, al igual que aspira fuertemente por la nariz -Y no... No quiero perderte...- Su corazón palpita desesperado, las manos se posan cuidadosamente en el pecho del mayor, para mirarlo directamente a las esmeraldas preciosas que posee, y así pueda comprender su sentir -No podría... Aceptar que algo malo te pase por mi culpa, por defenderme... Yo...- Los malditos recuerdos de una terrible noche se posan en su mente, y siente que cada segundo que trascurre solo aumenta su dolor -No soportaría que de nuevo alguien... Se sacrifique por mí- Baja la cabeza con un enorme pesar, las memorias de cuando su vida se volvió un infierno, aquellos gritos que aun hacen eco, las voces desesperadas pidiendo ayuda, los muertos, y la sangre, aun marcan la masacre que no puede olvidar.

-Yo no voy a permitir que nada malo te ocurra- Es firme en su hablar, ya que comprende muy bien el sentir de Shion... Sin embargo, también posee sus propios fantasmas -Yo te voy proteger contra quien sea, quieras o no...- Frunce el ceño levemente, sintiendo como el corazón se le estruja al traer recuerdos tormentosos -Yo no... Yo no voy a perderte jamás- Sus esmeraldas por alguna razón comienza a cristalizarse.

Tiene el recuerdo tan presente de su madre, de aquella fauno de cabellera roja y dulzura impresa, se sacrificó por él, le dio oportunidad de escapar, mientras ella era brutalmente asesinada como todos los de aquella mansión aunque fuera una simple sirvienta y nada más.

Era un niño, no la pudo salvar, solo logró escapar gracias a ella, mientras los gritos y el fuego consumía todo a su alrededor.

-No voy a dejar que nadie te lastime- Su posición es firme, su decisión está tomada. Como Alfa, es el deber al que se apaga con fuerza y devoción, pues lo acepta sin rechistar. Su madre, siempre le enseñó que cuando conociera a quien amara más que a nada en este mundo, su preciado destinado, debería protegerlo porque él sería tan fuerte como su amor lo fuera, y al haberlo ya conocido, tomado y marcado, cumplirá su deber ignorando cualquier consecuencias -No importa si muero, yo te seguiré defendiendo a pesar de no estar juntos- Sus palabras brotan del corazón, pero también de viejas heridas y temores.

-¡¡¡¿POR QUÉ NO ENTIENDES QUE YO NO DEJARÉ QUE LUCHES SOLO?!!!- Puede que sea un Omega, que sus miedos aun no son para nada superados, y que el hecho de haber tenido un reciente encuentro con el pasado lo ha dejado muy trastocado, sin embargo, esta mucho más decidido a que el otro entienda, que también lo puede proteger -¡¡¡SÉ QUE SÓLO SOY UN OMEGA, QUE NO SOY TAN FUERTE COMO LO ERES TÚ O FEROZ!!! ¡¡¡PERO, YO TAMBIÉN SOY UN FAUNO!!!- Sus cuarzos se alzan en son de furia y desesperación para enfrentarse a las esmeraldas -¡¡¡PUEDO PELEAR A TU LADO, PARA QUE NO HAGAS LOCURAS QUE TE PUEDAN COSTAR LA VIDA!!!- Alza su voz tan fuerte como su garganta se lo permite, mientras sus lágrimas brotan como carcasas torrenciales, al igual que muestra sus dientes, y el temblor en su ser no se va -Sí llegaras a salir herido... Sí... Algo peor te llegara a pasar, seria por mi culpa, y yo no...- Niega nuevamente con la cabeza en su desesperado -No podría seguir....- Solo siente deseos de llorar, de que su dolor desaparezca y no siga creciendo, pero en un mundo donde seguirán buscándolo y codiciándolo por su estirpe y condición, donde sólo existe un ser dispuesto y capaz de protegerlo contra quien sea, teme tanto perderlo -¡¡¡TE AMO TANTO DOHKO!!!- Baja levente la cabeza, mientras sus manos se aferran al cuerpo contrario, perdiendo un poco el cuidado por el creciente miedo -¡¡¡TE AMO, ERES MI DESTINADO, ME HAS HECHO TAN FELIZ EN ESTE CORTO TIEMPO, QUE YO... YA NO PODRÍA SEGUIR SIN TI!!!- Alza su vista, contra el rostro ajeno, está firme ante sus palabras, para seguir gritando lo que en su corazón se ha guardado -¡¡¡PREFERIRÍA MORIR A TU LADO LUCHANDO POR NUESTRA LIBERTAD, QUE VIVIR SIN TI, YO NO LO LOGRARÍA SOPORTAR!!!- Sus declaraciones son claras, potentes y firmes. Lo que ocasiona que el castaño tenga sentimientos encontrados, pero a la vez una calidez única en su corazón.

Escuchar todo lo que siente su amado fauno, el hecho de verlo llorar, encararlo más de una vez, decirle que daría su vida junto a la de él para seguir juntos.

No quiere que nada malo les ocurra a ninguno, eso está más que claro.

Desde que Dohko conoce a Shion, desde aquella vez que lo vio dentro de un jaula, en esa noche, bajo la lluvia... Sintió el fuerte deseo de seguir viéndolo, de conocer, protegerlo. Y ahora que su destino está unido al del corderito, y su marca esta granada en esa delicada piel, no piensa fallarle a su profundo amor.

Siente como su corazón se acelera, sintiendo que el respirar le cuesta, pues también posee miedo... De no ser lo suficientemente fuerte para protegerlo, sabe muy bien que incluso estando moribundo, no podría permitir se lo arrebaten. De tan solo pensarlo, siente que la locura podría desatarse en su mente.

Perder a su madre lo hizo entender que si amas a alguien lo debes proteger contra quien fuera, con todas tus fuerzas, mientras le das el tiempo necesario para que huya, y nunca llegue a ser encontrado. Eso es lo que piensa hacer por toda la eternidad. Sin embargo... El hecho de que su Omega quiera morir a su lado, en cualquier batalla en donde no pudieran llegar a ganar, es algo que no sabe explicar sí se siente con un peor terror de esa posibilidad, o una inmensa felicidad al saber el grado de amor que Shion le tiene.

Sin importar que su hombro derecho duela, ni tomar en cuenta que podría abrir más su herida o las otras que tiene en diferentes partes del cuerpo, atrae al Omega hacia él, para darle un abrazo, uno protector, posesivo, y necesito de cercanía, para que Shion entienda su sentir.

Las esmeraldas se han cristalizado como los cuarzos, pero con la diferencia de un destello feroz y radiante.

Mientras siente la cabellera verde y esponjosa debajo de su barbilla, lo acaricia suavemente, dejando que un suspira y sus lágrimas escapen -No podría dejar que algo así pasara... Lo siento pero, no dejare jamás que te pongas en peligro- Su agarre es un poco más fuerte, para hacerlo entender que lo protege incluso con solo pensarlo -Eres mi Shion, mi amado carnerito, mi Omega, mi todo- Frunce el ceño, señal de preocupación absoluta y conflicto -Que yo no querría verte herido, ni lastimado...- Sus ojos bajan lentamente para apreciar aquel golpe en el rostro del peliverde, las marcas en sus tobillos y muñecas, le hacen hervir la sangre, sintiéndose a la vez sumamente impotente -De por sí, ya soy un completo idiota e inútil por no haberte protegido como es mi deber... Te... Lastimaron... Y no pude evitarlo, pero ahora ya no dejaré que nadie te ponga un dedo encima, ni te haga hacer algo que no quieras... Tú... Eres todo lo que yo amo y solo a ti... Ya no quiero verte sufrir, ni que temas, yo... Me encargaré de todo, no puedo prometerte que...- Aunque tenga su mano izquierda contra esa delicada espalda y la derecha se esté esforzando para también abrazar al fauno herbívoro, no puede evitar que sus lágrimas caigan y su rostro sea contemplado -Dejare de hacer locuras para que estés a salvo, porque no puedo dejar de hacerlas, yo estoy dispuesto a dar mi vida por ti, porque jamás voy a dudar en cuidar de ti... Solo puedo asegurarte que mientras mi corazón lata, luchare para estar a tu lado, y nunca permitiré que nadie te aparte de mí, ni en esta vida, ni en la que sigue, lo juro- Sabe que sus palabras son sinceras y serán cumplidas, quiere trasmitirle al Omega seguridad de que todo estará bien, ya que si algo llegara a interrumpir su felices, el Tigre haría lo que fuera por defenderlo, y que aunque sus vidas esté en peligro, Dohko haría todo para que su corderito se salve.

Shion y Dohko, son dos jóvenes faunos, Alfa y Omega, un carnívoro y el otro herbívoro, sus vidas han sido tan diferentes y a la vez similares, vivieron felices con sus familias, no necesitaban nada más que sus amados padres, pero el odio de los humanos los obligaron a estar solo, abandonados y temerosos, mientras padecían la crueldad del mundo. Se encontraron en una noche donde ambos añoraban aquel pasado que se fue, sus corazones decidieron y entendieron que el lugar al que pertenecerían siempre seria a lado de quien le dio un poco de calma a sus almas destruidas, y entonces jamás se separarían de quien ahora aman con todas sus fuerzas.

Su conexión se volvió tan estrecha, han ido muy rápido en su amor, que ya no podían vivir el uno sin el otro, pues la marca Alfa los une hasta la muerte, y sus corazones también ya están eternamente entrelazados...

En Dohko reina ese profundo amor y devoción por Shion, en el Omega su Alfa tiene un lugar único y que nadie le arrebataría.

El fauno herbívoro, en cierta forma entiende esas palabras, comprender que es el instinto más primitivo un Alfa, defender y proteger al Omega que es suyo, pero eso no le puede quitar el inmenso miedo aún, sin embargo... Nunca le ha pedido permiso para también luchar por él, así que, Shion bien puede seguir adelante, dispuesto a entrenar con ferocidad para que algún día que ojalá nunca llegue a ocurrir, pueda luchar lado a lado con su Tigre, al igual como lo hicieron anoche, para salir lo más a salvo posible del mismo infierno.

Alza su rostro para lograr quedar tan cerca de su amado Alfa, verlo directamente ojos. Ambos lloran por sus miedos, temores y deseos de siempre estar al lado de la persona que aman, sin importar lo que llegue a ocurrirles, pero también entienden que su destinado es capaz de todo por protegerlos, porque se aman con todo el corazón y eso vale cualquier sacrificio.

Shion se acerca tanto como puede al Alfa, para de forma lenta y tímida plantarle un beso en sus labios, abrazándolo de inmediato, rodeándole el cuello y demostrándole así que lo ama más que nada en este mundo.

El Tigre siente este tacto agridulce, el entender los sentimientos y sentir de su amado Carnerito, sin embargo también es una sensación de que igual está dispuesto a luchar por su amor, es casi imposible pensar que su Omega se ponga en peligro por él, pero... Aun así no dejara que nada de eso ocurra. Sabe que ahora se deberá volverse más fuerte de lo que ya es, para así poder ser capaz de enfrentar a miles de enemigos él solo, para cuidar a Shion. Juro ante este delicado beso y su amado, que nada malo le volverá a pasar, jamás tendrá que volver a derramar ni una sola lágrima de miedo o angustia, no mientras él este a su lado.

Corresponde aquel dulce tacto, ambos comparten un abrazo, cuidando de no lastimar al Alfa y también procurando que las heridas limpias del Omega no se abran.

Los dos van a velar y ver por la seguridad del otro, es una promesa que se han dejado bien en claro, aunque el otro no desee que sufra su otra mitad.

Después de todo, el camino hacia el paraíso que buscan ya no está muy lejos de distancia, y puede ser que allí... Encuentren la vida y felicidad que se les fue negada antes.

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Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?

Yo me encuentro super bien, aquí trayéndoles algo que les debía desde el año pasado, casi ya un año, pero bueno... Jajajajaja no pasa nada ¿Cierto?

En fin, por ahora tendrán publicaciones los Lunes y Viernes, los semanales aun no por que espero hacer mas capítulos para traerles mucho contenido.

Pero bueno, espero que disfrutaran la lectura, también que les gustara el vídeo le den mucho apoyo, que cuenta mucho.

Por cierto, feliz día del maestro a todos mis terrones que son maestros, que adoran su carrera y la disfrutan jajaja también a quienes no a veces jajajaja.

Mis terrones de azúcar, me paso a despedir.

Miles de gracias por leer, disfrutar cada capitulo, espero no tardar tanto, jajajajaja no, mejor no digo nada, por que mucho tengo que hacer para ponerme al corriente ajaja.

Los mega quiero a todos ustedes.

Por favor cuídense mucho, hagan caso a las medidas de higiene y manténganse a salvo.

Ammu se va. 

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