13- ¿Despertaste?
Natasha pov:
- Lo siento, pero ¿quién eres?
Esas fueron las palabras que rompieron mi corazón.
- No te recuerdas de mí, Wandis si esto es una broma no es divertida.
- Perdón, pero no sé que haces aquí, espera - ella me miro de arriba hacia abajo - tú eres Natasha, la amiga de mamá, o lo que sea que fueras.
- No, Wandis, osea sí, pero también soy tu amiga, no recuerdas nada.
Y luego de eso, ella cerro los ojos, fuertemente, creí que algo le pasaba, así que llame al doctor.
Cuando les dije que había despertado, ellos llegaron de inmediato y empezaron a realizar pruebas.
- Señorita, no puede estar aquí, necesitó que salga.
Yo asentí y salí, de ahí - bueno a esperar, espero que pueda recordarme.
Luego llame a todos avisando que había despertado, la abuela de Wanda vino y hablo conmigo, sobre todo, prácticamente.
- Doctor - le hablé en cuanto salió de la habitación - ¿cómo está ella?
- Pues, sufre de una especie de perdida de memoria, lo singular de su caso es que es únicamente de la memoria corto plazo. Aunque ella recuerda algunos sucesos que han pasado en los últimos años, parece no recordar gran parte de los últimos dos años.
- ¿Eso quiere decir qué?
- Eso lamentablemente quiere decir, que no la recuerda, señorita, dice que cuando despertó usted estaba dentro del cuarto, y sabe como se llama, pero no recuerda nada más de usted.
Yo caí de rodillas llorando, ella me olvido, yo la esperé y ella me olvido.
- Natalia - mi madre me hablo, pero yo la escuché lejanamente, no podía sentir mi cuerpo.
- ¿Por qué solo me olvido a mí?
Yo ya no sabía ni como respirar.
- Calma Nat, creo que tienes que sentarte - dijo la abuela de Wanda - gracias señora Maximoff.
Luego de un rato sentado pude hasta cierto punto asimilar toda la información.
Y aunque me sentía mal por la amnesia, en este momento Wanda es la prioridad, tengo que cuidar de ella, y de alguna manera si no logra recordarme, luego me iré de aquí.
Me podría ir hasta del mundo por ella.
- Señorita Natasha, puede pasar a ver a la paciente.
- Gracias doctor.
Entre despacio a la habitación y Wandis levanto su vista - hola, creo que tenemos que hablar.
- Sí, creo que deberíamos hacerlo - ella intentó sentarse más, pero hizo una mueca de dolor - espera, te ayudo.
Yo me acerqué más a la camilla, la cama donde he pasado un mes viéndola, la misma donde pensé que podría perderla... Y si la perdí, de diferente forma.
Ella me miraba expectante y yo pasé mi brazo por su cintura, y la otra detrás de su cabeza.
Con cuidado la moví y acomodé sus almohadas, ella solo me miro.
Cuando nuestras miradas conectaron, ella no la quito, así que yo la aparte.
- Listo, ¿estás cómoda?
Ella asintió - y como te sientes - ella tardó un poco en responder - bien, confundida, al menos sé algunas cosas.
- Dime que es lo que recuerdas, y luego te diré más cosas, ¿te parece?
- Bueno, recuerdo que luego de la muerte de mis padres, mi custodia te quedo a ti, y también que ya no vivo en mi casa, tu hermana es mi amiga, y no sé que más decirte.
- Bueno, está bien, yo creo que solo tengo que agregarte algunas cosas... Em ahora vives conmigo y también, somos un poco amigas, ya volviste al colegio luego de haber pasado por mucho, vas donde una psicóloga y estás en el hospital, gracias a una relación tóxica.
Ella cerro los ojos fuertemente luego que mencione lo último - ¿se llama Visión no?
Yo asentí - lo puedo recordar, y recuerdo parte de lo que paso ese día, pero la verdad es que no tanto.
- asta donde recuerdas?
- Recuerdo todo antes de las seis de la noche, que paso luego de eso no tengo idea - yo asentí - y nosotras, que tan bien nos llevamos - en cuanto dijo eso recordé lo que me dijo Yels.
Ella dijo que Wanda siempre había tenido un pequeño enamoramiento conmigo, pero no lo tome en cuenta hasta ahora.
- Wandis - ella me miro extrañó - perdón, Wanda, de mí antes de todo te acuerdas?
Ella negó - no creo, recuerdo que te fuiste cuando tenía siete.
¿Cinco?, pero yo recuerdo, y ahí caí en cuenta que algo pasaba - ¿cómo que tenías siete?
- Sí, mama estaba triste porque te fuiste, pero yo recuerdo haberla consolado, yo no sabía quién eras, solo sabia que papa y mama peleaban por ti.
- Por mí, espera, me estoy confundiendo, yo vi a tu mamá embarazada a los quince, y me fui, no pudiste tener cinco.
- Pero, mama, perdió a su bebe, no te dijo, yo creí que sabrías, ella se embarazó dos veces, una vez de mí y otra de otro bebe, pero ella lo perdió.
- Wanda, espérame aquí, necesitó hablar con alguien, yo no sabía todo esto - ella asintió - Natasha me haces un favor - yo asentí.
- Podrías estar aquí por la noche, nunca me han gustado los hospitales - yo sonreí de lado - aquí estaré.
Luego de eso salí en busca de mama y de la abuela de Wanda, que se fueron a mi casa a descansar.
Cuando llegue las encontré en la sala, papa, no estaba, solo estaba Melina y la señora Maximoff.
- Cuanto me ocultaron?
Pregunte directamente, se les cayó el color de la cara - de... De que estás hablando, no te hemos ocultado nada.
- No me mientan Melina - dije poniéndome frente a ellas - la pregunta es porque?
- Yo no quería que te enteraras de esta manera, planeaba decírtelo - yo tome el puente de mi nariz - planeabas hacerlo, o esa también es otra de tus mentiras.
- Yo le dije que no te dijera - esa fue la señora Maximoff - puedo saber el porqué si es posible, porque parece no ser así.
- Pepper estaba pequeña, tenía casi quince, como hubieras actuado tú, todo el mundo se podía haber enterado, así que lo ocultamos.
- Sí, y le mintieron a todos, donde estuvo Wanda todo ese tiempo - ella se puso más seria - en un internado - yo me reí - en serio, tanto té dolía.
- Natalia esas no son maneras de hablar - yo volví a reír - en serio, parece que si, ahora creo que ya le hicieron suficiente daño a Wanda, díganme ya su edad real.
- Ella si tiene dieciocho - yo asentí, al menos no le mintieron con eso.
- No quiero que mantengan contacto con Wanda por estos momentos, al menos que ella me diga que quiere verlas.
- Pero, no nos puedes prohibir eso - yo la miré seria - yo aún soy la tutora legal de Wanda, así que yo tomo las decisiones por ella, la corte me cedió que dejaré de serlo cuando cumpla diecinueve.
- Comprendo tu enojo, y yo lo lamento, salúdala de mi parte, Melina me llevas por favor - mama asintió.
- Nos vemos...
Luego de que salieron cerré la puerta y subí a mi habitación, tome algunas cosas para mí y luego fui a la de Wanda.
Vi como estaba, y no me gusto, se sentía vacía, triste y hasta cierto punto, solitaria.
Tome ropa y cosas para cuando le dieran el alta, espero que se la den mañana.
Luego pase comprando unas hamburguesas y pedí su favorita, con papas con queso y limonada de bebida.
Me puse camino hacia el hospital y pregunté al doctor si Wanda podía comer la hamburguesa, dijo que si, y que era una buena idea para animarla.
Yo asentí y llegué a la habitación, estaba luchando para ponerse de pie.
- Hola, que estás haciendo, Wanda no puedes pararte aún - ella me miro enojada - ya no aguanto estar solamente acostada.
Dijo y se puso a llorar, yo me acerque y pase su cabello detrás de su oreja - ven te ayudo - ella subió de nuevo a su cama y se me quedo viendo.
- Que pasa, porque me miras así?
- Por un momento pensé que no volverías - parecía triste por eso - pero si lo hiciste.
- Lo lamento, pero tuve una discusión con mi mamá y tu abuela, te informo que para verlas me tienes que decir, les prohibí venir a visitarte, me entere de mucho y siento que no estoy lista y tú tampoco.
Ella asintió - está bien, comprendo que quieras cuidarme, sé que mama confiaba en ti, así que yo también lo hago.
- Bueno, dejemos las tragedias de lado, traje algo para mejorar tu ánimo - ella me siguió con la mirada.
- HAMBURGUESAS!!!!!!!!!
Lo grito con una emoción que me hizo reír - ten, pedí tu favorita - luego ella me dedico una de sus sonrisas.
- Muchas gracias - me dio un pequeño abrazo y yo solo se lo devolví, y luego me soltó, nos dedicamos a comer y dormimos, ella en su camilla y yo en el sillón de alado.
Que linda que se mira cuando está en paz.
Tranquila y segura a mi lado.
///////////////////////////////
Nota:
Hola, algunas aclaraciones, tuve que cambiar el número de la edad de Nat, porque dos personas me querían denunciar la historia, creo que no están en el lugar de lectura correcto, y no conocen la palabra ficción.
Pero bueno, las edades quedan así:
Natasha - veintiséis.
Wanda - dieciocho.
Yelena - dieciséis.
Ellas solo se llevan siete años.
Sé que para algunas personas sigue siendo mucho, pero entienda, ella ya es mayor de edad, paso un mes en coma y ahora ya cumplió la mayoría de por lo menos en mi país.
Pido perdón si incomodo, pero simplemente si no te gusta la historia no la leas, yo la hago para los fans que me piden más y que votan, no para los que la denuncian.
Así que ya aclarado.
Nos leemos...
Cofie:)
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top