34. Admiración

Capítulo 34: Admiración

—No quiero arruinar el momento, pero necesito un descanso —dice Ashton con voz dificultosa. Centro mis ojos en él, sus músculos están tensos y frunce los labios—. Estoy entumecido.

Suspiro y doy unas pinceladas más antes de dejar la paleta con el pincel sobre la mesa. Tener un modelo viviente es muy cansador. Más cuando se queja cada cinco minutos. Me acerco a mi novio que se ha colocado los pantalones sueltos de franela que usa como pijama siempre que viene aquí.

—Estoy segura de que Rose no se quejaba tanto como tú —Se estira con los ojos cerrados y sonrío peinando su cabello, está bastante largo y me gusta. Su cabello castaño tiene leves ondas, pero al tenerlo más largo las ondas comienzan a tomar forma de rulos—. Tu cabello es tan desordenado como tú.

Despliega una sonrisa perezosa y abraza mi cintura para acercarme a su cuerpo. Besa mi frente y desciende por mi nariz hasta llegar a mis labios. Hacía una semana que tenía a mi novio siendo un modelo artístico, de esos que sólo modelan su piel. Era algo inevitable no acabar haciéndolo en el sillón que habíamos elegido hacía unos meses atrás.

—A mamá le agradas —Me toma por sorpresa esa declaración. Tomo su rostro en mis manos y lo obligo a mirarme a los ojos.

—¿En serio? ¿Ella te lo dijo?

Asiente mientras me abraza un poco más fuerte.

—Sí, siempre me pregunta por ti o habla de ti —dice con una sonrisa—. No deberías sorprenderte, yo sabía que ibas a agradarle.

—Tus ojos enamorados no te dejan ver que yo no soy tan simpática como tú.

Ríe y acaricia mi cuello.

—Lo eres de una forma un poco más reservada, es inevitable que no caigan rendidos ante ti. Sino mira todos los amigos que has hecho a lo largo de tu carrera. Siempre te mantienes en contacto con ex compañeros de trabajo.

Asiento pensando en ello. Le gusto a la madre de Ashton y ni siquiera me conoce en persona. Sólo me ha escuchado divagar por teléfono sobre personas de tramas románticas o banalidades sin importancia. A veces se interesa por el trabajo y le comento un poco sobre la película que protagoniza su hijo.

—¿Y qué hay de tu padre?

No hay muchas menciones sobre él y no he conversado por teléfono con él más de un minuto. Todo es muy tenso y pese a su amabilidad, me siento un poco incómoda porque en el fondo sé que realmente no está interesado en conocerme. Diría que eso me hace sentir un poco mal, pero al menos me consuela que no sea desagradable y me trate de forma cordial.

—Él es más complicado, pero seguramente cuando te conozca en persona también le agrades —comenta hundiendo su cabeza en el hueco de mi cuello para dejar un beso—. La abuela siente curiosidad por ti, pero se rehúsa a conocerte por teléfono.

—¿Tu madre es estadounidense?

—Es inglesa. Conoció a papá mientras estudiaba en Dinamarca y se enamoró de él. Aunque papá no se la puso muy fácil, fue difícil que lo conquistara —Mira al techo concentrado, como pensando en ello—. Mamá era muy bonita, él siempre dijo que la evitaba tanto como podía porque no quería una relación. Ya sabemos quién ganó la pelea.

—Entonces, toda tu familia habla inglés.

—Y español, pero no con tanta fluidez. Es uno de los idiomas más difíciles que existe —Besa mis labios en un arranque de pasión antes de alzarme y hacer que enrede mis piernas en su cintura—. ¿Quieres que te enseñe danés? —Asiento con una gran sonrisa. Estar con Ashton es como estar en un aprendizaje constante. Él te enseña tantas cosas, algunas sin darse cuenta, como abrir tu corazón y dejarlo sanar—. Lo haré porque quiero divertirme escuchando tus horribles intentos de imitar nuestro acento —Ríe antes de besarme y una vez más, hacer uso del sillón.





Anoto un par de cosas en mi libreta mientras tarareo junto a la voz de mi novio. Otra de sus canciones está sonando en el apartamento de Kate y sé que se ha vuelto una fan porque Dylan parece cantar las canciones distraído. Creo que ella no deja de escucharlos desde que se enteró que su novio estuvo en una banda.

—¿Sientes curiosidad por saber su sexo? —pregunto mientras ella acaricia la ropa de bebé que hemos comenzado a regalarle con las chicas y los chicos. Hay varios juguetes e incluso Jordan le regaló muchos pañales y ropa. Creo que me sorprendió un poco el gesto, más cuando Kate lo abrazó. Puedo decir que mis amigas comienzan a hacer las paces con él y lo integran al grupo. Por supuesto que no hay una gran confianza, pero sé que no hay tanta incomodidad y de alguna forma se están haciendo amigos.

—Bastante, Capi cree que será un niño —dice señalando al primo que amablemente se ofreció a cocinar unos bocadillos para nosotras que vinimos a traerle otros regalos para nuestro sobrino.

—Estoy seguro, él me lo dijo en un sueño.

—¿El bebé? —Se burla Drew y yo río con ella mientras el castaño resopla en la cocina.

—Ríanse lo que quieran, pero será un niño.

—Ah, los instintos fraternales —murmuro haciendo mis cuadernos a un lado. Sigo haciendo una especie de itinerario sobre los lugares que debemos visitar en Dinamarca—. La cosa es que hace unos días estuve leyendo algunos datos curiosos... ¿Sabías que puedes quedar embarazada ya estando embarazada? —Ella deja de doblar la ropita de bebé y me mira sorprendida. Asiento para demostrar que no miento—. Es muy poco probable, pero puede pasar. Se llama superfetación.

—¿Qué dices, Maravilla? ¿Quieres tener gemelos o mellizos? —pregunta Dylan cruzándose de brazos con una sonrisa mientras la mira divertido.

—Podemos intentarlo más adelante, mientras tanto hay que volver a comprar condones —dice con el ceño un poco fruncido. El castaño ríe y se acerca para besar sus labios antes de volver a la cocina.

—Bueno, quería decir que también estuve leyendo esas cosas de abuelas que hacen para saber identificar el sexo del bebé —Mi amiga asiente y deja la ropa a un lado—. Es bastante fácil, ¿quieres probar? —Asiente y me acomodo mejor en mi asiento mientras las chicas se acercan con curiosidad—. Bueno, debes prestarme tu collar y el anillo que te regaló Dylan —Se desabrocha el colgante y me lo tiende. Le quito los dijes y los dejo sobre la mesa. Cuando me tiende el anillo paso la cadena a través de él y sonrío—. Ahora túmbate —pido poniéndome en el respaldar del sillón y el primo se coloca a mi lado mirando con atención la escena. Dejo el anillo y cadena sobre su vientre conteniendo una sonrisa. Respiro hondo y tomo la cadena y la levanto hasta que el anillo no la toca y se balancea como un péndulo. Río emocionada y creo que siento lágrimas acumularse en mis ojos—. ¡Es un varón! —exclamo ya no pudiendo evitar que las lágrimas caigan.

Abrazo a Dylan y luego a la castaña que también está llorando. Las chicas los felicitan y cuando ellos se abrazan tomo varias fotos porque he decidido que pronto comenzaré un collage con fotos nuestras. Aunque ya tengo un par de todos.

—Si el niño me dice su nombre en un sueño, definitivamente tendremos que ponérselo —murmura contra su cabello y besando su mejilla—. Parece que se comunica con su padre por sueños.

—Es sólo una coincidencia, pero si te dice un buen nombre, me lo pensaré —comenta besando sus labios con pasión. Miro a las chicas que se ven igual de incómodas que yo. Juntos mis cosas y las chicas se estiran mientras se acercan a la puerta.

—Nosotras ya nos vamos para que puedan celebrar la noticia —Amber sonríe con picardía y abre la puerta tirándoles besos—. No olvides el condón, Dylan.

Río y los saludo con mi mano antes de salir junto a Drew. Las dos llevan una sonrisa tan grande como la mía y sé que se trata por la noticia del bebé.

—Julian ha estado escuchando a No excuses —dice Amber una vez estamos en el ascensor—. Dijo que eran realmente buenos y no sé qué cosa debían mejorar, él es el experto en música. Le gustó la banda y el trabajo de los chicos.

—Es que son muy buenos, pero ellos han abandonado el sueño sólo porque las ventas no se dieron bien —Cruzo mis brazos y me apoyo en la pared metálica—. Ashton ni siquiera confía en la música que tiene y la que está escribiendo.

—Kyle se lo está tomando a broma cada vez que quiero preguntarle algo —La pelirroja resopla acomodando su cabello frente al espejo—. Cuando lo conocí tenía esa gran ambición por ser modelo y creo que ni, aunque la más prestigiosa agencia o fotográfica le dijera que era un asco, habría parado de intentar hacerse camino.

—¡Lo sé! Ashton hablaba de la actuación como si fuera algo que estaba preparado para vivir de un momento a otro —El ascensor se detiene y bajamos—. Es como si con este sueño ellos se dieran por vencidos.

—Yo creo que aún quieren ser músicos.

—Cada vez que los veo hablar sobre algo de la banda o escuchan sus propias canciones les brillan los ojos de una manera tan tierna —Amber se sube de copiloto en el auto de Drew con una sonrisa y pone la dirección en el GPS mientras yo subo en la parte trasera—. Julian está libre, así que nos invitó a almorzar.

—¿Qué tal el videoclip? —pregunto enviando un mensaje a Chloé para vernos esta semana.

—Quedó tan bien chicas, me hice amiga de una estilista y el director era muy amable.

—¿Qué ropa usaste? ¿Conjunto sexy o casual?

—Ambos.

—No me digas que sales en lencería —dice Drew con una sonrisa burlona.

—Obviamente sí, la canción tiene cierto doble sentido —No puedo verla, pero estoy segura de que rueda los ojos—. Hay tomas de cómo empieza la relación y varias escenas en las que simulamos hacerlo.

—¿Y qué tal besa Julian?

—¡Como la puta madre! —dice riendo—. No entiendo cómo es que ese hombre sigue soltero. Si besa así, no me quiero imaginar lo que es en la cama.

—Estoy segura de que ya te lo has imaginado en la cama muchas veces —comenta la pelirroja con burla—. ¿También tuviste sueños húmedos?

—Algunos.

Río porque no esperaba que lo confesara. Pero es Amber, ella al igual que Drew parecen no tener pelos en la lengua.

—¿Y él te dijo algo? ¿Le gustas? —pregunto ansiosa por una respuesta. Aunque no me engañan, tengo ojos de cupido y sé que a Julian le atrae bastante mi amiga, no sé si le gusta más allá de lo físico, pero sé que atracción hay.

—Él simplemente me sigue invitando a comer y me hace cumplidos tiernos. No ha dicho nada, pero en las escenas hot pude sentir que lo caliento.

—¿No se han besado fuera de cámaras? —Drew dobla a la izquierda y la mira de reojo. Todas estamos interesadas en lo que posiblemente pasará con Amber y Julian.

—Uhm... No. Siempre besa mi mejilla o mi mano.

—Quizás está siendo caballero y piensa que tú no lo deseas —digo pasando los dedos por mi cabello como si fuera un peine—. Pero quiere mantener contacto contigo.

—¿Te habrá enviado a la zona de amigos?

—Si se la come con la mirada, no creo que la haya tachado de amiga.

—La verdad es que no lo sé chicas. Pero en cuanto pueda le preguntaré.

Drew estaciona el auto y Amber revisa su móvil mientras bajamos. Es un bonito restaurante, creo que ya he estado aquí, posiblemente una de las veces que salí con Jordan. Siempre íbamos a restaurantes costosos, porque a él le encantaba despilfarrar dinero en lugares ostentosos. Cuando ingresamos al lugar compruebo que sí he estado aquí y recuerdo que fue donde lloré porque él me confirmó que sí se había besado con una actriz con la que lo habían fotografiado.

Amber pregunta por Julian y enseguida nos guían a una mesa bastante apartada de las personas. Veo al castaño mirando su móvil y parece aburrido. Cuando levanta la mirada nos mira y sonríe a mi amiga. Ese tipo de sonrisas no se dedican alguien que sólo te provoque calentura. Se pone de pie y besa la mejilla de la rubia.

—Creí que no vendrías.

—No llego tan tarde —dice mirando la hora en su móvil—. Además, tenía cosas importantes que chismear.

Sonríe antes de voltear a Drew y a mí y saludarnos con un beso en la mejilla también. Corre la silla para Amber y quiero reír, pero no lo hago y me siento dándole una mirada a Drew que la devuelve con complicidad. Sí, ella también se ha dado cuenta.

—¿Y cuál ha sido el chisme importante? —pregunta con una sonrisa mirándonos a las tres.

—Kylan tendrá un varón —dice Drew con una sonrisa. El castaño parece sorprendido y creo que por un momento se queda sin palabras, porque no dice nada.

—¡Grandioso! Dylan estaba muy convencido de que así sería —Luce pensativo durante unos segundos mientras su sonrisa se extiende—. Deben estar muy contentos.

—Sí, los dejamos celebrando para venir a deleitarnos con tu encantadora presencia —declaro con una sonrisa y él ríe.

Un camarero se acerca y nos toma la orden. Pido pastas porque hace bastante que no como fideos y este lugar tiene muy buenos platos. Veo a Julian mirar bastante a mi amiga, pero no digo nada. Hablo con Ashton por mensaje hasta que el camarero desaparece.

—Subiste fotos con mi novio y ahora tiene miles de seguidores —digo con un reproche fingido y él ríe—. Hay mujeres enviándole fotos desnudas. No estoy contenta con eso, Julian.

—Ah, pero seguro que él sólo quiere que tú le envíes fotos desnudas —Abro la boca sorprendida mientras las chicas ríen—. Puedo subir una foto contigo y estamos a mano.

Me recuesto en el respaldar de la silla y lo miro fijamente mientras me cruzo de brazos.

—Podrían pensar que soy tu novia.

—Dejo una nota al pie aclarando que sólo eres una amiga.

—No, a Ari no le gusta ser el foco de las cámaras —responde Drew con una sonrisa—. Pero yo sí quiero una foto contigo.

—Cuando quieras —Sonríe guiñándole un ojo. Luego mira a la rubia que está a su lado—. ¿Subo una foto contigo?

—¿También soy tu amiga? —inquiere ladeando su cabeza y mirándolo fijamente.

Sí, ella no tiene problemas en decir lo que piensa y yo sabía que tarde o temprano le preguntaría sobre ello. Amber es muy directa y no le gusta guardarse las cosas, pero pensé que al menos esperaría a estar a solas con él.

—¿Quieres ser mi amiga?

—¿Quieres que lo sea?

Miro a conejita y sonríe divertida antes de tomar un poco de agua. Julian la mira a los ojos sin titubear y Amber no despega la mirada de él. Pareciera que ni saben que estamos en la misma mesa con ellos. El cantante se acerca un poco más a ella con una sonrisa.

—No estás en la zona de amigos —Casi grito de emoción cuando lo veo acercarse, creo que va a besarla en la boca, pero no, sólo besa la comisura de sus labios—. ¿Estoy en la zona de amigos? —pregunta alejándose unos centímetros y mirándola a los ojos.

—Eres demasiado sexy para estar en la zona de amigos.

Ríe y creo que va a decir algo, pero mi amiga toma su rostro y lo besa. Cubro mi boca para no gritar y miro a la pelirroja que está igual que yo. Amber es mi heroína. Creo que hasta se están besando con lengua. Rápidamente les saco varias fotos y se las envío a Ashton. ¡Dios! No puedo creer que esto esté pasando justo frente a mis ojos. Definitivamente estoy viendo a una nueva pareja nacer.

Julian acaricia su brazo y cuando la rubia se aleja la mira embobado con la boca abierta. Ella sonríe y no recuerdo haber visto sus ojos brillar tanto alguna vez en mi vida. Esto se siente como estar viendo una película romántica.

—Es un trato —dice la rubia alejando sus manos de su rostro y con una pequeña sonrisa.

—Eso parece —musita lentamente. Oh, Ashton. Amo que hayas juntado a estos dos. Se aclara la garganta antes de mirarnos a Drew y a mí. Sonrío alzando las cejas y creo que parece un poco tímido porque evita nuestras miradas—. Yo...

Mamá lo aprueba —dice Drew asintiendo con la cabeza hacia la rubia.

—Oh, yo ya los veía de este modo desde que los vi conocerse frente a mis ojos —Tomo un poco de agua mientras veo que mi amiga rueda los ojos con una pequeña sonrisa—. Espero que esto no sea sólo sexual y quieras a mi niña dorada para algo con sentimientos y no sólo carnal.

¡Oh Dios! ¡Acabo de hacer sonrojar a Julian Stone! Esto es tan divertido. Ni siquiera la rubia está sonrojada, pero bueno, ella está acostumbrada a este tipo de conversaciones.

—Ya deja de avergonzarlo —pide la rubia y sonrío mientras nos colocan la comida—. Julian se ha vuelto un excuser gracias a mí. Ashton por supuesto que no lo sabe y estamos siendo cuidadosos para que él no sepa que Julian sabe.

—Entonces, ¿vas a ayudarlos? —pregunto con ilusión y él asiente mientras el sonrojo se va desvaneciendo de sus mejillas.

—Estoy hablando con mi representante y un productor musical. Han escuchado las canciones y los quieren. He averiguado la anterior discográfica que los contrató y es una que no tiene mucha llegada ni tanta trayectoria en la música.

—Pero, ¿la música la consideran buena? —cuestiona Drew totalmente interesada.

—La música es muy buena, sin embargo, hay cosas por arreglar y no es de parte de ellos. Tuvieron una mala combinación de sonidos, el instrumentista hizo un trabajo terrible —asegura con el ceño fruncido—. Me estoy encargando de conseguir lo necesario para que puedan tener un representante y graben con para otra discográfica.

—Diles la mejor parte —pide Amber sacudiendo su brazo y él la mira con una sonrisa antes de volver su mirada a nosotras de nuevo.

—Estoy preparando un nuevo Tour y los quiero de teloneros.

—¡Oh Dios! —exclamo cubriendo mi boca para no gritar una vez más—. ¿En serio?

—Ashton es un buen amigo y los chicos me caen muy bien; además, tienen un gran talento. Sería un desperdicio que todo quede en el olvido.

—Gracias. Sé que quizás está mal que estemos viendo esto a sus espaldas, pero estoy segura de que esta sorpresa les encantará —Acaricio su mano y sonrío—. En verdad aprecio que estés haciendo esto.

—Sí, cualquier cosa que necesites, puedes decirnos. Cuenta con nosotras —dice Drew con una gran sonrisa—. Quizás ellos lo consideran un sueño imposible, pero tú les estás ofreciendo una segunda oportunidad para cumplirlo y eso es algo que no muchos harían.

—Siempre que pueda ayudar, lo haré —Sonríe hacia nosotras—. Ojalá alguna de mis novias hubiera hecho lo que están haciendo por ellos ahora. Sí que tienen suerte.

—Lo mejor de estar en una relación es ver a la otra persona crecer —aseguro bebiendo un poco de mi vino—. Conocí a Ashton antes de que hiciera el casting para la película, de hecho, yo se lo conseguí, y la verdad es que no podría estar más que orgullosa de lo que está logrando mi novio ahora mismo.

—Ver la cara de satisfacción de Kyle luego de cada sesión de fotos no tiene precio. Creo que podría enamorarme de nuevo sólo con ver su sonrisa mientras trabaja de lo que siempre deseó. Realmente me hace sentir muy orgullosa que él nunca se haya rendido y siempre intentara alcanzar su sueño.

—Creo que podría escribir una canción sobre ustedes —murmura Julian mirándonos con atención y una bonita sonrisa adorna su rostro—. Sobre sentir ese amor y esa admiración hacia sus parejas.

—Quizás para el próximo disco —anima Amber y él le sonríe con dulzura antes de tomar su mano y besarla—. Creí que había quedado claro que ahora los besos eran en la boca.

Él ríe antes de acercarse y darle un corto beso.

—Puedes recordármelo siempre que quieras.

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