31. Sinceridad
Capítulo 31: Sinceridad
-¿Dinamarca?
Asiento pedaleando más fuerte. Mis piernas se sienten un poco entumecidas por el esfuerzo, pero es normal. Después de un mes estoy retomando el gimnasio, no es que lo dejara por holgazana, pero no me han dejado hacer mucho esfuerzo y estuve en reposo. Subí unos kilos que ahora pretendo bajar, aunque Ashton asegura que no me sientan mal.
-Sí, cuando me lo dijeron casi enloquezco.
-¿Va a presentarte a tus suegros? -Asiento de nuevo y dejo de pedalear. Amber se detiene también y vamos hacia unas pesas-. Bueno, era algo que iba a pasar en cualquier momento. Ashton babea por ti desde el principio -Sonríe tomando unas pesas-. Aún recuerdo cuando lo conocimos. No dejaba de verte y sonreír.
-Es que fue una bonita primera cita -Recuerdo las conversaciones, las risas, los besos. Definitivamente una de mis citas favoritas-. Siempre en las primeras citas me llevaban a cenar a un restaurante ostentoso y pagaban la cuenta por mí. Todo era en un ambiente íntimo como para poder hablar tranquilos -Incluso Jordan lo hizo cuando me pidió otra oportunidad-. Ashton me llevó a un parque de diversiones, donde todo era comida chatarra, había mucho ruido y era fácil reír. Ni siquiera tuvimos tanta intimidad, pero sí hubo diversión.
-Pienso que Ashton es bastante determinado y adorable. Él nunca te presionó y tuvo en consideración tus inseguridades -dice cerrando los ojos. Sí, como que también comienzan a dolerme un poco los brazos-. Y te adora tanto, te mira de una forma que me hace sentir un poquito de envidia.
-¡Lo sé! -No puedo evitar sonreír dejando las pesas a un lado-. Estoy nerviosa por Dinamarca, pero aún no iremos. Seguro me prepararé bien. No sé cómo serán los padres de Ashton y eso me pone muy nerviosa.
-¡Calma! Tienes a Dylan y Kyle de tu lado -Suspiro. Es cierto, sé que cuento con su apoyo igual que Drew y Kate cuentan con el de Ashton. Las chicas están nerviosas como yo, pero Drew tiene más ansiedad que nervios. Kate está siendo consumida por los nervios, pero Dylan aseguró que no era necesario decir sobre el embarazo por el momento. De cualquier modo, no sé notaría mucho porque ella tendría cuatro meses recién para esa fecha-. Al menos no estarás sola mientras tus amigas tienen a sus novios.
-¿Qué hay de Julian? Ashton dijo que también iban a invitarlo.
-Cada vez adoro más a tu novio -Sonrío. Es el efecto Ashton-. Luego te daré mi pasaporte y todos los documentos que necesites para el plan de viaje.
-Claro, aún estoy buscando una fecha específica porque Ashton quiere que estemos unos diez días allá. Obviamente los chicos pueden todos, pero ya sabes que debo coincidir con Sel y Evan. Julian lo hablará con Ashton.
-Sólo no te vuelvas loca.
-No, sólo debo encontrar una fecha conveniente para todos dependiendo nuestros trabajos, sacar los pasajes y listo. Ashton se ocupa de reservar el hotel según me dijo -Suspiro y abandono las pesas para tomar un poco de agua-. Dijo que me ama.
-¡Wow! ¿Y eso cómo te hace sentir?
-En un principio no le creí, lo dijo tan a la ligera que pensaba que estaba bromeando -Sonrío al recordar el momento y las bonitas palabras de mi novio-. Me asusté un poco y me negaba a creerlo, pero luego de que me tranquilizara y él dijera unas cuantas palabras pude asimilarlo un poco mejor. No lo sé. Me gusta estar con Ashton y me gusta que él me ame.
-¿Qué hay de ti? ¿Lo amas?
Suspiro, esa es la parte complicada del asunto. Ashton está muy seguro de lo que siente, de lo que somos y es muy comunicativo sobre sentimientos y nosotros. Pero yo no soy tan fácil para asuntos del corazón. Puedo sentir sin darme cuenta y me cuesta mucho asimilar mis sentimientos, siempre estoy rodeada de dudas y quizás a veces me cuesta un poco expresarme con él. Y ser consciente de lo que él siente ahora mismo me hace cuestionarme sobre qué siento yo.
-No lo sé, creo que mi ritmo es un poco más lento al suyo. No estoy segura de poder decir en este momento que amo a Ashton, pero tampoco siento que sólo lo quiero mucho. Si hubiera alguna especie de punto medio entre el querer y amar, yo me encuentro ahí, en ese punto medio que va en camino a amar.
-Es tan bonito ver esta faceta de ti de nuevo y sin lágrimas de por medio.
Es cierto, cuando descubrí la intensidad de mis sentimientos por Jordan él estaba engañándome en la universidad. Llevábamos un año y medio de novios cuando supe que lo amaba. Fue terrible porque no paraba de llorar y Jordan me engañaba con la misma frecuencia que una chica se cambia de ropa.
-Querer a Ashton se siente bien... Es como si me estuviera sanando.
-Bueno, según lo que cuentan los chicos, no eres la única sanando un corazón roto.
-Me ofrecieron un contrato para una serie de comedia en televisión -comenta Daria mientras bebo de mi trago, tiene cierta acidez es ligero de alcohol. Igual no es tanto problema el alcohol, tengo buena tolerancia a menos que beba más de diez tragos de esto.
-¡Felicidades! ¿Y te gusta la comedia? -La rubia sonríe y asiente-. No creí que fueras de comedias, te veía más en películas románticas siendo la protagonista que deslumbra con su belleza al hombre o mujer con su encanto -Ríe y acomodo un mechón de mi cabello detrás de mi oreja. Ya tengo que teñirme las raíces de nuevo.
-No lo sé, siempre estuve en cosas de acción o comedia. Pero un drama romántico suena interesante.
-Escuché que en cierta película de videojuegos buscaban a una chica. Tiene drama, acción y amor. Luego le paso la data a Juliet -digo y ella sonríe bebiendo otro poco de su trago-. ¿Y cómo están las cosas?
Suspira acabando el contenido de su vaso y pidiéndole al barman otro.
-Josh no ha dejado de llamar y buscarme.
-¿Y qué quiere?
-Quiere volver, dice que no conoce a esa mujer de nada.
-¿Qué piensas hacer?
-Bueno, voy a hablar con la chica, pero sé que no quiero saber nada más de él -Sus ojos se enrojecen y me aproximo un poco más a ella, sé que se viene el llanto-. Me engañó, Ari. Él ni siquiera tuvo en cuenta mis sentimientos. Entonces, ¿por qué estaba conmigo si se acostaba con otras? ¿Para qué me hacía perder el tiempo en una relación cuando podía conseguir a alguien mejor?
-Te entiendo, me lo han hecho hace unos años y duele que la persona que amas no te ame de la misma forma -Le doy un abrazo porque comprendo cómo se siente y lo que debe estar atravesando-. Sé que aún lo amas porque los sentimientos no se van de la noche a la mañana, pero intenta no torturarte en todo lo que pasó. Si quieres aclarar tus dudas con esa mujer para cerrar esta etapa lo veo muy bien, sabes que estoy aquí para ti -Me alejo un poco y le ofrezco una sonrisa mientras limpio sus lágrimas con mis dedos-. No dejes que ningún hombre pisotee tu corazón, mucho menos uno infiel.
-Lo sé -Suspira y juega con el vaso en sus manos, pero ni consejo parece haber llegado tarde. Daria ya está lidiando con un corazón roto y un ex insistente que no va a dejarla olvidar-. ¿De dónde conoces a Jordan?
Enderezo mi postura en el asiento, no me esperaba esa pregunta. De hecho, evité decirle a Daria de dónde nos conocemos y tengo entendido que J tampoco le dijo algo al respecto. No creímos conveniente nombrarlo y parece que ahora tampoco es muy bueno mencionarlo.
-Fuimos juntos a la escuela. Éramos compañeros, yo estudiaba fotografía y él me pidió que le haga unas fotos para su presentación a una agencia.
Es la verdad después de todo. Además, el cómo nos conocimos no es el problema principal, el espacio de cuatro años de distancia lo es.
-¿Fueron novios? -Me paralizo. No esperaba que pregunte de forma tan directa, desvío la mirada sin saber qué responder. Decir que no me lleva a mentir y decir que sí a contar nuestra historia, una que seguro haga desconfiar a Daria sobre J-. Tomaré tu silencio como un sí. ¿Fue hace mucho?
-Empezamos al tiempo de conocernos y terminamos hace más de cuatro años -comento dando un trago largo a mi bebida. Siento que estoy en un interrogatorio y soy culpable de algún crimen.
-¿Por qué terminaron?
¡Bingo!
Justo en el blanco, Daria. ¿Qué se supone que debo hacer? ¿Decirle que me engañó durante toda nuestra relación, pero que ahora se ha redimido y no es el mismo de antes? ¿Mentirle y decir que dejamos de amarnos? Debería decirle lo que pasó, pero estoy jugando de Cupido aquí y se me va todo a la mierda si cuento la verdad. Aunque tampoco puedo mentirle porque tarde o temprano descubrirá la verdad y eso sólo traería inseguridades a ellos.
Suspiro.
-Teníamos diferentes puntos de vista -digo bebiendo un poco y sin despegar mis ojos de la mesa-. Yo veía un gran futuro con él, pero no era algo recíproco. Me engañó muchas veces y lo perdoné -Sí, lo mejor va a ser contar la verdad-. ¿Recuerdas la fiesta de San Valentín de la que te hablé? -Asiente-. Él fue ese ex que terminó conmigo el día de los enamorados cuando le propuse matrimonio frente a todos los invitados.
No dice nada. Se aclara la garganta y acaricia mi brazo.
-¿Y aún así son amigos?
-Bueno, luego de un poco de insistencia de su parte pudimos tener una larga charla como adultos. Él quería volver, pero yo estaba feliz con Ashton -Sonrío recordando esa cena-. Es bastante obvio que ambos cambiamos mucho en estos años y estamos conociendo al otro de nuevo, pero como amigos.
-Si sabes que terminé con Josh por ser infiel, ¿por qué me presentas a tu ex que te fue infiel?
Sonrío, supongo que puedo mejorar un poco esta situación. No hay tantas cosas malas en Jordan.
-Porque Jordan es una nueva persona que no teme a los compromisos y ha cambiado mucho. Ha aprendido de sus errores y se merece una oportunidad para amar y ser amado como cualquier otra persona.
Asiente comprendiendo mi punto. Es posible que haya plantado cierta duda en ella, pero seguro que luego me dará la razón cuando descubra al nuevo hombre que hay en Jordan. Quizás ellos ahora no tengan la confianza suficiente como para empezar algo, ambos aman a otras personas, pero supongo que tendrán que superarlo en algún momento y podrán darse una oportunidad.
Un corazón roto es difícil de sanar, pero no imposible. Cuando conocí a Ashton estaba negada a sentir y arriesgarme al amor de nuevo, pero era de esperarse que con su encanto y paciencia cautivara mi roto corazón. Incluso él lo está sanando sin hacer nada más que ser él mismo.
Ashton también obtuvo un corazón roto, pero no sé si está sanando o sigue igual de destrozado. Él siempre se mostró de la misma forma.
-Es posible que las cosas vayan muy lentas con él -murmura acabando su bebida de un trago-. Aún tengo a Josh en mi cabeza, pero Jordan me parece interesante.
-Lo es.
Esboza una sonrisa pequeña y sé que está pensando en él. Jordan está un poco nervioso y ansioso y ella algo insegura, pero no me quedan dudas de que ambos harían una bonita pareja. Las veces que los he visto juntos parecían congeniar muy bien.
-Bueno, cielo. Debo volver a casa porque tengo un maratón de Sex and the city para ver y tengo que organizar un viaje a Dinamarca -Beso su mejilla y ella me sonríe. Dudo un momento-. ¿Quieres que te lleve?
-No, llamaré un taxi -asegura sacando su móvil y dejando su bebida a un lado-. Creo que me veré con Jordan -murmura. Asiento, él no la dejará aquí tirada.
Salgo del bar y subo a mi auto. Me pongo el cinturón y enciendo el estéreo. Cindy Lauper dice que las chicas sólo quieren divertirse. No tardo más que veinte minutos en llegar. Tengo nuchas cosas que organizar, ni siquiera sé cuándo viajaremos a Dinamarca y se supone que mañana Ashton y yo almorzaremos con mis padres.
Y hablando de Ashton. Tomo mi móvil y respondo poniéndole el seguro.
-¿Estamos en condiciones de que hable en francés y tú te calientes? -pregunta en voz un poco baja. Río, hace unos días me habla en diferentes idiomas e intenta enseñarme palabras. Sabe que escucharlo hablar otro idioma me excita.
-No, estoy en el estacionamiento y no sería cómodo caminar con la ropa interior mojada -susurro y escucho su risa. Ah, es tan bonita su risa-. Además, es horrible que quieras mojar, pero no quitar -Ríe.
-Apostaría cinco dólares a que hoy no llevas ropa interior -Me sonrojo porque es cierto. Hoy quise tener un poco más de libertad, pero si él lo notó, no quiero ni imaginar quién más lo habrá hecho-. Otros diez a que estás sonrojada.
-¿Qué se supone que debo responder a eso?
-¿Qué te parece un "Ashton, ven a comprobarlo"?
Sonrío esperando el ascensor.
-Ashton, ven a comprobarlo.
-Oh, eres tan sexy.
-Si tú lo dices -Al fin llega el ascensor-. Debo colgar. Te quiero.
-Te amo.
Sonrío y acabo la llamada. Me encanta Ashton, me encanta que me diga que me ama y me encanta que haya este tipo de confianza entre ambos. Salgo de la caja metálica y giro las llaves en mi dedo. Supongo que podría ir a su departamento en la madrugada de sorpresa. Meto la llave en la cerradura y giro abriendo la puerta.
Cierro detrás de mí y suspiro. Al fin en casa. Cuelgo mi abrigo y voy a la cocina para tomar una copa de vino. La heladera no está. Trago nerviosa viendo el espacio vacío en el que solía estar mi heladera. ¡No está! ¡La heladera no está!
Rasco mi cabeza porque comienzo a sentir picazón. Volteo para ir a la sala y no nada. ¡No hay nada! ¡Malditamente está vacía! Me apoyo en la encimera y observo mi sala vacía. Ni sillones, ni televisión, ni mesa, ni almohadones. Ni un sólo mueble a la vista. Sólo hay papeles en el suelo que ni siquiera tiene la alfombra mullida que me regaló mamá.
Siento las lágrimas acumularse en mis ojos y tiro de mi cabello caminando por el pasillo. Esto no puede estar pasándome. ¡No hay nada! ¡No tengo nada!
Oh Dios. Siento que no puedo respirar. Las lágrimas no dejan de caer mientras intento llevar un poco de aire a mis pulmones. Voy a morir. Cuando llego a mi habitación la escena es peor. ¡Ni siquiera tengo cama! ¡Me robaron todo!
Estoy tan mareada que me agarro de las paredes mientras me acerco al clóset. Abro las puertas y... nada. ¡También se llevaron la ropa! Caigo al suelo llorando y no puedo evitar dar un grito de enojo. Todo lo que me quedan son papeles. Ni un solo mueble, nada.
Esto no puede estar pasando. No puede ser que me hayan robado todo. ¡Oh Dios! ¿Qué voy a hacer? No tengo nada. Nada de nada. Es imposible. Esta es una zona muy segura y nunca hubo robos en el edificio. Como mucho se pudo haber extraviado alguna cosa que a los días volvió a su dueño, pero vaciar un departamento...
Tengo que llamar a la aseguradora y hablar con el portero. Miro la hora, más de medianoche. No. Nadie va a atenderme a esta hora. Llamaré en la mañana, pero ¿dónde voy a dormir? ¡Ni siquiera me dejaron la cama!
Respiro hondo tratando de tranquilizarme y limpio mis lágrimas. Debo tranquilizarme, no tengo que perder la calma. Me levanto del suelo y camino hasta la puerta sin mirar a mi alrededor, si lo hago tendré un ataque de histeria.
Tomo mi abrigo y las llaves, también mi bolso. Limpio mis lágrimas y salgo de mi apartamento. Necesito salir, no puedo ver mi hogar tan vacío. Doy dos vueltas a la llave y prácticamente corro hacia el ascensor. Los treinta segundos son eternos y no puedo dejar de llorar. Corro hacia mi auto y desactivo el seguro. Subo y me coloco el cinturón antes de salir con rapidez del estacionamiento. No hay música acompañándome.
Dejo mi auto dentro del estacionamiento del edificio como tantas otras veces hice. El encargado me conoce y no hay problema en que lo deje allí. Nuevamente me meto en otro ascensor y no puedo evitar tirar de mi cabello, las lágrimas vuelven a acumularse en mis ojos y sé que estoy siendo materialista, pero me importa muy poco cuando se han llevado todo lo que me gané con mi esfuerzo trabajando.
Las puertas se abren y corro por el pasillo, cuando me detengo frente a la puerta golpeo un par de veces mientras rasco mi cabeza. Nadie viene. Golpeo de nuevo tirando de mi cabello porque siento que voy a morir. Escucho la puerta abrirse y me lanzo a sus brazos rodeando su cuello.
-Parece que alguien me extrañó -Sollozo abrazándolo más fuerte-. ¿Ari? ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?
-¡No tengo nada!
Lloro escondida en su cuello y creo escuchar la puerta cerrarse antes de sentir sus brazos rodeándome. Acaricia mi espalda y besa mi cabello.
-Entonces me debes cinco dólares -Río, pero pronto la risa se vuelve un sollozo y el abrazo es más fuerte-. Dime qué es lo que no tienes.
-No tengo nada -farfullo alejándome de su abrazo y hipando. Intento hablar, pero los sollozos no me dejan. Ashton pasa sus dedos por mis mejillas limpiando mis lágrimas y corre el cabello de mi rostro-. Se llevaron todo. Me robaron todo lo que tenía en mi departamento.
-¿Tienes aseguradora?
-Sí, pero llamaré en la mañana porque ahora no me atenderán -Lloro de nuevo y me cubre con sus brazos-. Mi hogar está tan vacío.
-Vamos a encontrarle solución, ya verás que vas a recuperar tus cosas y podrás ubicar todo milimétricamente como siempre lo haces -Sonrío un poco y siento un ligero balanceo-. Piensa que esta vez sólo se llevaron lo material y tú estás bien.
-Se llevaron mi ropa.
-¿Estás diciéndome que mi fantasía de verte desnuda se está haciendo realidad? ¿No más ropa para Ariadne?
Sonrío un poco y me alejo unos centímetros. Ashton me besa de forma lenta y delicada, robándome un suspiro.
-Tienes algo de ropa aquí, pero luego podemos ir a comprarte algo -dice y asiento sorbiendo mi nariz-. Ya no llores, novia -Estoy por tirar de mi cabello, pero aleja mis manos y acomoda el desastre que dejé en mi cabellera-. Todo estará bien.
-¿Puedo quedarme a dormir contigo?
Detiene sus movimientos y me mira a los ojos frunciendo el ceño.
-Ni siquiera deberías preguntarlo. Mi cama es tu cama. Mi departamento, tu departamento -Ladea su cabeza con una sonrisa-. ¿Ahora es cuando saco un anillo y me pongo de rodillas?
Sonrío y besa mi frente. ¿Cómo podría no querer a Ashton? Él es simplemente encantador.
-¿Seguro?
-Tú puedes quedarte todo el tiempo que quieras -Quita mi bolso y lo deja colgando junto a mi abrigo. Deja mis llaves en el cuenco junto con las suyas y toma mi mano-. ¿Has comido algo? -Asiento-. ¿Quieres darte una ducha? -Vuelvo a asentir-. Bien, Drew hace unos días compró un shampoo y cosas para el cabello y las dejó aquí. Dijo que sería para cuando vinieras tú o Maravilla.
-Es una buena idea -murmuro mientras me lleva de la mano al baño.
-Lo es, Kyle estuvo usando algunas de esas cosas... -Frunzo el ceño y Ashton sonríe-. Él es un poco coqueto -Una vez dentro del cuarto de baño abre la llave y regula el agua-. Te prepararé un té mientras te das una ducha y te dejaré ropa en mi cama -Esta por irse y lo detengo en un abrazo-. Creo que hoy había un maratón de Sex and the city, ¿no veías esa serie?
Río, no puedo creer que lo recuerde.
-Sí.
-Bueno, podemos verla si quieres -Beso su cuello y eso parece hacerle cosquillas porque ríe removiéndose-. Creo que no es momento de comprobar si gané mi apuesta.
Intenta apartarse, pero cierro la puerta y beso sus labios con pasión.
-Yo pienso que deberías hablar en francés -Ríe contra mis labios y me encargo de quitar su camiseta. Sus manos van a mi espalda y bajan la cremallera de mi mono-. Te quiero tanto.
Vuelve a reír mientras beso su cuello y mis manos se apresuran con su pantalón.
-Me gusta cuando lo hacemos en la ducha.
-Me gusta que seas un novio tan atento.
-À son service, une fiancée⁴.
*************
4: A su servicio, novia.
Este capítulo va a dedicado a una fiel lectora: mirna12
Gracias por leer y votar🖤
Nos leemos pronto.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top