Capitulo VII Inuyasha, mi cuñado...
"...Estamos unidos en esto...descuida tenemos mucho tiempo..., toda una vida...mientras tanto...solo hay que disfrutarlo..."
Pov Rin
-HERMANO!!!-dije con sorpresa, mas bien grite, pero aunque hubiese estado con un parlante gigante, ambos hermanos Taisho no me escucharían, ya que estaban demasiado ocupados discutiendo, en cierto modo debo agradecerlo, porque soy yo la que se encuentra sentada sobre el escritorio de Sesshomaru y al parecer no lo nota
-largo!, no lo volveré a repetir-amenazo Sesshomaru al joven que corresponde al nombre de Inuyasha, volteando para mirarlo directamente con ojos de fastidio
-Keh!, por mi no estaría en este lugar, odio los hospitales-contesto, no dándose por aludido las amenazas de Sessh, solo se cruzo de brazos y contesto con cierto sarcasmo-es porque me llego una estúpida invitación de tu parte
-¿de mi parte?
-¿de su parte?-me pregunte también confusa, mirando como Inuyasha sacaba de su bolsillo, un gran sobre con una elegante invitación extendiéndoselo a Sesshomaru quedando ambos asombrados
Invitación
La gran familia Taisho, te invita cordialmente a la fiesta de compromiso de nuestro hijo Sesshomaru Taisho y la señorita Rin Nakamasu
Esperamos su compañía en este evento, que entregara felicidad y armonía a dos familias
Quede boquiabierta al ver aquella invitación, no puedo creerlo, ¡ya están las invitaciones!, mire la letra pequeña de este que salía el anfitrión del evento-Irasue...-leí-no puede ser...
-Irasue me invito-contesto él por nosotros, tal vez porque nos vio demasiado sorprendidos de la situación, lanzando un suspiro Sesshomaru
-mi madre, nunca cambiara
-hey! Ni yo sabia de esto, bueno...si-conteste jugando con mis dedos-pero no sabia que lo harían tan rápido-dije en mi defensa
-¿y tu quien eres?-pregunto Inuyasha- Sesshomaru imbécil, estas a punto de comprometerte y ya estas con otras chicas-comento para fastidiarlo y yo enfurecida quería golpearlo, pero su hermano mayor se me adelanto, dejándolo en el piso con el golpe de puño que le dio, me quede helada, jamás creí que lo haría, tomándome entre sus brazos y bajarme con delicadeza y decir
-ella es mi prometida, estúpido, mas respeto con ella ¿te quedo claro?- dijo ubicándome detrás de él, afirmándome en su espalda, me sentía extraña, una sensación cálida y tersa me envolvía, es algo difícil de explicar
-perdón...señorita Rin...-dijo poniéndose de pie- soy Inuyasha Taisho, es un gusto-siguió mas educado de como entro, yo solo sonríe apenada por lo que había pasado, se hubiera evitado primeramente de no haber caído por las escaleras
-descuida...-conteste sonrojada
-doctor Sesshomaru, lo necesitan en cirugía...-hablo la enfermera abriendo la puerta de la oficina, desvió la mirada hacia otro punto, para voltear a su escritorio y escribir unas cuantas notas, arrancando el papel
-toma-dijo extendiéndome el papel
-¿Qué es esto?-pregunte
-tu licencia medica, reposo por 15 días
-¿Qué? Pero es solo el pie Sessh..., no la pierna entera, además ¿Qué pasara con mis clases?-le reclame
-no me importa, debes guardar reposo-hablo severo
-pero...
-nada de peros Rin, es tu pie, y debes guardar reposo absoluto
-¿Cómo?
-le diré a tus padres para que obedezcas
-acúsame, atrévete -levante de ceja mientras me cruzaba a ver si se atrevía a hacerlo, logrando que solo se acercara a mi encendiendo mis mejillas
-¿quieres probarme Rin?, no me provoques
-doctor Sesshomaru, lo estamos esperando-nuevamente nos interrumpió la enfermera, suspirando pesadamente
-voy enseguida-contesto para marcharse y mandarle una mirada casi asesina a su hermano liberando un pequeño escalofrió en su espalda, pero antes, me entrego una muleta acomodándomela a mi estatura
-se me olvidaba-dijo- has lo que te digo
-esta bien...-conteste con resignación
-bien-marchándose de la oficina, un impulso me hizo alcanzarlo antes de que se fuera aun con la muleta estorbosa llegando al lumbral de la puerta
-Sessh!-lo llame aunque en ese momento me dio un poco de pena al llamarlo de esa manera, haciéndolo voltear, acercándose a mi nuevamente
-¿Qué sucede?
-gracias...-dije con un hilo de voz, ¿Por qué le dije eso? ¿llamarlo solo para decirle eso?, mire aun mas sonrojada, tomando mi mejilla con su enorme mano acercando su rostro al mío, pero...
-doctor Sesshomaru!- nos interrumpió
-pórtate bien Rin-dijo para perderse en los pasillos
-¿Qué? ¡Pero que tonto!
-si es muy tonto, es idiota-dijo Inuyasha detrás de mi haciéndome sobresaltar-así que tu eres mi cuñada ¿eh?-comento con una sonrisa
-y tu eres su hermano ¿verdad?-respondí desafiante de manera divertida
-así es, soy su hermano menor-dijo con franqueza
-¿desde cuando conoces a Sesshomaru?-pregunte con naturalidad
-de hace nueve...¿Qué? ¿Cómo lo...¿Cómo lo sabes?-pregunto sorprendido, aun no podía creer lo que escuchaban sus oídos, dejándome entrar nuevamente a la oficina cerrándola
-porque conozco a Sesshomaru desde los cinco años, quizás menos joven Inuyasha, y jamás había escuchado que él tuviera un hermano-confesé
-ahora veo porque Sesshomaru se enojaba cuando tomaba las fotografías cuando era pequeño, estabas tu-dijo casi sin pensar
-¿eh?
-nada, solo que solo había oído de ti, por Irasue y mi padre-contesto
-tu eres el hijo de el señor Inu no, ahora entiendo apariencias...
-así es, mi madre falleció cuando tenia once años, en ese entonces Sesshomaru tenia doce, y llegue a la casa de mi padre, con un a nota que cuidara de mi, y lo hizo e Irasue me tomo como otro hijo suyo y que solo había vivido en internados-me explico mirando por la ventana desviando la mirada, al parecer aquel tema lo complica un poco
-¿tenias once años? ¿se llevan por un año? Vaya tenemos la misma edad joven Inuyasha!- conteste emocionada
-no me digas joven Inuyasha, solo mi nombre, al fin y al cabo seremos familia, y mas aun ya que tenemos la misma edad
-entonces, tu también debes llamarme por mi nombre, Rin
-de acuerdo casi cuñada...¿Cómo te fijaste en el amargado de Sesshomaru?
-oye! No es tan amargado, solo se divierte a su manera-le defendí y ni si quiera se el por que me irritaba que hablaran mal de él
-al menos te gusta, como para querer casarte con él
-el matrimonio lo planearon mis padres y los tuyos Inuyasha!-le grite al borde de un berrinche
-son expertos en eso...-suspiro
-¿eh?
-nada, nada ¿Por qué no nos vamos? Odio a los hospitales-dijo fastidiado, abriendo la puerta, mientras yo iba mas lento, ya que la muleta me costaba manejarla -¿Cómo llegaste a una muleta?-pregunto curioso
-es por culpa de tu hermano, menos mal que estaba Koha...-me detuve, me había olvidado de él por completo y habían pasado casi dos horas desde que entre a la oficina, no puedo creerlo-Kohaku!-grite
-¿Kohaku? ¿Qué es eso? ¿se come?
-¿Cómo que se come? Hay que buscarlo, me debe estar esperando-le tome la mano para apresurarlo aun con mi muleta
-hey! Espera!
Habíamos llegado a la sala de espera, cuando lo encontré en la ventana como en estado de shock, volteando al ver mi reflejo y aun mas sobresaltado se dirigió a nosotros casi espantándonos
-¿no creen que hay afuera?-dijo señalando la ventana, camine lentamente a donde señalaba Kohaku, mirando que en el sector de estacionamientos habían muchos periodistas y fotógrafos, toda la prensa cubría el lugar e incluso tuvieron que poner una barrera de esas que se utilizan en las protestas para contenerlos
-¿Qué es esto?-pregunte algo ingenuamente sorprendida con una gota en mi cabeza gigantesca
-hay, tal vez me siguieron-contesto Inuyasha detrás de nosotros
-¿Qué? ¿a ti?
-estoy a puertas de mi divorcio, quizás quieren una entrevista o algo, además saben que Sesshomaru trabaja en este hospital, así que con mayor razón tendrían una primicia de ambos, aunque ese imbécil no le dirige a nadie la palabra
-¿Sesshomaru? ¿lo conoces?-pregunto Kohaku casi como un interrogatorio
-pues claro es mi hermano-respondió con simpleza
-¿Qué? ¡Así que ese hombre te atendió con el que te vas a casar!-dijo con sorpresa
-Kohaku es una larga historia, ahora debemos pensar como salir del hospital-conteste casi desesperada, me imaginaba las futuras portadas de las revistas matutinas de mañana, sin rostro y con muleta
-tengo una idea-sugirió Inuyasha dirigiéndose a la salida, colocándose los lentes de sol
-oye ¿Qué haces?
-voy a distraerlos, en la parte trasera del hospital, esta mi auto-explico metiéndose las manos al bolsillo para sacar las llaves de su vehículo y arrojármelo-ahí tienes mis llaves, escóndanse allí, hasta que vuelva ¿de acuerdo?- al principio debo confesar que no confiaba mucho en él, pero tiene la misma mirada que Sesshomaru cuando dice que no mentía en su palabra
-de acuerdo-conteste -vamos Kohaku
Fin de pov Rin
Ambos jóvenes se dirigieron al auto que se encontraba estacionado un poco mas apartado del recinto hospitalario, lejos de todas las aglomeraciones que habían mas allá, abrieron la puerta con cuidado, entrando por la puerta que da a los asientos traseros del vehículo, allí se ocultaron, dejando la muleta en la parte delantera ya que no podían esconderse sin que les estorbaba
-Rin...
-¿Qué sucede?-pregunto en voz baja
-¿y tu pie?
-me dieron 15 días de licencia...-susurro
-¿¿¿que???-grito él
-shi!!!! Que va a llegar toda la prensa aquí
-lo siento, pero...¿tantos días?
-quien sabe..., Sessh quizás en que esta pensando-susurro
-¿no me dijiste que era veterinario?
-hay Kohaku! ¿me estas pidiendo explicaciones? Además ni yo sabia que trabajaba en este hospital, ¿Cómo quieres que me enterara? ¿eh? Simplemente el destino me llevo a su consulta así de simple, lo dices como si me hubiera caído a propósito
-lo siento Rin yo...yo...lo siento...-susurro apenado
-perdóname tu a mi Kohaku he estado un poco alterada por todo, el compromiso, Sesshomaru, ahora la prensa, este me cambio totalmente la vida-respondió con voz sincera
-estamos a mano-dijo con una sonrisa
-es verdad-comento ella con una pequeña carcajada
-ya volví-contesto una voz sumado a que se abría la puerta de la parte del conductor
-¿Cómo te fue?-pregunto la joven azabache preocupada
-keh! Solo me preguntan lo mismo de siempre, divorcio, cuando, donde y por ultimo ¿Por qué se separaron?, por cierto soy Inuyasha- le dijo al joven que acompañaba a Rin
-¿Cómo sabe mi nombre?
-porque Rin, lo grito a los cuatro vientos buscándote, asumo que eres tu
-pues si
-oigan que les parece que vamos a ver a Kagome!-sugirió la joven en medio de ambos chicos totalmente emocionada
-me parece bien, después iremos a una fiesta ¿Qué les parece?
-genial!
-oye pero Rin tu pie...-dijo Kohaku
-Kohaku, no seas amargado, es mi pie, no la pierna entera, además necesito salir, me la he llevado encerrada casi una semana, y además tu nunca me dices que no-contesto poniendo ojitos de cachorrito sacando una gota en la cabeza a su amigo
-esta bien...-suspiro
-bien vamos Inuyasha! -decía feliz, mientras encendía el motor de su auto
-tengo un mal presentimiento sobre esto...-suspiro Kohaku con resignación
Una vez lejos de los periodistas, Inuyasha colocaba música en su vehículo coincidiendo mucho con Rin en su gusto con las música, haciéndola cantar durante todo el viaje a donde su amiga Kagome
-vamos Kohaku canta!
-¿Qué?
-Kohaku! Kohaku!..., ...- comenzaron a gritar rítmicamente ambos alentando al joven, quien se encontraba totalmente ruborizado
-parecen borrachos
-y eso que yo no puedo beber-contesto Rin con simpatía
-¿Por qué?-pregunto Inuyasha curioso
-cuerpo y mente sana, eso es todo lo que debes saber-respondió
-Rin...-susurro Kohaku-mira llegamos!- dijo con el fin de desviar el tema de conversación
-es verdad..., ya casi llegaban a la casa de la amiga de la joven azabache, deteniendo el auto al frente de la casa, tocando la puerta, quedando boquiabierta de la sorpresa al ver a todos allí, sobre todo del joven peli plateado
-hola chicos!-saludo -¿Qué sucede? Rin ¿Qué te paso?-pregunto mirando su pierna y la muleta que la estaba sujetando
-nada, eso es lo de menos te queremos invitar con Inuyasha a una fiesta!-comento entusiasta
-¿Qué? Pero Rin, tu estas así con muletas
-yo voy a salir! Me aburro en casa-dijo haciendo pucheros
-esta bien Rin, vamos, pero no hagas nada que pueda perjudicarte ¿esta bien?
-si, de acuerdo...-suspiro-bien! Vamos! Inuyasha ¿conoces un buen lugar?
-pues claro! Les encantara...-aseguro
-tu prometido no se enojara ¿verdad?-pregunto Kagome con cierto recelo dirigiéndose a Rin
-pues claro que no, además mientras él no lo sepa esta todo bien...-dijo rascándose la nuca
-ha..si....-dijeron todos con una enorme gota en su cabeza
-keh! Sesshomaru sabe que esta conmigo, no creo que haga un escandalo-comento Inuyasha cruzándose de brazos-bien vamos!
-si!!!!
Mientras tanto...
Sesshomaru, había finalizado la cirujía, que le habían encargado, comenzaba a alistarse para salir, cuando encontró en el bolsillo de su pantalón aquella cajita terciopelada color carmesí, abriéndolo apoyado en el escritorio revelando un hermoso anillo color dorado con un pequeño diamante color purpura, cerrándolo con cuidado para guardarlo nuevamente en su bolsillo, sonriendo de lado, imaginándose en la situación que se había envuelto Rin al querer sacarse el anillo "falso" durante toda la jornada que estuvo en la universidad, sabia a la perfección que le quedaría pequeño, pero quería jugarle una broma totalmente infantil incluso para él, logrando su objetivo que pensase en él todo el día, siendo interrumpido por uno pequeños golpes en la puerta
-adelante!-dijo él con voz seria ingresando, Jaken a la oficina un poco asustado
-señor Sesshomaru
-¿Qué quieres Jaken?-pregunto él con rostro de pocos amigos
-lo que pasa, es que la señorita Rin, salió con el inútil de Inuyasha y un mocoso moreno en su automóvil, parece que estaban hablando de ir a una fiesta e ir por la otra mocosa
-¿Cómo dices?-pregunto frunciendo el ceño
-eso...señor-tartamudeo, bañado en sudor, era la primera vez fuera de un trabajo importante que lo veía tan irritado
-vamos
-¿A dónde señor?
-a esa fiesta
Por otra parte, las cuatro personas iban riendo en el auto del mas joven de los Taisho, la música estaba elevada, y se manejaba a alta velocidad, saliendo de la gran ciudad aglomerada y adentrarse a unos callejones, que a cualquier persona le daría miedo ingresar, pero ellos no se daban por aludidos, siempre sobre todo ella frecuentaba ese estilo de lugares, siendo un dolor de cabeza a sus padres
-bien aquí es...-señalo Inuyasha, mostrándoles un lugar que tenia una puerta toda maltratada, no parecía que hubiera una fiesta en aquel lugar, llenando de escalofríos a Kagome y Kohaku
-me lo imaginaba peor-comento Rin, con una gran sonrisa en su rostro, mientras que el joven peli plateado, tocaba de cierta manera la puerta, abriéndola ampliamente, revelando al interior un pasillo oscuro ingresando los cuatro con algo de miedo los menos osados, cuando poco a poco la música, comenzaba a resonar fuertemente en sus oídos sorprendiéndolos con una enorme fiesta
-¿¿¿Qué????!!!!-gritaron los invitados
-bienvenidos a la fiesta de mala muerte, en el inframundo
-¿inframundo?
-claro no viste el letrero-señalándolo
-wooo, esta genial Inuyasha- decía Rin alucinada aun con la muleta trataba de moverse para poder bailar un poco
-ven Inuyasha vamos!-decía Kagome invitándolo a bailar tomándole la mano
-ahora te entusiasmaste!-decía confundido mientras era arrastrado a la pista de baile, en tanto Kohaku y Rin se sentaron en una de las mesas que estaban disponibles, porque tenia un ligero dolor en el pie
-¿estas bien?
-si...
-si quieres nos vamos
-no, me la estoy pasando bien
-¿enserio?-Kohaku contesto cuestionándola, algunos tipos borrachos, otras fumando como si fueran chimeneas,
-ven Kohaku, yo también quiero bailar-dijo poniéndose de pie
-pero si estas con la muleta
-olvida la muleta, vamos!-fue tomado de la mano, guiándolo cerca de los demás chicos, aquel chico moreno sentía una corriente eléctrica cruzando por todo su ser, ruborizándolo un poco, pasando por varios estilos musicales, su risa y alegría lo cautivaban poco a poco, tal vez, ya lo había sentido antes, pero nunca se le atrevía a decirle alguna palabra, ahora era su oportunidad de declarar sus sentimientos, estaba decidido, sin darse cuenta, la música paso a ser mas lenta y romántica, Rin envolvía sus brazos en el cuello de Kohaku, y este le tomaba delicadamente la cintura, ladeando de un lado a otro levemente con el ritmo de la música
-Rin...
-si Kohaku...-hablo ella con ojos inocentes
-pues yo...
-dime ¿Qué sucede? ¿te piso mucho los pies?
-no, no, es eso, es solo que...
-que...
-que aunque ya es tarde...-decía tartamudeando
-no te preocupes por la hora Kohaku
-no es la hora, es solo que...ya se me hizo tarde de hablarte que...
-dime...me estas preocupando Kohaku
-que yo...bueno yo...estoy...-en ese momento él levanta la mirada quedando paralizado deteniéndose al igual que la música en la cual se detuvo abruptamente
-¿estas...-pregunto ella confundida
-estoy...viendo ¿a tu prometido?-dijo en shock, haciéndola voltear, quedando pálida al igual que todos allí
-no puede ser...
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Holaaaa espero que les guste este capitulo, no terminare nunca en agradecer sus bellos comentarios y estrellitas, perdon las faltas de ortogafia, abrazos!!! nos vemos en el proximo!!!
cualquier duda o pregunta me dicen o sugerencia, siempre que sea con respeto, gracias!!!
proximamente...........................................capitulo VIII Desaparecemos...
aviso!!!! aqui me plantearon un pequeño desafio, en la cual me lo hizo @MChu601, espero haberlo logrado y tambien les recomiendo sus historias, son muy buenas como:
-FRIO Y DESPIADADO
gracias amiga!!!! espero a ver logrado el desafio!!!!
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