Chapter 4: Cuidarla no es fácil, pero vale la pena

Créditos a su creador .

Amigo imaginario, aún recuerdo el día martes, llegue, por el camino corto de la escuela a mi casa. Porque quería llegar a abrazar a Celestia y hacerle compañía, porque sin ella no podría haber pasado con diez ambos, exámenes. Y valla que me ayudo, tendría vacaciones de invierno. ¡Al fin tendría vacaciones!

También recuerdo, lo gracioso que fue pavonearme frente a mis compañeros, pero lo que más recuerdo de ese día martes, fue el llegar a mi casa, caminar hasta mi habitación lo más rápido, abrirla, y justo cuando estaba buscando a Celestia escuche a mi madre.

-qué bueno que ya llegaste-

-supongo- le respondí, volviéndome

-¿y cómo te fue?-pregunto de manera, algo sarcástica, como si sus labios dijeran: "Ya te atrape"

-míralo tú misma-le dije extendiendo mis exámenes. No sé, si le molesto que le ganase en su propio juego, o si se sentía orgullosa de mi. Así que no sé porque soltó la frase:

"Te has portado mejor desde tu castigo, (el sábado), quizás piense en darte algo de libertad"

¡Claro! que me he portado bien, he lavado todos los platos que he ensuciado, limpiado los sillones donde subo los pies, y además aprobé dos exámenes con calificación perfecta. Sin mencionar que cuido a un ser mágico desde el viernes.

-te fue bastante bien ¿eh?-hablo Celestia, acostada en mi cama, leyendo un libro y con una toalla en la cabeza, al momento de que hable.

-sí, bastante, de hecho mi madre piensa en darme algo de libertad-conteste, llegando hasta donde estaba ella, y acostándome en la cama. Me miro, como se le miraría a quien tiene un exceso de confianza, pero me deje llevar por los tonos azules de me techo, y por el suave olor que desprendía la yegua recién bañada en mi cama.

Se levantó un poco, y saco los vendajes del lugar donde los había guardado, en el mismo, donde tenía los libros, pero unos niveles más abajo, y empezó a curarse sola. Me le quede mirando, por un tiempo y vi que era bastante "manca" al momento de curarse su propia ala, es decir yo nunca, pero nunca, fui veterinario y mucho menos había tenido pájaros de mascota, pero si podía hacer que su vendaje no tuviera resultados contraproducentes en su ala.

-haber dame tu ala-le dije levantándome yo también de la cama, para ayudarle en su difícil tarea. Me le extendió con algo de miedo aun, creo que aún no hemos sobrepasado el miedo que le tenemos el uno al otro. Personalmente, tengo algo de miedo que me valla a lastimar con su magia o con sus patas, y creo que ella tenía miedo de lo mismo, y además de que le echara de mi cuarto y de mi casa. Pero que miedos más tontos ¿no?

Dejando esto de lado, empezamos a hablar sobre nuestro día, más que nada yo porque ella, no hacía mucho en el día. Más que "perfeccionar" su hechizo, y leer todos los libros que tenía.

-y lo hiciste, ¿te engallaste como gallo en frente de tus compañeros?-me hablo sonriendo. Le mire la sonrisa un momento, y no te algo ¿Cómo un caballo puede tener los dientes tan perfectos?, ¿acaso hay dentistas de dónde viene?

-si lo hice- conteste sonriendo y empezando a recordar, mi "pavoneada" como diría Celestia (ceporro, pavonear, vestíbulos, mucama, engallar, pero que palabras tan raras dice Celestia, por citar algunas)

RECUERDO

-me sorprende que solamente uno, haya aprobado el examen con diez- hablaba la maestra entregando el examen por número de lista

-pues baje la dificultad, culera-pensé sarcásticamente, al momento que me llamo para que recogiera el examen, de su escritorio.

-"¡Estaba muy difícil maestra!"- Fue la crítica de mis compañeros, hacía el examen, que en la defensa el grupo si estaba difícil, pero no eran temas que no hubiésemos visto, es solo que en examen combinaba todos los temas. Por ejemplo: Si hubiésemos visto cuatro temas en el parcial, ella los combinaba y colocaba dos preguntas en lugar de cuatro.

-aquí no es aprenderse los problemas de memoria, es lógica, o si quieren verlo de otra mañera, tienen que tener "maña"-contesto, la maestra explicando él porque del examen, y su manera de aplicarlos.

-aquí el que no vuela, corre- conteste en voz alta, esperando a que alguien me corrija.

-se dice, aquí el que no corre, vuela tarado- contesto riendo, mi compañero, apodado PKM. Por su fanatismo a la saga Pokémon.

-sí eres tan inteligente, porque el diez no lo tienes tu- hable mostrando mi examen, haciendo que todos mis compañeros se burlasen de él. Y si, "pavoneándome" como diría Celestia.

FIN DEL RECUERDO

-eres muy maduro ¿sabes?-hablo Celestia, sarcásticamente, al momento de terminar de contarle mi día.

Cuidar a Celestia no es fácil, para nada fácil, como ya te he dicho antes mi amigo imaginario. Pero si me preguntas: ¿vale la pena?

¡Claro! que vale la pena, su compañía vale la pena, las pláticas que hemos tenido, los chistes que nos hemos contado, las conversaciones, los sarcasmos, y las discusiones que hemos tenido sobre algunos libros, son cosas tan nuestras que hacen que valga la pena el cuidarla. Y creo que fue la principal razón, por la que no note, que los días pasaron, y de pronto, ya había salido de vacaciones y aún más sorprendente, no note como pasaron un par de semanas de vacaciones.

-pero ¿porque no quieres ir es tu celebración al fin y al cabo?-pregunto, Celestia, cuando colgué, el celular. Y me acosté en la cama, cosa que en estas tres semanas de convivencia ya no le molestaba y tampoco le incomodaba bastante.

-apenas nieve, voy a ir-conteste, mirándola, y deduciendo que había aprendido a diferenciar cuando estaba hablando por el celular y cuando estaba hablando con ella. Porque las primeras tres veces que me llamaron no supo diferenciarlo.

Y al decir eso, me miro, con una cara que decía: "Ya te tengo", y se sentó junto a mí.

-no me gustan las reuniones sociales, además es más como una posada para recordar la secundaria- le respondí

-¿y no te gusto la secundaria?-

-no, casi no hablaba con nadie, además de que mi grupo me odiaba, y me termine agarrando a golpes con un chico- dije haciendo señas de boxeo

-¡pobre de mí caballero en armadura brillante!- hablo ella sarcásticamente

-perdí a alguien importante para mí, aparte-conteste entre dientes, en tono bajo, recordando mi secundaria. Pero por más que quería, no podría dejar de pensar en esa persona. ¿Te ha pasado?, mi amigo imaginario ¿te ha pasado?

Es la misma sensación que siente ella por las mañanas, es acaso lo que Celestia siente, ¿al ver la luna llena? Siente la misma, culpa y pena cuando recuerda a quien sea que se llame "Luna", que yo siento al recordar a esa persona.

Siendo sincero no sé quién diablos es "Luna", y porque Celestia se despierta a mitad de la noche, en medio de una pesadilla, mientras grita, escandalosamente una y otra vez:

-Luna perdóname- ¿Quién diablos es Luna?, es ¿su pareja?, ¿su amiga?, ¿su hermana?, ¿una familiar? No le he preguntado por ella, porque creo que ella cuando esté lista me lo contara, pero quisiera que me dijese para poder ayudarle.

Después de eso, baje a hacer palomitas de maíz, con algo de miel (porque Celestia tiene una gran adicción a las cosas dulces) y subí con el bol, a mi cuarto. Solo para ver que estaba revisando mis discos.

-¿quieres ver una buena película?-pregunte, porque ese había sido nuestro habito, desde que tenía vacaciones ver películas sin más. Solo verlas, acostados juntos en la cama. Reír, emocionarnos, preocuparnos, sentir e inclusive llorar, viendo películas juntos.

-sí, pero quiero oír la canción de ayer- Me dijo, con cara de niña chiquita pidiendo que colocase el videoclip de la banda que yo le había hecho amar. Cosa que al principio me molesto, porque al fin y al cabo era MI música, y era MI banda favorita. Pero lo deje pasar, cuando vi que le levantaba el ánimo, el oír música.

Joder, me pase dos semanas buscando, libros contra la depresión, e inclusive páginas web, pero no encontré nada. Absolutamente nada, solo libros sobre dios, y páginas web sobre la familia y el típico "échale ganas". Pero es que las personas (o ponys en su caso) tienen que llorar, para vaciar su dolor y después buscar algo que les guste, cosa que hizo Celestia, porque nunca le detuve, cuando lloro por las mañanas, de hecho le deje su espacio y cuando creí conveniente me acerque con cosas que creí que le gustarían. Hasta que… Al fin despertó con una sonrisa. (Más aun no se atreve a ver el sol salir)

Coloque la canción que hablaba (irónicamente sobre la nieve y un vecindario). La vie emocionarse ante la canción, y tarareo una parte de la misma. Se movía lentamente como decidiéndose a bailar o solamente escuchar. La vi por un momento, entonces me decidí a actuar, y le jale del casco para que se subiese a la cama, y sin más empezamos a saltar encima de las cobijas.

Ambos cantábamos el coro al mismo tiempo, saltábamos al mismo tiempo y sentíamos al mismo tiempo. Hasta que la canción termino y nos caímos cansados a la cama. Nos miramos las caras y empezamos a reír.

Sé que es un recuerdo un tanto empalagoso, mi amigo imaginario, pero vale mucho la pena recordarlo, porque fue como un parteaguas en nuestra relación, fue cuando en verdad nos tuvimos la confianza que se le tiene a un buen amigo.

CAMBIO DE PRESPECTIVA

Han pasado, tres semanas realmente rápido, desde que el humano, creo que ahora, por el poco cariño que le tengo, ese apodo suena inadecuado. Así que le llamare "el" (porque la película favorita de "el" se llama "her"). Pero volviendo al tema, han pasado, tres semanas desde que caí en este lugar.

Y no mentiré, la primera semana fue la más difícil, porque debía acostumbrarme a hacer cosas que no estaba acostumbrada, recuerdo que llore bastante. No me apena admitirlo, porque no hay nadie que lo sepa, más que "el", mi mente y yo. No esta Luna, no está Twilight, no está Cadence. No hay nadie de mi familia, para fingir ser fuerte cuando en verdad no lo soy. Así que me di el permiso de llorar, cuantas veces quisiera hacerlo.

La segunda semana no fue tan difícil, "el" ya podía hacerme compañía, y de alguna u otra forma, el hecho, que m estuviera escuchando y consolando me ayudo, también me ayudo su forma positiva de ver la vida. Aunque "el" diga que no la tenga. Y después me mostro la música de su planeta, y es hermosa. No estoy menospreciando la música Ecuestriana es solo que en todos los años que tengo como gobernante, (que no los diré, más que nada por vanidad y un poco de vergüenza combinada con orgullo)

La música de los humanos, es tan diferente a la música de los pony, creo que logran hacer lo que nosotros los pony no, por sus "manos" y por sus "dedos". Ojala pudiese llevarme algunos discos de este mundo, para mi disfrute personal, cuando vuelva…. Si es que llego a volver.

Y esta tercera semana ha sido, pues ha sido extraña, me siento, mal, triste, y sobre todo sola. Pero no me siento, abandonada, ya no siento la desesperación que sentía hace dos semanas y creo que eso es bueno. Me he enfocado en el hechizo y casi estoy a punto de dominarlo. Además por si fuese, poco me acaba de dar una manera de vengarme por TODOS, los chistes sexuales que ha hecho.

No mentiré, en algunos si se muestra una gracia e inteligencia en el uso de las palabras, pero en otros. En otros puede llegar a ser tan vulgar.

Como el que dijo hace una semana cuando le vi, tomar un lápiz y un cuaderno.

RECUERDO DE CELESTIA

Estaba yo, intentando el hechizo, sin mucho excito para mi desgracia, y entonces dejo de observarme, y de reírse de mis intentos (porque al parecer, al idiota le dan gracia mis fallos). Tomo un lápiz, y su cuaderno (el cual era el único que no me dejo tocar, al momento en que le ayude a estudiar)

-¿que haces?-pregunte, después de un rato, cuando me canse, de practicar el hechizo, para cambiar mi forma.

-escribo poesía- respondió, sonriendo.

-amo la poesía y la escritura, podrías leerme algo que escribiste- pedí, mirándolo, y limpiándome el sudor con una toalla que tenía.

-claro-me hablo, se aclaró la garganta y declaro:

"Las rosas son rojas, el viento las mueve.

Yo soy un seis, y ella un nueve"

-Espera esta es mejor.-hablo, con una sonrisa, y recito:

"Yo papel, tu pluma.

Juntos hacemos una suma.

Tú me calientas los días de otoño

Y en invierno me comes el pollo"

Lo mire por unos momentos, aguantando las ganas de darle una cachetada, ante tales majaderías, del humano. Vi cómo, entre sus risas se le cayó, al suelo una hoja, del cuaderno, la levante, la leí y al ver el contenido pregunte:

-¿porque eres tan grosero?, si sabes rimar y usas palabras ingeniosas, no dices cosas como estas:- Pregunte empezando a exclamar en voz alta

"Cuando era pequeño,

Vivía para ser feliz,

Ahora que he crecido,

Vivo para sufrir"

"Como un clavel, en mi corazón por tu amor muero día a día,

Pero si ese es el precio, por un beso, mi amor durara por ti toda la vida,

Mi mente y mis sentimientos presos, piden libertad,

Y mi corazón, pide que me ames hasta la inmortalidad.

El clavel, en mi corazón no se puede marchitar,

Como yo a ti, no te puedo olvidar. "

"¿Por qué llorar y gritar, como loco?,

Si yo muero por ti,

Y tú, tu mueres por otro"-

Me quito la hoja que estaba levitando con magia, y la guardo de mal humor en el cuaderno.

-si le dijeses eso a una chica, podrías conquistarla fácilmente-hable, buscando molestarlo. Y quizás, solo quizás, vengarme un poco de tantas tonterías que hacía.

-¡yo nunca le diré eso a una chica!-contesto, entre molesto y sonrojado, es bastante raro, pero ese sonrojo le va bastante bien a la piel azabache del chico.

-es por eso que no tienes novia- Hable con la típica sonrisa sarcástica que colocaba "el", al momento de fastidiarme. Me miro por unos momentos, y hablo:

-felicidades, ya estas aprendiendo del maestro, soy tan mala compañía para ti- dijo después de un rato.

FIN DEL RECUERDO.

Si, sé que ya me he vengado antes de él. Pero, quiero que se trague sus palabras y se la manera perfecta de hacerlo.

Después de haber oído la canción que tanto le pedí, a "el". Nos colocamos en la cama a ver una película. No diré que estaba mal, pero tampoco diré que estaba muy bien, aunque "el" si la critico bastante.

-no tiene dialogo inteligente, el soundtrack es basura, la actuación de los niños es pésima- y un montón de cosas más, que ahora ya no recuerdo.

No la critico, porque siendo sincera, me enamore de este arte, ver lo que quieras cuando quieras y repetirlo las veces que quieras, es un placer indescriptible. Tan indescriptible, que si estuviera en Equestria, diría: "Es el tipo de cosas, que solo se consiguen en otro mundo"

CAMBIO DE PRESPRECTIVA

Después de la película que compartimos Celestia, y yo nos quedamos acostados en mi cama. Creo que nos habíamos perdido el miedo que nos teníamos mutuamente, tres semanas de convivencia habían hecho que nos acostumbrásemos a la compañía del otro. E inclusive también, habíamos hecho un par de chistes internos, entre nosotros.

-¿quieres ver otra película?- pregunto Celestia, levantando la cabeza para mirarme

-¿quieres oír música?-propuse, porque la anterior película me fastidio un poco.

-claro-contesto, y coloque "Viva la vida", en mi celular. Me miro por unos momentos, y me dijo:

-colócate de este lado de la cama- debido a que estábamos de lados contrarios de la cama. Mi cabeza apuntaba al respaldo, y ella estaba al revés.

-ponte tú de este lado- le conteste con algo de flojera.

-toma el celular y no te asustes- me dijo, y al momento en que tome el celular, empecé a levitar, hasta que llegue, a su lado de la cama, y aterrice lentamente del lado de ella. Me miro a los ojos, y me sonrió feliz, porque no me asuste al levitar.

-¿eso fue magia?-pregunte, algo asombrado.

-sí, fue magia, ya sabias que puedo hacerla-dijo riendo, y sí. Sabía que puede hacerla, pero no sabía que niveles, puede llegar. Aunque ahora que lo reflexiono, si, fui algo idiota el asombrarme porque Celestia, me hizo levitar, y no el asombrarme cuando me dijo que levanta el sol. Creo que en ese entonces no le prestaba la atención que termine prestándole.

-¿de qué va esta canción?-pregunto, al momento, que se terminó una canción, y empezó un piano a sonar.

-es… como una fotografía, que captura nuestras vidas en este momento. Como no tenemos ninguna de nosotros, creí que te gustaría- le conteste. Disfrutando del piano

-aparte, es de la misma banda que tu favorita- le agregue volteándola a ver con la tenue luz del celular.

-vamos a agregarla a la lista de reproducción-me contesto sonriendo.

Ahora que lo pienso, Celestia aprende rápido, demasiado rápido para mi sorpresa, ya sabía conceptos básicos, sobre los humanos y la humanidad en sí misma, también en estas dos semanas, ya sabía cómo elegir canciones de mi celular. Y como cambiar el canal de la televisión.

Comenzó otra canción, y en esta nos entró a ambos un gran sentimiento de melancolía, no sé si ella, sabía el idioma inglés. (Cosa que yo no sé) Así que le pregunte

-¿Sabes lo que dice la canción?-

-sí, reconozco el idioma, de hecho este acento, no me es raro. Comúnmente este idioma era usado por los unicornios antes de que Equestria fuese fundada- me contesto. Okey, eso me revelaba algo de su país llamado "Equestria", para empezar, que los unicornios, antes hablaban inglés con una entonación Inglesa, y no americana, y también me decía, que los unicornios, al juntarse con otras especies, terminaron hablando español. Confirme mis deducciones con Celestia, contestó afirmativamente y dijo:

-tienes madera de detective-

-los pony, de tu país, ¿hablan muchos idiomas?- pregunte mirándola.

-hablaban…- dijo con la melancolía que nos invadía

La mire algo triste. Sé que ella me esconde algo, pero ¿qué es?, tiene algo que ver ¿con su tristeza por las mañanas?, o ¿tiene que ver con su melancolía cuando ve la luna llena?, ¿tiene que ver con esa tal "Luna"?, ¿Por qué no habla?, ¿Por qué no se queja de su pasado conmigo? Que solamente me dé algo para ayudarla, pero ¡no!, se guarda todo para ella sola, y eso molesta.

-Celestia…-hable llamando su atención

-prometo que pase, lo que pase, iras a tu mundo-termine bostezando, y abrazándola. Porque se había quedado, mirando la luna llena, la cual se veía en mi ventana. Solo se acomodó en mi pecho y ambos nos empezamos a quedar dormidos, y después de la promesa (¡oh maldita promesa! como te odio ahora) la canción de melancolía se transformó en esperanza. Y nuestro sueño, se transformó hasta que nos quedamos dormidos. La primera que se quedó dormida fue ella, y fue en mis brazos, después, me quede dormido yo. Y fue, fue fantástico.

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