😽 Segundo miau 😽


Junmyeon y Yìxīng adoptaron a Jongin cuando el niño solo tenía un año y medio de edad (Sus padres habían muerto en un accidente de coche y lo llevaron al orfanato). Después de que se casaron, querían un hijo y decidieron adoptar. En ese momento, Jongin era el bebé más pequeño de todos; eso es lo que atrajo tanto su atención. Una vez que vieron a Jongin, sentían la necesidad de darle un hogar cálido, comida, amor y una vida feliz.

Ellos lo adoptaron de inmediato (bien, eso podría ser exagerado; en realidad, tardaron alrededor de un mes para firmar todos los documentos y otras 2 semanas para obtener derechos plenos sobre el niño). Decir que estaban felices era probablemente un eufemismo. Estaban extasiados, llenos de alegría, dichosos incluso. Finalmente tuvieron un hijo propio y se comprometieron a cuidar de él hasta el día en que murieran, sin importa qué.

La familia había sido feliz desde entonces, pero una vez que Jongin los oyó hablar con Minseok y Jongdae acerca de que era adoptado, se enteró de la verdad.

Yìxīng no quería decírselo a Jongin todavía porque era un niño pequeño, pero ya era demasiado tarde. Jongin había llorado tanto que Junmyeon y Yìxīng no sabían cómo detenerlo. Lo abrazaron, le dijeron que lo amaban como a su propio hijo porque era su hijo. Los tres durmieron en la misma cama ese mes entero. Repetidamente, ellos le decían a Jongin que era su hijo y nada en el mundo cambiaría eso.

Jongin empezó a abrirse de nuevo y algunas veces incluso les preguntaba si sabían quiénes eran sus verdaderos padres o dónde estaban. Solo le dijeron que estaban en un lugar mejor, y nunca dejaron de amarlo.

Un día, Jongin vio la danza de una bailarina en la pantalla del televisor y convenció a Yìxīng para llevarlo a clases de baile. Ahora Jongin va a clases de baile cada martes y viernes.

Jongin es un chico tímido, pero Yìxīng y Junmyeon no podrían haber pedido un mejor hijo. Lo cual es probablemente la razón del porqué Jongin es un niño mimado que consigue lo que quiere.

Junmyeon nunca puede resistirse a sus ojos de cachorro, así como Yìxīng.

❤🐻❤

—Aquí tienes, Soo —anunció Yìxīng mientras colocaba el recipiente lleno de leche en el suelo. El gatito, por curiosidad, saltó del regazo de su dueño y se dirigió hacia el recipiente. Lo olfateó unas cuantas veces antes de beber la leche usando su lengua rosada. El gatito parecía disfrutar la leche mucho; los bordes de los bigotes de Soo ya estaban humedecidos por la leche.

—¡No bebas demasiado, tendrás dolor de estómago! —exclamó Jongin inocentemente, aunque pareció funcionar. El gatito dejó de beber y se movió, saltando en el regazo de Jongin, mientras su cola envolvió su propio cuerpo con gracia.

—Awwwww —suspira su padre—. Realmente le gustas —Yìxīng rizó el cabello del niño—. Cuida de él, ¿de acuerdo?

—¡Por supuesto! —Jongin mira al gatito antes de agarrar el control remoto de la TV—. Soo, ¿quieres ver Pororo? ¡Sé que te encantará! —El muchacho dice felizmente. Encendió la televisión y cambió el canal al 522—. ¡Soo mira! Tus ojos son grandes como los de él, jeje —comenta alegremente Jongin, señalando a Pororo en la pantalla.

El gatito no estaba prestando atención a la televisión, estaba más absorto en la cara de su dueño. El gatito no podía dejar de mirar fijamente la cara del niño. La forma en que su expresión cambiaba cuando Krong estaba en marcha, o cuando Pororo estaba fascinado era... Jongin sintió que el gatito estaba un poco callado como de costumbre, así que decidió mirar hacia abajo y se encontró con los grandes ojos redondos de color verde oliva de Soo, que hizo que Jongin se sienta más atraído por el gatito.

—¿Sabías que tienes unos ojos hermosos? —dice Jongin, golpeando la nariz del gatito juguetonamente.

—Miau~

—Jaja, no tienes que estar avergonzado —bromea Jongin algo burlón.

El gatito parecía molesto y saltó del regazo del muchacho de inmediato.

—Qué gatito tan atrevido —Yìxīng murmura mientras se sienta al lado de Jongin.

❤🐻❤

La cena fue por relativamente rápida comparada con otros años.

¿La razón? Jongin no quería dejar a Soo solo durante más de tres minutos.

El Chenmin y el Taoris estaban en la mansión del Sulay (Junmyeon es un hombre muy rico, ujum) con sus hijos; Luhan, Baekhyun, Chanyeol y Sehun.

Luhan tenía nueve años y Baekhyun, siete, mientras que Chanyeol y Sehun tenían siete y cinco años, respectivamente.

Cuando llegaron por primera vez, Jongin era tan sobreprotector con Soo que le dolía verlo. No permitía que ninguno de sus hyungs o Sehun tocara al gatito, ni que se acercaran a él.

Sehun casi lloró porque su mejor amigo no le dejó tocar a su mascota. Pero a Jongin no le importó, solo estaba abrazando a Soo contra su pecho.

Luhan regañó al más joven por hacer que su "dongsaeng favorito" casi llorara. Jongin hizo una mueca cuando su padre le dijo que dejara que los demás vieran a Soo.

—¡Me romperán a mi Soo! —argumentó Jongin tratando de quitar al gatito de los brazos de Baekhyun.

—Jonginnie, Soo no se puede romper, no es un objeto —razonó Yìxīng mientras trataba de calmar a su hijo.

—Te compraré un nuevo iPod para tu cumpleaños el próximo año si eres un buen chico esta noche —Junmyeon trató de sobornarlo.

Pero Jongin no se movió.

—¡Vamos Jongin, no te enojes conmigo! —Se quejó su papá—. ¿Te quiero?

Jongin todavía no se movía.

—¡Bien! Que sea así entonces —Junmyeon se puso a hacer muecas antes de caminar hacia la cocina, con los hombros caídos.

Una vez que Yìxīng ve a su esposo enojado, rápidamente corrió a su lado y lo acercó hacia él, cogiéndolo por su cintura.

—Junmie, tienes 28 años, no actúes como un bebé —dijo.

—¡Pero Jonginnie está siendo malo conmigo!

—¿Estás bromeando ahora mismo? Tú eres su madre, ve a mostrarle quién es el jefe —animó Yìxīng.

—¡Oye! No soy la madre en esta relación...

—¿Quién es tops en la cama?

—Tú...

—Entonces, no tengo nada más que decir.

❤🐻❤

Comieron una cena cocinada por Yìxīng y Minseok, cantaron villancicos de Navidad, y miraron una película. Junmyeon había contratado a un par de decoradores para que arreglen su casa para que pareciera al taller de Santa Claus durante la noche e hicieron un trabajo fantástico. Su casa era la más navideña de todas, si la comparaba con las otras casas de su vecindario.

Sus sirvientas y mayordomos se retiraron en ese momento porque Yìxīng se negó a dejarlos trabajar durante la Navidad. Les dijo que volvieran con sus familias e incluso se les compró los boletos de avión para algunos de ellos que no podían pagarlo.

De todos modos, después de que Yìxīng y Junmyeon dijeran adiós a su último invitado, terminaron viendo a su hijo de cinco años acurrucado en el sofá con su pequeño gatito.

—¡Ah, Xīng, mira lo lindos que están juntos! —canturrea Junmyeon mientras camina hacia su hijo durmiente.

Yìxīng sacude la cabeza con diversión antes de despertar Jongin suavemente.

—Cariño, no puedes dormir aquí. Ve a dormir en tu cama —susurra Yìxīng, sin querer asustar al niño.

Los ojos del muchacho se abrieron lentamente.

—¿Puede Soo venir conmigo? —pregunta con los ojos dormidos, mirando a su gatito que estaba acurrucado en su pecho. Soo estaba poniendo el vientre hacia arriba y sus piernas cortas fueron empujadas contra su diminuto pecho. Parecía que sonreía mientras dormía.

—Por supuesto, cariño, ¿quieres que te arrope? —pregunta Yìxīng.

—Soy un niño grande ahora papi, no necesito eso también.

—La semana que viene no vengas corriendo a decirme que te arrope entonces —masculló Junmyeon.

—¿Papá dijo algo?

—No, cariño, ahora ve. Te amo —dijo el padre del chico antes de besar la mejilla de su hijo, Junmyeon besó su otra mejilla.

Jongin soltó una carcajada.

—¡Eso da cosquillas! Basta, Soo se va a despertar.

—Ok, ok, directo a la cama, ¿de acuerdo?

Jongin asiente con la cabeza antes de subir por las escaleras.

—Buenas noches —dice en voz baja.

Una vez que el niño llegó a su habitación, primero puso a su mascota suavemente sobre la cama. Luego se puso la pijama y se acurrucó junto a Soo. Tiró del gatito cerca de su pecho, Jongin estaba realmente sorprendido de que el gatito no se hubiera movido. Rápidamente revisa para ver si Soo todavía está respirando, suspirando de alivio cuando ve que los pequeños movimientos de respiración de su pequeño gatito.

—Te quiero, Soo. Me gustaría tener a alguien como tú en la vida real, un niño de verdad. De esa manera podría presentarte a todos y podríamos ser una familia feliz como papá y papá. Dulces sueños.

Esa noche, Jongin no tenía sus pesadillas habituales que se produjeron debido a que accidentalmente miró El Conjuro con sus papás. Dormía como un bebé tranquilo.

Jongin soñó con Soo y él persiguiéndose por toda la casa.

Jongin imaginó la presentación de su nuevo "mejor amigo" a su gatito.

Pero lo que Jongin no sabía realmente era que su deseo pronto se haría realidad.

❄❄❄

Se viene lo bueno, señores 😂👌 Gracias por sus comentarios anteriores, espero que la estén pasando bien en estas fiestas, besos 🙆😚💖

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