Capitulo 43 Nicolas
Querido Nicolas,
Espero con ansias el día que leas esta carta, porque significa que estas listo para seguir adelante y por fin sabes quien soy, no puedo decir que no me enoje contigo en un principio por olvidarme, también te culpe por ello, pero con el tiempo mantuve la esperanza de que lo que una vez sentiste fuese tan fuerte que te hiciera regresar a mi una vez mas, tengo que explicarte muchas cosas que sucedieron en las pequeñas vacaciones que se dio tu memoria, y que aunque pienses que te mentimos y te ocultamos cosas, tienes que saber que siempre fue pensando en tu bienestar, tu simplemente tenias que volver por tu cuenta y aunque eso me dolió como no tienes una idea nunca perdí la fe en ti.
Cuando salí del hospital después del accidente me sentí perdida, y es algo loco.
¿Sabes, por qué?
Apenas y comenzábamos una relación y ya no concebía la idea de una vida sin ti , de verte y no poder correr a tus brazos, llore, llore mucho.
Hasta que un día me di cuenta que estaba esperando un pequeño retoño de nuestro amor, y entonces llore mas, llore hasta casi acabar con todas mis lagrimas, sentía que todo estaba en mi contra que no podría yo sola con todo lo que me estaba sucediendo, pero entonces y aún sin que tú lo supieras seguías iluminando mi vida, me di cuenta que me habías dejado el recuerdo mas hermoso que alguna vez te pudiera pedir, y decidimos guardar el secreto, no me siento orgullosa de las decisiones que tome, pero tienes que entender que fue lo que nos pareció mejor en ese momento.
Poco tiempo después me informaron que debido a todo lo que había pasado en los últimos meses mi bebe se encontraba en peligro, yo debía calmarme, seguir instrucciones medicas, y evitar a toda costa cualquier situación que me provocara estrés y preocupación, debes de saber que nada de lo que sucedió ese día fue tu culpa, yo debí mantener la calma, no eres culpable de nada, pero te conozco y se que debes de estarte reprochando día y noche por algo que tú no hiciste.
Quiero que sepas que recuerdo como corriste conmigo en brazos para llevarme a la ambulancia, como lloraste y sostuviste mi mano de camino al hospital, aun sin recordarme te preocupaste por mi, y gracias a ti llegue a tiempo.
Si tengo que culparte por algo seria por eso, por salvarme la vida.
O mejor dicho por salvarnos la vida. Si Nicolas, Salvarnos en plural, a tu bebe y a mi.
No te culpo por irte, debió ser muy duro enterarte de tanto en un solo día, aunque debo reconocer que me moleste, y mucho, al darme cuenta que te fuiste con ...con ella, pero lo preferí así, a saber que te encontrabas solo y rodeado de tanta culpa.
Lo entiendo porque yo también tengo que sanar mis propias heridas, quiero que si un día vuelves no te encuentres con este ser marchito y con un corazón roto que ha dejado de sonreír.
Y si después de todo al final decides no perdonarme, lo entenderé, te juro que lo haré, en este tiempo descubriste una versión de mi que no conocías, pero eso es lo que soy, todo lo que me reclamaste, todo lo que me dijiste antes de irte, es cierto, no quiero mentir mas, perdóname cariño por haberme hecho pasar por una persona diferente, no soy mas que la bruja de este cuento que esta pagando por todas las malas decisiones que tomó en la vida.
Dejo con Lize esta carta, porque necesitaba aferrarme a la idea de que un día volverías y así supieras que nunca te culpe por nada, necesitaba despedirme de ti aunque no estuvieras.
Me voy lejos, y aunque al principio te espere ya no lo hago, estoy aprendiendo a vivir sin ti, un día a la vez, estoy sanando y tú debes hacer lo mismo.
Celeste
Termino de leer con un nudo en mi estomago y en mi garganta, Lize me observa desde la puerta de la oficina que antes ocupaba Celeste, atenta a mi reacción, a cualquier movimiento de mi parte, es la primera vez que estamos frente a frente luego de salir corriendo del hospital hace casi tres meses.
—Di algo Nicolas —susurra, no se acerca, tal vez por miedo a que huya de nuevo.
—Estoy furioso —siento la primera lagrima resbalar por mi mentón.
—¿Puedo acercarme?
—Dios mio Lize, te he traumado, no saldré corriendo lo prometo, solo entiende que esto no fue, ni es, fácil de asimilar.
—Ey tonto ven aquí déjame abrazarte —Me dejo rodear sin poner resistencia, aunque todavía me sienta molesto con ella, no puedo negar que necesito de mi mejor amiga.
—Estoy muy furioso con Celeste ...Y con todos —confieso —. Aun no me siento listo para enfrentar tanta mentira.
—Llora, grita, golpea una pared, haz lo que sea necesario para estar listo, haz dejado pasar mucho tiempo, y tengo miedo de que cuando abras los ojos sea tarde, soy tu mejor amiga, aunque estés enojado conmigo, sabes que es verdad, y si estas aquí es porque encontraste el valor que te hacia falta para hacerle frente a esto, tú puedes, eres el hombre mas asombroso y noble que conozco, aunque viniste aquí hace mas de un año disfrazado de falso ejecutivo mujeriego y arrogante, Celeste descubrió al verdadero Nicolas envuelto en capas artificiales, deja que conozca también ese hombre valiente que lucha por lo que quiere, ese que no se rinde, ese que se aprendió sus lugares favoritos para sorprenderla, el que pasaba pendiente de sus horarios para siempre hacerse un hueco en su agenda, el que chantajeaba a su mejor amiga para que le programara reuniones con la mujer que lo traía loco, ese eres tú Nicolas ¿Ya recordaste todo eso? —pregunta fustrada, yo sonrió.
—Si, ya —contesto con una sonrisa mas amplia, Lize abre los ojos con sorpresa.
—Tú... tú ...—señala—mierda porqué me torturas cuéntame todo.
—Me he estado arrastrando en mi miseria, ya sabes días malos, días horribles, nunca llegaron los días buenos, pero ...hace unas noches todo cambio, en realidad llevo mucho tiempo teniendo sueños raros con una mujer, y no me mires así, no ese tipo de sueños, pero en ellos nunca podía verla bien, sabes, era muy extraño, pero entonces hace unas noches los sueños se volvieron como flashes, escenas de mi vida que no recordaba, no tengo conocimiento si todo lo que soñé es verdad, porque no fue como que desperté y mi memoria hubiese vuelto de la nada, solo me siento menos perdido, como si todo tuviera sentido, aunque tengo mis dudas, me acabas de confirmar muchas cosas, todo eso que hice para conquistar a Celeste, sé que lo hice solo que no puedo procesarlo por completo, todo es muy reciente, luego por las noches aparecen por partes en mi memoria —suspiro— es difícil de explicar.
—No, no, lo entiendo y te creo. —aplaude— ¡Ay! esto es increíble, debo llamarlos a todos...
—¿Donde esta ella? —interrumpo. —¿Donde esta mi hijo?
—Nicolas...
—No mas mentiras, Lize, no mas engaños, omisión de información o como quieras llamarle, para mi siempre sera lo mismo. —acuso.
—Entiende Nicolas, no es como que vas a ir a hacer un escándalo, ella esta en reposo
—Gracias Lize, eso fue muy sutil, sé que fui un idiota antes, pero yo no sabia de su estado delicado, y ...quiero disculparme con ella yo necesito verlos, decírselo a la cara.
—¿Y luego que?
—No lo sé —mierda
No lo sé
—Entonces piénsalo, y cuando lo sepas yo misma te comprare el ticket de avión.
¿Que?
¿Donde demonios estas Celeste?
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top