Ya falta poco para llegar a la cuidad, no es necesario que diga lo estupendo que me la he pasado con Nicolas en el viaje porque es obvio al verme la tonta sonrisa que he mantenido durante todo el trayecto.

 — Ya basta me estas asustando  — shhhh subconsciente déjame ser cursi. 

He notado a Nicolas algo nervioso y extremadamente dulce estoy segura que esta avergonzado por la borrachera de anoche, según me dice tenia mucho tiempo de no tomar con ese exceso y por eso se le subió todo el alcohol a la cabeza tan pronto, pobre tiene una resaca horrible, tanto, que me ha tocado a mi conducir para regresar a casa, cosa que no le ha hecho mucha gracia a Nico pero no pudo llevarme la contraria y termino aceptando.

—¿Te arrepientes? —pregunta en un susurro bajo me toma por sorpresa sacándome de mis pensamientos, y ahora que mosco le pico a este.

—¿Hmmm? —Estaba tan distraída conduciendo que no se si fue mi imaginación y quiero confirmar. 

—¿De quedarte conmigo? ¿De lo que paso? ¿De lo que hicimos? ¿De mi? ¿Te arrepientes? —No entiendo a que vienen tantas preguntas, debo de tener la cara de poker mas honesta del mundo en este momento.

—¿Por qué me preguntas eso? —sonrió ingenua y nerviosa, acaso será que esta arrepentido pero quiere que yo lo diga primero, no, debe ser algo mas, necesito saber que tanto recuerda de la declaración de anoche.

—No lo sé —suspira frustrado —. Yo solo quiero saber si algo cambio para ti , o si lo que paso tan solo fue un sueño — lo ultimo lo termina en un susurro, creo que voy a entrar en pánico, por qué me cuesta tanto hablar de mis sentimientos, si tan solo no fuera tan yo y le dijera todo lo que siento.

—¿Qu...ie....eres hablar de lo que paso anoche? —pregunto con nervios y el corazón galopando a trote,  a él se le ilumina la mirada y algo me dice que este tema es algo que no voy a poder evitar y hasta no aclararlo no quedara tranquilo, soy muy torpe para hablar de sentimientos nunca he sido buena para esto, así que, antes de irme a un abismo por conducir nerviosa me salgo de la carretera y detengo el coche en un lugar seguro.

—¿Por qué tienes esa cara tan asustada? ¿Te hice daño? Celeste, mi cielo, te juro por Dios que si te hice daño... soy un idiota, perdóname por favor —Toma mis manos y se las lleva a los labios, lo noto tan desesperado que mejor me apresuro a contestarle.

—¡No!, claro que no, Nicolas, no paso nada, solo estuvimos en el baile y luego caíste rendido por la borrachera y luego te lleve a la habitación, solamente eso, no paso nada mas. 

Termino en un susurro triste y siento que me aprietan el corazón, tal vez una parte de mi quisiera que lo recuerde, pero es imposible desde que despertó no hemos hablado de todo lo que paso, ni nos hemos tocado, ni besado, a pesar que el no deja de ser tan lindo siento que me estoy muriendo por tan solo un beso suyo.

—Nunca en la vida te haría daño, al menos no lo haría estando consiente de ello, no mientras mi corazón lata como loco por ti, maldita sea, Celeste te quiero, no he mentido las veces que he dicho que eres muy importante para mi —Sus manos están tomando fuerte mi cara pero sin llegar a lastimarme y mientras habla no puedo evitar ver sus ojos, sus labios , sus ojos, sus labios y necesito contestarle , mi corazón se ha conmovido por sus palabras y también deseo besarle ahora porque siento que muero si sus labios no me tocan.

—Yo también ...te quiero —digo con la boca casi como un pescado, pues sus manos están sujetando tan fuerte mis cachetes que apenas y logre abrir los labios para contestarle.

Nunca se lo había dicho a ningún hombre y siento como que hubiera soltado un gran peso fuera mi, pensé que me sentiría tonta cuando lo dijera, pero no es así, me siento tan feliz que no me lo creo, Nicolas literalmente me comenzó a comer la boca con besos llenos de promesas y puedo sentir todo su cariño desbordado en mi, besa mi nariz, mis ojos, mi boca y cada vez que separa sus labios de los míos me dice un te quiero, si seguimos así no llegaremos nunca a nuestro destino ,sonrío al pensar que me importa un comino si llegamos ahora o en un mes, quisiera besarle hasta quedarme sin sentido pero por desgracia el termina el beso regalándome una gran sonrisa como premio de consolación.

—Tu sei la mía principessa —sonrío avergonzada y niego con la cabeza al escucharlo, al parecer Nicolas romántico es italiano, lo veo arrugar la frente y la sonrisa se borra de sus labios.

Ya la cagaste Cele, se supone que no entiendes recuerdas boba boba boba

—Este, Nico yo... 

—Por eso estabas tan asustada, por Dios pensé que... , solo tienes que decirme que no Cele—Nicolas me abraza y siento como su cuerpo vibra ¿Esta llorando? 

La cagaste, te lo dije.

—Nico yo... yo no...quiero... es decir.. no puedo.. no quiero decirte que no, pero tampoco me siento lista para decirte que si —Siento su abrazo mas fuerte y su cuerpo sigue vibrando.

Un momento...

 Se esta riendo de mi el muy idiota, me remuevo inquieta y muy enojada hasta que me suelta. 

—Perdóname Cele, no lo pude evitar, ponerte incomoda y nerviosa te hace ver tan linda, debiste ver tu cara —Explota en carcajadas. 

Estas en medio de la nada , podrías matarlo y enterrarlo aquí mismo, total, nadie sabe que están juntos.  

—Eres un idiota, quieres decir que has estado jugando conmigo —Salgo del vehículo necesito calmarme antes que le haga caso a mi subconsciente y termine por asesinarlo aquí mismo.

—Cele, escúchame por favor, claro que no, estas pensando lo que no es, déjame explicarte — Hago contacto visual y levanto una ceja en señal de que tiene toda mi atención.

—Solo te presione para que tu me dijeras lo que yo quería escuchar antes que llegáramos y tu hicieras como que nada ha pasado entre nosotros —Trata de acercarse pero lo hago seña que se quede en donde esta, aun no lo quiero cerca o podría golpearlo con la rama de un árbol.

—¿Que querías escuchar de mi? ¿Que te quiero? ¿Que es imposible tenerte cerca sin querer darte un beso? ¿Que incluso pensé en aceptar la propuesta de matrimonio mas informal del mundo por estar a tu lado? Quisiera con toda mi alma ser tu "principessa" pero no puedo serlo porque no soy la persona que tu crees que soy, mis demonios del pasado son muchos y te lastimaría y si eso llegara a pasar algo dentro de mi te juro que se moriría, eres tan estúpido ¿No te das cuenta? ¿No sientes como mi cuerpo reacciona al tuyo? ¿No sientes como con cada beso me robas un pedazo del alma? —Siento las lagrimas rodar por mis mejillas y las limpio rapidamente avergonzada y veo como Nicolas se ha quedado como piedra, maldita boca mía que tiene vida propia cuando quiere dejarme expuesta. 

—Ven acá —Nicolas toma mi mano y me lleva hasta el, comienza a besarme y me levanta del suelo para caminar hasta el auto

—¿Que haces? 

—Te robo todos los pedazos del alma —sonríe burlón

—Eres un idiota, CIELO — sonrió en sus labios y lo beso con toda la necesidad que he tenido de hacerlo 

Terminamos en la parte trasera del coche, Gracias al cielo por los vidrios polarizados, aunque en este lado del camino no pasan muchos autos, no puedo evitar sentirme avergonzada pero no arrepentida Nicolas hace mágico cada momento que estoy con el, no importa el lugar, todo se me olvida y pierdo los sentidos cuando me toca, estoy perdida ya no hay vuelta atrás lo amo como no he amado nunca a nadie.

—¿Quieres ser mi princesa? — me pregunta entre besos y suspiros.

—No me importa tu pasado, yo solo quiero ser tu futuro, dime por favor que aceptas.

Nicolas se mueve lento entre mis piernas, no se por que me hace estas preguntas en pleno acto, me esta volviendo loca con esos movimientos.

—Si, quiero serlo —. Logro poder articular apenas audibles las palabras entre jadeos —.  prométeme que no olvidaras que no te importara nunca nada de mi pasado.

Levanto mas mis caderas y siento como lo vuelve loco mis movimientos, es mi oportunidad de aprovecharme de la situacion como lo hizo èl.

—Oohh ¡Santo Jesucristo, lo prometo!—exclama.

Paso mis uñas por su espalda y el aumenta el ritmo estamos a punto de tocar el cielo juntos.

—Entonces ...Somos novios —afirma.

Estoy prácticamente viendo estrellas de placer , tomo su cara y me trago con mis besos sus últimos jadeos antes de perdernos juntos.

—Si, lo somos —digo tratando de recuperar el aliento y sonriendo como una chiquilla enamorada.

(...)

Retomamos nuevamente nuestro camino, ni siquiera sé cómo se lo van a tomar todos, voy ideando en mi cabeza y fabricando historias para poder contar como terminamos de novios en este viaje, cuando nadie siquiera sabe que estamos juntos, cada vez que estamos mas cerca mis nervios aumentan, por suerte Nicolas ha puesto música y como siempre me sorprende con mis canciones favoritas, logro olvidar todo por un momento al escucharlo cantar e invitarme hacerlo con él, soy adicta a los movimientos de su boca.

Quisiera ser la lluvia que empapo,
tus ojos negros pidiéndome un beso.
Yo quisiera ser el viento que soplo
dejando tan gracioso tu cabello
Parando el tiempo en mi corazón...

Quisiera ser el tallo de la flor,
con la que hiciste en mi boca el silencio.

Yo quisiera ser la luz que ilumino,
tu rostro aquella noche de Febrero
cuando en secreto escuche tu voz...

Quisiera ser la brisa que acaricia tu sonrisa, en el mar, en la montaña, o en el cielo azul de Abril.

Quisiera ser un verso dentro de tus pensamientos, que recuerdes mi mirada suspirando en la ventana
imaginando que apareces tras de mi.

Y que me cojas de la mano,
que me susurres que has llegado
que me prometas que a mi lado eres feliz.

No haré preguntas, no habrá recuerdos, 

—Haré que tu pasado sea solo un cuento, que sobre el agua un día el viento escribió.

lleva mi mano a su boca en una promesa y nos miramos por apenas un segundo antes de volver la vista.

Un auto ah perdido el control y viene hacía nosotros, después todo se vuelve negro.........  

Nota de la autora:

Bai ☺