¿Ventaja o desventaja?
Hola, no me había presentado por que se me hace algo innecesario y molesto poner notas en el capítulo ya que bueno se confunde con el texto pero bueno descubrí una buena manera de que no se interpusiera y no se confundiera con el capítulo. No abra notas finales así, escribiré al principio lo que tengo que decir y ya.
Espero que hasta este punto les esté gustando... me quise aprovechar un poco de lo famoso que es esta plataforma, siento un poco de frustración por no tener muchos comentario y al parecer aquí es igual, o bueno ni modo y mejor me rindo con eso de los lectores. En fin no lo quiero hacer largo ni que tengan estos detalles sin sentido.
Si prefieren la historia en esta plataforma esperen hasta que suba los demás capítulos en Amor Yaoi encontraran este mismo fic con... ¿13? O ¿14? Capítulos subidos.
Otra cosa que quería decir o mejor dicho agradecer es a mi beta xK1rarax.
— Foxy... — Dijo temeroso el chico peliblanco que llevaba un parche en el ojo derecho.
— Mangle, Balloon Boy.
— ¿Son parientes? — Preguntó Freddy.
— Sí... son mis primos.
— Me habías dicho que no tenías a nadie. — Cuestionó Golden.
— Su familia no quiere saber nada de mí.
— ¿Por qué? — Preguntó Golden mirándolos a ambos, pero estos estaban paralizados debido a esos ojos color miel que los veían con amenaza.
— Disculpen... me tengo que retirar.
— Pero, ¿Por qué? — No dieron explicaciones, los dos chicos se fueron. Foxy sonrió mientras los miraba partir.
— Hace cuatro años que no nos vemos, los iré a saludar ¿Les importa?
— Claro que no, ve — Dijo Freddy, sin más se dedicaron en sus asuntos mientras Foxy se iba a por esos dos. Será mejor callarlos antes de que se les suelte la lengua.
Los dos chicos estaban en una pequeña habitación donde estaban trajes de los animatrónicos, Foxy entró haciendo que esos dos se estremecieran.
— Vaya bienvenida...
— ¿Qué haces aquí? — Cuestionó Mangle, colocándose en frente de su pequeño primo.
— Trabajar.
— No tenías que salir del hospital.
— Ya no estoy enfermo.
— Tú nunca dejaras de ser un loco... Mataste a tus padres.
— Sí... de eso venia hablar. No quiero que digan nada, en especial a Freddy.
— Es mi amigo... lo protegeré de ti.
— Vaya, ¿Quieres perder el otro ojo? — Tembló por la pregunta, cosa que notó Foxy — Sé que me temen, sé que temen que les haga algo. No se preocupen, sólo quiero una relación con Freddy.
— ¿Para qué?
— Es un chico lindo, me gustó... quizás... amor a primera vista.
— ¿Tú enamorado? No sabes siquiera qué es el amor.
— Un sentimiento humano, la necesidad de hacer cosas por esa persona, pensar primero en su bienestar que en el mío, hay muchas teorías sobre el amor pero ninguna lo explica con claridad, nadie sabe que es en realidad, sólo lo sientes y ya — Mangle chasqueó la lengua mientras miraba a su primo. Foxy cerró los ojos y suspiró — Empecemos de nuevo, ¿Quieren? Seamos una verdadera familia — Mangle lo miró, desconfiado — Sé que les hice daño.
— Mataste a mi mascota... Me encerraste en mi habitación mientras te llevabas a mi conejo, lo cocinaste vivo.
— Esa vez había leído que los conejos también se comían.
— A Balloon Boy lo traumaste por el juego de la ruleta rusa.
— Esa no fue mi idea — Le sonrió y Mangle chasqueó la lengua en respuesta. — Te volviste una persona más ruda, Mangle — No obtuvo respuesta, sólo una mirada de desacuerdo por parte del peliblanco.
— Y, ¿Por qué trabajar aquí?
— Para estar más cerca de mi osito.
— Tiene novio.
— ¿Y? — Mangle suspiró profundamente.
— Haz lo que quieras — Dijo caminando hacía Foxy mientras que por detrás le seguía Balloon Boy, al estar al lado de Foxy se detuvo pero siguió mirando adelante — Sólo no nos metas en tus planes — Esa declaración le saco una sonrisa a Foxy.
— Se cómo eres, Mangle — El nombrado frunció el ceño para luego salir de ahí dejando solo a Foxy.
— ¿Todo bien Mangle? — Preguntó Freddy acercándose al peliblanco.
— Claro que sí, Freddy — Le sonrió con alegría fingida.
— ¿Se extrañaron mucho?
— Claro, después de todo es mi familia — Sonrió mientras se retiraba de Freddy.
El castaño siguió con la mirada a Mangle y Balloon Boy, ya que este se veía tenso.
— Se ven extraños. — Tan distraído estaba mirando a sus amigos que no se percató del camino, chocando con el pecho de alguien. — Lo siento. — Dijo mirando esos ojos miel. — No me fijé.
— No te preocupes. — Sonrió feliz, quizás era ridículo por el corto tiempo que duró, pero se sentía feliz de haber tocado a su osito.
— Foxy. — Llamó Golden al pelirrojo, éste se había quedado viendo con la misma sonrisa a Freddy poniéndolo incómodo. — Ven, te daré tu uniforme.
— Sí — Volteó a ver a Golden para luego ver de nuevo a Freddy.
— Suerte en tu primer día. — Dicho eso, pasó por un lado del ojimiel y se retiró, sin poder evitar lo siguió con la mirada hasta que de nuevo Golden le habló. Pero que fastidio. Caminó hacía el rubio.
Golden le entregó su uniforme y le indicó en donde podría vestirse, el zorro sólo asintió y se marchó pero antes de eso Golden le volvió a hablar.
— No suelo ser celoso, Foxy. — Dijo cruzando los brazos. — Pero tú me provocas.
— ¿Sí?, ¿Y? — Golden se sorprendió de la manera que le había contestado, nadie se había atrevido a siquiera mirar a Freddy ya que él daba miedo, pero al parecer el pelirrojo no le importaba.
— Freddy es mi novio.
— Créeme, eso lo notan todos — Lo estaba haciendo enojar.
— No me gusta mezclar mi vida personal con mi trabajo, pero si le haces algo a Freddy te juro que haré que te despidan.
— ¿Piensas que podría hacerle algo?
— No eres muy discreto con la mirada, zorrito.
— Tranquilo, no te lo pienso quitar. Están en una relación y Freddy se ve feliz contigo.
— Lo está. — Se estaba aguantado las ganas de matarlo, sin decir nada más se retiró hacía los vestidores para cambiar sus ropas a un traje negro de camarero con un delantal blanco que le llegaba un poco más debajo de las rodillas.
Salió de los vestidores y hacía lo que le indicaban, aunque a veces desviaba su mirada al castaño que ya se había colocado su pequeño disfraz con esas orejitas de oso, de nuevo sonrió.
Los clientes comenzaron a ir y venir, mirando el show de esos tres, Freddy se paró en el escenario mientras acercaba su micrófono a su boca. Un tono rockero se escuchó del piano eléctrico del conejo.
— El asesino culpable de las muertes de aquellos niños, mejor conocido como el hombre de morado.
Nadie sabe quién soy, conocen mi color
Pero no saben dónde estoy
Hace años que ocurrió, la verdad no me arrepiento
Disfrute sin compasión...
Y aunque quieran descubrirme es muy fácil confundirles
Mi nombre, mis apellidos dan igual, el hombre morado soy
En esa parte de la canción comenzaron a cantar las personas como en un coro.
Odio a todo niño de este mundo y quiero
Acabar con todo si están sonriendo
No merecen ser felices como yo
Han podido volver, ¿Cómo ha podido ser?
Malditos muñecos otra vez
No podrá escapar de aquí, pues parecen enfadados
Pero no me atraparan
Y aunque quieran descubrirme es muy fácil confundirles
Mi nombre, mis apellidos dan igual, el hombre morado soy
Tengo sangre entre mis manos
En mi alma está diablo
Te ha llegado una llamada ¿quién será?
El público comenzó a aplaudir a Freddy.
Al terminar la canción todos se dirigieron a su mesa y comenzaron a platicar, el castaño bajó del escenario para descansar un poco. Foxy miró a todos lados para asegurarse de que Golden no estuviera cerca, al estar seguro de ello se acercó a Freddy.
— Hola.
— Hola, Foxy.
— ¿Tú escribes las canciones?
— La verdad lo hacemos entre los tres — Le sonrió.
— Son un gran equipo.
— Sí, no conocemos desde niños — Se quedaron unos momentos en silencio hasta que Freddy habló — Te ves un tanto misterioso.
— No es gran cosa mi vida.
— Sabes, noto algo extraño a Mangle desde que te vio, ¿No se llevaban bien?
— Se puede decir así.
— Entiendo. — Sin quererlo, Foxy se le quedo viendo a Freddy. De nuevo esa incómoda mirada estaba en su persona — Tengo... tengo que ir con Bonnie — Sonrió nerviosamente, eso no pasó desapercibido por el pelirrojo.
— ¿Te incomodo, Freddy?
— No... no... sólo que... Bueno. — Foxy se acercó a él, poniéndolo aún más nervioso.
— Te ves tenso. — Miró algo temeroso esos ojos color miel, tenía una mirada extraña, una que no había visto antes.
— Foxy. — Dijo una voz detrás de él y agarró el hombro del nombrado. Foxy sólo rodo los ojos y volteó la mirada para ver aquellos ojos negros. — ¿Qué te parece si te vas a trabajar por allá? — Estaba molesto, a Freddy nadie lo tocaba mientras él estuviera ahí, NADIE.
— Claro. — Lo miró con una mirada penetrante para luego mirar a Freddy. — Después nos vemos, no quería incomodarte.
— Descuida. — Foxy le dio la espalda y caminó hacía donde le había indicado Golden.
— ¿Freddy?
— ¿Sí?
— ¿Estás bien? — Preguntó abrazando con preocupación a su novio.
— ¿Por qué no lo estaría?
— No... por nada.
— ¿Te preocupa Foxy?
— Admite que también te incomoda.
— Quizás no sepa que tenemos una relación.
— Se lo dije.
— No seas tan paranoico.
— Lo sé...pero Foxy... Simplemente como lo ven Mangle y Ballon Boy... de seguro saben algo que nosotros ignoramos por completo
— Quizás sean problemas familiares — Se acercó a Golden y le dio un pequeño beso en su mejilla para que se calmara un poco — No tenemos que meternos en problemas familiares, apenas lo conocemos.
— Pero a Balloon Boy y a Mangle ya los conocemos — Susurró mientras miraba hacía donde estaba Foxy.
.
— No es porque esté a tu favor, pero... ¿Piensas conquistarlo acosándolo? — Preguntó Mangle mirando a Foxy.
— Pasé cuatro años encerrado en un manicomio.
— Pero eso sólo hará que se aleje de ti. — Dijo el peliblanco cruzándose de brazos.
— Veo que estas cooperando, Mangle. — Se miraron ambos a los ojos, mientras que de cerca el pobre chico de ojos azules y cabello castaño observaba con temor a sus dos primos. — Regresaste, Mangle. — Sonrió de nuevo, simplemente no habría fallas en su plan.
Continuará...
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top