- Bien creo que mejor dejarte descansar , piensa bien las cosas –dijo el mirada azulada en la otra línea , colgando el celular-

- En realidad yo estoy enamorado de ese bobo profesor?-Dijo el menor en pregunta- no puede ser cierto...-penso,mientras que se consumia en sus pensamientos ede que si o no le gustaba su profesor.—

Onodera al llegar a su hogar, entró, se encontró con la sorpresa que su madre y padre estaban viendo una revista que Ritsu había dejado ya hace mucho tiempo, por otro lado sus padre voltearon he hicieron una seña para su único hijo se acercará, lo hizo, pero antes que sus progenitores digan algo el menor decidió hablar primero.

—Sobre esa revista yo...fue hace mucho...mejor dicho meses, estoy bien, yo no me iré del país...quiero...—

—Ritsu—interrumpió su madre, se acercó a él, le dio un reconfortante abrazo, su hijo correspondió— ¿Tú no quieres irte del país por Takano, o sí? —este golpe fue bajo muy bajo para el menor, está claro ¡que si lo quería! , tenía planeado irse del país para poder tener una profesión mejor, no tener que ver nunca más a ese tonto profesor particular...pero ¿qué paso?, está clara la respuesta ¿no? , para que dar ¿detalles?

—Mamá...eso fue antes...ahora estoy bien, se los aclare al comienzo—se zafó del agarre para mirar a sus padres—Yo...mierda... ¡¿Por qué, el amor están complicado?!... —exclamó, para después agachar su cabeza, dejar caer unas lágrimas—

—Ritsu—llamó su padre este alzó la mirada—Te irás al extranjero, el país que marcharás a Inglaterra asuntó acabado, quiero que tengas un futuro excelente, del amor...eso lo veremos después—el menor indignado ante lo que dijo su padre...no podía creerlo, miro a su madre , esta tenía una mirada preocupada, al notar que su hijo lo observaba sonrió, ¿Cómo no conocer esa sonrisas?, que son dan animo pero a través de ellas son de una gran tristeza oculta.

Decidió no pensar más en ello, se levantó, dejando a sus padres.

Ingresó a su habitación con tranquilidad, se recostó en su cama y unas ganas de llorar atormentaron al menor, empezó a llorar sin saber la razón... ¿Era lágrimas de felicidad o tristeza? ¿Qué es lo que realmente siente en este momento?, no fue en cuestión de minutos, segundo o quizás horas para que cayera el joven en los brazos de Morfeo.

Los rayos matutinos no tardaron en aparecer en la habitación de Onodera, con pesadez este se levantó ya que aquellos rayos no le dejaban dormir del todo, fue al baño a darse una refrescante mojada a su cara de recién despierto, grande fue la sorpresa de nuestro protagonista al darse cuenta que tenía los ojos hinchados y ojos totalmente rojos; era totalmente malo para él no podía ir a la escuela así, menos al hospital, dio un gran suspiro bajo las escaleras de su hogar al entrar a la cocina se encontró con sus desayuno listo junto con una nota que no tardó mucho el castaño al leer.

"Hijo ayer te escuche llorar, no me gusta verte de esta forma, sabes...yo también pase algo así como tú ni siquiera sabía el significado de aquellas lágrimas que alguna vez derrame, no te puedo asegurar que si la decisión de tu padre es buena, pero...quiero que sepas que te queremos, amamos demasiado como para verte así Ritsu.

Llegaremos hoy tarde a casa procura desayunar, almorzar y cenar bien ¿de acuerdo? , para aliviar la inflamación de tus ojos échate agua fría o manzanilla, cuídate, si no puedes ir a la escuela hoy , está bien, tomate tu tiempo pero eso si NO TE LO TOMES TAN EN SERIO DE TU DESCANSO que creo que sería mejor dártelo solo hoy , es hora de ir al trabajo, cuídate mi niño, aunque no lo eres... pero siempre lo serás"

De una mueca seria apareció una sonrisa, aquel papelito que su madre le ha escrito, ayuda mucho. Acto seguido el menor tomo su desayuno con tranquilidad hoy no iría a la escuela ¿para qué preocuparse por solo faltar un día? Lo bueno es que tiene su amigo Kisa para que lo ayude, cuando uno falta siempre se informan de todo lo que sea necesario, el mirada esmeralda ya había culminado su desayuno por lo cual ahora los tenía que lavarlos en el fregadero, con cuidado fue depositando los servicios en el secador.

Por otro lado en el hospital, Takano ahora que ha despertado, como no era de esperarse las enfermeras venían a visitarlo poniendo excusas diciendo "le falta suero" "debo revisarlo", la única enfermera que se tomaba en serio era la enfermera principiante que ya había atendido ayer al mayor, venía le sacaba muestras de sangre, una que otro para medirle la presión, etc de cosas.

En su cabeza sólo recordaba al castaño que ahora no iba a visitarlo, tenía dudas, esta con la esperanzas en el que aquel chico lo visite, pero no fue así..., ambos tienen que pensar en el futuro, su cabeza le estaba doliendo un poco al tratar de hacer un esfuerzo de recordar al chico, pero sus resultados fueron en vano, tanto fue aquel esfuerzo que termino quedándose dormido.

Onodera estaba igual, más que nada sus ojos, si los vieras pensarías que lo hubieran golpeado, él odiaba llorar más en especial porque sus ojos se hinchaban demasiado, como es día de clases los canales televisivos no son muy entretenido que digamos, apago aquel artefacto y se fue a su habitación, estaba como el mayor no podía dejar de pensar en él.

—Takano,¿Qué me has hecho? maldito seas...amor...—murmuro—Si tan sólo no me hubiera dado cuenta de mis sentimientos estoy seguro que estaría bien...no estaría pasando por esto, mierda, mierda...—

Con pesadez se movía el castaño buscando una posición donde quedarse dormido o relajado, pero ver su habitación le traía recuerdos unos que otros lindos y otros que lo hacían enfadar, tenía que admitirlo de una vez, si no lo hacía, ¿Quién lo haría? Nadie...él es suficientemente mayor que digamos para resolver estas cosas con esto salió de su casa a dirigirse al hospital pero claro llevando consigo unos lentes negros, nadie tenía que ver sus ojos hinchado y ojerosos.

En un abrir y cerrar de ojos, ya se encontraba en las puertas del hospital, chasqueó la lengua entre sí, entro tenía que acabar con esto si quizás decidía aunque ya estaba dicho que se tendría que ir a Inglaterra si o si tenía que acabar la secundaria para irse allá. Llegó por fin a la habitación doscientos siete, toco la puerta pero nadie respondió, entonces decidió abrir la puerta encontrándose con el azabache profundamente dormido.

—Es ahora o nunca, tengo que terminar con esto—susurró, se sentó en una de las sillas de la habitación—

Antes que nada gracias por los votos , los avisos de que no puedo actualizar xD, se los agradezco mucho y por su paciencia...

¿Qué les parece estar manera de escribir? ¿mola o no mola?

Eso los dejo a su criterio !! 

la historia esta por llegar su final , quizás el final sea muy corto, todo depende como vaya o como lo vea yo , ya que abra epilogo :3

:v hay si no que me a pasado matenme!!!!

corre por todos lados se lleva un peluche de sans :3

bye!! <3 los quiero mis querido Lectores