«Pov Shun»

Estaba muy preocupado por Seiya, se la pasaba todo el día en su cuarto sin hablar con nadie; nisiquiera conmigo. ¡Hasta no quería comer! Tenía que obligarlo lo cual no me daba nada de gracia, Saori ha estado muy ocupada con la Fundación así que no a estado con nosotros en un tiempo y no se ha dado cuenta de esto.

Los demás si estan bien, Hyoga se fue a Siberia, Shiryu a los cinco picos y Ikki está en la isla madre muerte (y yo estoy aquí porque el mismo me dijo), es muy solitario, y más si tienes como compañero a un Pegaso deprimido.

Estaba en la cocina preparando el almuerzo, cuando de repente mi teléfono sonó; me llegó un mensaje de mi hermano. Emocionado, cogí el teléfono y lo leí:

Ikki: ¡Hola hermanito! ¿Cómo estás?

Shun: Hola hermano, yo bien, pero Seiya está muy  deprimido y triste, me preocupa...

Ikki: ¿Qué le pasó ahora al Burro? ¿Lo rechazó Saori?

Shun: No, es que al parecer las heridas que sufrió lo desmotivó bastante...

Ikki: Ñah! Es una face de esas, ya se le pasará...

Shun: No lo creo, nisiquiera quiere comer...

Ikki: oh! Entonces la cosa si es sería...

Shun: Ya no se que hacer...

Ikki: ummm.... ya sé, ¿Qué tal si todos fuéramos a la mansión?

Shun: Eso estaría increíble! A Seiya de seguro le gustará que estén todos aquí!

En ese momento percibo movimiento, ¡Era Seiya! ¡Salió de su cuarto! Obviamente me emocioné que hasta se me cayó el teléfono en la mesa. Lo cual el notó.

Seiya: ¿Con quien hablabas? — preguntó con poco ánimo mientras abría el refrigerador.

Shun: Con mi hermano... — dije sin dejar de sonreír de la emoción.

Seiya: ... que bien, Mándale mis saludos... — dijo desinteresado volviendo a la salida de la cocina con una soda en mano.

Shun: ¡Espera! ¿No vas a almorzar?

Seiya: No se puede comer pasta quemada... — Suspiró saliendo de la habitación.

Shun: ¿Pasta quemada? Pero si no... — digo confundido hasta que veo la olla, ¡Se me estaban quemando el espagueti! Rápidamente tomó las agarra ollas y la pongo en el lavamanos sintiendo todo el vapor en la cara, pero ya era muy tarde. Suspire frustrado y volví con mi teléfono.

Shun: ¿Cuando vienen?

Ikki: En la tarde, pero el burro alado no puede estar mientras llegamos, para que sea sorpresa.

Shun: Entendido, nos vemos en la tarde...

En ese momento me fui rápidamente para la habitación de Seiya y toqué.

Shun: ¡Seiya! Arreglate que vamos a comer afuera...

Seiya: ¿Al final si se te quemó la pasta? — dijo sin abrir.

Shun: ¡Eso no es importante! — reclamó un poco enojado — ¡Pero vamos! ¡Será divertido!

Seiya: ¿Tengo opción? — preguntó mientras abría lentamente la puerta.

Shun: Nop — digo sonriendo mientras lo tomo de la playera roja y lo sacó de la mansion hasta un auto donde lo puse de copiloto, y él se quedó viendo por la ventanilla.— ¡Anímate! Hace tiempo que no sales...

Seiya no dijo nada sólo suspiró apoyando el codo en la puerta del auto, viendo la calle mojada por que había llovido mucho hace poco, quería aliviar el ambiente así que primero fuimos a una plaza para caminar un rato. Todo parecía estar bien, y vi un puesto de helados.

Shun: ¿Quieres uno? — dije señalando al mismo.

Él solo se encogió de hombros, sólo asistí para dirigirme al puesto donde habia una fila de unas tres o cuatro personas. Cuando llegó mi turno pedí un cono de vainilla y otro de chocolate, casi se me cae por que la gente se estaban amontonados.

Shun: ¡Seiya! ¡Ya llegué con los....! — pero a ver que Seiya no estaba sacudí mi cabeza para ver en medio de la gente, no estaba. Empecé a buscarlo y adentrarme en la multitud para ver si lo encontraba...

«Pov Normal»

El Pegaso se aburrió de esperar a su amigo y decidió irse por su cuenta, en la plaza había un camino hacia una pequeña villa pobre, podía ver que los comerciantes vendía sus frutas, verduras, dulces y etc etc. La verdad se sentía apagado, y con poca confianza, sólo quería volver a ser el mismo pero le era difícil. En eso, pudo notar a unos tres niños; dos niños y una niña que parecían ser muy pobres, uno de los niños al parecer el mayor tomó una manzana roja de un puesto de un gordo pero fornido hombre. Que se dio cuenta y no lo tomó bien;

Hombre: ¡Hey! ¡Tienen que pagar eso! — gritó enojado pero los niños corrieron y el gordo comenzó a perseguirlos. Seiya seguía la escena muy de cerca y sabía muy bien que esto no terminaría bien así que los siguió hasta un callejón sin salida, el hombre los había acorralado. — Ahora si pagarán mocosos...

Seiya iva a intervenir pero vio que el hombre estaba en el suelo, y a su lado estaba alguien, una chica, tenía sus ropas rasgadas y sucias de al parecer de barro. También tenía raspones y algunas heridas,  su piel era (C/p) y por el puente de su nariz había pequeñas pecas que la hacían ver más adorable con su  cabellos (C/c) y ojos (C/o). Sostenía un tuvo y al ver lo que había hecho se dirigió a los niños.

???: ¿Están bien? — dijo dulcemente agachandoce a la altura de los niños, ellos asienten, y la chica , suspiró de alivio. — serán mejor que se vayan antes de que ese hombre despierte...

Los niños comprendieron — gracias señorita... — dijeron al unísono mientras se iban.

Seiya no podía dejar de ver a la joven, le era imposible. Era tan bonita, y al parecer tenía un año menor que él, y no importaba que estuviera sucia y con andrajos. En ese momento el hombre que estaba inconciente se levanta con un palo de madera que estaba en el suelo e intenta atacar a la chica, Seiya no pudo hacer nada a ver que cuando Casi el hombre le  azota a la joven, está gira en sus propios pies para darle con el tubo en la mano y que ambos soltaron sus armas. Tanto la joven como el hombre estaban desarmados pero con mucha diferencia.

La chica dio un paso hacia atras cuando vío que el hombre levanta su mano para golpearla, en ese momento Seiya interviene tomando al hombre por la muñeca.

Hombre: ¿¡Pero que!?

Seiya: ¡Déjala en paz! — reclamó el castaño tirándolo hacia atrás justamente en unos botes de basura. — ¡Largo! ¡No quiero volver a ver que intentes lastimar a alguien!

Y el gordo se fue escopetado de la escena, la chica se le quedó viendo a Seiya y él a ella. Cierto sonrojo aparece en las mejillas del Moreno volviendo más incomoda la situación.

???: G-Gracias... — dijo tímida la joven sonriendo agradecida, Seiya sintió que su corazón se detuvo en esos momentos. — ¿Cómo te llamas?

Seiya: M-mi nombre es Seiya... ¿Y el tuyo...?

(T/N): Soy (T/N)... Un gusto — sonrió ampliamente provocando que el color carmín en las mejillas del castaño se intensificará, (T/N) lo analiza con la mirada; se notaba que no era de esos lados por su ropa tan limpia. — No eres de por aquí ¿Verdad?

Seiya: La verdad es que no... es que estaba de paso y... — Suspiró rascándose la nuca, pero notó que ella empezó a sangrar levemente por sus manos, rodillas y sus raspones. Tomo sus manos inconscientemente para verlas más a detalle, también estaban lastimadas. — ¡Estas sangrando! Te llevaré a un hospital...

(T/N): ¡Ah! Esto, bueno, no es nada... — dijo rápidamente para sonreír nerviosa, obviamente Seiya no quería que sus heridas se infectaran así que la tomó de la mano para salir del callejón, (T/N) estaba confundida con que puso resistencia. — ¡Espera! Esto no es nada, de verdad no te preocupes...

Seiya: Te llevaré a un hospital para que te sanen — dijo sin cambiar de idea viendo por cada esquina a ver si la encontraba.

(T/N): Pero en estos lados no hay hospitales... — dijo algo desanimada y tristeza, Seiya parecía pensarlo (tranquilas no es el fin del mundo XD) .

Seiya: Entonces te llevaré a uno que no esta por aquí...

Y siguieron caminando hasta que salieron de la villa, aunque (T/N) le decía a Seiya que no era necesario él insistía más, llegaron a uno donde atendieron rápidamente a la joven. Cuando Terminaron de curar la, habían dejado a los jóvenes solos en una habitación porque la enfermera había hecho exámenes y buscaba los resultados, (T/N) estaba sentada en la camilla y Seiya frente suyo en una silla; un silencio incómodo invade el ambiente.

Seiya: Y.... ¿Cómo te hiciste estas heridas? — preguntó curioso para romper el hielo.

(T/N): Eh... bueno es-es que verás, — se puso nerviosa y al final se rasco la nuca. — No te vayas a reír ¿ok?

Seiya asintió y guardó silencio para escuchar el relato.

«Pov (T/N)»

Flashback

Salí del trabajo temprano, lo cual no pasa muy seguido; trabajo como camarera en un restaurante de segunda, ese día al parecer había una reunión de la gerencia y por eso nos liberaron temprano. Pensé que era buena idea ir por las compras así que emprendi mi camino hacia la villa pobre que me queda cerca de casa, y era el mejor lugar para conseguir todo más barato.

Vivo en un claro en una colina en medio del bosque cerca de allí, caminaba tranquilamente hasta que sentí las gotas de lluvia mojar mi cabello y cuerpo. Maldije a lo bajo y comencé a correr.

Gran error...

Resulta que estaba cerca de una Barranca y como había barro por todas partes no lo noté, y caí de lleno para rodar cuesta abajo. Terminé cayendo en un gran charco de barro que me ensucio toda.

Me levanté con dificultad al sentir los golpes y raspones en mi cuerpo, pero tuve que ignorarlo por que estaba cerca de la villa así que no tuvo más opciones que ir a comprar y regresar a casa para arreglarme. Allí me Di cuenta de que mis ropas también estaban rotas y sucias, sentía mucha pena de ir así pero ya estaba en la entrada y me daba pereza volver así que me fui como estaba.

Fin del Flashback...

«Pov normal»

(T/N): Y eso fue lo que pasó....

Seiya no podía responder, sus mejillas estaban infladas para contener la risa que le provocaba la historia. Obviamente (T/N) al notarlo se enojó y se levantó de la camilla para darle un leve golpe en el brazo, lo que provocó que riera el castaño.

(T/N): ¡No es gracioso!

Seiya: ¡Claro que si! jajajajajajaja — siguió soltando carcajadas hasta que se le acabó el aire y a doler el estómago. — ay ay Es muy gracioso...

(T/N) sólo le sacó la lengua enojada, allí llegó la enfermera y dijo que todo estaba bien ya se podían ir. Ya saliendo del hospital la joven ve en su reloj que también estaba cubierto de barro y al limpiarlo vio que ya debía regresar a casa.

(T/N): Lo siento Seiya pero me tengo que ir me esperan en casa, adiós.— se despidió amablemente del castaño moviendo su mano.

Seiya: ¡E-Espera! — gritó de repente llamando la atención de la joven que se voltio para mirarlo fijamente. — ¿Te... volveré a ver?

Esa pregunta sorprendió a (T/N), pero a la vez le pareció muy tierno así que sonrió ampliamente.

(T/N): Si el destino lo quiere así será... — fue lo último que dijo antes de que se fuera de la vista del Pegaso al doblar una esquina.

Él solo suspiró, no sabía porque, pero quería volver a ver a esa chica. Aunque la acaba de conocer su mirada le despertaba un sentimiento tan calido y hermoso en su pecho, algo parecido sintió hacia Saori. Pero este era más intenso y Real, metió sus manos en los bolsillos de sus pantalones y caminó hacia adelante sin prestar atención adónde iba; y allí va, detallando en su mente el rostro pecoso de la chica que defendió a esos niños a costa de su propia seguridad.

Andaba tan perdido en sus pensamientos que no se dio de cuenta de que alguien los llamaba desde un auto.

Shun: ¡Seiya! — gritó el peli verde abriendo la puerta del piloto para salir del auto, Seiya a ver su presencia decidió reunirse con él.— ¿¡Donde has estado?! ¿¡Te he buscado todo el Santo dia?!

Seiya: ay ni es para tanto Shun... — Suspiró aún en las nubes posando las manos en la nuca.— Vámonos que tengo hambre...

A Shun le sorprendió ese cambio de humor por parte de Seiya, cuando lo perdió estaba muy triste y deprimido. Pero ahora era diferente; parecía hasta feliz. Estaba confundido pero tenían que volver a la mansión para la reunión sorpresa de los demás, así que subieron al auto con rumbo a la mansión Kido.

«Pov (T/N)»

Al dejar a Seiya me fui a hacer mis compras, me puse a pensar por que un chico tan lindo puede estar en esos lados, dudé en que viviera por allí, tal vez sólo exagero un poco las cosas y sea una buena persona. Pero dejaré de pensar en eso, tras un largo camino para llegar a mi casa, al fin pude encontrarme con la cerca de madera improvisada que estaba alrededor de la propiedad, subiendo la colina con pereza llegue a la puerta abriendo la con mi llave. Cuando escuché un grito.

???: ¡Nada de zapatos sucios en casa! — gritó una voz femenina que obviamente me sorprendió sobresaltandome, pero me relaje a ver de quien se trataba.

(T/N): Hola mamá... buen día a ti también... — dije sarcástica mientras me quitaba los zapatos con los mismos pies y dejándolos en la entrada.

Mamá: Ya sabes que hoy yo limpio la casa *cof cof* — dijo ella mientras cubría su boca con la mano.

(T/N): Madre, ya te dije que yo iba a limpiar cuando saliera del trabajo. Sabes que no puedes hacer muchos esfuerzos... — dije algo desanimada al final mientras ponía las cosas en la mesa del comedor que estaba en medio de la cocina.

Mamá: *cof cof* Cariño, aprecio lo que estás haciendo pero estoy bien de verdad, ahora haré la cena... — intentó ser optimista cuando la interrumpo.

(T/N): No, yo haré la cena, tú descansa debes estar muy cansada.

Mamá: Pero... *cof cof* — volvió a toser lo cual me preocupé y le pregunté:

(T/N): ¿Te has tomado tus medicinas? — hable con un tono serio para que me responda.

Mamá: bueno... si... — sonrió con nerviosismo.

(T/N): ¿Todas? — me crucé de brazos arqueando una ceja.

Mamá: al menos una... — confesó cabizbajo.

(T/N): ¡Mamá! ¡¿Que es lo que te dijo el médico?! — le reprendi como ella lo hacia antes.

Mamá: Tranquila hija, estoy bien, enserio... me siento como nunca... *cof cof* — habló ella, obviamente no le creí así que me acerqué a ella y la tomé de los hombros para sentarla en la silla que estaba junto a la mesa.

(T/N): Esta bien, te creo. Pero yo haré la cena, estoy de buen humor.....

Mamá: ¿Y eso? — preguntó ingenua levantando una ceja.

(T/N): Eh, bueno, primero salí temprano del trabajo. Pero empezó a llover y me caí, al ir a la villa... conocí a alguien... — susurre recordando al castaño amable y "caballeroso",  creo que estuve en las nubes pensado en ello que mi me había dado cuenta de que mi madre me miraba sospechando. — Y regrese a casa, eso fue todo...

Y no le dije más, y eso le hizo sospechar más, pero yo solo me concentre en hacer la cena.

Mi madre está enferma, y mucho, la eh visto desmayarse por un paro cardíaco. Con eso no podía trabajar y pagar las cuentas así que yo tuve que tomar cartas en el asunto, dejé la escuela para trabajar tiempo completo para pagar las medicinas que ella necesita: Necesitaba eso y no me importaba trabajar día y noche para que ella estuviera viva y sana (a lo que cabe).

Terminé la cena y empezamos a comer, siempre teníamos temas de conversación pero creo que tenía mi cabeza en otro asunto.

<= En la mansión Kido=>

Seiya y Shun están en la puerta de la mansión, cuando lo abrieron todo estaba oscuro.

Seiya: ¿Por que esta todo tan oscuro? — cuándo estaba buscando el botón de la luz, cuando la encendió una multitud gritó:

???: ¡HOLA BARRO ALADO....! — y salieron de su escondite y Seiya dio un salto por la impresión, pero se puso feliz a ver de quienes se trataban.

Seiya: ¡CHICOS! ¡QUE ALEGRÍA VERLOS! — gritó emocionado el castaño cuando fue a abrazar al Fénix pero este le pone la mano en la cara para que se alejara.

Ikki: No te pongas sentimental burro, sólo hice esto para ver a mi hermano.— dijo frío mientras se dirigió a este.

Shun: me alegro que pudiste venir hermano... — sonrió el peli verde abrazando a su hermano.

Ikki: Yo también — dijo riendo mientras le revolvió el cabello.

Shiryu: también vinimos para verte Seiya, ¿Cómo estás? — preguntó curioso el azabache.

Seiya: .... Mejor que nunca... — Suspiró sonriendo ampliamente, todos se quedaron confundidos y vieron a Shun. Se encogió de hombros también ajeno a la situación.

Pero eso no evitó que hablarán de sus experiencias fuera de la mansión, estuvieron hablando hasta muy tarde. Seiya estaba de mejor humor que en esa mañana; al ir a su habitación se dejó caer en la cama sin dejar ir el pensamiento que tenía en mente.

Seiya: (T/N).... — Suspiró con nostalgia antes de caer dormido...