Sacudo mi cabello mojado después de una ducha y me acomodo tomando mi libreta. Me gustaba escribir de noche, olvidarse un poco de todo y pensar por un simple instante que todo estaba bien.

A veces no entiendo si es por algo que siento esto o si no hay necesidad de pensar una solución. Quiero lograr entender lo que me pasa pero me es imposible. ¿Que hace él en mi mente?, llego a pensar que no podré soportarlo y cuando creo que ya no esta mas vuelve a irrumpir en mis pensamientos... Ayer por la noche volví a escaparme, no toleraba su voz otra vez, pensé que si me iba saldría de mi mente pero no fue así. Estaba en todos lados, lo intento pero siento que no puedo evitarlo, no puedo deshacerme de él.

Miro mi mesa de luz y me doy cuenta de lo tarde que es. Desde que vivo sola todo es diferente, además de sentirme sola y estarlo es como si me hubiera olvidado de mi misma. Mañana tengo instituto, la verdad es que siempre fui bastante rara y bipolar. Mas eso no me importaba demasiado. Apague la luz de noche y me acosté, trataba de dormirse rápido, antes de que su voz aparezca pero no funciono.

"—Aun es temprano". No conteste.

"—Hoy no corres como ayer?". Rió

— Déjame — tape mis oídos.

" — me llevas contigo. No importa lo que hagas."

— Quien eres?

"—Tu creación." Dijo tranquilo.

Prendo la luz y busco las píldoras para dormir. dos noches seguidas haciendo lo mismo. Antes lo toleraba, pero ahora comenzó a hartarme.

Camine sin rumbo alguno por el pasillo. El instituto esta prácticamente vació y no entre a segunda clase. Busco la habitación de limpieza y entro de inmediato al ver que el conserje no estaba en la puerta. Me siento en el suelo apoyando mi espalda en la esquina de la pared. Entonces me trato de tranquilizar sin que su voz interrumpa mi paz. Lamentablemente no seria así.

"— No entiendo para que vienes aquí, sabes que nunca estarás sola.”

No conteste, busco en mi mochila, y saco las píldoras. No tengo idea cual es, solo me la meto a la boca con brusquedad, estaba temblando y quería acabar con esto.

"—No consigues nada." insistió.

Saque la botella de agua y pase unas cuantas píldoras mas por mi garganta si esto no acababa ya terminara drogada.

— Terminaré con esto — pensé en voz alta.

"— Terminaras contigo misma." me interrumpió.

— Púdrete — tome mis cabellos.

"— Tu primero." rió.

Escuche el sonido de la puerta y me pare asustada, tome mi mochila y escondí el frasco de pastillas en un costado de mi mochila, abri rápidamente, yo no podía estar aqui, el conserje comenzaba a sospechar no podía decir la verdad, me tomaría de loca.

— Disculpe, yo solo. — suspire.

— No puedes estar aquí, nos sancionaran a ambos— Me explico cansado.

— Lo se, es que — me acomode mi mochila y algo rodó por el piso. El tipo me miro y abrí mis ojos mas de lo común, se agacho a recogerlos y lo puso frente a mis ojos mientras levantaba su ceja.

— Que es esto?.

— Medicamentos-trague saliva.

"— Cuéntale cuanto te drogas."  escuche su voz nuevamente y fruncí el ceño.

— Me sentía mal y vine a tomar mi remedio aquí — menti.

— Al sector de limpieza? — cuestiono irónico.

— No quería que mi profesor sepa queque estoy enferma porque podría darme plazo a clases y quiero rendir junto con los demás — no lo convencía del todo pero ¿que podía hacer el? solo desconfiar.

— Que sea la última vez — me miro superior y soltó el botecito en mi mano.

— No se preocupe — lo guarde y sali de allí cuanto antes.

"— Eres tan frágil." se burlo.

— Te sacare de mi mente.

“—Sabes que no podrás es ridículo intentarlo.Soy tu creación."