Capitulo 1


—¡TU!— grito con furia el de ojos color miel apuntando al pelinegro de ojos carmesí con sumo coraje levantándose del suelo después de aquella maldita derrota que habían tenido con las tortugas, dejando varios robo-pies hechos pedazos y a los mutante como Xever y Bradford en el suelo, mientras Garra de Tigre se encontraba desorientado buscando algún rastro de donde se habían escapado, mientras el peli-negro salía de uno de los tambos de basura con asco y probablemente apestando a basura, además de que se puso su mascara de nuevo. —¡Escaparon por tu maldita culpa!— contesto con ira empuñando en su mano derecha su Tantō mientras de dirigía hacia el mas alto.

—¿Yo?, ¿Mi culpa?, Seras imbécil....mejor dicho eres imbécil, dije que ayudaría mas de lo que hice al cumplir con la misión, fue tu culpa que los rehenes los liberaran, y seguido de eso, tu falta de saber liderar un equipo, ¡Tenías un maldito grupo de robo-pies y mutantes, teníamos la victoria garantizada!, Y ¡Diste indicaciones estúpidas!, ¡JAMÁS TE DISTE CUENTA QUE FALTABA UNA TORTUGA, Y TU MALDITO PLAN SE FUE A LA MIERDA!— grito lo último también con notable furia en su voz sacando ágilmente de la funda una de sus espadas color negro, escuchando un choque de metales, entre el metal negro y plateado de aquel Tantō con su espada y empujar con fuerza al mas bajo, empezando así una pelea.

→_→→_→→_→Flashback←_←←_←←_←

Al momento en el que su mascara había sido tirada por aquella patada el peli-negro volteó con rapidez para ver así al responsable de aquel golpe hasta que la vio de pies a cabeza y era nadie mas y nada menos que aquella tortuga mutante portadora de las katanas gemelas, y ojos como dos zafiros, en otra ocasión podría apreciarlos incluso pero por esos momentos era obvio que no lo harían.

Sin importar ya que su identidad había sido expuesta comenzó a bloquear varios ataques de su parte hacía el con sus dos espadas de color negro sin dejar de escuchar aquel choque de estas.

—No acostumbro a pelear contra chicas— decía el de ojos carmín mientras hacía fuerza al igual que ella al empujar sus espadas contra las katanas de la mas baja y sonreír de forma coqueta. —¿Podría saber el nombre de tan bonita contrincante?— comento sin haber perdido el tiempo en coquetear con la mutante, importándole poco que esta era de otra especie.

Por otra parte la de ojos zafiros desde que había visto al chico a la cara y esos ojos rojizos como dos rubíes brillantes no había dejado de verlo de una forma discreta, le parecía extraño de cierta forma, el como actuaba, o reaccionaba en lugar de reaccionar como sus otros enemigos o una persona normal, no le daba tantas vueltas al asunto pues tenia que estar concentrada en liberar a sus amigos y no en estar perdiendo el tiempo con un lindo chico de sonrisa brillante que hipnotizaría a cualquiera.

Después de escuchar el tono de su voz junto a su pregunta la mutante de ojos zafiros lo miro con confusión seguido de sentir sus mejillas calentarse al escuchar aquel cumplido hacía su persona, nunca nadie le había dicho algo así a ella, mas negó con la cabeza ante otros pensamientos y empujar con mas fuerza sus katanas contra las espadas del chico seguido de darle una patada en la zona de su pecho. —Me llamo Leonor— le contesto finalmente pero de forma mas sería para volver a atacarlo mas esta vez el fue mas rápido al esquivar sus ataques con sus Katanas. —Y tu ¿Quien eres?— pregunto en ese mismo tono de voz hacía el peli-negro viendo de reojo que su hermana Donatella había liberado ya a sus amigos, aunque no le quitaba el ojo de encima al mas alto ante cualquier movimiento que hiciera este.

—Asi que Leonor....bonito nombre, para una chica encantadora— comento de nuevo levantándose del suelo por aquella patada y esquivaba los ataques de sus katanas gemelas con agilidad, tenía que admitir que esa chica mutante no peleaba nada mal, incluso peleaba mejor que Garai.

Leonor lo miraba con extrañes, ¿Se lo estaba imaginando o el chico de verdad le seguía coqueteando a ella?, Pareciera que no sabia que estaban en medio de una batalla, y ser bastante obvio que eran enemigos los dos ya que el estaba de lado del clan del pie. Aunque bien era muy probable que era una táctica, lo sabía ya que Garai lo hacía seguido con ella para engañarla.

Los dos estaban consumidos en su propio mundo, atentos nada mas al movimiento del otro, ante los ataques, esquivándolos, realmente se veía incluso como si fuera algo coordinado, al saber mas hacia donde irían cada unos de los golpes o ataques con aquellas armas afiladas. Que ni siquiera notaron a los demás pelear, el peli-negro no noto que los dos chicos que estaban atados ahora estaban libres y estaban acabando con la mayoría de robo-pies, además de que Xever había sido el primero en caer del grupo del clan del pie, ni siquiera Garai y los demás se daban cuenta se la pelea entre Leonor y el oji-carmin y el como se había tornado todo.

T/N poco a poco llevaba a la mutante de ojos ojos color zafiros cerca de la orilla de aquel edificio en el que estaban ocurriendo aquella batalla, daba empujones algo mas fuertes con cada que sus espadas quedaban pegadas a las katanas de la mas baja viendo como retrocedía, la tenía justo donde la quería.

Cuando la mutante estaba por acomodarse algo le había fallado, claramente su gran error había sido no ver había donde la llevaba, siendo un error bastante grave que le iba a costar caro pues estaba perdiendo el equilibrio en la orilla del edificio para seguramente estrellarse contra el duró piso desde aquella altura.

Abrió uno de sus ojos color zafiros notando que se había detenido muy cerca de la orilla donde casi caía, cuando elevó su vista miro con sorpresa quien había sido su salvador de evitar que cayera, sus mejillas comenzaban a calentarse a montones empezando a notarse un bonito tono carmín en sus mejillas color verdosas debido a qué también estaba en una  bastante corta distancia del mas alto que la sostenía con una de sus manos en dónde vendría siendo su cintura.

—Deberias de notar también por donde pisas cuando estas en batalla—   comentaba el jóven de cabellos negros dirigiendo sus ojos rubíes a los zafiros de la contraria, estaba sintiéndose algo extraño solo que no se sentía mal aquello, le parecía de cierta forma interesante también esa sensación que no le importaría descubrir cual seria. Pero no era momento para eso, y de eso era consciente, movió con agilidad una de sus espadas que estaba en su mano libre para colocar aquel metal filoso cerca del cuello de la mas baja. —No te muevas o hagas movimientos bruscos, coopera y quizás tendrás un mejor trato por mi parte dulzura— decía este si bien confundiendo algo en su tono de voz, era serio y a la vez también coqueto además de decirlo acercándose peligrosamente a su rostro.

La jóven mutante por su parte sentía como su corazón empezaba a latir con rapidez, no solo por el peligro que estaba sintiendo al tener de cerca aquella espada amenazar con cortar su piel, y a la vez el como este acercaba su rostro peligrosamente hacía ella con una sonrisa que haría a cualquier chica volver loca.

Ambos jóvenes podían sentir incluso sus respiraciones estar por mezclarse, el mas alto se acercaba con determinación y clara seguridad mientras la mas baja ahora estaba con el corazón latiendo a mil.

—¿Que cara...¡Mierda!— dijo en alto el joven de ojos rubíes perdiendo el equilibrio el y terminar por caer de el edificio, para su suerte o algo así había caído en uno de los tambos de la basura que estaban abiertos así que callo en blando por así decirlo.

¿Como se había caído?, Sencillo, no fue por resbalarse, si no que debido a que el peli-negro estaba mas distraído con Leonor, no se había dado cuenta de un gran detalle, y era que sus "compañeros" habían terminado por ser derrotados, incluyendo Garra de Tigre que por un fuerte golpe en la cabeza que de milagro le habían dado quedo algo desorientado además de que aprovecharon para tirarlo del edificio igual.

Los humanos y las Tortugas de bandada morada y anaranjada no se habían dado cuenta de que Leonor estaba algo..."distraída" con el nuevo integrante de el clan del pie. A excepción de una, que fue Raquel, había visto incluso la escena desde que el peli-negro extrañamente estaba ¿Coqueteando con su hermana?.

En silencio sin que este se diera cuenta Leonor había visto a su hermana Raquel prepararse para atacar al mas alto que seguía amenazándola con su espada por lo que esperaba también pacientemente el momento indicado para cuando su hermana le había dado un golpe fuerte al oji rubí junto a un fuerte empujón alejándolo de su hermana y de paso tirándolo del edificio.

—¿En que estabas pensando al dejar que te coqueteara el nuevo integrante del clan del pie y que te atrapara?, ¿Que esperabas acaso?, ¿Que te besara?— preguntaba notablemente molesta la mutante de ojos color esmeralda dejando a relucir su temperamento, al menos estaban un poco mas alejadas de las demás para que no alcanzaran a escucharlas.

—Raquel calmate para empezar— respondió la joven líder con seriedad. —El chico me empezó a coquetear en plena batalla y amenazo con una de sus espadas— respondió lo mas bajo posible para que solo Raquel la escuchara y no los demás.

—Ah claro, igual que Garai eh— contesto con los brazos cruzados mirando a su hermana de ojos zafiros recordando que le pasaba lo mismo con Garai. Parecía que su hermana no aprendía realmente, primero estaba enamorada de Garai a pesar de ser del clan del Pie, le tomo un tiempo poder aceptar que Garai la estaba usando solamente para poder llevarlo a Splinter y que Destructor pudiera acabar con su sensei y padre y que Garai no sentía lo mismo por Leonor porque era el enemigo además. Como para ahora pasar con lo mismo. —Garai solo te uso y lo sabes aparte es el hijo de Destructor, el chico nuevo es del clan del pie igual, tal vez no sea su hijo pero también cumplirá con lo que Destructor le pida eso jamas lo dudes— dijo como último siendo un recordatorio para ir ahora con las demás.

Por su parte la joven líder tan solo se dedico a asentir con la cabeza ante lo que dijo su hermana, si bien ella tenía razón malamente había aprendido la primera vez de una forma que le había roto el corazón a ella al descubrir que realmente Garai solo la estaba usando, y no iba a volver a caer en ese error, de eso ella estaba segura.

Estaba por retirarse mas algo de preocupación por el chico empezó a abrumar la, sabía que había caído de tan alto así que esperaba que se encontrara bien, cuando se dio la vuelta dispuesta a ver por la orilla del edificio que había estado bien, también se encontró con la mascara que le había quitado al oji rubí al haberlo pateado, era una mascara de un demonio japonés por lo que había notado. Miro por la orilla notando al chico en el tambo de la basura dándole en parte un gran alivio, aunque le daba algo de gracia al ver la expresión de asco que tenía, seguramente apestaría bastante, soltó la máscara mirando como caía encima de la cabeza del chico, haciendo que mirara hacia arriba, llegando a conectar miradas por unos momentos, hasta que la mutante decidió retirarse del lugar junto a sus hermanas y amigos, con una bomba de humo desaparecieron sin dejarles rastro a el clan del pie para que no lograran seguirlos.

→_→→_→→_→Fin del flashback_←←_←←_←

Después de que ambos jóvenes terminaran por pelear, el que tenia mas golpes acertados y estaba mas agotado había sido Garai, en cambio T/N tenia uno que otro golpe que Garai le había logrado dar pero seguía en pie, era bastante obvio que el era mucho mas fuerte que el mas bajo, no solo por la apariencia de tener un poco mas de musculatura en sus brazos, si no también por mas experiencia en batallas que el mas bajo no había tenido.

Los dos se encontraban ahora arrodillados en el suelo en señal de respeto para su maestro, principalmente T/N, no sabía cómo podría reaccionar Destructor al ver que le había dado una paliza a su hijo después de haber tenido aquella miserable derrota, si que se había distraído, ¿Como pudo haber cometido un error de un novato?, Eso le pasaba por centrarse también por estar de coqueto y eso lo sabía de sobra, pero no podía evitarlo, ya se había hecho costumbre en el, además de que ciertamente...aquella mutante no le había parecido tan mal de hecho, sus ojos fue también lo que mas le había llamado la atención, tenía un brillo tan singular y mucho mejor que el brillo que solían verse en aquellas joyas.

Mentiría si no tenía miedo, claro que lo tenía, estaba frente al trono de su jefe, Destructor estaba delante de el y seguramente pensando ya en que castigo le daría por haber fallado, aunque no tenía por que técnicamente, aunque ya sabía que Garai diría algo que lo involucraría sobre haber fallado la misión y o que sorpresa, ya lo estaba haciendo el desgraciado.

—Como te decía padre, el fue el responsable de que la misión fallara y se fuera por el caño, incluso apesta a derrota por no obedecer mis ordenes— comento el mitad peli-negro y rubio hacía su padre mirando de reojo al mas alto con enojo.

T/N también lo miro con coraje aunque no se notaba por la mascara que tenía puesta, mas seguía arrodillado.

—¿Eso es verdad T/N?— pregunto con frialdad aquella voz detrás de aquel casco la hacia sonar mas terrorífica junto a su semblante, ese hombre daba tanto miedo de solo escucharlo hablar o hacer notar su presencia.

El adolescente peli-negro se trago muy en el fondo aquél miedo que sentía mas no lo demostraba, este elevó su vista para ver a su jefe con seriedad. —Temo decirle maestro Destructor que Garai esta equivocado— dijo con gran seriedad el oji carmín viendo como su jefe dejaba que prosiguiera. —Vera, como usted sabe mi misión solamente involucraba localizar a sus enemigos que eran las tortugas, todo iba a la perfección, el objetivo ya venía gracias a que teníamos de rehenes a sus amigos, teníamos una gran ventaja eh incluso yo estaba haciendo mas de lo que se había planeado, habían aparecido 3 tortugas primero, mas Garai nunca dijo o se percato de que eran 4 y faltaba una de ellas y no mando a vigilar a los rehenes. Yo como no sabía al ver a la tortuga yo la detuve pero me ataco otra durante la batalla, y en resumen los rehenes fueron liberados y comenzaron a vencernos, yo ya tenía a una como rehén pero como la mayoría de mis..."compañeros" fueron vencidos, me terminaron por tirar a un tambo de basura— termino por decir incluso aclarando el mal aroma que soltaba, sabia que Destructor lo estaba mirando a los ojos y el tampoco apartaba la mirada.

Destructor parecía leer su mente a través de solo mirar sus ojos, miro como su jefe ahora veía a su hijo pero con más enojo hacía el, siendo un alivio en su interior al saber que su jefe si le había creído, además la ventaja era que Garai había fallado varias veces pero como el era el hijo de Destructor se salvaba de sufrir el castigo que imponía Destructor para así dar a entender a sus subordinados lo que se llevarían si fracasaban para así "inspirarlos" y no fracasar.

—T/N puedes retirarte, uno de los robo-pies te dará tu paga— contesto con frialdad el mayor mirando como el joven se levantaba del suelo y se iba no sin antes verlo inclinarse por respeto a el y escucharlo decir un "Gracias Maestro" y desaparecer de su vista. Para ahora voltear y ver a su joven hijo con enojo que estaba por irse. —Garai— hablo con firmeza viéndolo detenerse después de escuchar su voz con notable enojo. —Tu y yo vamos a hablar, ahora— dijo hacía su hijo para verlo regresar, seria una larga, muy largaaa charla, seguido de como represalia entrenar horas extras sin descanso.

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—¡Auch!, Oye no tan fuerte— se quejo el peli-negro al sentir un fuerte sape en su nuca por parte de una chica de mas baja estatura que la veía con gran enojo.

—Ni tin fuirti— dijo la mas baja para cruzarse de brazos y ver al mas alto. —Mira como llegas, con unos moretones y además hueles horrible— dijo una chica de unos 12 años exactamente estando mucho mas baja que el joven, cabello negro como la noche y largo siendo recogido en una coleta, tez blanca, apenas desarrollándose, y unos ojos muy inusuales siendo de diferente color, su ojo derecho era rojo como un rubí igual a los del mas alto y el izquierdo era de un tono morado como una amatista.

—Relajate enana no es para tanto solo son unos moretones ni siquiera duelen total, no te preocupes me dare un baño, además mira lo que traje— dijo este al entrar por completo a aquel departamento desde la ventana y tiraba una bolsa en la que contenían muchos dólares. Siendo visto por la menor con decepción cada que traía sacos así. —¿Que?—

—Nee san— hablo con mas seriedad la niña sentandose en uno de los sofás de la sala, elevando la vista a su hermano mayor que la miraba atento. —¿Cuando vas a dejar de hacer esto?— pregunto con tristeza bajando su mirada al suelo, ella ya sabía desde años como su hermano mayor empezó a trabajar para aquel horrible clan, sabía también lo que eran capaz de hacerle si fallaba misiones además si el los traicionaba, y por si fuera poco también los peligros que corría en cada "misión".

Soltó un suspiro pesado el mas alto pasando su mano por su cabeza para ir a sentarse a lado de su hermanita menor, siendo su adoración y única persona por la que todo lo que hacía valiera la pena. —Tu mas que nadie sabe muy bien porque lo hago, necesitamos el dinero y lo sabes, a mi no me aceptarían en algún trabajo por ser menor de edad y los estudios y si lo hicieran no nos alcanzaría para nada la paga, están muchos gastos, el departamento, la comida, tus estudios, y los mios, el material de la escuela— dijo enumerando cada una de las cosas que hacían falta. —Contando que el que tiene mas dinero es el que manda y lo sabes...— dijo  voltendo a ver a su hermana que tenia la mirada baja, pero con una de sus manos elevó su dulce e inocente carita y acariciando su cabeza con su otra mano. —Confía en mi, ¿Si?, Prometo que cuando tenga un buen trabajo en unos años y me paguen bien dejare el clan del pie—

—Lo...¿Dices enserio?— pregunto la menor con sorpresa en su voz al igual que sus ojos lo mostraban al escuchar a su hermano mayor decir aquello le hacía sentir realmente felíz.

—¿Cuando e roto una promesa?— pregunto con una sonrisa sincera hacia la menor siendo a la única que mostraba ese lado real de el, al sentir a la menor abrazarlo no dudo en corresponder felizmente, aunque aquel momento duro un poco porque la menor se separó con algo de asco al olerlo mas de cerca.

—Guacala, que asco....ve a darte una ducha y a cambiarte, apestas— decia la menor tapándose la nariz teniendo asco al olor que desprendía su hermano mayor.

—Pequeña exagerada, no huelo tan mal— decía el mayor para oler uno de sus brazos con seguridad aunque se separó de su brazo al instante con una cara de asco, valla que realmente apestaba. —Creo que mejor retiro lo dicho, voy a bañarme, en lo que me baño tu tomate tu medicamento, y después hare la cena— termino por decir para revolver los cabellos largos y negros de la mas baja recibiendo una queja por su parte, riendo al ver lo tierna que se veía su hermanita para después irse hacía su habitación y a su baño.

Mientras se daba aquella ducha en su mente comenzó a recordar aquellos ojos color zafiros brillantes, sintiéndose de cierta forma extraño, al recordar a aquella mutante que lo había dejado con algún que otro moretón también además de provocar que el plan hubiera fracasado, aunque en cierta forma le había dado cierto interés por la mutante, además de que era bastante buena peleando y valla que lo había confirmado.

Mas negó con la cabeza ante esos pensamientos, debía de concentrarse en varías cosas, uno era estar al pendiente de su hermana ya sea ir a sus terapias y comprarle medicamentos, otro eran sus estudios, luego estaba su "trabajo" nocturno y finalmente no morir en alguna misión dada por su jefe y maestro.

Después un rato ya había terminado de ducharse y ponerse su ropa habitual, siendo una camiseta cómoda un poco mas floja de colores oscuros con estampados de calaveras y la palabra "Monster" escrito en el de un color rojo y viéndose como si fuera escurriendo sangre en la palabra, unos pantalones para dormir de color gris, y unos pantuflas. Aunque su cabello estaba aún algo mojado ya que ni se tomo la molestia de sacárselo bien, aunque no le interesaba mucho, al menos el horrible aroma se le había quitado.

Cuando fue a la sala, miro a su hermana guardando unos frascos con pastillas en una bolsa, le alegraba ver que su hermana menor ya estuviera mejorando de su salud, era un gran progreso. —Oye enana, ¿Que te gustaría para cenar hoy?— pregunto bromista ante el apodo de "enana" a su hermana menor adorando ver los pucheros y enojos leves de la mas baja, aunque por consecuencia recibió una pantufla en la cara, el lado bueno era que no lanzaba tan fuerte además le divertía decirle así por sus reacciones.

—¡No me digas enana T/N!— decía para cruzarse de brazos aunque su enojo duro poco al escuchar la pregunta que había hecho. —Mmmm, tal vez un spaghetti...¡No!, Mejor un ramen, hace tiempo que no comemos ramen— comentaba con cierta emoción en sus ojos heterocromaticos  la menor mientras miraba a su hermano mayor. —Por favor— pedía hacia su hermano mayor usando aquellos ojos de borreguito a medio morir sabiendo que era una debilidad del mas alto aunque no quisiera admitirlo.

—Esta bien, haré ramen— comento después de un suspiro y reír de forma leve después de ver los tiernos ojos de la menor mientras sacaba todos los ingredientes para preparar la cena. —Oye por cierto, recuerda que mañana tenemos que levantarnos temprano para ir a nuestra nueva escuela, fue algo tardado pero ya conseguí que nos cambiaran, es una donde están los de secundaria con los de preparatoria, así te podré cuidar y estaré mas al pendiente de ti— comentaba a la par que lavaba unas verduras y comenzaba a cortarlas.

—Me parece bien, solo espero que no empieces a coquetear con todas las chicas que se te crucen— comento la menor mirando a su hermano mayor obviamente conociendo lo. —De por si aunque no lo hagas todas van detrás de ti, y mas porque les llamas la atención al ser japonés hermanito— comentaba hacía su hermano mayor desde la sala.

—¿Que?, No es mi culpa ser tan apuesto hermanita, y volver locas a las chicas, que te puedo decir, tienes al hermano mas guapo— comentaba con una risa además de tener un tono mas orgulloso al decir eso viendo que su hermana menor lo miraba mal por eso. —Oh vamos, no te quejes hermanita, además no seré el único, todos los chicos irán tras de ti, de eso te lo aseguro, y si pasa solo te digo que los hare picadillo— comentaba empezando a ponerse celoso de solo tener esa idea, siendo algo normal de ver para la menor. —Solo te digo hermana que tengas cuidado, ya ves como son la mayoría de chicos, unos calenturientos, disfrutan romper corazones y querer pasarse de la raya, si te topas con uno así solo...—

—Tengo que voltearle la muñeca y con eso tirarlo al suelo, si no es suficiente lo pateo en su zona y también en uno de sus puntos sensibles para dejarlo inconsciente— interrumpió a su hermano mayor sonando como si fuera algo monótono y las verdad que si lo era. —Si, si lo se, me lo dices todos los días y si se puede dos o tres veces al día a diario Nee san, además yo se defenderme, me enseñaste a pelear ¿Lo olvidas?—  dijo ya mas tranquila mientras lo miraba ahora preparando los fideos para el ramen, siempre era entretenido ver a su hermano mayor cocinar, era un gran chef realmente en la cocina, su hermano era genial a su vista aunque claramente con varios defectos pero era admirable. —¿Y como se llama la escuela a la que iremos?— pregunto con curiosidad la menor mirando con sus ojos heterocromaticos al mayor.

—Bueno para empezar te falta aprender aún mas para defenderte mejor— menciono como recordatorio para escuchar su pregunta y con tranquilidad responder. —Se llama Roosevelt—

Menciono en respuesta hacia su hermana menor, mientras ahora cocinaba, por el momento había una gran tranquilidad en el ambiente, tal parecía que siempre sería así pero quién sabría que cosas tendría deparado el destino, bien dicen que siempre suele haber calma antes de la tormenta.

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Y aquí queda el primer capítulo, y como aca se ve algo mas de información de T/N (osea ustedes) aquí les aclaro lo que se sabe en este cap.

T/N (tu) es un chico japonés

Y no lo mencioné pero ya que vamos en esto, como es Japonés obviamente el habla Japónes, aunque aprendió a hablar inglés y español. (Aquí se supone que hablan inglés porque en Nueva York se habla inglés y ya saben, bueno sigo)

Tiene o bueno tienes una hermana menor, de 12 años de edad que esta algo mal de salud pero esta mejorando (no mencionare que tiene hasta otro capítulo)

Fuiste entrenado por el maestro Destructor mejor conocido como Oroku Saki aunque la mayor parte de tu entrenamiento fue con Hattori Tatsu.

Llevas unido al clan del pie desde años (aun no diré cuántos)

Y la escuela Roosevelt tengo entendido que es la escuela a la que van April y Casey, en lo que investigue en Wikipedia jsjs, así se hace llamar.

Y bueno eso sería todo por el momento no dare mas detalles hasta mas capitulos en adelante, espero les halla gustado, hasta la proxima:D

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