Capítulo 43

-Gracias- lo abracé cuidadosamente y le di un tierno beso -Nunca más lo volveré a hacer, lo prometo

-Nunca más volveremos a tomar tanto- ambos reímos -Oye, ¿y Eric?

-Al parecer se fue con Cindia- dije mirando a mi alrededor

-Espero que se reconcilien también- Bruno hizo una mueca y en ese momento Romina despertó

-Eh... eh- balbuceó moviéndose en mis brazos

N.A: así hablan los bebés XD

-¿Quieres ir con tu papi?- la acerqué a Bruno, pero volvió a moverse y balbucear

-Siéntala en la cama- dijo Bruno y lo hice, pero seguía así -¿Qué querrá?

-Tal vez quiere gatear- la puse en el piso, me arrodillé a su altura y dejó de estar inquieta -Eso quería

Gateó hasta mí, se agarró de mi brazo y se paró. Bruno y yo abrimos los ojos como platos al verla pararse y apoyarse en la pared para caminar un poco. Caminó tambaleándose dos pasos y para el tercero se cayó al suelo.

-Romina, tan rápido ya quieres caminar- exclamé haciéndole parar de nuevo

-Tiene un año y cuatro meses, supongo que ya es hora

-Eso creo

-¿Por qué no la ayudas a que camine por toda la habitación?

-Buena idea- me coloqué en frente de ella y tomé sus manitas -Vamos mi amor, camina- le dije, ella sonrió y dio unos cuantos pasitos para después caer en mis brazos -Esa es mi nena

-Crecen muy rápido- dijo Bruno observándonos con una sonrisa en su rostro

-En verdad- tomé a Romi en brazos y me levanté del piso

-¿Cómo están los niños?

-Bien, se quedaron en casa

-¿Y Thomas?

Al oír ese nombre, el cuerpo se me heló debido a que recordé lo que pasó ayer.

-¿_____? ¿Estás bien cariño?

-Ah... estoy bien, tranquilo

-¿Qué pasa? Te pusiste pálida en menos de un parpadeo, algo anda mal, ¿verdad?

-No Bruno, no pasa nada- mentí

-_______, sé perfectamente cuando me mientes, si pasó algo puedes confiar en mí, vamos, cuéntamelo

"Recuerda, una palabra y tú y tus queridos hijos mueren."

Las palabras de Thomas retumbaron en mi cabeza, debo contarle a Bruno, pero podía poner en riesgo la vida de mis hijos y no quiero que ese idiota los mate.

-¿______?- volvió a insistir Bruno

¡Cuéntale, díselo ya!

No puedo.

-Ah este...- en ese momento mi celular comenzó a sonar, por lo que contesté, era Peter

-¿Peter?- dije al contestar

-Hola mami, ¿Cómo está papá?

-Está mucho mejor ahora

-Me alegro mucho, ¿cuándo va a volver?- miré a Bruno para buscar respuesta

-Mañana en la mañana me dan el alta- dijo dedicándome una sonrisa

-Mañana Pet

-¡Qué bien! Bueno tengo que colgar, te esperamos mami, adiós y dile a papá que lo quiero

-Se lo diré, adiós Pet- colgué -Dice Peter que te quiere- le dije a Bruno y este sonrió

----------------------En la noche--------------

-Ya es tarde, debo irme- dije levantándome de la cama

-No te vayas, duerme conmigo- con su brazo me apretó más a él -No quiero estar solo

-Pero los niños están solos en la casa

-Déjalos con la sirvienta, o llama a tu madre

-No puedo dejarlos con Laura

-Por favor- hizo puchero

-Ah, está bien, pero Romina se queda con nosotros, no quiero dejarla sola a ella

-¡YEIIII!- chilló

Marqué a la casa y le pedí a Laura que cuidara a los niños esta noche, ella aceptó con todo gusto, eso me gustaba de ella, nunca se negaba y siempre obedecía.

Me recosté al lado de Bruno, coloqué a Romi en medio de los dos y juntos la contemplábamos con una sonrisa.

-Gracias por quedarte- dijo besando mi frente -Te amo

-Yo también- lo abracé con mucho cuidado para no tocar su brazo roto y no aplastar a la bebé

-No puedo dormir boca arriba- se quejó Bruno cuando Romi se quedó dormida

-¿Y si te recuestas sobre el brazo sano?

-No puedo, me pesa el yeso

-Ay- acaricié su mejilla -Todo es mi culpa, lo siento

-Tranquila

-Intenta contar ovejas

-Eso es algo muy tonto- ambos reímos -Cántame algo- aclaré mi garganta y comencé a cantarle:

-Me he acercado a ti,
a decirte que lo siento,
no sabes lo encantador que eres.
Tenía que encontrarte,
decirte que te necesito,
decirte que te separé de los demás
Cuéntame tus secretos,
y hazme tus preguntas,
oh, volvamos al principio.
Corriendo en círculos,
levantando las colas
de cabeza, alejados de cualquier ciencia
Nadie dijo que fuera fácil,
es tan penoso para nosotros separarse,
nadie dijo que fuera fácil,
nadie nunca dijo que sería así de difícil,
oh, llévame de nuevo al principio.
Solo estaba suponiendo
números y las cifras,
desmontando los rompecabezas.
Las preguntas de ciencia,
de ciencia y de progreso,
no hablan tan alto como mi corazón.
Dime que me quieres,
vuelve y róndame
oh, y corro hacia el principio.

Levanté mi vista y me di cuenta de que Bruno se había quedado dormido. Sonreí y cerré los ojos.

-Te amo Bruno

--------------------Al día siguiente-------------------------

-Hogar dulce hogar- exclamó Bruno entrando a nuestra casa y yo cerré la puerta con llave

-¡Papi!- giré mi cabeza y vi a los gemelos abrazando a Bruno

-Hola mis amores- dijo él alegre -Quisiera cargarlos, pero no puedo

-¡Bruno!- la voz de Thomas me erizó la piel

-¡Hola campeón!- Bruno agitó su cabello, Thomas lo abrazó y me dedicó una mirada desafiante

-Hola ______, gusto en verte- tomó mi mano y yo me deshice de su agarre

-Hola- le dije fríamente -¡Hola mis amores!- les dije a los gemelos mientras los abrazaba

-Señora- dijo la sirvienta acercándose -El almuerzo está servido

-¡Muero de hambre!- exclamó Bruno y corrió al comedor

Todos seguimos a Bruno, senté a Romi en su silla especial, yo me senté en medio de ella y Bruno; miré hacia adelante y me di cuenta de que Thomas estaba sentado en frente mío, mirándome con completo odio.

Decidí ignorarlo y ayudar a comer a la bebé y a Bruno, puesto que como es tan inútil no puede comer con la mano izquierda.

-Dios, ahora tengo dos bebés en casa- dije dando de comer en la boca a Bruno

-Gugutata- Bruno imitó la voz de un bebé -Quiero teta mami

-¡Bruno!- exclamé dándole un codazo y soltó una carcajada

-Peter, ¿me pasas el cuchillo?- preguntó Thomas y lo miré

Comenzó a jugar con el cuchillo, acercándolo a sus muñecas y a su cuello, mientras me miraba desafiante. Leí sus labios, claramente me dijo: "Cuidado"

Tragué saliva, sacudí mi cabeza y me enfoqué en lo que estaba haciendo.

--------------------En la noche-------------------

-Te quiero

-Yo más Bruno- lo abracé -Iré a cambiarme

-Delante de mí, por favor

-¡Peter!- exclamé y soltó una carcajada

-¡No me digas Peter!

-Entonces no vuelvas a decir eso- le saqué la lengua

Me acerqué a mi guardarropa y saqué mi pijama, al hacerlo, un pedazo de papel calló al suelo, lo recogí y miré lo que traía escrito:

"Aléjate de Bruno"

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