Capitulo 2: No es tan fácil...
Después de que Aron salió de casa camino hasta un centro de mascotas, entro y se dispuso a buscar todo lo necesario para su nueva mascota, después de un largo recorrido por el lugar y encontrar lo que fue a buscar y otras cosas más fue a la caja a pagar
-¿Seria todo?- Pregunto el muchacho alto de cabello negro el cual atendía la caja
-Sí, seria todo, gracias- Respondió Aron el cual seguía pensando el nombre del pequeño felino que lo esperaba en casa, debía ser un nombre que encajare perfecto con el felino, tierno pero no tanto
-¿Aron?, que haces comprando cosas de gato, tu ni siquiera tienes mascota- Pregunto el mismo chico de la caja el cual era amigo de JR
-¿ah?..¿Dylan?, no sabía que trabajabas aquí- Pregunto Aron a su amigo que ahora estaba delante del dándole las cosas que había comprado en una bolsa de plástico
-Empecé hace como 3 semanas, pero no importa, responde, acaso tienes un gato?- Pregunto el chico de tez clara y cabello negro
-Sí, lo acabo de "adoptar" hace como 2 o 3 horas- Hizo comillas con sus dedos a lo que su amigo respondió ladeando su cabeza en señal de confusión
-¿Como que "adoptar"?- Dylan hizo la misma acción de Aron con los dedos, formando unas comillas
-Veras, es que cuando iba de camino a casa lo encontré y el me siguió, así que decidí quedarme con él, algo me dice que ese pequeño es especial- Dylan miro raro a su amigo al escuchar lo que Aron acababa de decir, no sabía a lo que él se refería diciendo que era especial pero decidió no darle más vueltas al asunto, se limitó a asentir y a entregarle sus cosas
-Bien, nos vemos mañana Dylan- Se despido Aron de su amigo con una sonrisa y una señal con la mano, después de salir de aquella "tienda de animales" camino en dirección a su casa miro su reloj de mano
-Aun es buena ahora- Se dijo a si mismo Aron al llegar a la puerta de su casa metió la llave en la cerradura dando dos vueltas a las llaves abrió lento la puerta para encontrarse con su casa echa un desorden, los cojines tirados por doquier, baria de su propia ropa estaba en el piso de la sala y en la mesa del comedor, algunos platos rotos siguió viendo las cosas tiradas hasta llegar a su habitación donde se encontró con un pequeño felino negro echado en su cama con unos boxes suyos entre las patas siendo mordidos
-Esto no es tan fácil como creí que seria, como es que un pequeño gato puede hacer tantas cosas en menos de 2 horas- Decía un poco molesto pasando su mano por su cabello mientras comenzaba a levantar las cosas que el pequeño gato había tirado
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