La "linda" familia había llegado al restaurante del cual tenían que reunirse con las demás amistades de los mayores y ahí también se encontraban sus hijos que estaban conversando entre ellos mientras que también tenían los celulares en la mano para estar al pendiente de las redes sociales. Oliver si tenía celular, pero en realidad solo escuchaba música o veía videos de Youtube, pero no tenía cuenta de Instagram o Tik Tok, porque la verdad esas aplicaciones le tenía un poco de pavor porque de por si apenas aguanta los insultos o las cosas horribles que recibía de la escuela, no podría soportar los comentarios constantes en su celular, que era su único lugar seguro para poder de perdida olvidarse de sus problemas y entrar aunque sea en una fantasía de la cual pudiera estar a salvo de su propia realidad.

Los tres habían salido del carro al momento en que llegaron al restaurante, Oliver estaba preparándose mentalmente, al momento en que entraron, pues sus padres habían puesto su mejor cara para poder saludar a sus amistades, y Oliver pues comenzó a saludar educadamente a los mayores haciendo que estos correspondieran el saludo y sobre todo de que dijeran constantemente a sus padres de que tenían un hijo educado y también inteligente porque bueno, Oliver era uno de los estudiantes que tenían mejores calificaciones.

Digamos que eso era lo único que sus padres le "agradaba" por así decirlo, por el hecho en que no tendrían que lidiar con un "burro", como ellos decían a los que tenían un bajo rendimiento, pero cuando se enteraron de que varios de los hijos de sus amistades eran parte de ese grupo, se abstenían de decir algún tipo de comentario así, ya que sus amistades provenían de una sociedad de elite, de la cual tenían mucho poder y respeto, además les convenian estar con ellos por el hecho de que como ellos habían trabajado demasiado para llegar al nivel en el que se encuentran, como para que el más mínimo error arruinara todo, por ello tenían presionado a Oliver de que no bajara el nivel de sus calificaciones y al mismo tiempo de que no dijera ninguna palabra acerca de su orientación sexual y en caso de que le pregunten que si tenía pareja, pues tendría que mentir de que estaba saliendo con una chica inteligente de familia adinerada, pero Oliver conocía a los hijos de las amistades de sus padres de los cuales saben cómo es en realidad y usarían lo que sea para humillarlo, pero era un alivio de que no supieran que era gay.

Pero en la reunión, había algo o más bien alguien que le llamo la atención a Oliver y es que se trataba de una mujer que no aparentaba ser más de los cuarenta años, vestía de manera casual, pero era elegante al mismo tiempo y tenía un maquillaje natural, aunque destacaba un poco un tono rojizo que tenía en los labios, pero admite que era lindo.

Nunca había visto a esa mujer, en todas las reuniones que había ido con sus padres y por alguna razón ella le daba una sensación agradable, es decir, como si estuviera un poco cómodo con ella.

¿La dueña de la compañía? ¿Está aquí? --. decía su madre sorprendida y nerviosa al señalar a la mujer que Oliver había visto antes.

Al parecer si --. decía su padre un poco pálido.

Ahora si no vayas hacer algo estúpido, porque si llegas a molestarla ya verás como te va ir cuando lleguemos a casa y de seguro no se te olvidara por un tiempo --. le amenazo su padre en un tono autoritario y grave.

S-Si padre --. decía Oliver nervioso por la amenaza de su padre.

Espero que te comportes --. dijo su madre mientras que lo pellizcaba el brazo discretamente.

S-Si madre --. dijo Oliver tratando de no hacer muecas por el dolor del pellizco.

Mas te vale, y camina de una vez, no me hagas enojar --. dijo ella de manera indiferente.

Oliver solo acato lo que dijo su madre y se comportaba de manera educada hacia los mayores, mientras trataba de ocultar su expresión de miedo al ver que sus buleadores no le quitaban los ojos de encima, y estaba seguro de que encontrarían el momento adecuado para molestarlo y humillarlo, pero Oliver tenía planeado estar en la mesa por mucho tiempo hasta la hora de irse, por ahora tenía soportar esta prueba sin causar ningún problema, esperaba en poder lograrlo.

Aunque también la dueña de la empresa miraba de vez en cuando a Oliver y la verdad ella mostraba una leve expresión de sorpresa, pero ponía su atención nuevamente hacia los demás, pero eso sí, ya tenía a la mira al menor.