Edad: Off 15 - Gun 19

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Ambas familias decidieron festejar juntos el hecho de que Tay y Gun ya están graduados de la escuela y que para su fortuna, ambos quedaron aceptados en la universidad que deseaban. Organizaron una comida en la casa de los Jumpol debido a que el comedor, y la casa en general, era más grande. Dara y Lawan se pusieron a llorar cuando se graduaron, y de hecho, en la misma comida se pusieron a llorar a moco tendido con la abuelita Atthaphan y Sompob consolándolas mientras los protagonistas del festejo miraban avergonzados a sus amigos.

Sin embargo los planes de los menores para la noche no tienen que ver con una linda tarde familiar. Joss ofreció su departamento para organizar una fiesta al par de graduados. Por supuesto, con alojamiento incluido.

—Off no irá —declara Dara como si nada mientras come de su ensalada.

—Pero Mamá, ¡Es la fiesta de mi hermano y mi novio! —se queja el alfa como un bebé berrinchudo.

Aunque bueno, de bebé queda su personalidad y su linda sonrisa de conejito que lo hace ver más infantil. Se ha teñido el cabello color vino y su oreja la adornan diversas perforaciones. Sus brazos y piernas adquirieron una musculatura decente y ya está del tamaño de Gun, pero internamente sabe que lo pasará una vez termine la adolescencia. Sus facciones se han ido marcando, perdiendo un poco el aspecto infantil para uno mucho más juvenil. Pero no hay que ser tonto para notar que si ya está guapo, al hacerse joven adulto estará para lamerse los dedos.

—Gun y Tay ya son mayores, tú tienes quince años. Y no me mal entiendan chicos, pero estoy segura que no se juntaran a conversar de la vida. También fui adolescente.

Se escucha una queja colectiva. Pues aunque cada palabra es cierta, quieren que el menor vaya a su primera fiesta y reírse de él cuando se embriague, obviamente siempre cuidándolo. Y Gun, bueno, Gun tiene otros planes.

—Prometo cuidar a Offy, suegra —dice el omega de cabello rubio, tratando de utilizar toda su lindura a su favor con una linda sonrisa. Sin embargo Dara alza una ceja, por esa misma razón duda de darle el permiso. ¿Dejar a su hijo hormonal con el omega de sus sueños más bellos hasta los más sucios toda una noche? ¡Ni hablar!

Tay, notando esto y conociendo a su madre quiere ayudar

—No les sacaré el ojo de encima. Todos cuidaremos a Off.

—Sé cuidarme sólo, gracias.

—No ayudas —le susurra Luke pegándole un codazo.

—Vamos, Dara, es sólo una noche y los chicos te lo están rogando. Confía en ellos —interviene Lawan luego de los ojitos que su lindo hijito se encargó de darle. Ella lo crió bien, está segura de que Gun no es de los que se emborrachan y bailan sobre la mesa. ¿Qué tantas tonteras pueden hacer?

Debido a la presión colectiva finalmente cede, mirando a su esposo quien asiente demostrando su aceptación.

—Los quiero a ambos en casa y sin resaca a la hora de almuerzo. Si veo algo extraño, mi amigo es policía y les hará el alcohol test. Están advertidos. Ahora coman que la comida se enfría.

Off ríe feliz antes de abrazarla y darle un sonoro beso en la mejilla. Su madre no tiene ningún amigo policía, apenas tiene amigos hombres. Pero lo importante aquí es que le dio permiso y si podrá ir a la fiesta con Gun.

—La pasaremos muy bien Gunnie —se dirige a él emocionado. Casi todos pueden sentir sus feromonas y aura feliz.

Gun se sonroja pero no lo suficiente para ponerse en evidencia.

—Por supuesto, Offy.

La música suena a un volumen alto pero moderado para ser fin de semanas y ser una fiesta de gente joven. Invitaron a un grupo más de amigos, aunque los que se quedarían serían Luke, Tay, Gun y Off. La luz está apagada pero luces de colores iluminan la habitación y resaltan los vasos rojos con alcohol.

—¿De dónde sacaste las luces?

—Ni idea, las trajo Luke —le responde Joss a Tay encogiéndose de hombros. Según Luke, "un Dios nunca rebela sus secretos". Aunque al parecer si pueden equivocarse de frases, pues está seguro que es mago en lugar de Dios

—Off~ ¿Por qué tan tímido?

Off está sentado junto al par, con la mirada entre la gente buscando a su novio

—¿A qué hora llegará Gun?

—Tranquilo Romeo, no desesperes. ¿Quieres tomar algo más que sólo bebida?

Off niega y Tay sonríe.

—Déjalo, no beberá nada hasta que vea a Gunnie-Gu.

El alfa está inquieto pues Gun dijo que llegaría temprano cuando se despidió de él en su casa para ir a ponerse más guapo de lo normal. ¿Cuánto puede tardar en ponerse lindo, cuando es así desde que se despierta por las mañanas?

Sin embargo sus palabras quedan atoradas en su garganta al ver su cabellera rubia pasar entre la gente. Se ha cortado un poco el cabello, dejando que su fleco platinado sin pasar de sus cejas y su cabello apenas rozando su oreja. Lleva puesto un poco de maquillaje, resaltando sus preciosos ojos amielados y el labial en sus labios hace que la forma de corazón de estos se vea más atractiva que nunca. En su cuello lleva un choker rojo con textura de lazo, contrastando con el resto de su ropa que es una simple camiseta negra manga corta metida de manera informal bajo el pantalón negro ajustado y con algunos rasgones, resaltando todas sus curvas y atributos. «¿Se puede ser más atractivo?» Off piensa que si cuando se acerca a él sonriendo de manera tierna en contraste con su look.

El menor pasa saliva antes de poder hablar pues siente su garganta seca

—H-hola Gunnie.

—¿Te diviertes? —pregunta disimulando su nerviosismo. Tardó mucho en elegir como venir, aunque su outfit es de lo más sencillo, simplemente quería alargar el tiempo. Pero Luke lo había llamado y obligado a mover su trasero omega hasta la fiesta.

—Te ves muy guapo Gunnie —interrumpe, sin importarle el cambio brusco de conversación, haciendo a Gun negar y reír por lo atrevido que siempre se muestra—. Soy el alfa más afortunado del mundo~.

Luego se reúnen con el grupo a conversar, cantar, bailar y hacer estupideces juntos. Su mayoría tratando de embriagar a Off, pero fallando en el intento pues Gun en verdad lo está cuidando. Aunque si logran hacer que diversos tipos de alcohol entren en el sistema de ambos menores.

Gun se distrae, tomando un sorbo más de su vaso de vodka para poder tomar el valor de hacer lo que tanto lleva pensando. Mira a Off bailar junto a Tay riendo y le es inevitable no sonreír. Han pasado por tanto y sin embargo todo sigue como el primer día. Cuando el pequeño Off de cinco años había preguntado su nombre para luego salir corriendo. Quien diría que aquel niñito cumpliría su promesa de ser su alfa.

—Aquí están las llaves, Gunnie-Gu. Pero por favor, no se te vayan a perder —ruega Luke entregándole las llaves de su departamento, el cual corresponde al contiguo al de Joss. Pero él dormirá en la casa del anfitrión esta noche—. Suerte, segundo omega más hermoso del país.

—¡Gun!

Gun no alcanza a seguir bromeando cuando su novio se ha acercado a él, con una sonrisa que por un lado le dice que está entonado y por el otro que quiere ligar con él lo que resta de la noche.

—Que omega tan bonito y tan solito tenemos aquí~.

—Mi alfa quería hacer el ridículo en la pista y preferí mirarlo desde lejos —le sigue el juego—. Soy como su niñero.

—Me he portado bien, merezco un premio Gunnie. ¿No lo crees?

Gun se acerca a él con las intenciones de jugar un poco. Pero no estaba consciente de que sus supresores que se han encargado de ocultar su celo todo el día están deshaciendo sus efectos. Sintiendo su piel calentarse rápidamente, su olor hacerse más intenso y sus sentidos agudos.

Casi gime cuando Off lo toma por el antebrazo, acercando su nariz a su cuello queriendo confirmar lo que su lobo le grita.

—Gunnie... Estás en celo —evidencia relamiendo sus labios y mirando los ojos contrarios dilatarse a la par que los suyos, sin ser consciente claro está.

Gun asiente, pero toma la mano de Off al mismo tiempo que este, escabulléndose entre las personas para salir de allí y una vez afuera, poder entrar al departamento vecino con la llave de Luke.

—Gun, debes tomar un supresor —dice Off sintiéndose caliente al ver al otro moverse inquieto, casi con necesidad de subírsele encima. Y por supuesto que Off no se negaría. Pero han aguantado tantos celos separados que se siente nervioso.

—N-no, Offy —dice manteniéndose firme aun cuando quiere abalanzársele y comerlo a besos—. He estado pensando... Y creo que ya estamos listos para dar otro paso.

Off quiere resistirse, no por él si no por el mayor. No quiere aprovecharse de su condición de celo, pero sin querer él también comienza a entrar en uno al sentir la necesidad de su pareja en el aire. Lo toma de la cintura chocándolo contra su cuerpo para besarlo con fuerza, ambos devorándose en medio de aquello. Sus lenguas batallan siendo el alfa quien domina. Gun toma entre sus manos la nuca contraria. No hay espacio entre los dos y aquello se confirma al sentir una embestida por parte del menor.

—Alfa~agh —gime el omega, separándose para dirigirlo a la habitación de invitados.

Una vez allí Gun se deshace de su propia camiseta, quedando la parte superior de su cuerpo a la vista de su pareja quien no puede ni quiere despegar sus ojos de él. Da tres pasos hacia él pero su alfa retrocede uno, aún cuando su lobo se queja.

—¿Gunnie, estás seguro? —pregunta Off luchando por mantener la calma y el control, pero Gun ve en sus ojos lo duro que está siendo esto para él—. No quiero presionarte... tú me esperaste y yo puedo hacer lo mismo por ti.

No basta más palabrería para que Gun junte sus labios con los del otro transmitiéndole su seguridad. Él quiere esto, él no podría estar más seguro de que Off es el alfa con el que quiere pasar el resto de su vida. Se aventuraría a decir que si existen los destinados, definitivamente ellos dos lo son.

—Quiero hacerlo, Off. Estoy seguro de todo, sólo si es contigo. Mi alfa.

Se dejan llevar hacia la cama en un camino lleno de caricias, palabras dulces, gemidos, jadeos, besos y toqueteos de lo que les pertenece. Porque ellos se pertenecen en cuerpo y alma desde el momento en que se vieron por primera vez. Así que sin miedo, se dejan llevar por los instintos, el celo y sus lobos. Disfrutando de la lujuria con amor de por medio.

La habitación y el departamento en general se llena con la combinación perfecta entre sus olores, convirtiendo el lugar en el único testigo además de la luna tras la ventana. Y cuando están desnudos a la vista del otro, con Off sobre Gun, apreciándose con ojos de enamorados, el lubricante natural de Gun y el preservativo que les dejó Luke hacen mucho más fácil la intromisión del pene de su alfa. Ambos gimen fuertemente el nombre del contrario, disfrutando de una sensación nueva y excitante.

Los movimientos son torpes, como todos unos principiantes. Pero para ellos son la gloria. El poder ser todas las primeras veces del contrario sabe tan bien para sus lobos. Van agarrando técnica a medida que las embestidas van y vienen, agarrando un ritmo más desesperado y delicioso. En un tiempo, ambos sienten todo el calor de su cuerpo concentrándose en sus zonas bajas. Instintivamente Off baja de su boca a su cuello, mordiendo y dejando marcas pequeñas. Pero eso no es lo que él desea. Y su mirada desesperada se encuentra con la de su omega, deshecho en gemidos entre sus brazos.

—Hazlo —le da su consentimiento acariciando su mejilla y dándole un corto besito, transmitiéndole la confianza suficiente para realizar la acción.

Off da una última lamida en la piel tersa y acanelada. Sus ojos se clavan allí profundamente y sus dientes pican por enterrarse hasta que finalmente lo hace. Hunde sus colmillos en la unión entre cuello y hombros de Gun, llenándolos de un placer desbordante. Se siente mejor que estar en el paraíso, se siente mejor que cualquier cosa tangible e intangible.

—¡Off! —gime profundamente Gun tirando su cabeza hacia atrás, sintiendo la mordida en todo su esplendor mientras suelta su esencia y siente el orgasmo.

Al terminar de eyacular en el preservativo, Off suelta la mordida dando lamidas y cortos besitos a la marca. Sus pechos suben y bajan, recuperando la respiración aunque aún no se puedan separar debido al nudo. Luego de sufrir el fuego de mil soles, sienten como una calma los inunda y se dejan llevar por ella. Es la calma de estar con su pareja para toda la vida.

Sus ojitos se encuentran y ambos se ven con brillos en ellos. Ambos están sudados, con el cabello despeinado, sus rostros colorados y los labios rojos, pero para ellos es la mejor vista. Lo hacen con amor, no existe nada más que la versión más pura de ello.

—Ahora si es para siempre Gunnie.

—Siempre ha sido para siempre, Offy —responde con honestidad y felicidad antes de darse mutuamente el beso más dulce jamás dado.

»Aquella noche duermen el uno junto al otro, dándose cariños y susurrándose al oído todo lo que sienten, desde fuegos artificiales hasta estrellas verdaderas. Aquella noche y todas las demás. Porque Off ama a Gun. Y Gun, ama a su pequeño alfa.

(Aunque quizás, ambos se llevaron la regañada de sus vidas por parte de Dara).

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ