Luego de la fiesta, cuando Off marcó a Gun.

Off 15 - Gun 19

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Son las diez am y pese a que luego de una noche de fiesta que terminó a eso de las seis am todos deberían estar durmiendo con un silencio sepulcral, el departamento de Luke está siendo demasiado ruidoso.

—¡La bruja te va a matar! Primero a ti, luego a mí y luego... bueno a Gun no, a Gun lo matará su mamá —parlotea Tay tirando de su propio cabello caminando de lado a lado por la sala de la casa. Mira a su hermano antes de avanzar hacia él—. ¡¿Qué acaso no pien...?!

Joss lo tira de un brazo de vuelta a su posición alejado de los menores.

—¡Alto! Si no te mata la Señora Dara te mata Off —le advierte viendo como los ojos de este se ponen más oscuros, suelta un gruñido enseñando los colmillos y abraza más a Gun contra si antes de seguir lamiendo la reciente marca. Puesto que primero, se han metido en "su territorio" y segundo, están muy cerca de él y de su omega. Ya de por sí le molesta que estén en el mismo edificio.

Luego de que los invitados se fueran y que Tay se haya acordado de que estaba a cargo de su hermano menor y este ya llevaba varias horas desaparecido con Gun, decidió buscarlo. Luke había tratado de disimular que no tenía relación alguna con lo que pasaba, pero por dentro se sentía terrible, les dio su departamento para que estuvieran una hora a lo mucho, y ya llevaban unas cuatro. Así que al final terminó soltando la sopa, con Joss regañándolo. Se suponía que Off se emborrachara por primera vez, no tener literalmente esa primera vez. Y para Luke era que Off tuviera su primera vez, no que hiciera su primera marca.

Cuando entraron, con la copia de la llave que tenía Joss el olor a bosque mojado con rosas inundaba —e inunda— todo el departamento, sacándolos a todos de sus estados de borrachos. Sus rostros se pusieron pálidos y Joss ahora si parecía color blanco puro. Tay fue el que se aventuró a abrir la puerta de la habitación, donde Off que ya estaba alerta cubrió a Gun con las sábanas y su propio cuerpo con un gruñido de advertencia para que no se acercaran.

En ese momento todos se consideraron muertos y comenzaron a pensar en los testamentos. Probablemente dejándole todo a su posible asesina, Dara, por haber roto sus promesas.

Más no era el único problema. Gun y Off estaban en celo, con una reciente marca y sus lobos combinados como nunca con su parte humana. No se pensaban separar por nada del mundo. Y el alfa estaba evidentemente alterado.

—¿Qué haremos ahora?

—Podemos cubrir a Gun con nuestros olores y... —el brutal gruñido de advertencia de Off, hizo a Luke callar. Sin embargo prosiguió hablando a los otros dos alfas en susurro— Tay puede llevar a Off a casa y con Joss podemos cuidar de Gun hasta que se nos ocurra algo.

—No —exclamó Off sorprendiéndolos a todos al utilizar por primera vez y a edad temprana su voz de alfa. Gun se refugió en su cuello, Luke siendo omega instintivamente bajó la cabeza, Tay yacía sorprendido y preocupado y Joss con el ceño fruncido—. No me separarán de Gun, ni menos se lo llevarán lejos de mí. ¡Ahora largo! ¡Salgan de aquí!

Aún cuando se resistieron, finalmente los tres salieron del departamento dejando la llave dentro. Tardaron al menos dos minutos en procesar lo que acaba de pasar, y otro minuto en darse cuenta de que definitivamente, estaban muertos.

—¡Me echaron de mi propio departamento! —exclamó Luke indignado.

«Estos mocosos, incluso les dejé condones y así me lo pagan».

—Sí, bueno. A la próxima directamente no les prestas tu departamento —se quejó Joss.

—¿Cómo vamos a hacer para sacarlos de ahí? —pregunta Tay peinando su cabello y soltando demasiadas feromonas demostrando su verdadera preocupación al grupo.

—Sólo queda comida instantánea así que cuando les de hambre tendrán que salir.

—¿Cómo sabes que tengo de comer? —Pregunta Luke alzando una ceja mirando el rostro indiferente de Joss—. ¡Joss Way-ar deja de entrar en mi departamento!

—¡Tenemos problemas más serios que esos ahora!

—¿Qué fue eso, Off~? —pregunta Gun aún meloso acariciando las mejillas de su novio a su lado.

Off se siente nervioso, aún cuando ha dejado sus feromonas por toda la casa para que se fuera el olor de los otros alfas que habían entrado.

—N-no lo sé, Gunnie. Mi lobo me controló y yo no quería que te vieran.

—No lo digas de manera tan tierna —se queja Gun recostándose por completo en la cama.

Sus lobos se han calmado luego de haber realizado la unión. La marca molesta en el hombro de Gun y sus corazones revolotean. Se sienten tan completos y sus sentimientos tan eternos.

Off se recuesta también, girando su cuerpo para poder verle y Gun imita su acción, entrelazando sus piernas bajo las sábanas. El menor le da un besito en la nariz que hace a Gun reír.

—Robamos el departamento de Luke —se ríe Off como si sólo fuese una travesura cuando probablemente Luke este incluso descompuesto.

—Offy —susurra Gun—. Cuando salgamos de aquí estaremos muertos.

—¿No es romántico, Gunnie? Como Romeo y Julieta —bromea ganándose un golpecito en el hombro.

—Deberíamos tomar los supresores y...

—¡No! —exclama Off acercándose inmediatamente a abrazarlo y hundir su cabeza en el cuello del contrario, justo en la parte de la reciente y sensible marca, inhalando su olor pero con cuidado de no dañarle. Aún no termina su celo y no tiene ganas de acabar con este momento que es el mejor y más hermoso de toda su vida—. Quedémonos un ratito más Gunnie... Por favor.

«Pequeño manipulador» piensa Gun con una sonrisa acariciando su cabello. Aunque de todos modos, no se negaría a nada con su pequeño alfa. Debe disfrutar que aún estén vivos.

»A las once de la noche es cuando finalmente llega Dara a casi derrumbar la puerta con sus golpes. Tay no pudo distraerla mucho más tiempo, y sinceramente, estaba sorprendido por haber llegado tan lejos.

—¡Off abre la puerta o la bajo a golpes! ¡Es una promesa! ¡Off! ¡Gun! Si no abren llamo a la policía y no me importa ser su madre y suegra.

—Señora Dara...

La mano de Sompob se pone sobre el hombro de Luke haciéndolo callar mientras niega con la cabeza. No es buena idea hablarle a su esposa ahora mismo.

—¡Off! ¡Abre! ¡La! ¡Maldita! ¡Puerta! —exclama entre cada golpe que todos (Sompob, Tay, Luke y Joss) se preguntan ¿Cómo es que no le duele?

—¡Mamá, te abriremos pero cálmate! —Escuchan una respuesta desde el otro lado de la puerta—. Estás asustando a mi omega.

La sangre de Dara parece hervir aún más y los presentes dan un paso atrás.

—¿Qué "mi omega" ni nada? ¡Te enviaré a un internado en Afganistán! Abre la puerta.

—¡Ni siquiera sé dónde queda Afganistán! ¡No me alejarás de Gun!

—¡Pruébame!

Ambos siguen peleando a través de gritos, llamando la atención de los vecinos, que finalmente se alejan al darse cuenta de la complicada situación en la que están. Pero de todos modos, después de varios intentos de forzar la entrada, logran abrirla sin romper la puerta a petición de Luke.

Ambos chicos están vestidos sólo con boxers y sus playeras cambiadas, teniendo puestas las del contrario, sentados en el sofá jugueteando como si los demás no hubiesen estado tratando por alrededor de una hora de abrir la puerta.

Dara se fija en el cuello acanelado de su yerno, viendo la gran y notoria marca recién hecha confirmando sus sospechas, puesto que Tay no había querido decirle la historia completa. Ella está lista para sacarse sus tacones y ponerse ruda con ellos pero Sompob la agarra del brazo antes de que su adorable esposa cometa homicidio.

—Off nos vamos a casa ahora mismo —informa viendo como ambos toman sus manos y se acercan más entre sí, incluso Off abraza con su brazo libre a su pareja.

—No.

—Lo haremos por las buenas o por las malas, niño mentiroso.

—Dara, cálmate —exige su esposo soltando sus feromonas para que a su esposa se le bajen los humos de encima.

Gun tiene sus ojos llorosos mientras se aferra más a Off. Entiende que su suegra este molesta pero él no quiere separarse de su alfa. Menos ahora que está sensible.

—Si los separamos ahora, probablemente el par de tontos entren en depresión. La marca sólo tiene unas horas —explica acariciando su mano por encima—. Tú también eres omega, sabes como es. ¿Quieres que Gun sufra? —pregunta.

Dara le mantiene su mirada unos segundos antes de suspirar. Está bien. Está molesta con ellos, pero su ira y regaños pueden esperar.

—Como me entere de que me hicieron abuela, son lobos muertos. ¿Escucharon? —pregunta amenazante viendo al par asentir antes de retirarse del departamento junto a Sompob, quien también les lanza una mirada dura. «¡Estos niños de hoy en día!».

Una vez afuera todos se miran con notoria tensión. Es obvio que Tay está castigado y que el par de amigos, vetados de su casa en un buen tiempo.

—Bueno, los dejaremos unos días. Pero luego, tu hijo va a sufrir las consecuencias de su irresponsabilidad —apunta Dara como si Sompob fuese el único progenitor de Off.

—Pero es mi departamento —se queja Luke.

—Bueno, así me pagas el "todos cuidaremos de Offy" —añade Dara, sujetando bien su bolso y yéndose por el pasillo con Sompob con un "Debemos avisarle a Lawan".

Luke hizo una mueca mientras Joss reprimida una sonrisa ganándose una mala mirada del contrario.

—Tú y tus dos neuronas se pueden quedar en mi departamento.

Gun llegó a su casa media semana después, con sus mejillas rojas y un inútil sweater cuello de tortuga, a pesar de que probablemente hasta el mismo rey de Tailandia ya sabe que está marcado. De puntitas fue hacia su habitación para no hacer ruido; sin embargo fue interrumpido por un abrazo de su abuela.

—¡Aw, mi lindo omeguita ya fue marcado! Déjame ver la marca, quítate eso —pide su abuela hablando en voz alta llamando la atención de Lawan quien estaba barriendo la casa.

Cuando sus ojos miel se cruzan con los de su progenitora, sabe que está en problemas.

—¡Gun Atthaphan! ¿Cómo te atreves a deshonrar la confianza de tu madre? —Pregunta acercándose a él con la escoba en manos mientras Gun retrocede y se cruza entre los muebles—. ¡Ahora como podré mirar a los Jumpol a la cara! "Cuidaré de Offy" ¡Vil mentiroso! ¡Par de niños cochinos!

—¡Hija, baja esa escoba! Le puedes hacer daño al cachorro.

Los ojos de Lawan se tornan más oscuros, a la par que los de Gun se abren aún más, levantando la escoba y dirigiéndose hacia su hijo que corre de ella.

—¡Ya verás, Gun Atthaphan!

—¡Usamos condón!

—¡Más te vale que sea verdad porque como no sea así les obligaré a ti y a Off a tragar diez paquetes de esos!

—¡Hija! Ten cuidado, los condones no siempre son confiables.

—¡Abuela no estás ayudando!

Luego de horas de esconderse en su habitación y aguantar las ganas de ir al baño, además de recibir algunas llamadas de Off preocupado por sentir a su omega inquieto, y escuchando los susurros de Tay de "Apúrate, mamá no se puede enterar de esto", por fin habla tranquilamente con su madre.

—Entiendo, yo también soy omega y me he enamorado, Gunnie.

—¿Si?

—Sí, la diferencia es que yo no dejé que mi novio de quince años me marcará y no estoy castigada hasta el fin de los tiempos.

—¡Mamá, tengo diecinueve!

—Pero vives bajo mi techo. Así que estás castigado he dicho. Nada de mesada, nada de salir de fiesta y serás el chófer de tu abuela hasta que odies conducir.

Off suspira agotado, ¿Cómo es que una casa puede estar tan sucia? Y es que si, Dara se había encargado de quitarle el celular y los videojuegos y transformarlo en el conserje/mayordomo de la casa. Pero luego de ser regañado por más de dos días y ser ignorado otros tres, no le quedó de otra que aceptarlo.

—Mami, terminé de trapear el suelo, ¿Puedo sal...?

—Ve a lavar las ollas —interrumpe Dara sin siquiera mirarle. Aunque por dentro tiene una sonrisa malvada y Off lo sabe. Aquello lo hace rodar los ojos mientras obedece y va en camino a la cocina.

Sin embargo Off está sonriendo internamente también. Marcó a su omega y eso es algo de lo cual jamás se va a arrepentir. Aunque tenga que ser el esclavo de su madre hasta los cuarenta años.

Sigilosamente, toma el teléfono de la casa para poder marcar a Gun con el sonido del agua del lavavajillas cubriéndolo.

—¿Aló?

—Al final no me voy a Afganistán, Gunnie —cuenta Off haciendo reír al contrario.

—¿Y me llamas sólo para decirme eso? Si mamá sabe que estoy usando mi teléfono...

—No, Gunnie, no era sólo por eso. Te extraño —le cuenta sabiendo que lo ha hecho sonreír. Se relame sus labios, con una sonrisita traviesa antes de decir—. Y quería preguntar cuando es tu próximo celo.

—¡Off, pequeño descarado! ¡No puedes ir preguntándome esas cosas de la nada! ¿No te bastó con el castigo que nos dieron?

—Off, ¿Quién te ha dado el permiso de usar el teléfono?

—Gunnie, te amo, en mi funeral pon alguna canción de BTS.

𝕰𝖛𝖎𝖎 𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ